Se debe asumir que, con frecuencia, la anemia en los ancianos es de origen multifactorial; todos los mecanismos
fisiopatológicos son posibles y, muchos de ellos, simultáneos.
Según los datos del estudio NAHNES, parecería que las deficiencias nutricionales eran responsables de, aproximadamente, el
34% de los casos de anemia, mientras que las enfermedades crónicas, con y sin insuficiencia renal, respondían al 33% de los
casos de anemia en sujetos de edad avanzada. En el 30% o más de los ancianos con anemia no se logró identificar la etiología
(anemia de causa desconocida), aunque este hecho podría ser simplemente el reflejo de la utilización de un número restringido
de pruebas diagnósticas.
Deficiencia de nutrientes:
-Hierro: aumento de las pérdidas de hierro (úlcera péptica, neoplasias benignas o malignas, uso de AINEs, enfermedad
inflamatoria intestinal, parasitosis intestinal, alteraciones vasculares, pérdidas genitourinarias); Disminución de la absorción
(enfermedad celíaca, síndrome de Whipple, linfangiectasia, sobrecrecimientobacteriano, atrofia gástrica, gastrectomía,
resección o bypass intestinal, medicamentos: anti-H
2, IBP, antiácidos, etc., exceso de fibra en la dieta, compuestos fenólicos
del té y café, soja…)
-Vitamina B
12: ingesta inadecuada (vegetarianos estrictos, alcoholismo, malnutrición), enfermedades gástricas (anemia
perniciosa, gastrectomía, gastritis crónica atrófica), enfermedades del intestino delgado (síndromes de malabsorción,
resección ilealo bypass, enfermedad de Crohn ileal, síndrome de asa ciega), enfermedad pancreática (insuficiencia
pancreática), fármacos (IBP y anti-H
2, metformina, colchicina, neomicina, colestiramina)
INFORMACIÓN ADICIONAL
ANEMIA EN ANCIANOS