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La prudencia significa: “discernir o distinguir lo que es bueno o malo, para seguirlo o huir de ello”. Es la cautela o moderación que acompaña a nuestras decisiones y habla.
El siervo de Dios debe ser prudente, teniendo el control de su mente y de sus sentimientos, a fin de decidir dentro de ...
La prudencia significa: “discernir o distinguir lo que es bueno o malo, para seguirlo o huir de ello”. Es la cautela o moderación que acompaña a nuestras decisiones y habla.
El siervo de Dios debe ser prudente, teniendo el control de su mente y de sus sentimientos, a fin de decidir dentro de lo que es correcto ante los ojos de Dios. Es claro que sólo bajo el control de Espíritu Santo es posible sujetar las emociones y controlar también en habla imprudente, que se torna en la causa y efecto de muchos males en el servicio del Señor.
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Language: es
Added: Oct 19, 2016
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El Siervo de
Dios
IV
IGLESIA BAUTISTA EL DORADO
Pastor Ricardo Fernández J.
PRUDENTE
(I Timoteo 3:2)
El Siervo de Dios – Lección IV: Prudente
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LECCIÓN IV: PRUDENTE
(I Timoteo 3:2)
DEFINICION: La prudencia significa: “discernir o distinguir lo que es bueno o malo, para
seguirlo o huir de ello”. Es la cautela o moderación que acompaña a nuestras decisiones y
habla.
El siervo de Dios debe ser prudente, teniendo el control de su mente y de sus
sentimientos, a fin de decidir dentro de lo que es correcto ante los ojos de Dios. Es claro
que sólo bajo el control de Espíritu Santo es posible sujetar las emociones y controlar
también en habla imprudente, que se torna en la causa y efecto de muchos males en el
servicio del Señor.
Proverbios 12:18 y 21:23
I. DIOS QUIERE QUE SEAMOS PRUDENTES Y NO NOS DEJEMOS GOBERNAR POR EL
IMPULSO DE NUESTRAS EMOCIONES:
A. Es voluntad de Dios que nada tenga dominio sobre nuestro ser, incluyendo las
emociones.
I Corintios 6:12
B. Todo lo bueno que podamos tener o ser procede de Dios, así que debemos pensar de
nosotros con mucha cordura, porque la carne es débil y la imprudencia está en
nosotros mismos, cuando nos sobrestimamos o sobrevaloramos.
Romanos 12:3; Santiago 3:2
II. UNA DE LAS CARACTERISTICAS PRINCIPALES DE LOS GRANDES HOMBRES USADOS POR
DIOS FUE LA PRUDENCIA:
A. José, demostró prudencia ante Faraón; cada una de sus palabras fue medida y pesada.
En la interpretación del sueño del Faraón de las 7 vacas gordas y las 7 vacas flacas, él
tuvo la virtud transmitir y distinguir lo bueno de lo mano y la capacidad de determinar
medidas de cautela para proveerse en los tiempos de escasez, discernimiento que da
Dios al siervo de sana conciencia.
Génesis 41:33-41
José también pudo distinguir lo malo y huir del mal, cuando fue presionado
indignamente por la esposa de su amo Potifar, y huyó de la tentación.
Génesis 39:12
B. David, desde joven tenía cualidades atléticas, habilidades de guerra, buena apariencia,
era talentoso musicalmente, pero su mayor peso fue ser prudente en palabras.
I Samuel 16:18 y 18:5
El Siervo de Dios – Lección IV: Prudente
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C. Salomón fue un rey a quien Dios dio sabiduría y prudencia, mayor que todos los reyes
orientales.
I Reyes 4:29-30
D. Daniel, desde muy joven, durante el cautiverio babilónico, demostró su prudencia en
escoger la rectitud de Dios.
Daniel 1:8-20; 2:14
III. LA PRUDENCIA TIENE QUE VER CON EL CONTROL DE NUESTRA LENGUA:
A. Debemos administrar las palabras que usamos. A veces queremos impresionar,
convencer o imponer. En el hablar puede haber una forma de dominar a otros,
aparentar lo que no es o manipular.
Proverbios 10:19; Santiago 1:19
B. El saber callar es una forma de prudencia
Proverbios 11:12
C. La murmuración es condenada por Dios, nuestras palabras deben ser para edificación.
Números 12:1-9; Judas 16; I Tesalonicenses 5:11
D. Hay que apartarse de las malas conversaciones, porque corrompen las buenas
costumbres.
I Corintios 15:33; Efesios 4:29
Las divisiones de las Iglesias se han producido por heridas causadas por el hablar
imprudente. Si se pusiera uno a indagar las causas de enemistad entre hermanos,
se daría cuenta que comenzaron por pequeñas cosas que se fueron acumulando, al
igual que en los matrimonios (I Cantares 2:15)
IV. LA PRUDENCIA TIENE QUE VER CON DECIDIR OBEDECER A DIOS EN SU PALABRA:
Cuando ponemos en ejecución la palabra de Dios, no siendo oidor olvidadizo, somos
entonces hombres prudentes, que sabemos decidir por lo bueno.
Mateo 7:24-27
En la Biblia el insensato es aquel que no obedece al Señor, sino que es orgulloso y
autosuficiente; el Señor tendrá que humillar a todo aquel que se levanta contra su autoridad.
Salmo 75:5-7; Proverbios 1:7 y 14:16
Dios quiere que conozcamos sus palabras para no ser insensatos ni necios.
El Siervo de Dios – Lección IV: Prudente
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Efesios 5:17
El obedecer, con gozo, la Palabra de Dios nos hace prosperar en todo lo que hagamos como
siervo.
Salmo 1
El Apóstol Pablo le advierte a Tito que hable “lo que está de acuerdo con la sana doctrina”
(Tito 2:1). Es la seguridad de un ministro o siervo del Señor, o maestro de Escuela
Dominical, el estar dentro de los cánones establecidos por Dios de forma tal que sea el
propio Dios, por vía de su Palabra, el que detente el orden y autoridad en la Iglesia.
Isaías 55:6-11
Es una insensatez apartarnos de la sana doctrina. Palo reprende a la Iglesia de Gálatas por
hacerlo y llama niños espirituales a la Iglesia de los Corintios porque se habían desviado de la
sana doctrina. (Gálatas 3:1; I Corintios 3:1-8)
V. La Biblia llama a la mujer y al joven a ser prudente, indicando con ello que nadie escapa a
la necesidad de que nuestro carácter contenga como peculiaridad el ser prudente
Tito 2:5-6
Resulta clave en la convivencia matrimonial, que el control de la lengua por parte de la
mujer, sujeta al Espíritu Santo sea el que dé la estabilidad en el hogar y un adorno especial
de belleza espiritual a la mujer que practica la prudencia.
I Pedro 3:1-6
VI. Es importante que el Pastor no ceda a la tentación de manejar impulsivamente a la grey,
mediando sentimientos de ira, tratando de dominar por la fuerza, o por el contrario, estar
atemorizado al punto de que entre en una depresión, miedo o subestimación personal.
I Pedro 5:1-4
El Siervo de Dios – Lección IV: Prudente
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PRUDENTE
Lección # IV
1. Defina prudencia
2. ¿Es posible dominar la imprudencia?
3. ¿Es posible sobrevalorarnos y hablar imprudentemente?
4. De tres ejemplos de hombres de Dios prudentes
5. De tres formas de ser prudentes controlando nuestro lenguaje
a.
b.
c.
6. ¿Causa divisiones en la Iglesia la imprudencia?
7. ¿Cómo podemos ser prudentes en la Palabra de Dios?
El Siervo de Dios – Lección IV: Prudente
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8. ¿Qué es ser insensato? De Ejemplos bíblicos
9. ¿Es posible que toda la iglesia sea insensata con relación a la obediencia de la Palabra
de Dios?
10. ¿En qué consiste la prudencia en la mujer?
11. ¿Están llamados los jóvenes a ser prudentes?
12. ¿Comente cómo el pastor debe ser prudente en la ministración de su grey?