Retenedores indirectos

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About This Presentation

Universidad Mexico Americana del Norte. A.C.
Escuela de Odontología
Prótesis Parcial Removible


Slide Content

Tema 5: Retenedores indirectos Prótesis Parcial Removible Dr. Israel Rodríguez Guzmán

El movimiento de las PPR se pueden producir en 3 planos. Las prótesis dentosoportadas utilizan los dientes para controlar los movimientos sin contacto con los tejidos blandos. Las PPR dentomucoportadas no tienen esta capacidad ya que un extremo de la prótesis se puede separar de los tejidos. Esto se debe a la acción de la gravedad en el maxilar superior a a los alimentos pegajosos en ambas arcadas. la estrategia utilizada en el diseño de las PPR con objeto de controlar los movimientos funcionales estriba en la debida atención a los detalles en cuanto al diseño y localización de sus componentes.

Cuando la extensión distal de la base de una dentadura se separa de su asiento basal, tiende a rotar alrededor de las líneas del fulcro. Este movimiento de alejamiento se puede contrarrestar con la activación de los retenedores directos, la estabilización de las partes del retenedor, y la rigidez de los componentes de la estructura metálica localizados sobre apoyos bien definidos en el lado opuesto a la línea del fulcro lejos de la extensión distal de la base. Estos componentes se conocen como retenedores indirectos, y se deben colocar lo más lejos posible de la extensión de la base, para conseguir el mejor brazo de palanca frente a las fuerzas de desalojo.

Para comprender mejor la localización y las funciones de los retenedores indirectos, se considera como línea de fulcro al eje alrededor del cual rotar a la dentadura cuando las bases se separen de la cresta residual. El retenedor indirecto consta de uno o varios apoyos y conectores menores de soporte. Aunque es habitual identificar todo el conjunto como un retenedor indirecto, debe recordarse que el apoyo es realmente el retenedor indirecto unido al conector mayor por un conector menor. Los contactos con los vertientes de los dientes no forman parte de los retenedores indirectos. El retenedor indirecto se debe colocar más lejos posible de las extensiones distales, en un lecho tallado en un diente capaz de soportar esta función.

La localización más efectiva de un retenedor indirecto está en la vecindad de un diente incisivo, pero puede ocurrir que este diente no sea bastante fuerte para soportarlo por presentar vertientes muy inclinadas que no puedan ser modificadas para colocar un apoyo. La mejor solución para la retención indirecta puede estar en el canino más cercano o en la superficie mesiooclusal del primer premolar, a pesar de que no esté tan alejado de la línea del fulcro.

Factores que influyen en la eficacia de los retenedores indirectos Estos factores son los siguientes: Los principales apoyos oclusal es sobre los dientes primarios deben mantener razonablemente estables en sus lechos por los brazos retentivos de los retenedores directos. Distancia entre la línea del fulcro. Longitud de la base de extensión distal. Localización de la línea de fulcro. Distancia del fulcro a la que se coloca el retenedor directo. La rigidez de los conectores que soportan los retenedores indirectos. Efectividad de la superficie dental de soporte.

Funciones auxiliares de los retenedores indirectos Además de activar el retenedor indirecto para evitar la separación de la extensión distal del tejido, el retenedor indirecto tiene las siguientes funciones auxiliares: Reduce las fuerzas de palanca que inclinan ante él o posteriormente los pilares principales, lo que es especialmente importante si se emplea un diente aislado como pilar, situación a evitar siempre que se pueda. El contacto de su conector menudo con las superficies axiales del diente ayudan a la estabilización contra el movimiento horizontal de la dentadura. Los dientes anteriores que soportan los retenedores indirectos se estabilizan contra el movimiento lingual. Puede actuar como apoyo auxiliar para soportar una parte del conector mayor, facilitando la distribución del estrés. Puede ser la primera indicación visual de la necesidad de rebasar la extensión distal de una base.

Formas de retenedores indirectos Los retenedores indirectos pueden adoptar varias formas, todas ellas efectivas según su soporte y la distancia hasta la línea de fulcro. Apoyo oclusal auxiliar. Es el retenedor indirecto más empleado, localizado en la superficie oclusal, lo más alejado posible de la extensión de la base. En las arcadas mandibulares de clase I, localización acostumbra a estar en la cresta marginal mesial del primer premolar de cada lado de la arcada. La posición ideal del retenedor indirecto perpendicular a la línea de fulcro estaría en la vecindad de los incisivos centrales, que son dientes demasiado débiles y cuya superficie lingual es demasiado perpendicular para soportar un apoyo.

Son más efectivos los apoyos bilaterales de los primeros premolares, aunque estén más cerca del eje de rotación. Cuando los retenedores indirectos se emplean en dentaduras parciales de maxilares clase I, se aplican los mismos principios: empleo preferente de apoyos bilaterales en crestas marginales de primeros premolares en vez de apoyos en incisivos, ya que no solamente son efectivos sin perjudicar los débiles incisivos uniradiculares , sino que también la interferencia con la lengua con el conector menor situado entre el canino y el premolar, es menor que cuando se ubica en la parte anterior del canino.

En las dentaduras parciales de clase II, los retenedores indirectos se acostumbran a colocar en la cresta marginal del primer premolar del lado de la arcada opuesto al extremo distal. Los apoyos bilaterales están pocas veces indicados, excepto cuando se requiere un apoyo auxiliar para soporte de conector mayor o cuando el pilar distal tiene un pronóstico malo y existe la posibilidad de transformación posterior en una dentadura parcial de clase I.

Apoyos en caninos. Cuando la cresta marginal mesial del primer premolar está demasiado cerca de la línea de fulcro, o cuando los dientes están solapados de manera de que la línea de fulcro no es accesible, se puede emplear un apoyo en el camino adyacente. Este apoyo es más eficaz si se coloca el conector menor en la tronera anterior del canino, o curvándose hacia atrás hasta el lecho preparado lingualmente, o bien extendiéndose hasta el apoyo mesioincisal .

Extensiones caninas de los apoyos oclusales En ocasiones se coloca una extensión disital desde un premolar en una vertiente lingual del canino adyacente retención indirecta, aumentando la distancia de un elemento resistente desde la línea del fulcro Este método es especialmente útil cuando se utiliza el primer premolar como pilar principal La distancia anterior hasta la línea del fulcro es solamente la distancia que queda entre el apoyo mesioclusal y el terminal anterior de la extensión digital. En estos casos, aunque la extensión descanse en una superficie preparada, se debe emplear con un apoyo terminal en la cresta marginal mesial del primer premolar. Aunque no se empleen como retenedores indirectos, las extensiones caninas, los retenedores en barra continua y las placas linguales nunca se deben emplear sin apoyos terminales, por las fuerzas resultantes que aparecen cuando se colocan solamente sobre planos inclinados.

Barras cingulares y placas linguales Las barras cingulares y las placas linguales, no son retenedores indirectos, porque se apoyan en vertientes linguales no talladas de dientes anteriores. Los retenedores indirectos son los apoyos terminales de cada extremo, en forma de apoyos oclusal es auxiliares o de apoyos caninos. En las PPR de clases I y II se pueden incrementar la eficacia de los retenedores directos con una barra cingular o una placa lingual acompañada de un apoyo terminal en cada extremo. No se deben colocar nunca un retenedor en barra continua o el borde superior de la placa lingual por encima del tercio medio del diente para evitar el movimiento ortodontista o de los dientes durante la rotación de una prótesis con extensión distal. Esta guía deja de ser importante cuando los 6 dientes anteriores están en línea recta, pero cuando la arcada es estrecha y angulada, una barra singular una placa lingual sobre los dientes anteriores se extiende más allá de los apoyos terminales y puede provocar movimientos tontico de estos dientes. Aunque su intención sea estabilizar dientes anteriores débiles, si no se emplean con discreción , pueden producir el efecto contrario.

Zonas de modificación En ocasiones, el apoyo oclusal de un pilar secundario en una PPR de clase II puede servir como retenedor indirecto, dependiendo de la distancia entre la línea del fulcro y el pilar secundario. En la clase II, modificación I, los pilares principales son los adyacentes a la extensión distal de base y el pilar más distal del lado dentosoportado . La línea de fulcro es un eje diagonal entre los dos pilares terminales.

El pilar anterior de lado dentosoportado es un pilar secundario que sirve para soportar y retener un extremo del segmento dentosoportado y añadir estabilización horizontal a la dentadura. Si no existe espacio de modificación, como las arcadas de clase II no modificado, en el diseño de la PPR es esencial que los apoyos o cruciales auxiliares y los componentes de estabilización estén en la misma posición. La presencia de un espacio de modificación puede proporcionar un pilar dental de soporte, estabilización y retención.

Soporte de las rugosidades Algunos clínicos aconsejan cubrir la rugosidades palatinas como un medio de retención, porque las rugosidades están en zona firme y habitualmente bien situadas para retener indirectamente la PPR clase I. A pesar de ser cierto que el recubrimiento amplio de la rigurosidad es puede proporcionar cierto soporte, los hechos demuestran que el soporte de los tejidos es menos efectivo y hace como fue que el soporte dental positivo, de manera que el recubrimiento del arco ciudades no es deseable sí puede ser evitados El empleo de rugosidades como retención indirecta forma parte del diseño de la placa palatina en forma de herradura. Como en estos casos la retención posterior acostumbra a ser inadecuada, las necesidades de retención indirecta son probablemente mayores que las que puede proporcionar este tipo de soporte tisular por si solo.

En la arcada mandibular la retención de la base en extensión exclusiva no previene la elevación y separamiento de la base de los tejidos. En la arcada maxilar con solamente dientes anteriores, casi siempre se necesita recubrir totalmente el paladar. En las PPR de clase I con extensión distal a partir del primer premolar, el recubrimiento del paladar puede ser ventajoso excepto cuando le impide un todos los maxilar. El recubrimiento completo se puede conseguir con una base de resina acrílica, pero es preferible el paladar metálico colado por la retención añadida y la reducción del grosor. Cuando en las PPR de clase I no se puede utilizar un paladar completo, se puede emplear un retenedor indirecto con otros diseños de conectores mayores palatinos.