Cuento sobre la ética

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Provengo de Filosofía, una ciudad en la cual son muy… ¡eh! ¡Cómo Llamarlos! “Moralistas” por así decir; mi padre es latín se llamaba ethĭcus, y mi era griega (por desgracia no la conocí), murió cuando era niña; así que mi padre me crio y él no hablaba mucho de ella. Mi padre d...


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LA ÉTICA VIAJERA
Cuento sobre la ética
Provengo de Filosofía, una ciudad en la cual son muy… ¡eh! ¡Cómo
Llamarlos! “Moralistas” por así decir; mi padre es latín se llamaba ethĭcus,
y mi era griega (por desgracia no la conocí), murió cuando era niña; así que
mi padre me crio y él no hablaba mucho de ella. Mi padre dedico la mayor
parte de su vida a que Yo estudiara el bien y el mal y sus relaciones con la
moral y el comportamiento humano; cansada de tanto sufrir ¡no sé cómo! de
algún modo me las arregle para escapar de esa ciudad tan anticuada y de
ideas retrogradas, por cierto me llamo ética.

Hace unos días, en medio de la carretera vi a una chica; no tenía un destino
fijado así que decidí llevarla hasta donde pudiera; me llamo ética
Profesional, dijo esto mientras se subía a la camioneta, gracias por llevarme.
Paso unos minutos le pregunte a que se dedicaba y me dijo: regulo las
actividades que se realizan en el marco de una profesión. En castellano
¡replique!... a lo que respondió: cuento con las herramientas administrativas
“legales o los medios” suficientes para garantizar que una persona dentro de
su profesión se comporte “o rija” de manera más ética posible; en fin busco
que “un individuo” desarrolle de forma ética y justa su trabajo, intentando
cooperar, en la medida que pueda, con el bien común.

Pasado unos días nos varamos, y que creen nos tocó empujar el coche
hasta la orilla para no estovar en la carretera, afortunadamente llevábamos
mucha comida pues nos tocó esperar por días; finalmente paso una
caravana a la cual nos unimos sin reparar. ¡Por favor, Ustedes nunca hagan
eso! Pues esto es lo que pasó: durante el día nos rotábamos para conducir y
en las noches E.P “ética profesional” y yo nos convertíamos en unas
exploradoras, verán la caravana era grande así que sentimos curiosidad,
tomamos unas antorchas, nos abrigamos y salimos a recorrer la caravana
con una carpa removible la cual nos rotamos en el camino.

A mitad de la trayectoria nos encontramos con fundamentos, un personaje
raro y de múltiples personalidades, ¡muy, peculiar! Un día era racional pues
se mostraba educado y responsable. Al otro día era irascible pues todo lo
que pensaba en su corazón lo convertía en una acción.

Y en otras era puro apetito; pues se dejaba llevar de sus instintos, pasiones
y sus deseos; en fin es un personaje al cual le falta trabajar su auto dominio.
Pasado unos días, de repente todo cambio pues E.P y YO, nos sorprendimos

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al encontramos en una ciudad antigua, en la cual los hombres y las mujeres,
desde el más pequeño hasta el más grande o anciano, tenía idea de lo
bueno, lo justo, el deber y poseían una gran virtud al poder justificar sus
acciones; ya que poseían una alta moral.

Alto, deténganse; nos dice una voz enérgica desde lejos; después de
recuperar su aliento al acercarse Sócrates, nos dice: en esta ciudad existen
unos valores, los cuales nos han permitido establecer unas leyes; estos
valores que el hombre puede alcanzarlos mediante el uso de la Razón, y si
se alcanzan se es Sabio y Virtuoso. La sabiduría nos hace distinguir el bien
del mal.

Así es, señoritas “nos interrumpe una voz”, hola soy Platón; chicas déjenme
decirles algo: el esfuerzo físico-gimnasia anula las tendencias NEGATIVAS
y controla las pasiones; al igual que el Conocimiento al servicio de la
inteligencia es usar la razón para conocer los deberes. Lo que quiere decir
mi compañero es que la felicidad es el ejercicio de la inteligencia. Por lo
tanto, para conseguir una sociedad buena, justa y virtuosa es necesaria la
Educación; mucho gusto soy ARISTÓTELES. No sabemos en qué
momento se hizo de noche, pues no nos dimos cuenta del momento exacto
en el que terminamos en una fogata a mitad de la noche, con tantos
filósofos y científicos.

Hola chicas “nos susurra una voz al oído” es fundamentos: creo que ya esta
tarde y es hora de irse, pues consideramos que ya han aprendido lo que
necesitaban. No se asusten, ni se preocupen, pues estaremos aquí siempre
que lo necesiten; de todos modos luego lo entenderán.

Nos despertamos a la mañana siguiente un poco atolondradas y
sorprendidas, pues estábamos en el desierto aunque podíamos ver el auto
desde donde estábamos; así que nos dirigimos hacia él. Al llegar E.P y yo
concordamos en que todo fue una ilusión, pero esta nos hizo ver lo
equivocada que estábamos y por más que tuviéramos motivos huir no fue la
mejor elección; así que, decidimos volver a casa convencidas de que el
hombre es un ser social capaz de vivir y organizar una sociedad
pero esta no vale nada si no se vive con ética.

Por: Jazmi J. Mena M.
Ética Profesional
Licenciatura en música y danza
Universidad Tecnológica del Choco Diego Luis Córdoba
Nivel: X
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