La erosión glacial
Los glaciares son agentes erosivos de gran importancia
que, en el pasado, modelaron una buena parte de los
paisajes que ahora conocemos en latitudes medias y
altas de todo el planeta.
Las enormes masas de hielo desplazándose lentamente
por efecto de la gravedad llevan a término una tarea de
desgaste implacable sobre los terrenos en que se desli-
zan, que se puede observar fácilmente en aquellas re-
giones donde los glaciares han desaparecido. El hielo es
capaz de cortar o arrancar enormes rocas que otros
agentes erosivos no podrían.
Maestra.
Rosidalia Flores Hernandez
Velocidad de erosio n
La velocidad de erosión de un glaciar es muy va-
riable. Esta erosión diferencial llevada a cabo por
el hielo está controlada por cuatro factores im-
portantes:
1. Velocidad del movimiento del glaciar.
2. Espesor del hielo.
3. Forma, abundancia y dureza de los fragmen-
tos de roca contenidos en el hielo en la base
del glaciar.
4. Erosionabilidad de la superficie por debajo
del glaciar.
Las velocidades medias varían. Algunos presen-
tan velocidades tan lentas que los árboles pue-
den establecerse entre los derrubios deposita-
dos. En otros casos, sin embargo, se desplazan
varios metros por día. Tal es el caso del glaciar
Byrd , un glaciar de desbordamiento en la Antár-
tida que, de acuerdo a estudios satelitales, se
desplazaba de 750 a 800 metros por año (unos 2
metros por día).
El avance de muchos glaciares puede estar carac-
terizado por períodos de avance extremadamen-
te rápidos llamados oleadas. Los glaciares que
exhiben oleadas, se comportan de una manera
normal hasta que repentinamente aceleran su
movimiento para después volver a su estado
anterior. Durante las oleadas, la velocidad de
desplazamiento es hasta 100 veces mayor que
bajo condiciones normales.
Aludes
Una forma de erosión distinta de
los glaciares, pero también provo-
cada por la acumulación de agua
en estado sólido, son los aludes.
Un alud es el desprendimiento de
grandes masas de hielo y nieve
que desciende desde las cumbres
hacia los valles. A su paso, un alud
arrastra la vegetación, dejando
una estela de terreno desnudo
donde puede actuar más fácilmen-
te la erosión.
Los aludes se producen cuando se
acumula mucha nieve en una zona
de pendiente elevada, especial-
mente cuando se deposita sobre
otra capa de consistencia distinta
que le pueda servir como superfi-
cie de deslizamiento, quedando en
un equilibrio inestable.
A medida que un glaciar des-
ciende por un valle o avanza a
través de una amplia zona, en
el caso de las grandes exten-
siones de hielo, va modelando
el terreno. Desplaza las rocas
que encuentra a su paso y el
hielo rompe y arrastra las sub-
yacentes. Las rocas inmersas
en el fondo del glaciar actúan
como partículas abrasivas, al
lijar y pulir la piedra del lecho
sobre el que se desplaza.
Corriente de Hielo Por movimiento
El hielo se comporta como un sóli-
do quebradizo hasta que su acu-
mulación alcanza los 50 metros de
espesor. Una vez sobrepasado este
límite, el hielo se comporta como
un material plástico y empieza a
fluir. El hielo glaciar consiste en ca-
pas de moléculas empaquetadas
unas sobre otras. Las uniones en-
tre las capas son más débiles que
las existentes dentro de cada capa,
por lo que cuando el esfuerzo so-
brepasa las fuerzas de los enlaces
que mantienen a las capas unidas,
éstas se desplazan unas sobre
otras.