Para comenzar debemos saber que la Criminalística, es una ciencia
multidisciplinaria que reúne conocimientos generales, sistemáticamente
ordenados, verificables y experimentables, a fin de estudiar, explicar y
predecir el cómo, dónde, cuándo quien o quienes del accionar delictivo.
Es multidisciplinaria, por que sintetiza para sus objetivos investigativos
los conocimientos y técnicas de otras ciencias tales como la Química,
Física, Matemática, Medicina, especialidades de la Medicina Forense,
Biología, Antropología. A tales personalmente le sumo a la óptica,
Informática y toda ciencia, disciplina o técnica que le pudiere servir a sus
objetivos. La Criminalística se vale de todos los conocimientos, métodos,
técnicas y ciencias de investigación posible, en virtud y en cuanto le sea
útil a sus objetivos. Tal es el caso, que amalgama a todas ellas, acorde a
sus intereses científicos para el estudio del delito. De tal manera, la
Criminalística se halla en un estadio superior plenamente articulada con
el que hacer Criminológico. Conjuntamente con la Criminalística actúa la
Fotografía Judicial. Esta se define como la Técnica Criminalística,
auxiliar de la Justicia, que tiene por objeto la fiel documentación del lugar
del hecho, las evidencias materiales (objetos, rastros, huellas, manchas,
procedimientos periciales, etc.), a fin de coadyuvar en la investigación y
la fiel interpretación de la realidad de los hechos criminales.
La Criminalística, si bien se ocupa de medios para descubrir y verificar,
unos y otros van referidos, al hombre. El fin de lo mismo es el
descubrimiento del delito y del delincuente y también de la víctima o
perjudicado por el delito. Descubrir un delito no significa solo comprobar
la existencia del hecho punible, existencia que en verdad muchas veces
se acredita, pudiéndose decir, por si misma, sino determinar el cuándo,
el dónde, como, porque y el quién, con la mayor exactitud posible las
exigencias tiempo espaciales, modales y personales del hecho punible,
comprendiendo en lo personal no solo al quién activo, sino también al
pasivo, aunque la determinación de este tenga menor alcance penal que
la de aquel; el cuándo es en principio, más importante que el dónde, ya
que marca una relación temporal que puede predeterminar por si misma
el dónde y tiene además a los efectos de una responsabilidad, una
mayor repercusión penal. También importante a los efectos de ciertos
agravantes, etc. y en ciertos conflictos de jurisdicción. El tiempo es
fundamental a los efectos de causalidad, etc. (ej. violación previa o
posterior al homicidio), pluralidad de delitos, delitos imposibles (ej. matar
a un muerto) Añadamos aún que la criminalística puede ser eficaz
respecto al testimonio en todas formas, tanto en orden a la confección
como a las manifestaciones de los testigos, peritos, etc. Probando que
unas y otras no concuerdan con la realidad de los hechos. En tal sentido,
pueden también evitar errores judiciales. Comprobar el delito es también
verificar el delincuente y la víctima. La más importante de estas dos
comprobaciones es la que atiende al delincuente. Individualizar éste
quiere decir, éste y no otro. Ahora bien individualizar una persona no es
precisamente identificarla. La individualización es previa a la
identificación, Solamente un uso amplísimo de ésta palabra puede llevar,
incorrectamente a equipararla como la anterior.