Los sistemas y aparatos son los componentes del cuerpo humano, uno de los organismos más complejos del universo. Si alguno de esos sistemas o aparatos no cumple con su función, se corre el riesgo de tener graves problemas de salud. Por ello, identificar cada uno de los componentes es fundamental para cuidar al máximo de tu bienestar.
el sistema del cuerpo humano El origen de la palabra "sistema" se ubica en el latín sistema y significa la unión de elementos de forma organizada. Al hablar del cuerpo humano, un sistema hace referencia al conjunto de órganos semejantes por su origen y estructura . Además, el objetivo de los sistemas es trabajar conjuntamente para desempeñar una función fisiológica específica en el cuerpo y antes de hablar de cada uno de ellos, debes saber que la semejanza de los órganos integrantes de un sistema se establece a partir del tipo de tejido del cual se compone
Sistemas del cuerpo humano
Sistema circulatorio: liderado por el corazón como motor, este sistema es el encargado de nutrir cada célula del cuerpo. El oxígeno y los nutrientes son transportados a través de venas y arterias pero, además, esta sistema también recoge los desechos del metabolismo y los envía de vuelta a los órganos encargados de eliminarnos del cuerpo. Sistema nervioso: su misión es procesar los estímulos y generar las respuestas adecuadas a cada uno de ellos. Se subdivide en los sistemas nervioso central, nervioso periférico y sensorial. Sus órganos principales son la médula espinal, el encéfalo, los nervios, los ganglios, las terminaciones nerviosas y el sistema sensorial.
Sistema digestivo: se encarga de la transformación de los alimentos en nutrientes aprovechables. La boca, el esófago, el estómago, el intestino delgado, el colon, el recto y el ano son los órganos pertenecientes a este sistema. Además, el hígado y el páncreas participan en el proceso digestivo al producir los jugos gástricos. Sistema respiratorio: sus componentes fundamentales son las fosas nasales, la faringe, la laringe, la tráquea, los pulmones y el diafragma y su principal tarea, como bien sabrás, es llevar al corazón el oxígeno necesario para la vida de las células. Posteriormente, este sistema se encarga de retirar del cuerpo el dióxido de carbono procedente de la sangre.
Sistema endocrino: se encarga de la regulación del metabolismo, la función sexual y el crecimiento. Esto se logra gracias a las hormonas secretadas por las ocho glándulas que posee el cuerpo humano. Sistema excretor o urinario: es el responsable de mantener el equilibrio químico del cuerpo a través de la expulsión de los desechos del metabolismo. Los riñones, la vejiga, los uréteres, la uretra y los esfínteres también forman parte de este sistema
Sistema inmunológico: su función principal es combatir bacterias, virus y cualquier agente que perturbe o atente contra el funcionamiento normal del cuerpo. Sistema linfático: se opone a la difusión de enfermedades, destruye o elimina las sustancias tóxicas y transporta los lípidos (compuestos orgánicos como las grasas o los aceites) al torrente sanguíneo. Se compone de conductos o capilares circulatorios donde se almacena y distribuye el líquido producido en los tejidos.
Sistema muscular: su función es permitir el movimiento postural y sanguíneo gracias a los 650 músculos que poseemos distribuidos en tres tipos: el esquelético, el liso y el cardíaco. Sistema reproductor: es el encargado de conjugar los elementos necesarios para lograr la concepción o reproducción humana. El sistema reproductor femenino está integrado por los ovarios, las trompas de Falopio, la vagina y el útero, mientras que en el caso del hombre, los testículos, el conducto deferente y el pene son sus órganos reproductores.
Sistema esquelético u óseo: es el encargado de darle estructura y movilidad al cuerpo, así como de crear células sanguíneas y almacenar calcio. Está conformado por 206 huesos. Sistema integumentario: la piel, el cabello y las uñas forman parte de este sistema. Cumple funciones de defensa y protección y, además, regula la temperatura de nuestro cuerpo y colabora en la depuración metabólica del organismo.
Aparatos del cuerpo humano Un aparato es el conjunto de sistemas que contribuyen a cumplir una misma función. Por ejemplo, el sistema respiratorio capta el oxígeno con el cual, posteriormente, el sistema circulatorio nutrirá las células. En este caso, dos sistemas trabajan en conjunto para realizar una tarea vital. Conforme la complejidad de las funciones a cumplir, los especialistas distinguen seis aparatos que veremos a continuación.
Aparatos del cuerpo humano
Aparato cardiovascular: compuesto por el corazón, arterias, venas, capilares y arteriolas que se encargan de transportar la sangre a través del cuerpo humano. Aparato respiratorio: como hemos visto anteriormente, el aparato respiratorio está formado por los pulmones y por vías aéreas que se encargan de hacer que el oxígeno pase por nuestro cuerpo con el fin de oxigenar la sangre.
Aparato digestivo: todos los órganos que forman parte del aparato digestivo se encargan de transformar los alimentos que consumimos en energía para que nuestro organismo se pueda beneficiar de sus nutrientes. Aparato reproductor: como bien indica su nombre, la función de este aparato es trabajar para la reproducción sexual.
Aparato excretor o urinario: a través de los excrementos y la orina, los órganos que forman este aparato (riñones y vías excretoras) se encargan de eliminar de la sangre aquellos deshechos innecesarios. Aparato locomotor: la función del aparato locomotor no es otra que la de proteger algunos órganos vitales y la de permitir el movimiento de los seres humanos a través del sistema óseo y el sistema muscular.
Diferencia entre sistema y aparato Las principales características para establecer las diferencias entre sistema y aparato en el cuerpo humano son el tipo de tejido y la cantidad de órganos que los complementan. En cuanto al tipo de tejido, los sistemas agrupan aquellos órganos compuestos por tejidos similares u homogéneos. Por ejemplo, los órganos pertenecientes al sistema esquelético poseen un tipo de tejido distinto al presente en los órganos del sistema digestivo. En cambio, los aparatos están compuestos por órganos cuyos tejidos son heterogéneos o diversos . Además, un aparato posee una cantidad superior de órganos porque está integrado por dos o más sistemas. Por ello, la organización de un aparato suele ser más compleja que la de un sistema. Es importante señalar que algunos expertos utilizan las palabras "sistema" y "aparato" como sinónimas, aunque en la práctica no lo sean.