EL SÍNDROME DEL CUIDADOR QUEMADO, JUBILADO, ESTRÉS Y ANSIEDAD ESTUDIANTE Johana Sara Salas Bogotá
¿ QUÉ ES CUIDADOR? La experiencia de cada cuidador es única, ya que son muchos los aspectos que hacen que esta experiencia difiera de cuidador a cuidador. ¿QUÉ ES EL SÍNDROME DEL CUIDADOR QUEMADO? Una de las formas de estrés que ha suscitado mayor interés en los últimos decenios ha sido la conocida como el “síndrome del cuidador quemado” o Burn Out , caracterizado por un estado de agotamiento físico, emocional y mental producido por haber cuidado durante períodos estables, de extensa duración y de alta implicación, a personas dependientes.
CARACTERÍSTICAS: a. Trastornos del sueño. b. Irritabilidad. c. Altos niveles de ansiedad. d. Reacción exagerada a críticas. e. Dificultad en relaciones interpersonales. f. Desesperanza. g. Resentimiento. h. Ideación suicida o de abandono. i. Dolores. j. Cansancio. k. Aislamiento y perdida de interés. l. Dificultades para concentrarse y alteración de la memoria.
SÍNTOMAS FÍSICOS Cansancio continuo (agotamiento, fatiga). Aumento o disminución del apetito. Trastornos del sueño (insomnio, somnolencia durante el día). Dolores musculares, palpitaciones, molestias digestivas, cefaleas. Consumo excesivo de bebidas con cafeína, alcohol o tabaco. Abuso de pastillas para dormir u otros medicamentos. Abandono de su aspecto físico. SÍNTOMAS EMOCIONALES Tristeza , sentimientos de culpa. Irritabilidad, cambios frecuentes de humor o de estado de ánimo. Dificultad para concentrarse. Problemas de memoria . Depresión
SÍNTOMAS SOCIALES Desinterés por actividades que antes disfrutaba. Aislamiento familiar y social. Van abandonando las amistades. Tratar a otras personas de la familia de forma menos considerada que habitualmente. Una vez conocidos los posibles síntomas de alarma, actuaremos para prevenir esta sobrecarga. No olvides que para poder cuidar, lo principal es CUIDARSE . Dos son las escalas más utilizadas internacionalmente para la valoración de la sobrecarga del cuidador: el Índice de Robinson (1983) y la Escala de Zarit (1980). SÍNTOMAS PSICOLÓGICOS: La salud mental de los cuidadores principales suele verse más afectada que la salud física: PROBLEMAS CLÍNICOS: (Depresión, ansiedad, estrés, hipocondría, etc ) PROBLEMAS PSICOSOMÁTICOS: (dolor de cabeza, pérdida de apetito, temblor, problemas gástricos, palpitaciones, vértigo, alergia inmotivada, insomnio, problemas de memoria y concentración, etc ) 3. PROBLEMAS EMOCIONALES: Si bien los sentimientos son algo natural, en el cuidador se convierten en algo perturbador, debido a que no saben controlarlos.
¿CÓMO EVITAR LA APARICIÓN DEL SÍNDROME DEL CUIDADOR QUEMADO? Las medidas de actuación para evitar y/o aliviar la aparición de este síndrome los propone la Asociación Psicogeriátrica Internacional (IPA, 2000), en concreto, los generados por los trastornos conductuales y psicológicos asociados a la demencia: Cambio de actitud, empatía, adaptabilidad ante los cambios. Entender las causas y significados de determinadas conductas. Expectativas realistas respecto a las capacidades de la persona enferma. Tolerancia ante ciertas conductas problemáticas. Compromiso de mantener a la persona enferma en las actividades diarias. Fomentar la dignidad y autoestima de la persona enferma permitiendo un cierto grado de control sobre su vida y su entorno. Preocupación auténtica por el bienestar de la persona enferma. Respeto a su persona, a sus sentimientos e intereses. Sentido del humor, capacidad para expresar sentimientos, creatividad en el manejo de los problemas conductuales y capacidad de detección de los desencadenantes. Voluntad de mejora permanente. El cuidador perfecto no existe y cada día se aprende algo nuevo.
ESCALA DE SOBRECARGA DEL CUIDADOR DE ZARIT 1. ¿Sientes que tu familiar solicita más ayuda de la que realmente necesita? 2. ¿Sientes que debido al tiempo que dedicas a tu familiar ya no dispones de tiempo suficiente para ti? 3. ¿Te sientes tenso cuando tienes que cuidar a tu familiar y atender además otras responsabilidades? 4. ¿Te sientes avergonzado por la conducta de tu familiar? 5. ¿Te sientes enfadado cuando estás cerca de tu familiar? 6. ¿Crees que la situación actual afecta de manera negativa a tu relación con amigos y otros miembros de tu familia? 7. ¿Sientes temor por el futuro que le espera a tu familiar? 8. ¿Sientes que tu familiar depende de ti? 9. ¿Te sientes agobiado cuando tienes que estar junto a tu familiar? 10. ¿Sientes que tu salud se ha resentido por cuidar a tu familiar? 11. ¿Sientes que no tienes la vida privada que desearías debido a tu familiar? 12. ¿Crees que tu vida social se ha visto afectada por tener que cuidar de tu familiar? 13. ¿Te sientes incómodo para invitar amigos a casa, a causa de tu familiar? 14. ¿Crees que tu familiar espera que le cuides, como si fueras la única persona con la que puede contar?
15. ¿Crees que no dispones de dinero suficiente para cuidar a tu familiar además de tus otros gastos? 16. ¿Sientes que serás incapaz de cuidar a tu familiar por mucho más tiempo? 17. ¿Sientes que has perdido el control sobre tu vida desde que la enfermedad de tu familiar se manifestó? 18. ¿Desearías poder encargar el cuidado de tu familiar a otras personas? 19. ¿Te sientes inseguro acerca de lo que debes hacer con tu familiar? 20. ¿Sientes que deberías hacer más de lo que haces por tu familiar? 21. ¿Crees que podrías cuidar de tu familiar mejor de lo que lo haces? 22. En general: ¿Te sientes muy sobrecargado por tener que cuidar de tu familiar? RESULTADO Cada respuesta se valora así: Frecuencia Puntuación Nunca 0 Casi nunca 1 A veces 2 Bastantes veces 3 Casi siempre 4 Una puntación inferior a 46 puntos se considera indicativa de: “no sobrecarga”. Una puntuación superior a 56 puntos se considera indicativa de: “sobrecarga intensa”.
ÍNDICE DE ROBINSON DE SOBRECARGA DEL CUIDADOR 1. ¿Padeces insomnio u otros trastornos del sueño? 2. ¿Notas que vas siendo menos efectivo en tus cuidados? 3. ¿Estás fatigado con mucha frecuencia y esta situación representa un notable esfuerzo físico? 4. ¿Cada vez tienes menos tiempo libre para ti y notas una importante restricción en otras actividades? 5. ¿Los hábitos básicos de tu familia se han visto trastocados? 6. ¿Has tenido que cambiar tus propios planes personales tales como vacaciones? 7. ¿Notas que no te llega el tiempo y siempre estás urgido? 8. ¿Has notado cambios emocionales (estás deprimido, angustiado u obsesionado)? 9. ¿Algunos de los comportamientos de tu familiar te resultan francamente molestos o desagradables?
10. ¿Te duele darte cuenta de lo mucho que ha cambiado tu familiar o tú comparado con cómo eras antes? 11. ¿Has tenido que modificar importantes aspectos de tu trabajo laboral? 12. ¿La enfermedad de tu familiar representa una gravosa carga económica? 13. ¿Te sientes desbordado por la situación? RESULTADO Si has contestado 7 o más respuestas de forma afirmativa, señala un elevado nivel de tensión personal para el cuidador que debe ser controlado. Si has contestado 11 o más respuestas de forma afirmativa, señala riesgo cierto de estar sufriendo el síndrome del cuidador quemado.
"SÍNDROME DEL JUBILADO " Uno de cada tres jubilados enfrenta problemas de adaptación cuando dejan de trabajar, lo que se conoce como el síndrome del jubilado, que se manifiesta con alteraciones del insomnio, hipertensión, trastornos digestivos, cardiovasculares y reducción del deseo sexual.
LOS SÍNTOMAS DEL SÍNDROME DEL JUBILADO SON: Estrés Ansiedad Pesimismo Depresión Propensión al alcoholismo Alteraciones sociales Perdida de relaciones Soledad Dependencia y violencia
Para los jubilados, adaptarse a esta nueva etapa implica reorientar su vida, establecer una nueva rutina, volver a sentirse útiles y productivos, hacer las actividades que les agradan y estar saludables o mantener bajo control enfermedades crónico–degenerativas como hipertensión o diabetes. El tiempo que antes invertían en trabajar puede ser tiempo de ocio, que implica actividades lúdicas como asistir al cine, a espectáculos, a galerías de arte y museos, y les permite a las personas jubiladas afrontar con optimismo su situación actual.
ESTRÉS Y LA ANSIEDAD El estrés se inicia ante un conjunto de demandas ambientales que recibe el individuo, a las que debe dar una respuesta adecuada poniendo en marcha sus recursos de afrontamiento. La ansiedad, además de ser una respuesta emocional al estrés, puede ser una reacción emocional de alerta ante una amenaza que puede originarse sin agentes estresantes.
CONSECUENCIAS DEL ESTRÉS LABORAL • Mal humor y descontento. • Baja laboral por enfermedad, prolongada más de lo necesario. • Deterioro de las relaciones con los jefes y compañeros por discusiones, malos modos, menos paciencia, etc. • Incumplimiento del horario laboral (salir antes del trabajo, llegar tarde). • Disminución del rendimiento en el trabajo. • Mayor riesgo de accidente laboral. • Agobiar a los compañeros con problemas personales. Social • Pérdida de interés en la colaboración ciudadana y actos sociales. • Alejamiento de los amigos, compañeros, etc., por el aislamiento personal. • Aumento considerable de accidentes de tráfico debido a los cambios de comportamiento, por aumento de consumo de alcohol, barbitúricos, etc., o bien por alteraciones en el ámbito emocional. • Sobrecarga en los servicios de atención primaria y urgencias por los síntomas que produce la situación de estrés y por los gastos económicos sanitarios que genera un diagnóstico certero.
FAMILIAR • Alteraciones generales en la dinámica familiar. • Malas relaciones con otros familiares. • Alteraciones en la relación con los hijos, que puede repercutir en su desarrollo afectivo y social. • Alteraciones en la relación de pareja, que pueden llegar a ocasionar incluso la ruptura de la misma. • Trastornos en la economía familiar. PERSONAL • Alteraciones psicológicas y orgánicas. • Aumento en el riesgo de accidentes laborales. • Peligro de automedicación. • Aumento en el consumo de fármacos, como analgésicos, hipnóticos para dormir, para paliar los síntomas derivados del estrés. • Alteraciones por cambios en el comportamiento: – En la alimentación (obesidad o anorexia). – Aumento del consumo de alcohol (alteraciones hepáticas y de conducta). – Aumento del consumo de tabaco (trastornos pulmonares).
Tanto la ANSIEDAD como el ESTRÉS , son las consecuencias derivadas del ritmo de vida de la sociedad actual. Además de sentirnos más irritados o agobiados, también provocan consecuencias sobre nuestro organismo que afectan a nuestra salud general, como cansancio excesivo, decaimiento, dolor de cabeza e insomnio. Los trastornos por ansiedad comprenden una amplia gama de subtipos, de los cuales los más comunes serían los trastornos de ansiedad generalizada (TAG) y trastornos por estrés. Se caracterizan por una sensación de estrés y preocupación permanente, donde la persona está continuamente ansiosa y preocupada. SÍNTOMAS Los síntomas más destacados son: Tendencia a la fatiga con facilidad. Dificultad para la concentración. Irritabilidad. Tensión y/o dolor muscular. Inquietud y trastornos del sueño. Cefaleas y temblores.