rifs, usando la misma palabra que los ingleses, dado que en espanol unos les
llaman pies, termino que va bien cuando el remate se halla en la base del bas-
ton, como en la A, pero que deja de tener sentido cuando el pie se encuentra,
ademas, en la cabeza, como en la I; otros, queriendo ser mas fieles, les llaman
"bigotillos", y la verdad, eso de "bigotillos"..., ya me dira usted; creo que es
mejor llamarlos serifs.
En fin, no se extrane usted de que en este estudio el orden de las letras
no responda al tipico del alfabeto: A, B, C, D... etc., porque, como veremos
seguidamente, a efectos de analisis, es mas conveniente ordenar las letras
segun su anatomia o conformacion, pensando, por ejemplo, que la B, la P y la
R nacen de un mismo patron, al igual que la C y la G, la E y la F, etcetera,
etcetera.
a V
A
He aqui la letra A del alfabeto clasico romano. Observe en ella las si-
guientes caracteristicas importantes: el ancho de la letra, incluidos los serifs,
igual al alto; el vertice de la A sobrepasa la altura de la caja-canon, de modo
que la letra A es un milimetro mas alta que la B, la E, la F, compensando con
ello cierto efecto optico del que hablaremos al estudiar la C, la G y la O. La
terminacion del vertice superior de la A puede ser resuelta de dos maneras di-
ferentes, ademas de la clasica: a) dibujando el vertice cortado, ofreciendo una
pequena muesca, tal como se da en algunos tipos —no muchos— considerados
tambien clasicos, como el Caslon y el Granjon; y b) disenando el vertice
achatado, sin punta, como puede verse en los tipos Bembo, Garamont de
Deberny et Peignot, Perpetua, etc.
Compruebe, por ultimo, la situacion del baston horizontal que cruza la
letra A, ligeramente mas arriba del centre, y las curvas de los serifs, de confi-
guration muy especial en esta letra.
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