Gr 11 Primera Parte

basseta 833 views 80 slides Jan 10, 2009
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About This Presentation

Reportaje de un viaje con motocicletas de 49 cc siguiendo el trazado del sendero de largo recorrido GR 11 (Cantábrico-Mediterráneo). En cinco días pudimos hacer el tramo desde Cabo Híger (Mar Cantábrico) hasta Jaca (Huesca).


Slide Content

GR 11 - PRIMERA PARTE
Cabo Higer - Jaca
Del 25 de Septiembre al 1 de octubre de 2004
Textos: Basseta
Fotos: Xavi, Jordi, Rafa y Basseta

Introducción sobre el GR-11
El GR-11 es un recorrido eminentemente montañero por la vertiente sur
de los Pirineos, que enlaza Euskadi, Navarra, Aragón, Andorra (45 km) y
Cataluña, es decir, va del Cantábrico al Mediterráneo (825 kms).
El recorrido por Euskadi es reducido (unos 30 km) pero significativo ya
que en Hondarribia hay uno de sus puntos de inicio/final. El itinerario
pasa por Cabo de Híger, Hondarribia, Irún y collada de San Antón.
El tramo de Navarra (de unos 180 km) recorre la parte más occidental de
los Pirineos. Entra en esta comunidad por la collada de San Antón y Vera
de Bidasoa, continúa por el valle de Baztán hacia Elizondo, Roncesvalles
y los bosques de Quinto Real; sube a la sierra de Abudi (pico de Orhi,
primer dos mil del lado oriental de los Pirineos) y pasa por Orbaitza,
Selva de Irati y continúa hacia Ochagavia; desde este punto va a la villa
roncalesa de Isaba y sube al Ezcaurri (2.045 m) para ir a buscar Zuriza en
el límite con Aragón.

Nuestros medios: Motocicletas de 49 cc (Mobilette,
Vespino y 2 Derbi Variant), transportadas por agencia
hasta Hondairribia y devueltas a Ibi desde Jaca.
Más información sobre el GR-11:
http://www.cuentatuviaje.net/senderos/gr11.asp

SABADO 25
Jorge y Xavi pasan a recogerme a las 5’10 h para subir a por Rafa, que
como estaba de boda hasta tarde empalmó con la salida sin dormir en
toda la noche. Conduce Jorge y al pasar por Alcoy paramos a tomar un
café en el kiosco de La Rosaleda, donde Paco y su mujer atienden la
barra desde primeras horas de la madrugada.
Jorge conduce hasta pasado Segorbe y cojo el coche un rato. Hacemos
una media de 100 km por hora y a media mañana llegamos a Tafalla y
almorzamos. Jorge aprovechó para hacer una gestión de trabajo y, sin
mucha pausa, seguimos hasta llegar a Hondairribia. Por el camino
contactamos con el enlace de Spain Tir, que viene a recogernos al
aeropuerto y nos lleva con su coche hasta el almacén donde están las
motos.

En Tafalla, después de almorzar.

Una vez cargado el equipaje, ...

... comemos en una gasolinera y nos vamos a Cabo Higer, inicio del
GR 11, donde cumplimos el ritual de tocar el agua del Cantábrico antes
de iniciar nuestra ruta

Tocando el Cantábrico en Cabo Higer

Cruzamos la hermosa ciudad de Hondairribia (Fuenterrabía)

Dirección Bera de Bidasoa nos perdemos y en lugar de ir campo a
través por la montaña acabamos ladeando el rio por una carretera
general con abundante tráfico de camiones. Nos desviamos por un
camino y llegamos a Bera siguiendo una antigua vía de ferrocarril.
Buscar alojamiento en Bera
resultó un tanto cómico, pues
una señora dispuesta en
principio a alojarnos en una
casa rural se asustó y prefirió
mandarnos a otro hostal.
Cuando volvimos ni nos abrió la
puerta, alegando que le habían
llamado por teléfono y ya no
tenía habitación. El caso es que
volvimos al hostal y nos
atendieron de maravilla.
Cenamos en el bar de abajo y,
en un balcón encantador,
echamos unas partidas hasta
hora de dormir.

Bera de Bidasoa

Aquí en Bera de Bidasoa observamos un detalle que se convertiría en
una constante a lo largo de todo el viaje. Me refiero al aspecto de las
casas, con las equinas de sillería, con balcones de madera llenos de
macetas con flores, con sus buhardillas, ...

DOMINGO 26
Me levanto a las 7,30 y Rafa me pega la primera bronca pues lo que
quiere es dormir hasta más tarde. Cargamos las motos y nos vamos en
busca de un lugar para desayunar. Rafa intentó sacar dinero en un cajero
y se le tragó la tarjeta, por lo que tuve que prestarle algo de pasta.
Partimos con idea de llegar a Elizondo por la mañana.

Camino de
Elizondo

Sin embargo, pronto se fueron al traste nuestros planes porque la moto
de Jorge tenía sucesivas averías (se pasaba a bici sin motivo aparente y
hubo que desmontar varias veces el plato).

Perdimos
toda la
mañana
intentando
encontrar la
forma de
solucionar el
problema.

De todos modos, no
habíamos acertado a
coger el verdadero GR
11.
En vista de la situación,
Xavi y yo nos volvimos a
Bera a comprar algo para
comer, haciendo el
trayecto de ida y vuelta
por la verdadera ruta,
mucho más
impresionante y auténtica
que la que habíamos
hecho en un principio.

Por suerte, la moto de Jorge quedó definitivamente reparada gracias al
buen hacer de Rafa, y pudimos reanudar la marcha. De nuevo nos
perdemos y tengo que poner pronto la reserva de gasolina, quedando
mucho trecho por recorrer hasta Elizondo.
En mitad del monte
encontramos a cuatro
franceses, con motos
enduro, que se brindaron a
sacarnos hasta Elizondo.
O no nos entendimos o se
perdieron, pero el caso es
que acabamos mucho más
al Norte, en Dantxarinera,
donde pudimos repostar.
Desde allí y por carretera
llegamos a Elizondo.

ELIZONDO

ELIZONDO

En Elizondo encontramos un buen hostal, en una casa que
albergaba un frontón. Cenamos y nos fuimos a la habitación (una
buhardilla con cuatro camas y aseo) a jugar unas partidas.

LUNES 27
A la vista de las continuas equivocaciones, acordamos guiarnos por el
GPS durante una etapa entera, como prueba de fuego de este sistema de
orientación que, junto con los mapas, nos ofrecía una posición segura en
todo momento. Por tal motivo me levanté temprano para introducir los
waypoints y tenerlo todo controlado.

MARCA DEL GR 11
Aquí experimentamos la verdadera naturaleza del GR-11, es decir, ni
camino ni senda ni nada, todo campo a través por la montaña y, muy de
cuando en cuando, una marca (señal de que íbamos bien).

Era una etapa con
continuas cuestas en las
que casi sacamos los
hígados

Esta vez fue Rafa el que tuvo más problemas con su moto.

Paramos a comer
bajo unas encinas y
vimos una manada
de caballos salvajes
acercarse para
abrevar en un
riachuelo.

MARCA DEL GR-11
Nos fuimos guiando muy bien
hasta casi el punto en que
llegábamos a Bustalmorro.

Pasamos por zonas verdaderamente impracticables, como por
ejemplo, el lecho de un torrente que, si hubiera llovido algo más estos
días, no hubiéramos podido pasar.

Cruzamos algunas colinas verdaderamente
impresionantes.

Subiendo hacia la Peña de los Generales

¡Vaya vista! ¿He?

¡Vaya piedras! ¿Eh?
¡Qué cerca estábamos de verlas mejor!

Todo iba bastante bien, pero cometimos un error y nos metimos en un
pedregal que descendía de una dolina. Hubiéramos podido volver y
rodearla por el otro lado (pues luego comprobé que estaba más
transitable), pero Rafa nos convenció de que podíamos atravesar el
pedregal acarreando las motos entre los cuatro.

Fue un error de apreciación, como más tarde reconocería Rafa, y nos
desfondamos acarreando las motos, hasta el punto de que se nos echó la
noche encima sin terminar de sacarlas.

Optamos por pernoctar al raso (algo que me hacía especial ilusión), por
lo que nos movimos rápido para buscar leña (por suerte pudimos prender
fuego a unos puntales retirados de una alambrada) y agua (encontramos
un pequeño hilo en un barranco justo al lado del fuego).

La noche que
pasamos no la
olvidaremos en
nuestra vida.

Mal que bien pasamos la noche (coto incluido) y tuvimos suerte de
contar con buen tiempo.
MARTES 28

La niebla apenas dejó humedad y la temperatura no bajó en exceso. Si
no hubiéramos encontrado leña y/o agua, tendríamos que haber llamado
a socorro.

Al amanecer, algo descansados, pero sin comer desde mediodía del
Lunes, conseguimos sacar las motos del pedregal y ...

... subirlas como pudimos hasta la cresta.

Arriba nos topamos con una alambrada y, para seguir, teníamos que
pasar al otro lado, pero no había portillo ni hueco suficiente para las
motos.

Para cruzar la alambrada que tuvimos que cortarla y seguir, campo a
través, por la frontera con Francia hasta encontrar una pista que acabó en
carretera. Mi moto había perdido un tornillo del amortiguador trasero
izquierdo, otro de un protector plástico y tenía el pedal doblado, lo que
me impedía arrancarla. La de Xavi tenía una rueda pinchada que
reparamos provisionalmente.

En el primer hostal que pasamos, junto al embalse de Eugi, comimos
como padres, echamos unas partidas y retomamos energía para seguir
hasta Burguete.

Embalse de Eugi

Nos acercamos a Roncesavalles pero volvimos a dormir a Burguete,
acordando que a la mañana siguiente acudiríamos a un taller a intentar
hacer las reparaciones de urgencia en las motos.

Burguete resultó ser un lugar impresionante, con unos campos verdes
alrededor que se observaban nada más asomarse a la ventana de la
habitación. Dimos una vuelta por la mañana y confirmamos que se
trata de un lugar encantador.

Burguete

Había que poner gasolina
y buscar un taller para
reparar algunos
desperfectos.
MIERCOLES 29

Tuvimos suerte en el taller, nos
prestaron herramientas, y pudimos
salir de ruta a media mañana en
dirección a Isaba (a 58 km por
carretera). Habíamos decidido no
hacer la etapa por montaña pues
aparentaba ser una de las más duras.

Cruzamos por pista forestal un puerto de montaña así de
impresionante.

En ruta hacia Isaba.

Yo seguía dando la lata con los mapas, el GPS y las coordenadas
UTM

Y Xavi seguía con los problemas que le daba la rueda pinchada.

Pero no se perdió ninguno por el camino.

En Ochagavía cogimos un tramo para ir por pista forestal.

La antigua Central Patatera de Ochagavía, junto a la vía del tren.

Tuvimos un pequeño altercado al intentar hacer una foto a un camión
que retiraba troncos talados (el hombre afirmó estar “hasta los
cojones de los gilipollas que vienen por aquí”).

Seguimos por
carreteras secundarias y
pistas forestales.

Salvo por un pequeño error, que nos llevó hacia el Sur, llegamos a
Isaba (en pleno Valle del Roncal) y comimos en un bar. Luego nos
fuimos al Norte, hacia Zuriza, donde había un camping y alojamiento.

Vimos una casa de madera en el camping con muy buen aspecto.
Aprovechamos mientras Rafa se fue a “investigar” para tomar una
sidra (un antojo que tenía Xavi desde el primer día).

Rafa se había acercado con la moto
un poco más arriba, hasta el refugio
de Linza, y volvió con la sugerencia
de dormir allí.

Los precios nos gustaron (21 euros por cama, cena y
desayuno).

Valió la pena hacer
el viaje, pues
estuvimos solos con
la pareja de
encargados de
guardar el refugio.
Jugamos a las cartas
y nos fuimos a
dormir a una
habitación con
cuatro camas sin
sábanas ni
almohadas.

Tras un desayuno
abundante estábamos
dispuestos a seguir hasta
Jaca.
JUEVES
30

Refugio de Linza.

Era el último día de moto y vista la situación decidimos llegar a Jaca por
carreteras secundarias, pasando por pueblos maravillosos (Jasa, Aisa,
Lastiesas Altas y Lastiesas Bajas, ...).

Poco antes de comer, y a
sugerencia de Rafa, dejamos la
carretera y nos desviamos por
un tramo del GR 15 que todo
parecía indicar que llevaba al
pueblo donde íbamos a comer.

Creo que si lo llegamos a saber no lo hacemos, pues era una cuesta
permanente a través de una regata llena de pedruscos como adoquines.

Para colmo, hubo que vadear el río y a Xavi le costó un remojón.

Pero llegamos por fin a un lugar
donde comer en Noves

Tras la comida y una partida bajo un nogal ...

... llegamos a Jaca a las 19,00 h.

Contactando por teléfono con Spain Tir dio la casualidad de que el
chofer estaba haciendo un servicio en Jaca y podía recoger las motos en
pocos minutos. A las 19,15 salía el último bus a Zaragoza y pensamos
que podía ser muy conveniente dormir en la capital. Por suerte, el chofer
llegó dos minutos antes de salir el bus, lo que dio tiempo a comprar los
billetes, cargar el equipaje y subir.

Llegamos a Zaragoza a las 21,30 h y, tras unas dudas sobre el tipo de
hotel y la forma de encontrarlo, un taxista nos dejó a la puerta de
uno en el que había cama para los cuatro (una triple y una sencilla).
Nos fuimos a cenar y a tomar algo hasta hora de dormir.

El día anterior
estuvimos en contacto
con el primo de Jorge
de Eurocar y pudimos
reservar un coche hasta
Alicante.
Lo recogió Jorge y sin
muchas prisas salimos
hacia Ibi.
VIERNES 1

Por el camino paramos a dar una
vuelta por el casco viejo de
Daroca.

Daroca

Comimos en Teruel, aprovechando
para dar un paseo.

THE END
Llegábamos a Ibi sobre las 8 de la tarde,
dando por concluida la excursión hasta
dentro de 16 meses.