EDUCACIÓN RELIGIOSA ACTIVIDAD N° 04
Título de la experiencia: “Valoramos a María Madre de Dios y Madre de la Iglesia que nos enseña a
vivir en comunidad”
PROPÓSITO: Imitar los valores que María vivió como Madre de Dios y Madre de la Iglesia que orienten a la reflexión de la conducta
de los y las estudiantes que les ayude a construir un orden social justo y fraterno para la buena convivencia en nuestro
entorno familiar y social.
MARIA MADRE DE DIOS Y MADRE NUESTRA
A. RAZÓN PRINCIPAL. Si Jesús es Dios y María es madre de Jesús entonces María es Madre de Dios.
La encamación significa que en un instante dado se unió la segunda Persona de la Trinidad, el Verbo, en el hijo engendrado
milagrosamente por María. Como fue instantánea y esencial, María en ese momento empezó a ser madre de Jesús: hombre-Dios.
Nosotros, cuando le damos ese título desde hace siglos no estamos pensando que sea Madre de Dios Padre. No. Lo que hemos creído
siempre es que María está totalmente unida a su Hijo y si él es Dios hecho hombre, entonces María es Madre de Dios.
B. RAZONES BÍBLICAS. Isabel le reconoce como Madre de Dios. Veamos lo que sucedió cuando Isabel, prima de María
le dice: ¿Cómo he merecido yo que venga a mí la madre de mi “¿Señor” (Lc. 1, 43)? El término “Señor” en la biblia e
un título que se le da solamente a "Dios". Por lo tanto, Isabel llena del Espíritu Santo la reconoció, así como madre de Dios.
*Como el Discípulo se llevó a María a su casa como Madre, así nosotros también. María será Madre nuestra. Esto es algo que
perfectamente nos enseña la Sagrada Escritura. Nuestro Señor Jesucristo nos dejó este regalo: "Jesús, viendo a su madre y junto a ella al
discípulo a quien amaba, dice a su madre: "Mujer, ahí tienes a tu hijo. "Luego dice al discípulo: "Ahí tienes a tu madre." Y desde aquella
hora el discípulo la acogió en su casa" Jn 19,26-27. Es tan clara la Biblia... Jesucristo le dice a su discípulo: "ahí tienes a tu madre". No le
dijo o te encargo a mi madre cuida a mi madre o ahí tienes a mi madre. No Jesucristo fue muy claro.
C. RAZÓN HISTÓRICA. La Iglesia siempre ha enseñado la Maternidad divina de María y el ser Madre de la Iglesia:
a) El Concilio de Éfeso (año 431) definió así "…habiendo unido consigo el Verbo, de ambas resulta un solo Cristo e Hijo... desde el seno
materno se sometió al nacimiento carnal. De esta manera (los Santos Padres) no dudaron en llamar Madre de Dios a la Santa Virgen.
b) Un poco más adelante, en el año 450, otro gran santo lo dirá de esta manera: "Se le reconoce y se le venera como verdadera Madre
de Dios... más aún, es verdaderamente Madre de los miembros (de la Iglesia) porque colaboró con su amor a que nacieran en la Iglesia
los creyentes..." San Agustín
c) El "Ave María" (oración rezada desde hace más de 500 años) en su segunda parte dice "Santa María, Madre de
Di
os
...
"
d) El Concilio Vaticano II dice:" Jesús al pie de la cruz, nos da a María, como madre espiritual no solo del creyente sino de toda la comunidad
de creyentes que es la iglesia. Cuando en la encarnación, María acepta ser la madre del Mesías o sea del salvador, y a la vez,
necesariamente madre del salvador. Ella es la madre de la cabeza, y en el orden de la gracia, se convierte también en madre del cuerpo
místico. No se puede concebir a una cabeza sin cuerpo. María da a luz virginalmente a Jesús en Belén, y María nos da a luz a nosotros la
iglesia al pie de la cruz, cuando tiene su otra anunciación y acepta ser madre de los creyentes. Darnos a luz, conllevó mucho dolor, no se
desgarraron sus entrañas, pero si su corazón. La Santidad de María mueve a los fieles a levantar los ojos hacia ella pues brilla como modelo
de virtud ante la comunidad de los elegidos" (LG 65) La Virgen María fue solemnemente proclamada como "Madre de la Iglesia" en el
Concilio Vaticano II el 21 de nov. de 1964. Carta Encíclica “Redemptoris Mater"40 “Después de los acontecimientos de la Resurrección y
de la Ascensión. María, entrando con los apóstoles en el cenáculo a la espera de Pentecostés, estaba presente como Madre del señor
glorificado…era la esclava del Señor, entregada por su hijo como Madre a la Iglesia naciente: "He aquí a tu madre
* VIRTUDES DE MARÍA QUE LA IGLESIA DEBE IMITAR
- La fe y la dócil aceptación de la Palabra de Dios.
- La obediencia generosa.
- La humildad sencilla
- La caridad solicita.
- La sabiduría reflexiva.
- La piedad hacia Dios pronta al cumplimiento de los deberes religiosos
- La gratitud por los bienes recibidos; ofrece en el templo, en la comunidad apostólica.
- Fortaleza en el destierro y en el dolor.
- La pobreza llevada con dignidad y confianza en el Señor
- El vigilante cuidado del hijo desde la humildad de la cuna hasta la ignominia tic la cruz.
- Delicadeza provisora
- Pureza virginal