Cap. I La revelación y su Transmisión.pptx

Formación Catequistas

1. ENCUENTRO PARROQUIAL DE CATEQUISTAS

2. AGENDA Bienvenida Oración Lectio Divina: San Juan 6, 60-69 Directorio para la Catequesis. Cap. I: “La Revelación y su Transmisión” . Trabajo en Grupos. Receso. Inscripción SPAC. Varios.

3. Jn 6 , 60-69

4. En aquel tiempo, muchos de los discípulos de Jesús dijeron: «Este modo de hablar es duro, ¿quién puede hacerle caso?».

5. Sabiendo Jesús que sus discípulos lo criticaban, les dijo: «¿Esto os escandaliza?, ¿y si vierais al Hijo del hombre subir adonde estaba antes? El Espíritu es quien da vida; la carne no sirve para nada.

6. Las palabras que os he dicho son espíritu y vida. Y, con todo, hay algunos de entre vosotros que no creen». Pues Jesús sabía desde el principio quiénes no creían y quién lo iba a entregar.

7. Y dijo: «Por eso os he dicho que nadie puede venir a mí si el Padre no se lo concede». Desde entonces, muchos discípulos suyos se echaron atrás y no volvieron a ir con él.

8. Entonces Jesús les dijo a los Doce: «¿También vosotros queréis marcharos?». Simón Pedro le contestó: «Señor, ¿a quién vamos a acudir? Tú tienes palabras de vida eterna; nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo de Dios».

9. S./ Palabra del Señor.

10. Directorio Para la Catequesis Cap. I: la revelación y su transmisión

11. 1. Jesucristo, revelador y revelación del Padre La Revelación del plan providente de Dios. (11-14) REVELACIÓN : Dios en su infinita Bondad, por el amor al hombre se revela , se dice a sí mismo para entrar en estrecha comunión con él . El SER y HACER de la Iglesia se fundamenta en que Dios Revela su Voluntad de salvar al hombre. PALABRAS Y OBRAS , manifestadas plenamente en la Persona de Jesucristo.

12. 1. Jesucristo, revelador y revelación del Padre Jesús anuncia el Evangelio de la salvación. (15-16) Jesús manifiesta la presencia del Reino de Dios, un Reino que inaugura en los más pequeños (Pobres, Pecadores, Enfermos…) cuya ley es el AMOR , pues lleva al hombre a su perfección. Pentecostés es la Plenitud de la obra salvífica de Dios, manifestada en Jesucristo. Espíritu Santo actualiza en cada hombre la redención obrada por Jesús, y al mismo tiempo anima a los discípulos a continuar la misión.