"El egoísmo es diferente al amor propio, que es necesario y saludable, porque el egoísta no siente amor hacia su persona sino desprecio y quiere todo para él porque se siente miserable y vacío."
El egoísmo ha sido interpretado de dos maneras muy distintas, lo que ha causado una confusión desafortunada. En este escrito intento buscar una solución a ese desorden. Primero , el egoísmo ha sido interpretado como un rasgo humano, propio de esa naturaleza e imposible de erradicar —lo que en algunas partes se le llama egoísmo psicológico .
Segundo , el egoísmo ha servido de base para la construcción de una escuela filosófica que da pie a un sistema moral que coloca al bien personal como el valor de más altura. En ambas concepciones existen elementos valiosos que pueden rescatarse —es posible reconocer como innato el deseo de cuidarse a sí mismo, de buscar el bien propio y, también es posible comprender que el cuidado propio es un valor innegable .
El egoísmo moral , o egoísmo ético , es una doctrina ético filosófica que afirma que las personas deben tener la normativa ética de obrar para su propio interés, y que tal es la única forma moral de obrar, sin embargo permite realizar acciones que ayuden a otros, pero con la finalidad que el ayudar nos dé un beneficio propio tomándolo como un medio para lograr algo provechoso. Afirma que la validez de una teoría o praxis se encuentra en su aportación directa a la edificación positiva y responsable del yo o desarrollo personal.
El egoísta moral se basa en la afirmación de sí mismo; que lo convierte en su propio soberano al volverlo consciente de su realidad moral y personal. La realidad es la de su propia existencia y su vivir en una realidad determinada. Está vinculado a la dimensión moral de formas de subjetivismo o solipsismo radical.
El egoísmo es un concepto totalmente opuesto al altruismo. Ósea que podemos decir que el egoísmo nos impediría nuestra realización como arquitectos po r que siempre veríamos por nosotros mismos, en este caso solo pensaríamos en el dinero, y los proyectos que nos encargaran los haríamos en cualquier lugar aunque supiéramos que ahí no se puede construir o el terreno no es apto para la construcción, y en futuro la casa o edificación se venga abajo causando varios daños materiales o perdida de vidas humanas.
CONCLUSIÓN: El egoísmo racional no es racional y es arbitrario. El egoísmo ético promueve una discriminación moral arbitraria: el egoísmo. Entre el egoísmo ético y el altruísmo está la opción de contrapesar los intereses propios con los ajenos.