leccion # 6 "El Manto de Elias y Eliseo"
en powerpoint
Size: 3.11 MB
Language: es
Added: May 02, 2011
Slides: 24 pages
Slide Content
"El manto de Elías y Eliseo" "El manto de Elías y Eliseo" Lección # 6 Lección # 6 Por Robert N. Gómez para Ministerio Revive
Resumen Rasgar los vestidos en los tiempos b í blicos generalmente significaba dolor y tristeza profundos. Pero, en el caso de Eliseo, pareci ó simbolizar no solo una emoci ó n profunda, sino tambi é n un cambio muy grande en su vida, al tomar la seria responsabilidad de responder al llamado de Dios. Para Memorizar: “ Porque la tristeza que es seg ú n Dios produce arrepentimiento para salvaci ó n, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte ” (2 Cor. 7:10). Para el 7 de mayo de 2011 S á bado 30 de abril
POCOS PERSONAJES B Í BLICOS han tenido una vida m á s pintoresca que el profeta El í as: una historia de fe, de pruebas, y del abrumador poder de Dios en este mundo. Ahora consideraremos a El í as y el manto que usaba, y veremos qu é lecciones espirituales podemos obtener de ellos.
Domingo 1 de mayo: “ Un silbo apacible ”
La vida de El í as, registrada en 1 y 2 Reyes, incluye casos en que valientemente afront ó reyes y sus amenazas de muerte. Sin embargo, hubo una excepci ó n notable: la ocasi ó n cuando, asustado por las amenazas de una reina malvada, escap ó por su vida. En 1 Reyes 18, hizo descender fuego del cielo sobre el monte Carmelo, hizo matar a los profetas de Baal y advirti ó a Acab de la lluvia que se aproximaba. El poder de Dios vino sobre é l y, despu é s de que se ci ñó su manto con su cintur ó n, corri ó delante de Acab los 36 km que distaba Jezreel .
Lee 1 Reyes 19:5 al 19. ¿ Cu á l es el significado de que El í as haya envuelto su rostro en el manto? Es fascinante el hecho de que, aunque El í as sinti ó un fuerte viento, un terremoto y un fuego, ninguna de esas cosas le hizo cubrirse el rostro con el manto. Fue solo la presencia de Dios, en “ el silbo apacible y delicado ” , lo que motiv ó esa reacci ó n: una respuesta de temor, respeto y protecci ó n propia.
Lo que El í as necesitaba aprender era que, por poderosas y activas que fueran esas fuerzas, en s í mismas no retrataban un cuadro real del Esp í ritu de Dios. El í as oy ó la voz de Dios en una tranquila y sutil forma que le dijo lo que deb í a hacer, y é l obedeci ó a esa voz. Cómo podemos aprender a reconocer la voz de Dios, que nos habla? Más importante todavía es la siguiente pregunta: ¿Obedeces lo que escuchas o apagas ese “silbo apacible y delicado” que te habla al alma?
Lunes 2 de mayo: El cambio de vestiduras El cambio de vestiduras
Lee 1 Reyes 19:19. ¿ C ó mo fue el llamado de Eliseo en el campo? No se nos dan las palabras exactas de El í as, o la respuesta de Eliseo al llamado de El í as, pero sabemos que respondi ó positivamente. El í as ahora arroj ó su manto, un s í mbolo de sus responsabilidades como siervo de Dios, sobre los hombros de Eliseo (ver N ú m. 20:28). El simbolismo es bastante obvio. Eliseo recib í a, ahora, un llamamiento sagrado. Siguiendo las indicaciones de Dios para encontrar un sucesor, El í as se fue a una granja de Safat , el padre de Eliseo, y encontr ó a Eliseo arando con bueyes. Tal vez El í as salud ó con la mano para llamar la atenci ó n de Eliseo, y Eliseo detuvo su trabajo y esper ó a escuchar el mensaje de El í as.
Piensa acerca de ¿ Qu é est á s haciendo con las cosas que hay en tu propia vida? ¿ Qu é clase de significado les est á s dando, por tus acciones? ¿ Qu é llegan a simbolizar para ti, y por qu é ? El manto de El í as, aqu í , significaba devoci ó n, compromiso y dedicaci ó n. “ Cuando El í as, divinamente dirigido en la b ú squeda de un sucesor, pas ó al lado del campo en el cual Eliseo estaba arando, ech ó sobre los hombros del joven el manto de la consagraci ó n. y ahora el Esp í ritu de Dios impresion ó el coraz ó n de Eliseo acerca de lo que significaba el acto del profeta. Era, para é l, la se ñ al de que Dios lo llamaba a ser sucesor de El í as ” (PR 164).
Martes 3 de mayo: Vestir un saco de cilicio Cilicio - una tela oscura y áspera tejida generalmente con pelo de cabra o de camello- era un símbolo de profunda tristeza y lamentación (2 S. 3:31; 2 R. 19:1,2). Parece que a veces se la usaba alrededor de la cintura como cinto, pero pudo haber sido empleado también como un manto suelto que cubría la mayor parte del cuerpo ( Gn. 37:34; 1 R. 20:31; I[...] Definición agregada Diccionario Bíblico
La misi ó n de El í as de enfrentar a Acab sobre varios problemas serios deber í a haberle producido una buena cantidad de estr é s, pero é l pareci ó fuerte y dispuesto, por lo menos all í , a seguir las instrucciones de su Se ñ or aun cuando é l sab í a que su vida pod í a estar en peligro. Ahora deb í a comunicar Acab las denuncias que Dios hab í a pronunciado sobre é l adem á s de aquella acerca de que los perros lamer í an su sangre. Y le hablar á s diciendo: As í ha dicho Jehov á : ¿ No mataste, y tambi é n has despojado? Y volver á s a hablarle, diciendo: As í ha dicho Jehov á : en el mismo lugar donde lamieron los perros la sangre de Nabot , los perros lamer á n tambi é n tu sangre, tu misma sangre ” (1 Rey. 21:19).
El rasgar las vestiduras, una acci ó n com ú n en ese tiempo, representaba horror y tristeza, lo que revel ó que realmente aceptaba la verdad que El í as le dijo. Cu á n profundo y cu á n duradero fue ese arrepentimiento, el texto no lo dice; lo que dice es que rasgar la ropa revelaba la sinceridad de su coraz ó n en ese momento. “ La tristeza que es seg ú n Dios produce arrepentimiento para salvaci ó n, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte ” (2 Cor. 7:10). Qu é est á ense ñ ando Pablo, y c ó mo podemos aplicar esta advertencia a nuestras propias vidas? Lee 1 Reyes 21:21 al 29. ¿ C ó mo entendemos la respuesta de Acab ,? A pesar dela clase de hombre que el era? Cuando Acab oyó estas palabras, se presentó a Dios de una manera sumamente humilde (1 Rey. 21:27), que incluyó rasgar sus vestidos, poner cilicio sobre su cuerpo, y aun rehusó comer. El resto del capítulo implica que su arrepentimiento y humillación debieron haber sido genuinos.
Mi é rcoles 4 de mayo: La ascensión de Elías La ascensión de Elías
Sea lo que fuere lo que se pueda decir de El í as, ciertamente tuvo a ñ os dram á ticos e interesantes en su vida (aunque, sin duda, ahora estar á m á s contento). Segundo de Reyes 1 cuenta Lee 2 Reyes 2:1 al 18, y responde las siguientes preguntas: ¿ Qu é razones podr í a haber usado Eliseo para rehusar separarse de El í as, a pesar de los tres pedidos del profeta de que hiciera precisamente eso? una historia fascinante que conduce a otra a ú n m á s fascinante en el cap í tulo siguiente. Se podr í a decir que Eliseo sali ó con una llamarada de gloria.
¿ Por qu é Eliseo rasg ó su vestido en dos partes? ¿ Era por duelo, o por alguna otra causa. ….Aunque generalmente rasgarse las vestiduras significaba duelo, esta vez Eliseo pudo haber estado tan abrumado que rompi ó sus vestidos por gratitud.…...Rasgar su ropa tambi é n pudo haber sido un s í mbolo de echar fuera todo lo propio, y ponerse las vestiduras de El í as. Cuando El í as puso su manto al principio sobre el agricultor Eliseo, ambos sab í an que ese acto simbolizaba un llamado a trabajar para Dios Eliseo, ahora, ten í a esta prenda especial en su posesi ó n, lo que indicaba que é l deb í a llevar adelante las responsabilidades del liderazgo como El í as lo hab í a hecho.
Considera tambi é n el pedido de Eliseo a su mentor ( ¿ a qu é pedido te recuerda esto?). Las palabras de Eliseo revelan algo de su car á cter, mostrando que é l era un sucesor digno de vestir el manto del gran profeta que estaba a punto de ser “ sacado ” de este mundo. Qu é cuadro m á s amplio de la existencia nos presenta esta historia? Es decir, ¿ cu á n a menudo tendemos a mantener ideas estrechas y materialistas del mundo, olvidando la realidad siempre presente del á mbito sobrenatural, que tambi é n existe en este mundo y que interact ú a con nosotros?
El manto de Eliseo Jueves 5 de mayo: El manto de Eliseo
“ Alz ó luego el manto de El í as que se le hab í a ca í do, y volvi ó , y se par ó a la orilla del Jord á n. Y tomando el manto de El í as que se le hab í a ca í do, golpe ó las aguas, y dijo: ¿ D ó nde est á Jehov á , el Dios de El í as? Y as í que hubo golpeado del mismo modo las aguas, se apartaron a uno y a otro lado, y pas ó Eliseo ” (2 Rey. 2:13, 14). Qu é historia nos recuerda este incidente? ¿ Qu é simbolismo importante se ve all í ?
Lee 2 Reyes 2:15 al 18. Trata de ponerte en el lugar de estos profetas de Jeric ó . ¿ Por qu é habr á n reaccionado como lo hicieron, tratando de encontrar a El í as, aun cuando sab í an que hab í a sido llevado? El texto no dice si ellos mismos vieron el evento. Por alguna raz ó n, ellos creyeron que El í as todav í a podr í a ser encontrado “ en alg ú n monte o en alg ú n valle ” (vers. 16). Tal vez no estaban preparados para la idea de que alguien pudiera ser arrebatado al cielo .Y, aunque ten í an la palabra de Eliseo de no molestarse en buscarlo, ellos insistieron. Tal vez, despu é s de no hallarlo, se dieron cuenta de lo que hab í a sucedido. Al fin, no importan las experiencias o los milagros que hayamos visto, todav í a necesitamos ejercer fe, porque m á s temprano o m á s tarde entrar á la duda y desafiar á seriamente nuestra experiencia cristiana.
Para Estudiar y Meditar: Viernes 6 de mayo
“ El í as, que hab í a sido trasladado al cielo sin ver la muerte, representaba a aquellos que estar á n viviendo en la tierra cuando venga Cristo por segunda vez, aquellos que ser á n ‘ transformados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta ’ ; cuando ‘ esto mortal se vista de inmortalidad ’ , y ‘ esto corruptible se vista de incorrupci ó n ’ (1 Cor. 15:51-53). Jes ú s estaba vestido por la luz del cielo, como aparecer á cuando venga ‘ por segunda vez, sin relaci ó n con el pecado [...] para salvar ’ . Porque é l vendr á ‘ en la gloria de su Padre con los santos á ngeles ’ ( Heb. 9:28; Mar. 8:38)" (DTG 390).
¿ Qu é cosas pr á cticas podemos hacer para ayudarnos a escuchar “ el silbo apacible ” ? C ó mo el pecado voluntario nos hace “ duros de o í r ” , por as í decirlo? Cuando experimentas angustia y des á nimo que casi son m á s de lo que puedes soportar, ¿ c ó mo sabes que Dios est á cerca y te est á cuidando, como lo supo El í as? El manto de El í as simbolizaba el traspaso o la sucesi ó n de su ministerio a Eliseo, lo que plantea la pregunta de la sucesi ó n en la iglesia hoy. ¿ C ó mo act ú a el proceso, y c ó mo podemos estar seguros de que las personas adecuadas “ reciben el manto ” , por usar una expresi ó n de la vida de El í as?