LA ESTRELLA, EL CORAL Y LA MARIPOSA Había una vez una estrellita fugaz, era la más pequeña pero la más luminosa y hermosa de todas las estrellas. Vivía pensando en bajar del cielo ya que le interesaba saber cómo era la vida en la tierra, hasta que un día cumplió su sueño. Se desprendió del cielo y cayó a la tierra en una playa, pero cuál sería su sorpresa al observar en la orilla a un Coral llorando, muy triste y sin consuelo. La estrella se le acercó y le dijo: --¿Por qué lloras señor coral? ¿Qué está pasando aquí? El coral parpadeó dos veces y le respondió: --Es que resulta que adentro en el fondo del mar, más de un habitante se está muriendo debido a la cantidad de basuras que son arrojadas a él por los humanos, por ejemplo: el pulpo perdió su fuerza, los peces ya no nadan, las medusas y nosotros los corales perdimos nuestro encanto. ¡No te preocupes señor coral! Que si de consuelo te sirve, allá en el cielo sucede casi lo mismo, el sol cada día calienta más, la luna ya casi no alumbra y nosotras las estrellas ya casi no brillamos. --¿y… a que se debe todo esto? --- preguntó el coral La estrella le dijo: ---pues, a los inventos del hombre, ya que día a día hay mas contaminación por los gases y químicos que producen las fábricas, los aviones, en fin, producen tantas cosas que contaminan la atmósfera, muy triste pero esa es la realidad que vivimos--- afirmó la estrella. Ya un poco más calmado, el coral invitó a la estrella a dar un paseo por el bosque, a lo cual ésta dijo que si. S e internaron en él y cuando habían recorrido un poco se encontraron posada sobre el tronco de un árbol a una mariposa que lo menos que quería en ese momento es lo que mejor sabe hacer: volar. El señor coral y la estrella le preguntaron: ---¿Qué te sucede linda mariposita? Esta respondió: --- Es muy triste la vida en el bosque, los árboles perdieron sus hojas y sus flores, ya no dan frutos, los pájaros ya no cantan, los jardines perdieron su belleza y colorido, en fin a los demás animales los embarga una gran tristeza, todo esto debido a la mano indiscriminada del hombre por la tala de árboles, construcción de viviendas, tráfico de especies y muchos casos más. ¡ Qué panorama tan triste y desolado! concluyeron los tres, ---yo creo que al hombre debemos castigarlo--- manifestó el señor coral. ---No se si de pronto con nuestra ausencia para darle a entender que nosotros somos necesarios y hacerle comprender que el mundo está en peligro. La mariposa replicó: ---ninguno de estos castigos solucionará esta situación que vivimos, hasta que el hombre tome conciencia del daño que nos está causando y que se hace así mismo. ---Propongo que llevemos un mensaje de advertencia a todos los hombres y puedan prevenir la muerte del mundo. --- dijo la mariposa. Todos aprobaron la idea y decidieron llevar el mensaje a los diferentes lugares de la tierra. Pasado un tiempo se realizaron muchas campañas y se crearon movimientos ecológicos para preservar las riquezas naturales y otros recursos que tenemos en la tierra. Al final todos decidieron dejarle una enseñanza a los habitantes de la tierra: ---”No importa en el sitio donde te encuentres, recuerda que todos somos diferentes, pero hijos del mismo creador y podemos vivir juntos. ANA CRISTINA IBAÑEZ VILLAMIZAR