Cantemos al Señor: Lo mortal esté en silencio N° 110
1. Lo mortal esté en silencio y se acalle con temor: nada humano considere, pues con bendición y amor Cristo, nuestro Dios, desciende exigiendo todo honor.
2. Rey de reyes que en lo antiguo vino al mundo a morar y en humana vestidura, sí, de carne y sangre, a andar, ha de darse a los fieles, a sí mismo por manjar.
3. Van las huestes celestiales su vanguardia a desplegar, y la Luz de luz desciende de aquel reino eternal; el poder del mal ahuyenta, las tinieblas al clarear.
4. A sus pies los serafines, sus vigilias al guardar, cúbranse de la presencia sin dejar de aclamar: “Aleluya, aleluya, aleluya, Rey si par”.