Comprender los componentes de las competencias emocionales

MayraAdelinaRivasPal1 8 views 12 slides Aug 28, 2025
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Las emociones se sostienen en varios componentes a considerar en el estudio científico de la discapacidad psicosocial


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Dra. Mayra Rivas Paladines Mg. Sc

Por competencia emocional entendemos la capacidad de mantener o mo­dificar las interacciones con el entorno de manera efectiva y socialmente adecuado, gracias a la capacidad de afrontar las emociones propias y ajenas en situaciones cotidianas. A continuación, presentaremos las principales teorías al respecto: la de Gordon, la de Saarni y la de Denham .

Cuando se habla de competencia emocional es referirse a la perspectiva teórico aplicativas bien definidas y derivadas de la convergencia de 3 modelos: Modelo socioconstructivista Modelo Relacional Modelo Funcionalista

Las principales teorías relacionadas con el origen y desarrollo de las emociones son: la teoría diferencial de Izard , la teoría de la diferenciación de Sroufe y la teoría componenc:ial de Scherer . Stcvcn Gordon (1989), desde una perspectiva socio constructivista y socioló­gica, introduce el concepto de cultura emocional, con el que en­tiende una serie de conocimientos que el individuo aprende a través de las interacciones diarias en las que se ve envuelto desde una edad temprana y que son el requisito previo para ser emocionalmente competente. Enfatiza el papel de la cultura emocional a la que están expuestos los niños, definió la competencia emocional como un conjunto de conoci­mientos y habilidades comportamentales. Para el autor, la competencia emocional implica cinco habilidades principales: saber ex­presar las emociones, saber interpretar conductas emocionales, saber con­trolar la expresión emocional en función de su adecuación al contexto, conocer el vocabulario emocional y, afrontar las emociones dolo­rosas sin perder el control. Existe un estrecho vínculo entre cultura y emoción. ACERCAMIENTO CULTURAL DE GORDON

La teoría de la competencia emocional de Saarni Carolyn Saarni (1999; 2007), se ha dedicado por muchos años a investigar sobre el desarroJlo típico y atípico Con la expresión «competencia emocional» se refiere a la capacidad de comprender las emociones propias y ajenas, de regularlas y controlarlas y de utilizarlas eficazmente en los procesos cognitivos y en las relaciones sociales. Para Saarni , la competencia emocional está compuesta por ocho habili­dades básicas, que emergen y se desarrollan a través de un sistema dinámico e integrado .

La competencia sodoemocional de Deham Susan Denham (1998) sistematizó el conte­nido de los modelos propuestos por los autores anteriores, definiendo la competencia emocional como un conjunto de habilidades que se pueden reducir a tres categorías principales: expresión, comprensión y Regulación de las emociones Posteriormente, la misma autora contribuyó, junto con otros colegas ( Halberstadt , Denharn , Dunsrnore , 2001), a construir un mode­lo teórico que se ha denominado: •Competencia socioafectiva», que incluye tres componentes principales, que son: enviar mensajes emociona­les-afectivos , recibirlos y tener experiencias afectivas; A cada uno de los tres componentes corresponden cuatro habilidades: conciencia del afecto o emo­ción, identificación del afecto, adaptación a situaciones contextuales y gestión y regulación emocional se refiere a la capacidad, presente desde la más tempra­na edad, de manifestar el propio estado emocional a través de canales expre­sivos, como el llanto o la sonrisa. aparece tempranamente, ya en la edad preescolar; por ejemplo, un niño que quiere jugar con sus compañeros: sabe que si quiere entrar en un juego debe comunicar corresponde en nuestro ejemplo a la habilidad del niño para elegir el tipo de mensaje emocional adecuado para lograr el objetivo, implica la capacidad de saber cambiar d propio comportamiento en relación con las características cambiantes de la situación Hace que el niño sea ca­paz de modular y regular la expresión de las propias emociones; volviendo a nuestro ejemplo, esta habilidad implica, por parte del niño, por ej : en­mascarar la rabia si no es aceptado por el grupo de compañeros. propor­ciona al individuo una retroalimentación inmediata sobre las acciones reali­zadas y, además, informa sobre las intenciones del otro. capa­cidad de comprender los significados de los propios estados de ánimo, siem­pre teniendo en cuenta los límites dados por las reglas contextuales y los cambios en el acontecer de los de eventos.

El concepto de competencia está en revisión debido a su complejidad. Hay diversas categorías de competencias: técnicas, profesionales, participativas, personales, básicas, clave, genéricas, transferibles, emocionales, socio-emocionales, etc. En este caso se toman en consideración las competencias emocionales, entendidas como un subconjunto de las competencias personales. En torno a estas competencias se aporta una conceptualización y una sistemática estructurada en cinco grandes bloques: Conciencia emocional, regulación emocional, autonomía emocional, competencia social, habilidades de vida y bienestar. Se hace referencia a las aplicaciones de las competencias emocionales en la empresa, la salud y la educación. De cara a la clarificación de conceptos, se establece la distinción entre inteligencia emocional, competencia emocional y educación emocional. LOS COMPONENTES DE LA COMPETENCIA EMOCIONAL

Partimos de estudios sobre el desarrollo emocional , sino tam­bién de el campo clínico-aplicativo . La visión dualista de la naturaleza humana -que considera la razón y la emoción como dos dimensiones opuestas- es muy antigua, ya presente incluso en el pensamiento de Platón, y ha sobrevivido durante siglos, encontrando espa­cio también en textos que estudian las emociones. Competencia socioafectiva del niño . Hay muchos intelectuales que tienden a desacreditar la razón en favor de las emociones ; argumentar a favor de la racionalidad a menudo se consi­dera frío , filosóficamente poco sofisticado y, a veces , incluso políticamente sospechoso . La paradoja radica en que quienes abogan por la supremacía de las emociones , para hacerlo se ven obligados a recurrir a razonamientos complejos y argumentos lógicos sofisticados , en definitiva , a utilizar la razón para desacreditar a la razón misma .

¿QUÉ ES LA EMOCIÓN? Las emociones son uno de los aspectos más importantes de nuestra vida, sin embargo, se han mantenido como uno de los fenómenos más enigmáticos para ser explicados científicamente. Es obvio que las emociones juegan un papel importante en la vida de los humanos y muchas otras especies, sin embargo, el estudio científico de las emociones sigue siendo una disciplina fragmentada y confusa y algunos autores inclu­so abogan por la oportunidad de deshacerse por completo de la palabra «emoción».

John Watson 1930) y Burrhus Skinner (1938), desde un punto de vista comportamental, creían que los únicos datos fiables como objeto de estudio eran los obtenidos mediante la observación directa de la conducta. Las emo­ciones quedaron así excluidas del estudio científico, como variables internas, imposibles de estudiar con fiabilidad: lo que se estudiaba era el comporta­ miento emocional. Después de todo, a principios del siglo pasado, los psicó­logos no tenían la abundancia de conocimiento neurocientífico que posee­mos ahora, ni se disponía de las biotecnologías actuales. Desde una perspectiva diferente, el psicoanálisis consideró las emociones determinadas por mecanismos inconscientes sometidos a la represión, por lo que propuso una teoría que no podía ser refutada ni ser objeto de inves­tigación científica (Popper, 1934). También hay que considerar el límite que actualmente impone la ética en el estudio experimental de las emociones. La reproducción en el labora­ torio de eventos asociados con emociones fuertes, especialmente negativas,

Palvarini (2019) propone una distinción muy clara entre estos tres términos. El afecto (o afectividad) se considera un concepto inclusivo que abarca tanto la emoción como el sentimiento. La emoción es el componente biológico, innato de la afectividad, tiene un inicio repentino y es de corta duración, incluye la activación del sistema nervioso autónomo, la expresión facial, los elementos de comunicación paraverbal y la acción manifiesta. Así pues, la emoción representa una respuesta inmediata y transitoria que determina la activación neurovegetativa y que lleva a reaccionar de forma bastante inmediata ante un estímulo externo o interno. El sentimiento es en cambio una manifestación afectiva prolongada en el tiempo, menos intensa que la emoción, menos reconocible por la expresión facial, muchas veces alimentada por la cavilación sobre determina­ dos contenidos. Otro término que a menudo se confunde es el de «estado de ánimo». En psicología de la personalidad, por estado de ánimo entendemos una tenden­cia emocional bastante estable y recurrente, debida en parte al temperamento y en parte a las experiencias personales.