1. INTRODUCCIÓN
La teoría de la generación espontánea (también conocida como arquebiosis o
arquegénsis) fue una de las brillantes teorías de Aristóteles que defiende que
podía surgir vida compleja (animal y vegetal), de manera espontánea a partir de
la materia inorgánica, es decir, que las cosas se originan simplemente de la nada
y sin ninguna explicación aparente, es decir de forma espontánea o mágica,
mediante poderes filosóficos.
Se recuerda esta teoría como una de las más brillantes del ateísmo. Es una de las
más conocidas teorías acerca del origen de la humanidad, junto con otras igual
de inquietantes como son la cigüeña, la planta y las otras cosas.
Para referirse a la "generación espontánea", también se utiliza el término
abiogénesis, acuñado por Thomas Huxley en 1870.
La observación directa de ciertas experiencias confirma esta teoría, llegándose a
la conclusión de que las moscas se generaban ordinariamente a partir de la
carne en estado de putrefacción, los gusanos a partir del barro , los cochinillas a
partir de la humedad , etc.
Hoy en día, sin embargo, desde un punto de vista experimental, gracias
principalmente a los experimentos de Francesco Redi (s. XVII), Lazzaro
Spallanzani (s. XVIII) y Louis Pasteur (s. XIX) rebatieron la teoría de la
generación espontánea.
Sin embargo, posteriormente otros investigadores han intentado abordar la
cuestión sobre el origen primigenio de la vida, Arrhenius, Alexander Oparin,
Erwin Schrödinger, Stanley Miller o Joan Oró , por citar algunos de los más
destacados.
En todo caso, la idea de la aparición continua de nueva vida parece relegada hoy
en día fuera de los ámbitos académicos.
2. EL PROBLEMA DEL ORIG EN DE LA VIDA
Desde siempre, la humanidad ha buscado una explicación a los problemas
relacionados con el origen de la vida. Por ahora, a pesar de tratarse de una
cuestión esencial, no existe todavía una solución concluyente. Varios pueblos
primitivos intentaron resolver la pregunta sobre la base de las creencias
religiosas, los mitos y la intervención divina .
El problema del origen de la vida se puede abordar desde puntos de vista muy
diversos. La convergencia de todos ellos en una única respuesta es muy difícil,
entre otros motivos, porque la mayoría de las soluciones propuestas no se
pueden probar y forman parte de los dogmas religiosos.
Sin embargo, cuando se aborda el problema del origen de la vida desde una
perspectiva biológica, se ponen en evidencia hechos objetivos y concretos que
abren las puertas a una respuesta verosímil.