Clasificación de los proceso cognitivos: básicos y complejos
Los procesos cognoscitivos maduran y se afianzan en nuestra corteza cerebral a
medida que vamos escalando en el desarrollo evolutivo de nuestras vidas; se dice que
algunos son básicos y otros más complejos en tanto se desarrollan más rápido en la
persona. Los "complejos" son los últimos en desarrollarse y los primeros en
deteriorarse con el envejecimiento. Estos procesos son, desde los más simples hasta
los más complejos y como van apareciendo en el desarrollo del individuo:
Motricidad, atención, percepción, memoria, lenguaje, pensamiento, conciencia,
inteligencia y creatividad.
Los complejos son aquellos que aparecen al final de la maduración de la corteza
cerebral, nos diferencia fundamentalmente de los animales inferiores y se deterioran
iniciando el proceso de envejecimiento.
Habilidades de lóbulo frontal (planificación y control de los procesos cognitivos
básicos, control de impulsos, toma de decisiones y conciencia, planificación de
actividades, etc.
La sensación
Nuestro comportamiento es el resultado del conocimiento
de la realidad exterior.
“nada llega a nuestro conocimiento sin antes haber pasado
por los sentidos”, por lo tanto, la sensación es la primera
fuente de nuestro conocimiento.
Concepto: la sensación es el proceso por el cual se destacan
y regulan los estímulos a través de los receptores sensoriales que son los sentidos:
visión, audición, tacto, gusto, olfato, los cinestésicos y vestibulares. En cualquier
sensación, siempre ocurre una determinada secuencia de eventos en la actividad
sensorial, esto es, cierta forma de energía estimula a una célula receptora, luego este
receptor responde enviando una señal electroquímica codifica hasta el cerebro,
produciendo la sensación.
Cada uno de del sentidos responde específicamente a un determinado tipo de energía.
El olfato y el gusto responden a cambios de energía de naturaleza química. El tacto, el
oído y los sentidos vestibulares y cinestésicos son estimulados por la energía mecánica.
La vista responde a las ondas luminosas.
Umbrales sensoriales.
Para que se produzca la sensación es necesario que la energía
que llega a un receptor deba ser lo suficientemente fuerte. Este
nivel necesario se llama umbral absoluto, si la estimulación esta
por debajo de este umbral, no se experimentara la sensación.
Existe un nivel de intensidad en el que una persona puede sentir
un estimulo algunas veces, aunque no siempre. Investigaciones
realizadas por Mc Burney y Collings (1984) sobre los umbrales aproximados, señalan
que para que se dé la sensación del gusto, se necesita:
Un gramo de sal diluido en 500 litros de agua.