Primero que todo debemos entender qué es un argumento.
Argumento: son una serie de enunciados (relacionados entre sí) que apoyan una
tesis o una creencia. (Existen argumentos válidos e inválidos; los cuales se explicarán más adelante).
Por ejemplo cuando las personas afirman: “Dios me creó”.
(Esta es la creencia o la tesis)
¿Pero cómo llegamos a esa tesis? Por medio de un argumento:
Dios creó a todos los seres vivos, yo soy un ser vivo; por lo tanto, Dios me creó.
Todo lo anterior es el argumento
Ahora bien; los argumentos se componen de premisas y conclusiones:
Premisas: son los enunciados, que relacionados entre sí, permiten justificar o apoyar
una conclusión (la tesis o la creencia).
En muchas ocasiones, las premisas son introducidas por palabras como: dado que,
ya que, teniendo en cuenta que, se determina que…
La conclusión: La conclusión se deriva de las premisas y viene siendo la tesis o la
creencia. (Las premisas apoyan la conclusión).
Las conclusiones, en muchas ocasiones, las introducen palabras como: por lo tanto,
por esta razón, de manera que, en consecuencia…
Interpretando lo anterior, ya podemos reconocer las premisas y las conclusiones
de un argumento. (Continuemos con el ejemplo dado).
Dios creó a todos los seres vivos, yo soy un ser vivo; por lo tanto, Dios me creó.
Premisa Premisa Conclusión
Premisa 1: Dios creó a todos los seres vivos
Premisa 2: yo soy un ser vivo
Conclusión: Dios me creó.
Ahora sí; comprendiendo todo lo anterior, hemos alcanzado nuestro primer objetivo:
Reconocer las partes de un argumento: premisas y conclusiones.
Haz las prácticas que se te presentan a continuación