DISTOCIAS DINÁMICAS
Dr. Carlos Díaz
Dra. Silvia Cruz
CONCEPTO
Las distocias dinámicas son aquéllas
producidas por la existencia de una
actividad uterina defectuosa, ineficaz o
inapropiada para conseguir la dilatación
cervical y/o el descenso de la
presentación.
Dinámica uterina
normal durante los diferentes periodos
del parto
Frecuencia: es el número de contracciones que
aparecen en un periodo de 10 minutos. Lo normal es de
3-5 cada 10 minutos.
Intensidad: se mide en mmHg y compara la diferencia
de presión desde el tono basal hasta el punto más alto
de la contracción. Lo aceptado es de 30 a 50 mmHg.
Duración: es el tiempo transcurrido desde que se inicia
la contracción hasta que recupera el tono basal
existente antes de su inicio. Lo normal es entre 30 y 90
segundos.
Tono basal: es la presión intrauterina existente en un
útero en reposo, entre dos contracciones. Esta oscila
entre 8 y 12 mmHg.
Características de la contracción
Uterina
CLASIFICACIÓN
Las distocias dinámicas se clasifican
según el parámetro alterado de la
contracción.
Hipodinamias
Son aquellas distocias dinámicas que se
caracterizan por una disminución de la
frecuencia, intensidad o del tono basal uterino.
Alteraciones de la dinámica uterina suelen
producirse más frecuentemente durante la fase
activa del parto, después de que el cuello
uterino se ha dilatado más de 4 cm., siendo en
este caso llamadas hipodinamias secundarias;
en estos casos suelen poner de manifiesto un
obstáculo al mecanismo normal del parto.
Hipodinamia primitiva o primaria, donde
la normosistolia (que se suele lograr
durante la fase activa del parto) no se
consigue en ningún momento. En estos
casos se mantiene una bradisistolia o
hiposistolia (propias de la fase prodrómica
del parto).
Hipodinamias primarias
Por disminución de la contractilidad y excitabilidad
miometrial:
– Malformaciones uterinas: útero bicorne, doble….
– Miomas y adenomiosis.
– Primíparas añosas, grandes multíparas.
– Inducción inadecuada.
– Espasmolisis y analgesia precoz.
– Excesiva distensión de la fibra muscular uterina
(gestación múltiple, polihidramnios)
Por disminución del estímulo contráctil:
– Disminución de la síntesis de prostaglandinas
a nivel del miometrio y decidua.
– Insuficiente compresión del cuello uterino
(fracaso del reflejo de Ferguson-Harris):
presentaciones fetales muy altas, situaciones
fetales anómalas.
– De forma controvertida y poco concluyente se
habla de partos prolongados en mujeres con
diabetes insípida o con destrucciones
hipotalámicas en las que la secreción oxitócica
estaría disminuída.
Hipodinamias secundarias
En este caso no se trata de una falta de
potencia de la fibra muscular uterina, sino de
una fatiga de la misma, ya que generalmente
se presentan de forma tardía en el periodo de
dilatación y están precedidas de una dinámica
normal o hiperdinamia.
Pueden poner de manifiesto la presencia de un
obstáculo al parto, bien sea en las partes
blandas u óseas del canal.
Hipodinamia
Hiperdinamias
Trastornos de la dinámica uterina por
exceso, pero que paradójicamente en
algunos casos conducirá a un parto
prolongado, porque esta dinámica
frecuentemente es excesiva pero
inefectiva.
Hiperdinamia primaria
El exceso de la actividad contráctil del
útero tiene una etiología poco definida.
– Hiperfunción de los mediadores
bioquímicos del miometrio (hipersistolia)
– Aumento de la excitabilidad de la fibra
muscular uterina, por sobredistensión de
la misma (embarazo múltiple,
polihidramnios)
Hiperdinamia secundaria
Generalmente causadas por:
– La existencia de obstáculos
mecánicos a la normal progresión del
parto, que originan una dinámica de lucha
que trata de vencer el obstáculo.
– La administración de dosis
inadecuadas de oxitocina o
prostaglandinas.
Hiperdinamia
Clínicamente podemos distinguir 2
formas de hiperdinamia, según se
acompañen o no de hipertonía,
(esta última puede ser leve 13-20 mmHg,
moderada 20-30mmHg., severa >30
mmHg. de tono basal)
Hiperdinamia sin hipertonía:
La actividad contráctil por encima de los valores
normales posee una gran efectividad y puede originar un
parto que progresa muy rápidamente (parto precipitado).
Aumenta las posibilidades de complicaciones feto-
maternas como riesgo de pérdida de bienestar fetal por
hipoxia, desgarros de canal blando, desprendimiento de
placenta e hipotonías postparto.
“El útero que se contrae con una gran fuerza antes
del parto, probablemente sea hipotónico después de
él, presentando como consecuencia, hemorragia
que parte de la zona de implantación de la placenta”.
Hiperdinamia con hipertonía:
La actividad contráctil eficaz está alterada.
Con ello aumenta el riesgo de pérdida de
bienestar fetal (por disminución mantenida
del flujo sanguíneo en el espacio
intervelloso), de desprendimiento de
placenta e incluso de rotura uterina.
Hiperdinamia por polisistolia e hipertonía con repercusión fetal.
Disdinamias
Se pueden definir como alteraciones de la
coordinación y regularidad de la
contracción uterina.
La contracción se origina en el ángulo
tubárico de útero y desde allí
desciende hasta el cuello, de tal
manera que las contracciones en el
fondo uterino son más fuertes, más
duraderas y comienzan antes que en
las partes más inferiores.
Podemos distinguir dentro de las
disdinamias:
Ondas anormales generalizadas o inversión del
triple gradiente: en este caso las contracciones
se originan en las porciones más inferiores del
útero produciéndose una inversión del triple
gradiente de tal forma que la contracción es
más fuerte, más precoz y más duradera en el
segmento inferior que en el fondo uterino.
Inversión del triple gradiente total y
parcial
En la inversión total el parto no puede
progresar ni en dilatación ni en descenso
de la presentación, existiendo el riego de
dinámica de lucha, hipertonía, sufrimiento
fetal e incluso rotura uterina.
Ondas anormales localizadas o
incoordinación uterina: este grupo de
disdinamias se caracteriza porque
aparecen dos ondas contráctiles a la vez
o separadas por un intervalo de tiempo
muy pequeño de forma que el miometrio
todavía no se ha relajado completamente
cuando aparece la siguiente contracción.
Incoordinación de primer o
segundo grado
Según se originen las ondas en dos o
más zonas del útero.
Cada contracción se inicia en un punto del
útero, pero al no comenzar de forma
simultánea estas contracciones se
encuentran con zonas musculares
uterinas en fase de resistencia que
impiden la contracción
Incoordinacion de 1º y 2º grado.
Anillos de contracción:
Se consideran variantes de las ondas
localizadas o incoordinaciones.
Se producen por la existencia de
marcapasos que da lugar a ondas
localizadas que forman zonas anulares
del útero que al contraerse deforman la
cavidad.