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Ciencia y Tecnología para un modelo de sociedad…
con más sentido común
Atención especial de este programa la merece la innovación popular. En esta
modalidad investigativa participan personas que desarrollan tecnologías por iniciativa propia,
que no pertenecen a una institución o empresa en particular. Estas tienen las ideas pero no
los recursos; pueden tener formación académica, o no, aun cuando reconocen y valoran su
importancia en los tiempos modernos. En la mayoría de los casos, dominan un conocimiento
empírico amplio. Trabajan desde y con necesidades comunitarias reales para buscarles
soluciones. Muchas veces utilizan desechos como materia prima para sus creaciones y creen
en la posibilidad de construir una soberanía científica-tecnológica humanista, para compartirla
con la gran nación latinoamericana y caribeña y con toda la humanidad.
La tecnología popular lleva implícita unas características particulares: es producida
localmente, reparable, repetible, accesible, refuerza a su comunidad de origen. En ella, la técnica
se transforma en una herramienta al servicio humano para resolver problemas específicos en
lugares específicos y, al involucrarse con sujetos colectivos, su pertenencia no es privada, al
contrario, es comunitaria y compartida. Además, promueve una sana y respetuosa convivencia
con la naturaleza.
Para incentivar la actividad investigativa bajo este modelo, el Mppcti fortaleció los
siguientes premios: el Premio Nacional de Ciencia y Tecnología, el Premio Nacional al Mejor
Trabajo Científico, Tecnológico y de Innovación (en 4 áreas, a saber: Ciencias naturales, Ciencias
exactas, Ciencias sociales, Investigación tecnológica) y el Premio Nacional a la Inventiva
Tecnológica Popular Luis Zambrano (PLZ).
El PLZ, en especial, está dirigido a destacar la inventiva popular desde la función social
comprometida, antes descrita. Su origen nace de la actividad creadora y solidaria de Luis
Zambrano (1901-1990), un campesino que dotó de electricidad a Bailadores, y a otros pueblos
andinos, ¡mucho antes de que llegara el servicio eléctrico público estatal! Esto lo logró a través
de unas turbinas, construidas por él, que generaban este tipo de energía, con el movimiento
del agua de los ríos.
Luis Zambrano sólo pudo estudiar hasta cuarto grado, pero fue un autodidacta
permanente, observador de la naturaleza y de los molinos y trapiches de su entorno inmediato.
Esto lo llevó a relacionarse con los principios básicos de la Física y de la Ingeniería mecánica.
Con materiales y equipos desechados, creó diversas máquinas para aligerar las labores
de las comunidades campesinas cercanas. Entre sus numerosos inventos se cuentan: un telefé-
rico corto para transportar cargas, una bicicleta moledora de granos y huesos, un trapiche eléc-
trico para moler caña de azúcar, y otras más. Su trabajo se basaba en el respeto a la naturaleza
y en el uso de fuentes de energía alternativa. Expresaba “en la vida hay que tratar de producir,
porque no vinimos a puro consumir”; de igual modo, “eso de vivir para crear, para servir… eso es
el resumen de mi vida”. Ambas ideas resumen la actualidad y pertinencia de su legado.
Las tecnólogas y tecnólogos que se inscriben para este premio, o que solicitan su in-
corporación al Programa de Apoyo a la Inventiva Tecnológica, reciben asesoría por parte del
Estado así como el acompañamiento y eventual financiamiento de sus proyectos, hasta el es-
calamiento de los mismos, es decir, la producción en serie, a nivel industrial. También existen
otros programas de estímulo a la investigación e innovación; ¡sólo es cuestión de informarte y
dar rienda suelta a tu creatividad!
Un bipedestador vehicular, o silla de ruedas especial, que permite a las personas con
paraplejia mantenerse erguidas y movilizarse de manera independiente…
Una prótesis articulada para personas sin piernas por debajo de la rodilla, que costaría
unos 4.500 bolívares, a diferencia de unos 115.000 bolívares, en promedio, que cuestan
las prótesis importadas de este tipo…
Un nebulizador que, en lugar de servir a 48 pacientes en 24 horas, permite atender a
144 personas en el mismo lapso…
Un combustible ecológico, eficiente y renovable, elaborado a partir del yare, que es un
pasivo ambiental o desecho de la yuca con que se prepara el casabe…
Una incubadora-nacedora automatizada que pase a producir, de 180 pollos mensuales,
a 600 pollos en el mismo tiempo…
Moldes para construir viviendas de concreto aligerado con anime, cuyo costo estaría
alrededor de los 70.000 bolívares, construidas en 25 días aproximadamente…
Baldosas de arcilla y fibra de coco…
Son prototipos elaborados por venezolanas y venezolanos, con inventiva criolla, y con
la finalidad de atender las necesidades de las personas y comunidades más humildes, en con-
traposición a objetivos comerciales de lucro… ¿No te parecen inventos y fines interesantes?
Así es. Ésta es una de las políticas que está desarrollando el Ministerio del Poder Po-
pular para la Ciencia, Tecnología e Innovación (MPPCTI) para apoyar el trabajo investigativo
de innovadoras e innovadores, quienes combinan el conocimiento académico-científico con
los saberes empíricos, provenientes de las experiencias populares, para contribuir a solucionar
diversos problemas de las comunidades, sobre todo de las más desasistidas.
La crisis social y económica que viven millones de personas en el mundo, y que se tra-
duce como una crisis de humanidad, nos obliga a revisar no sólo la finalidad del conocimiento
científico y tecnológico actual sino también la manera como éste es valorado por la sociedad y
el modelo que se construye, se difunde y se utiliza.
Es práctica común en la mayoría de los países del mundo, producto del modelo econó-
mico dominante, que este tipo de conocimiento lo administren comisiones gubernamentales
e instituciones privadas para que el contexto de la producción científica-tecnológica esté muy
orientado hacia el sector de las grandes empresas transnacionales.
Contra esta visión, el MPPCTI está desarrollando, desde el año 2006, el Programa de
Apoyo a la Inventiva Tecnológica Nacional para promover la articulación entre los sectores
académico, de investigación, productivo, tecnológico y comunidades organizadas, en general,
a fin de crear procedimientos o productos que permitan solucionar problemas en las áreas de
salud, educación, ambiente, vivienda y actividades socioproductivas en escala local, regional o
nacional. Con ello se mejorarían las condiciones de vida de la población, con sello endógeno,
nacional y sustentable.
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