Durante el 2005 se vendieron en el país más de un millón de vehículos nuevos, un 12.2 por
ciento más que el año anterior, marcándose un récord de ventas para México. Esta diferencia
positiva se debe a la continuidad en la estabilidad económica, los incentivos a la compra, los
planes de financiamiento y promociones, dando como resultado una masa crítica total
nacional, de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática, INEGI, de
aproximadamente 14 millones de automóviles particulares.
Con esto se observa, en México existe un importante número de personas que poseen un
vehículo, haciendo que este nicho de mercado posea un espectro de acción elevado.
Se estima que más del 70 por ciento de los automovilistas lavan más de una vez por semana
su vehículo, por lo que el potencial para los servicios de lavado en México es muy grande.
Por otro lado, los lavados de autos además de ofrecer el ahorro de tiempo (uno de los
servicios más importantes que ofrecen), han contribuido a la campaña de cuidado del agua,
pues cuentan con equipos de reciclado que permiten economizar su utilización, con menos
dosis aprovechan al máximo este recurso y facilitan su reutilización.
Emprender un negocio de autolavado, como cualquier empresa, es una inversión a mediano
y largo plazo, ataca uno de esos nichos cuya materia de servicio, los automóviles, es casi
imperecedera y por el contrario cada vez exige más demanda, por lo que es una
prometedora inversión.
Apóyese en esta Guía para arrancar con los pies sobre la tierra y aprovechar al máximo su
capital.
CAPÍTULO 1.
CENTRO DE LAVADO DE AUTOS
MANUAL
El proceso de lavado de autos puede variar dependiendo del tipo de lavado que se tenga,
siendo totalmente manual, semiautomático o totalmente automático. También puede cambiar
la forma en que se lava el auto y los mecanismos del servicio. A lo largo de este capítulo
desarrollaremos todo lo relacionado con el negocio de lavado de tipo manual y
semiautomático.
Este esquema de trabajo consiste en el lavado manual, es decir, sólo se requiere personal,
contando con cubetas, trapos, cepillos, jabón y franelas para secar el auto, sin embargo,
también dentro de este ramo de microempresa, existen lavados manuales con procesos
automáticos, como el lavado a presión y el aspirado del auto.