La hermano le contestó, “Oh, no te preocupes. Yo, sin embargo, ¡soy bien hipócrita! D.A.,
Springfield, MA, USA
Una vez un hombre predicaba en una iglesia, y cuando estaba en lo mejor del mensaje, una
persona sentada en las últimas bancas le gritó, “¡No se oye!” El predicador aumentó el
tono de su voz, pero la persona insistía, “¡No se oye!” Un poco molesto, el predicador le pidió al
de los controles de sonido que aumentara el volumen, pero la misma persona volvía a gritar, “¡No
se oye!” Indignado, el predicador le dijo a la persona, “¿Tienes problemas en los oídos, o qué te
pasa?” La persona le contestó, “No. Lo que pasa es que lo que tú haces no me deja oír lo que tú
dices.” Hermanos, muchas veces nuestros actos impiden que la gente nos crea lo que les
predicamos. J.O., Seattle, WA, USA
Había un pastor que era fanático de jugar gallos. Para poder jugar, él se fue a una gallera
bien lejos, donde nadie lo conociera. Cuando iba a poner el gallo a jugar, salió alguien que dijo,
“Yo le apuesto 500 al del pastor.” P.G., Caguas, Puerto Rico
En una ocasión un ateo estaba dando una charla acerca de la 'no existencia de Cristo.' Él
decía, “Cristo no existe decía, nadie lo ha visto, ha sido un invento para engañar a la gente,” y
continuó arremetiéndola contra Jesucristo. Al terminar la charla, invitó a los oyentes que tuvieran
preguntas a preguntar lo que quisieran. Entonces, se levantó un hombre cristiano que había sido
alcohólico y drogadicto. El cristiano estaba comiendo una naranja, y preguntó, “Señor ateo,
¿Esta naranja que estoy comiendo está dulce o ácida?” El ateo, muy enojado, le contestó,
“¿Cómo voy a saber si no la he probado?” El cristiano le respondió, “Entonces, ¿Cómo usted
puede asegurar que Cristo no existe, si no lo ha probado? Solo los que hemos probado a Cristo
sabemos que Él es real y verdadero.” J.O., Seattle, WA, USA
Un pastor dijo a su hijo de siete años que no le podía comprar juegos electrónicos que
usaran armas de fuego. Cuando el niño inquieto preguntó por qué, el papá le dijo, “Esos
juegos son muy violentos, y no se los compraré.” El niño respondió, “Yo leí en la Biblia que
varios apóstoles utilizaron armas de fuego.” El desconcertado pastor exclamó que no era cierto,
pero el hijo insistía que sí lo había visto. Finalmente el papá le dijo, “Por favor, muéstreme dónde
la Biblia dice que varios apóstoles usaron armas de fuego.” El hijo le comentó, “Pablo escribió
sobre unas e-PISTOLAS, Pedro escribió sobre unas e-PISTOLAS, Juan escribió so…” A.G.,
Valencia, Carabobo, Venezuela
[Este es un chiste verídico.] La mamá se acercó a su hijo de 3 añitos, que estaba orando,
y le escuchó decir, “Dios, mira a todas las cucarachitas, porque mi mamita las está matando.”
D.A.G., Catacamas, Olancho, Honduras
[Este es un chiste verídico.] Había un predicador que llegó a los Estados Unidos de América,
y un hermano le invitó a su iglesia a predicar. Cuando pasó al frente él dijo a la congregación:
“Yo ya tengo residencia.” Al terminar el culto, un hermana le preguntó, “Hermano predicador,
¿cómo usted lo hizo para tener su residencia tan pronto, porque yo no tengo residencia, ni
permiso, ni ID, ni tampoco licencia de conducir, y ya llevo diez anos viviendo aquí en los Estados
Unidos?” Ahora contestó el predicador, “No hermana, es que no me comprendió usted, yo ya
tengo mi residencia para ir al cielo.” C.C., Harrisonburg, VA, USA
[Este es un chiste verídico.] Un evangelista internacional predicaba al aire libre en Valencia,
Venezuela. Después de su acalorada predicación, el evangelista preguntó en que país había
nacido Jesús. De inmediato un hombre levantó la mano y dijo, “En Venezuela.” El evangelista,
un poco confundido, no quiso ridiculizarlo, y le contestó que no era así. El hombre insistía que sí
era verdad, porque él había leído en la Biblia que Jesús nació en Belén. (El pueblo de Belén
está cerca de Valencia, en el mismo estado de Venezuela.) A.G., Valencia, Carabobo,
Venezuela
[Este es un chiste verídico.] Había una hermana que dirigía la alabanza por primera vez.
Ella estaba muy nerviosa y emocionada. En eso, empezó a cantar un coro que dice, “Todo lo
bueno que tengo lo he recibido…” Sin embargo, por su nerviosismo cantó así, “Todo lo tengo
muy bueno...” F.J.C., Tlapa, Guerrero, México