que queremos en la vida «son limitadas», ya sea amor, felicidad, amistad,
un trabajo o una carrera profesional, belleza, dinero o bienes materiales, y
como son limitadas es mejor hacer todo lo que esté en nuestra mano para
conseguirlas antes de que otro lo haga. Esta idea, referida con frecuencia en
términos económicos como «escasez», crea un ambiente no demasiado sutil
de comparaciones y competitividad entre tú y muchas de las personas que
conoces.
La idea de escasez y la mentalidad competitiva que le sigue abunda hasta
tal punto en la vida que cuesta detectarla en todas sus formas. Por ejemplo,
cuando conoces a una persona por primera vez, fíjate en si empiezas a
compararte con ella según lo que es importante para ti como individuo.
¿Evalúas su aspecto físico comparándolo con el tuyo? ¿Mides su riqueza
material, su nivel educativo o su posición social comparándolos con los
tuyos? ¿O te cuestionas si es «más espiritual» que tú? Hay distintas clases
de comparaciones, dependiendo de lo que sea más importante para ti, pero
el hecho de compararte con otra persona casi siempre lleva a la
competitividad, aunque esta solo resida en tu mente. El viejo cliché de no
ser menos que el vecino ilustra esta mentalidad comparativa y competidora.
Es un hábito y dejarlo atrás exige atención y esfuerzo.
Lo más curioso es que las primeras cuatro letras del término inglés
scarcity (escasez) son también las cuatro primeras letras de la palabra scare
(asustar), porque esto es precisamente lo que provoca la idea de escasez:
miedo. La gente, temiendo que no haya bastante de sea lo que sea lo que
quiera, ve a los demás en el Sueño del Planeta como competidores de una
cantidad limitada de recursos, ya sea amor, felicidad, dinero, etcétera, y
actúa en consecuencia. Como has aprendido, cualquier acción motivada por
el miedo no puede estar también motivada por el amor incondicional, y
acaba generando sufrimiento de una forma u otra. Cuando aceptas el
concepto de escasez sin cuestionártelo, crees que alguna otra persona
conseguirá lo que tú necesitas. Es una actitud que no facilita para nada las
relaciones con los demás en el Sueño del Planeta, porque los transformas en
contrincantes en lugar de amigos.
En la tradición tolteca se entiende que la idea de escasez, como se
promueve en el Sueño del Planeta, es un mito. Desde una edad temprana te
domesticaron con la falsa creencia de que la escasez existe, pero lo cierto es
que siempre hay bastante de lo que necesitas en este momento. Cuando
crees en el mito de la escasez, te entra miedo, ves a los demás como