el poder del joven que ora

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About This Presentation

ministerio juvenil


Slide Content

bm\ \ n
Autora de la serie éxito de librería El poder de la oración ®

Descubre el poder.
Cambia tu vida.
Cambia el mundo.
Cuando oras, ¿estás seguro de que Dios escucha? ¿Algunas veces
te preguntas si tus palabras no dan contra el cielo raso y se
evaporan? ¿Alguna vez dudas de que tus oraciones puedan ser
determinantes?
Pues bien, la verdad es que no solo pueden ser determinantes, sino
que pueden transformar vidas.
En El poder del joven que ora, descubrirás que el saber orar puede
cambiarlo todo. A través de la oración, Dios puede elevarte por
encima de las presiones de tu vida de modo que puedas ver el plan
singular que tiene con tu futuro. Veinte capítulos de actualidad te
ayudarán a...
tener un andar más íntimo con Dios
decirle adiós a las emociones negativas
atraer buenas relaciones
mantenerte libre de la presión de tus ¡guales
ser una luz para otros
Lo que es importante para ti es importante para Dios. Dile todo lo
que tienes en tu corazón, comenzando con las oraciones que se
ofrecen al final de cada capítulo. Habla con Dios. Escucha a Dios. Y
observa el desarrollo del gran propósito que tiene contigo.
Stormie Omartian es la autora de la serie de libros que han sido
éxitos de librería El Poder de la Oración® (más de siete millones
de ejemplares vendidos), Stormie, Suficiente luz para el próximo
paso y La oración que cambia todo™. Stormie y su esposo, Michael,
han estado casados durante treinta años y tienen tres hijos adultos.
www.editorialuniiit.com
ÏÏUNILIT
Producto 495446
Categoría: Jóvenes / Devocional y oración
«Publicamos para la familia•<

Publicado por
Editorial Unilit
Miami, Fl. 33172
Derechos reservados
© 2006 Editorial Unilit (Spanish translation)
Primera edición 2006
© 2005 por Stormie Omartian
Originalmente publicado en inglés con el título:
The Power of a Praying® Teen
por Harvest House Publishers
Eugene, Oregon 97402
www.harvesthousepublishers.com
Todos los derechos reservados.
Todos los derechos reservados. Ninguna porción o parte de esta obra se puede repro-
ducir, ni guardar en un sistema de almacenamiento de información, ni transmitir en
ninguna forma por algún medio (electrónico, mecánico, de fotocopias, grabación,
etc.) sin el permiso previo de los editores.
Traducción: Nancy Pineda
Revisión: Rojas & Rojas Editores, Inc.
Portada: Koechel Peterson & Associates, Inc., Minneapolis, Minnesota
A menos que se indique lo contrario, las citas bíblicas se tomaron de la Santa Biblia
Nueva Versión Internacional. © 1999 por la Sociedad Bíblica Internacional.
Las citas bíblicas señaladas con RV-60 se tomaron de la Santa Biblia, Versión Reina
Valera 1960. © 1960 por la Sociedad Bíblica en América Latina.
Las citas bíblicas señaladas con LBD se tomaron de la Santa Biblia, La Biblia al Día. ©
1979 por la Sociedad Bíblica Internacional.
Las citas bíblicas señaladas con DHH se tomaron de Dios Habla Hoy, la Biblia en Versión
Popular. © 1966, 1970, 1979 por la Sociedad Bíblica Americana, Nueva York.
Las citas bíblicas señaladas con LBLA se tomaron de la Santa Biblia, La Biblia de Las
Américas. © 1986 por The Lockman Foundation.
Las citas bíblicas señaladas con TLA se tomaron de la Bibliapara todos, © 2003. Tra-
ducción en lenguaje actual, © 2002 por las Sociedades Bíblicas Unidas.
Usadas con permiso.
Producto 495446
ISBN 0-7899-1397-6
Impreso en Colombia
Printedin Colombia
Categoría: Jóvenes/Devocional y oración
Category: Youth/Devotional & Prayer

¿Qué es el poder y por que lo necesito? 5
• i 1 '.'i11/
'!• 4: • '¡
Séñor, ayúdame a conocerte mejor 15
Señor, ayúdame a liberarme
de los errores del pasado 27
Scfeor, ayúdame a perdonar a otros 37
áfekar, ayúdame a hacer lo que es bueno 47
Sefior, ayúdame a mantenerme
firme contra las malas influencias 57
fillíor, ayúdame a tomar el control de mi mente 69
'""t ./iu., ' , • . , ,, ,
Séñor, ayúdame a comprender tu Palabra 79
Señor, ayúdame a liberarme
de la presión de mis ¡guales 89
Señor, ajúdame a Lener buenas relaciones 10]
Señor, a\ iklanie a alabarte en todo tiempo 109

"i •:. . • • •• ' .. > ,
S&etayúdame a encontrar
tu propósito para mi vida. 117
1if '»'"I ";•• .' • •
SléíEiCi ayúdame a tomar decisiones sabias ........ 127
SteWf éyúdame a deshacerme
de las emociones negativas 135
"t é
Síful^ayúdame a resistir la tentación 147
««t cr • • - :: •
SM©íi ayúdame a ser fuerte cuando
pasan cosas malas. . 155
I" lili " : •• ";:v ' 1
Sitó® f5 ayúdame a estar seguro 163
Seáoí, ayúdame a decir palabras que traigan vida... 171
SiñíW ayúdame a tener fe por lo imposible 181
• • ' • ' ' 1' ' •
' lililí" ' • ' '
Seño-r; ayúdame a conocer tu voluntad para mi vida. 189
Señor; ayúdame a adentrarme
en el futuro que tienes para mí. .............. , . 199

$Í¡ÉRES JOVEN, ESTÁS EN una posición Única para lograr influir
en tú mundo de una manera poderosa. Eso se debe a qué eres
parte de un mundo que es intenso, agresivo y muy pequeño en
algunas maneras. Es pequeño porque las personas que no son
jóvenes no forman parte de él de la forma en que lo,haces tú.
Eres capaz de vci de cerca tocia* las cosas que son buenas \ malas
en tu mundo, las cosas que tú deseas que nunca terminaran \ las
cosas que sabes que necesitan eambiar.
Tú, tu oída y tu mundo pueden cambiar mucho má> de lo t/ue
jamás soñaste posible cotí sola orar por esto todos los días.
Como joven, tienes una vida ocupada. Nunca ha habido
más presión por aprender, mejorar y triunfar. Ni nunca lu habido1
más oportunidades de hacerlo. Quizá sientas que no tienes tiempo

El podar *iel joven que ora
de orar. Si es así, no eres el único. Muchas personas se sienten
así. La vida está llena de un sinnúmero de cosas que están dise-
ñadas para mantenernos demasiado ocupados para orar. Sin
embargo, cuando no pasamos tiempo con Dios cada día en oración,
nos perdemos de escuchar su voz hablando a nuestro corazón y
guiándonos de maneras importantes. Puede hacer que nos perdamos
muchas de las cosas buenas que Él tiene para nuestra vida.
He encontrado un método para que ores por cada aspecto de tu
vida que te mantendrá enfocado en quién es Dios y en para qué te
creó. Y esto es muy importante, porque cuando las personas no
saben quién es Dios en realidad, ni para qué Él las creó, pueden
terminar tomando malas decisiones y nunca
experimentan todo lo que Dios tiene para
ellas.
Esta manera de orar quitará los proble-
mas de tus hombros y pondrá la carga en los
de Dios. Él no solo quiere llevarlas por ti,
sino también elevarte por encima de las
circunstancias difíciles para que logres ver las
cosas desde su perspectiva. Cuando puedes
hacer eso, podrás saber lo que es verdad y
lo que es mentira. Demasiado a menudo
creemos cosas que no son ciertas sobre
nosotros y nuestras situaciones, y esto
puede limitarnos, o incluso paralizar-
nos, hasta el punto en que no podemos
avanzar como debemos. Ver la verdad
como la revela Dios nos libera.
Sobre todo, este tipo de oración te ayudará a acercarte de veras a
Dios. Y ahí es donde quieres estar. Cuando estás cerca de Dios,
puedes expresar los más profundos sentimientos y deseos de tu
corazón. Y tu corazón puede escucharlo a Él guiándote en el
camino que tiene para ti, revelándote, los maravillosos planes
que tiene para tu futuro.
Las principal®3
cosas por las
que oro:
• Buena salud para mí
y mi familia
• Que tenga éxito
en la vida
• Que sea libre
de la tentación
• Que haya paz
en el mundo
• Que Dios salve
a mi generación
(16-19 años de edad)
§

¿Qué es el poder y por <|u<§"Íq necesito?
" - " cor. r > x-ím '
La cosa más importante que necesitas comprender en la vida
es que Dios te creó, te ama, está comprometido contigo y tiene un
gran propósito con tu vida. Sin embargo, no soló tienes que creer
esto en tu cabeza, sino también conocerlo en tu corazón. Y solo a
través de una relación íntima con Dios es que puedes conocer
todo esto en verdad.
Uno comienza una relación íntima con Dios al recibir a su
Hijo, Jesús. Solo pídele a Jesús que venga a tu vida. Luego toma
una Biblia y comienza a leerla. (Revisa diferentes traducciones
para ver la que sea perfecta para ti). Procura j untarte con personas
que conozcan al Señor. ¿Cómo puedes llegar a ser todo para lo
que te creó Dios si a cada momento te empujan a un mundo
que quiere que te amoldes a su imagen? Las personas qué tengan
la mayor influencia en tu vida deben ser personas que conocen a
Dios. Búscalas en la escuela. Sobre todo, búscalas en una buena
iglesia, pues allí pueden dárte el apoyo sólido que necesitas para
cultivar tu relación con el Señor.
Tener una relación cercana con Dios no significa que nunca
tendrás problemas, sino que cuando los tengas, Él estará a tu
lado para ayudarte. Calmará las tormentas de tu vida cuándo las
cosas se pongan feas. Tomará los asuntos difíciles que enfrentas
para o bien transformarlos, permitiéndote elevarte por encima
de ellos, o para ayudarte a atravesarlos con éxito.
Sin embargo, todas estas cosas no pasan por casualidad. No
pasan sin oración.
Cuando andas cerca de Dios mediante la lectura de su Palabra
y pasando tiempo con El cada día en oración, descubrirás dé
veras quién eres y para qué te creó. Comprenderás el propósito
que Dios tiene con tu vida.
La oración es simplemente comunicarse con Dios. Es hablar con
Él y decirle cualquier cosa que tengas en el corazón. Es contarle

El potíer del jo ver. «gue ora
Jo que opinas de tu vida y lo que opinas de Él. Es decirle a Dios
todas las cosas que ves que son malas y cómo te gustaría que
cambiaran. Y es permitirle a Él que hable a tu corazón sobre qué piensa
de tí y cuáles son los planes y propósitos que tiene con tu vida.
Cuando oras a menudo, te enfocas en quién es Dios y en
quién , eres tú con relación a Él. Cuando hablas con Dios, Él
comienza a mostrarte cada vez más, quién debes llegar a ser y lo
que quiere que hagas. Y esa es una de las cosas más importantes
que necesitas conocer en tu vida.
B^a^e.^^^ ti< hablemos «le mi
Este libro te ayudará a aprender a orar por ti y tu vida, y por
otras personas y circunstancias también. Es el libro que me
hubiera gustado que ya lo hubieran escrito cuando yo era joven.
Si hubiese sabido todas estas cosas, no me hubiera metido en
tantos problemas, ni malgastado tantos años de mi vida buscando
cosas que no podía tener. No hubiera pasado tiempo luchando por
algo para lo que no me crearon. No hubiese sufrido el desaliento,
la depresión, la frustración, la ansiedad ni la desesperación que
sufrí. Me hubiera ahorrado un montón de tristeza y dolor.
Cuando era adolescente, mi familia y yo
Mi oración vivíamos en una parte de la ciudad que no
& Dios era tan bonita como donde vivían los demás
Seiíor> ayúdame a pasar chicos. No era agradable en lo absoluto,
a través de esta maravillosa Los demás chicos vivían en casas que eran
Vida que me has dado. muy grandes, nuevas y bien equipadas. La
Dame todo lo que necesito mía era pequeña, vieja y de aspecto ruinoso,
y ayúdame de manera Ellos procedían de familias adineradas. La
espiritual, mía era pobre. Ellos vestían mejores ropas,
emocional y física. conducían autos más bonitos e iban a
lugares en las vacaciones. Las pocas ropas
que tenía para vestir estaban gastadas, nuestros autos
eran tan viejos y estropeados que apenas funcionaban, y nunca íba-
mos a ninguna parte. Ellos comían bien, se mantenían saludables
8

¿Qué es el poder y por Jo necesito?
y vivían mejor. Yo a menudo me iba-aja cama con hambre, casi
siempre estaba enferma y vivía en la miseria. Ellos tenían ilusión
en la vida; yo le temía a cada día y a menudo deseaba más morir
que vivir.
Si hubiera conocido al Señor en ese entonces, hubiera podido
acudir a Él con todas las necesidades que tenía. Hubiera sentido
su presencia y su poder ayudándome a través de cada día y se
hubiera llevado mi pena y soledad. Hubiera dejado de estar
avergonzada de ser quien era y hubiera estado agradecida de lo
que Dios estaba haciendo de mí. Hubiera aprendido a andar en
los caminos de Dios y a no meterme en problemas. Hubiera
reconocido mucho antes mis dones y talentos y los hubiera
desarrollado, en lugar de recriminarme por no ser lo que pensaba
que debía ser. Hubiera comprendido lo que Dios quería de mi
vida y a no apartarme del camino ni malgastar tantos años tra-
tando de descifrar la vida y buscar mi camino.
Te contaré más de mi vida a lo largo de este libro, y espero
que aprendas lo suficiente de esta para evitar los errores y los
males que tuve que soportar.
¿»pr ^ masa———
¿Te parece a veces que orar es difícil? Si es así, no eres el único.
Yo me he sentido también de esa manera. Es más, todo el mundo
experimenta lo mismo de una manera u otra, no importa la
edad ni el tiempo que haga que conocen al Señor.
Existen muchas explicaciones diferentes de por qué se nos
hace difícil la oración. Una es que no estamos seguros de que
digamos lo que hay que decir. Pensamos que tenemos que sonar
como un predicador o que tenemos que usar las palabras apro-
piadas. Tememos no decir las cosas lo suficientemente adecua-
das ni buenas. O no oramos el tiempo suficiente ni con bastante
firmeza; '...
Algunas veces pensamos que Dios no escucha nuestras ora-
ciones. O que quizá no las considera importantes. O que está
i

El podar *iel joven que ora
demasiado ocupado para escuchar. O creemos que los asuntos
por los que queremos orar son muy grandes y nosotros somos
muy pequeños, ¿cómo es posible que nuestras oraciones mar-
quen alguna diferencia? No entendemos lo poderosas que son
nuestras oraciones y lo que se puede lograr cuando oramos.
¿Encuentras más fácil orar por otras personas que por ti? Sé
que me he sentido de esa manera. Puedo orar con mucha más
facilidad por mis amigos, familiares y personas que ni siquiera
he conocido y de las que me he enterado en las noticias que por
mis propias necesidades. ¿Por qué?
Por una cosa: me resultaba sencilla entender las necesidades
de otras personas. Las mías eran muchjas veces complicadas y no
era fácil hablar al respecto. A menudo no tenía ni idea de cómo
orar por una situación en particular. D las circunstancias eran
tan abrumadoras que mis oraciones fió eran más que un básico
clamor por ayuda. Algunas veces penisaba que no podía decir
una oración que Dios deseara escuchar. Hace mucho que he
descubierto que nada de eso es cierto. I
La verdad es que Dios no está buscando a alguien para orar
que sea perfecto, ni que diga las «cristianísimas» palabras perfec-
tas de una manera perfecta. Está buscando a alguien que tenga
un corazón lleno de amor para ÉL Dios no mide tus oraciones
por el tiempo que oras. Las mide por lo importantes que son
para ti. Sabe lo que hay en tu corazón y le interesan las cosas que
te preocupan, porque tú le importas. Lo que es importante para
ti es importante para Él. Por eso quiere que vayas a Él con las
cosas que son importantes para ti.
Es posible que estés pensando: Si Dios sabe lo que está en mi
corazón y se preocupa por mí, ¿por qué tengo que orar? ¿Por qué
simplemente no me da lo que necesito sin tener que pedírselo?
La respuesta es que Dios quiere que vayas a Él, que estés cer-
ca de Él, que hables con Él y que dependas de Él. Quiere hablar
contigo sobre las cosas que son importantes para EI& fin de que
lleguen a ser importantes para ti. Quiere llevarte a lugares a los
que no puedes llegar sin Él. Quiere hacer gfandes cosas por

¿Qué es el poder y por <|u<§"Íq necesito?
medio de ti, pero tienes que andar cerca de Él a fin de que se
hagan realidad. Cuando comprendes todo esto, orar es muchísimo
más fácil.
fias hacfi£ cuanto as. aisa4"-^ Bates*- - -
¿Alguna vez has sentido que tu vida está fuera de control y
no tienes poder para hacer algo al respecto? ¿Algunas veces te
sientes tan presionado por las circunstancias externas o las emo-
ciones internas que crees que estás a punto de explotar? ¿Alguna
vez has sentido como si tu vida estuviera atascada en un lugar y
que no vas a ninguna parte, o peor aun, que vas hacia atrás?
¿Alguna vez experimentas sentimientos de vacío o frustración?
¿Te has preguntado si puedes avanzar hacia lo que Dios tiene
para ti? La mayoría de las personas sienten esas cosas, en especial
las de tu edad. Sin embargo, la buena noticia es que Dios tiene
un camino para ti a la oración qué te dará el poder para levantarte
por encima de todos esos sentimientos.
¿Has deseado a veces hacer algo gran- Oré y Dios
de, algo que fuera determinante en este respondió
mundo, pero no sabías qué hacer ni cómo ie ^ a ^
hacerlo? Si es así, consuélate en saber que me ayudara
que esta es la manera en qúe quiere Dios en mi relación con Él
que te sientas. Él también quiere que No oraba mucho y ahora
hagas algo grande que sea determinante lo hago todos los días.
en este mundo, pero quiere que busques A veces olvidaba leer
de Él la habilidad y el poder para 'a Biblia, pero he mejorado,
hacerlo. Demasiado a menudo trata- (14 años de edad)
mos de hacer cosas por nuestra cuenta
y nos llegamos a desalentar cuando no ocurren de la manera que
esperábamos.
Lo que necesitamos es un poder mucho mayor que nosotros
mismos. Aun así, en el mundo solo existe un poder lo suficiente
grande para ayudarnos a elevarnos por. encima de nosotros mismos
y nuestras limitaciones y circunstancias, y ese es el poder de Dios.

El poHer ¿al j^mn que . ora
•Corno se ajferitxa un*-. • --
Lo más maravilloso que ocurre cuando invitamos a Jesús a
entrar en nuestra vida es que el Espíritu Santo de Dios viene a
vivir dentro de nosotros. Como tenemos su Espíritu Santo en
nosotros, nunca estaremos solos y siempre tendremos acceso a todo
lo que necesitamos. Eso significa que cada vez que oramos a
Dios en el nombre de Jesús, su poder se libera a fin de actuar en
cualquier situación por la que estemos orando. Cuando nega-
mos el poder del Espíritu Santo, nos volvemos como esos indi-
viduos que la Biblia dice que «aparentarán ser piadosos, pero su
conducta desmentirá el poder de la piedad» (2 Timoteo V. ).
Sin el poder de Dios, no podemos elevarnos por encima de
nuestras limitaciones. No podemos permanecer firmes ante
todo lo que nos venga en contra cada día.
Dios quiere que comprendamos «cuán incomparable es la
grandeza de su poder a favor de los que creemos» (Efesios I; í j).
Él quiere que veamos que «no hemos recibido el espíritu del
mundo sino el Espíritu que procede de Dios, para que enten-
damos lo que por su gracia él nos ha concedido» (.„ Corintios
Eso significa que debido a que tenemos el Espíritu de
Dios morando en nosotros, lograremos experimentar todas
las cosas que Dios tiene para nosotros. ¿No es esa una gran
noticia?
No puedo hacer que comprendas el poder de Dios, ni la
manera en que el Espíritu Santo quiere obrar en ti. Eso va más
allá de mis capacidades y autoridad en tu vida. Sin embargo, tú
no necesitas que te convenza porque lo hará el mismo Espíritu
Santo. Jesús dijo: «El Defensor, el Espíritu Santo que el Padre va a
enviar en mi nombre, les enseñará todas las cosas y les recordará
todo lo que yo les he dicho» (Juan > -i DHH). El Espíritu
Santo te lo mostrará.
Una vez que haces a Jesús el Señor de tu vida, llegarás a
conocerlo como «a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas
mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos,

¿Qué es .el poder y por <tn|¿$c -'«cesito?
según el poder que actúa en nosotros» (Efesios *..t¿', RV-60).
Esto quiere decir que debido al Espíritu Santo de Dios en ti, su
poder en ti, El puede hacer más en tu vida de lo que puedas
pedir. Él puede hacer más de lo que puedes imaginar siquiera.
¿Qué te parece?
¡a j^mssa^ - ———— —
Este libro te ayudará a orar por los diferentes asuntos de tu
vida. Solo toma un capítulo cada vez. Al final de cada capítulo
está una sección llamada «El poder de la oración», una oración
que puedes hacer para empezar. A medida que oras, vendrán a
tu mente otras cosas para incluirlas.
Después de esa sección está una llamada «Palabra de poder».
Son importantes promesas de la Palabra de
Dios relacionadas con lo que se está hablando.
Al leerlas, piensa en lo que cada promesa en
particular significa de manera específica
para ti y tu vida. La última sección de cada
capítulo se llama «Pensémoslo un poco más».
Estas son preguntas para que las respondas
y pensamientos para que los completes
que te ayudarán a aprender a orar por esas
cosas.
A través de todos los capítulos aparecen
pequeños recuadros que contienen pensamientos, oraciones
y opiniones de jóvenes. Decidí mantenerlos anónimos porque
muchos son muy personales y quería proteger la privacidad de
todos los que realizaron la encuesta. Están divididos por igual entre
contribuyentes masculinos y femeninos. Sin embargo, los mismos
jóvenes no realizaron la encuesta de manera anónima. Los vi y
hablé con ellos en persona, y fueron muy entusiastas y sinceros
en sus respuestas debido a que creían que su franqueza podía
ayudar a otros jóvenes que atravesaban por las mismas cosas y
experiencias.
Oro por
otros cuando;
por ellos
• Me ayudan
• Pienso en ellos
' Están tristes
• Tengo la oportunidad
(13-15 años de edad)

El podar *iel joven que ora
lora.cíe •.•A;,^-
Cuando hablas con el Señor, nunca te quedas inmóvil. O bien
avanzas o retrocedes. O bien eres más semejante a Cristo cada
día o te pareces menos a Él. Es por eso que escribí este libro.
Deseo que sigas avanzando al pasar tiempo con el Señor cada
día. Deseo que aprendas a amar a Dios y vivas como Él quiere de
modo que puedas recibir todo lo que Él tiene para ti. Cuando
vives acorde a la Palabra de Dios y por el poder de su Espíritu
Santo, puedes confiar en que el Señor está obrando su perfecta
voluntad en tu vida y te está convirtiendo en todo para lo que te creó.
!íEÉeir oración
Señor, tu fias ffitiSTBirtO Palabra- que tu Espíritu
Santo nos ayuda a orar (Romanos 8:2i). Te invito,
Espíritu Santo, a que me enseñes a orar. Muéstrame
las cosas que me hacen falta saber. Dame la fe que
necesito para creer que tú siempre me escucharás y
responderás a tu manera y en tu tiempo. Gracias,
Señor, porque enviaste a tu Espíritu Santo a fin de
que pueda vivir en poder y que me puedas usar de
manera poderosa (1 Corintios 1:18). Ayúdame a
hacer eso. Necesito tu poder para que me permita
vivir de la manera en que quieres que lo haga, de
modo que pueda llegar a ser todo para lo que me
creaste. Te lo pido en el nombre de Jesús.

m
SíHBñ
WUjiL»
AN"I j-:s QUE LLEGARA \ CONOCER AI SEÑOR, participaba en
iodo tipo de prácticas ocultas y religiones oriéntales y de la Nue-
va Era. En cada una de estas trataba de encontrar a Dios y descu-
brir el propósito de estar viva. Llegué a estar desesperada por
encontrar una salida del dolor emocional, el temor, la ansiedad
y la depresión que había experimentado casi cada día desde que
era niña. Pensaba que debía haber un Dios, y que si podía acer-
tarme a Él lo suficiente, quizá pudiera darle significado a mi
vida y entonces me sentiría mejor conmigo misma.
Por supuesto que esto no pasó porque los dioses que buscaba
eran distantes y fríos. Y esto me deprimió aun más porque me
criaba una madre que era disiaiue y fría.. También era violenta
en lo físico, abusadora de palabras, temible y cruel. Me,encerra-
ba en un armario por largos períodos y eso me ponía nun asus-
tada y irisie. Más tarde me di cuenta que ella lenía una grave
enfermedad menial, y debido a que nunca recibía ninguna ayu-
da médica, empeoraba cada vez más a medida que pasaba el

I^illip^l^ieíl -<|W«í:.ora
Con el tiempo perdoné a mi madre
por todas las cosas que sufrí por su culpa,
pero seguía teniendo recuerdos muy
malos de mi niñez. Siempre ocultaba a
los demás esa parte de mi vida, sobre todo
cuando era adolescente. A esa edad no
era bueno ser diferente, y de seguro no
era bueno ser diferente de una manera
tan negativa como esa. El dolor qué sentí
en la adolescencia llegó a ser como una
avalancha que se estrellaba contra mí
hasta que parecía como si me fuera a ahogar bajo su peso. La
desesperanza, la depresión y la desesperación que sentía se tor-
naron tan insoportables que tuve pensamientos constantes de
suicidio.
Después de cumplir los veinte años y estar ya por mi cuenta,
estuve probando todo lo que se me ocurría para salir de mi des-
dicha, pero nada daba resultados. Tomé drogas hasta el punto
de casi matarme un par de veces por una sobredosis. Bebía
alcohol para tratar de adormecer el dolor, pero solo me hacía
sentir enferma y confundida. Por último, en el punto más bajó
de mi vida, ya tenía 2 U años de edad y había hecho todo lo que
sabía a fin de encontrar una salida al dolor que sentía a cada
momento. Quería morir y estaba planeando una forma de
matarme.
Fue en ese tiempo que mi amiga Terry vio que no andaba
muy bien, y me pidió que fuera con ella a conocer a su pastor.
Era cristiana y yo no lo era, y por eso dudé. Temía que tuviera
que hablarle sobre mi madre o mis problemas, o revelar las terri-
bles cosas que había hecho. No quería que nadie lo supiera. Sin
embargo, también estaba desesperada por encontrar una razón
para vivir, y por eso fui.
El pastor de Terry, el pastor Jack, se reunió con nosotras en
un popular restaurante de la ciudad. Comimos y nos sentamos
allí por dos horas mientras me hablaba de Jesús. Cuando ¿1
Lo más difícil
de la oración es:
• Reconocer mis pecados
• Orar de corazón
• Mantener los ojos
cerrados
• No ser egoísta
• Nada. IEs fácil!
[13-15 años de edad)

Señor, ayúdame a conocerte mejor
pastor Jack hablaba de Jesús, este no se;parecía a los dioses fríosy
críticos de los que había estado leyendo en mis libros sobre reli-
giones ocultistas y orientales. El pastor Jack me dijo que si reci-
bía a Jesús como Salvador, podía comenzar un andar cercano
con Dios que cambiaría mi vida para siempre. Me ayudaría a
encontrar la paz y la restauración. Me mostraría su propósito
para mi vida, y sería mejor que nada de lo que hubiera imaginado
jamás. • ;...••• , .
El pastor Jack me dio tres libros para leer, Uno era sobre Ja
realidad del mal. Mis prácticas ocultistas me habían enseñado
que no existía el mal. El segundo libro era sobre el poder del
Espíritu Santo. Nunca había conocido esa clase de poder, y esta-
ba fascinada que pudiera tener acceso a eso cuando recibiera a
Jesús . El tercer libro era el Evangelio de Juan en tamaño pequeño.
Hablaba de la vida de Jesús, quién era y lo que enseñó. El pastor
jack me pidió que fuera con Terry a su oficina después que leyera
los libros, y luego le dijera lo que pensaba de ellos.
Me fui a la casa, puse mis planes de
suicidio en espera y leí los tres libros en Oro por otros
solo unos días. Cuándo regresé con Terry cuando:
a la semana siguiente, le dije al pastor • Me lo piden
Jack que creía que lo que había leído era . p¡0$ m ^ ^
la verdad, Me preguntó si estaba lista . Nemit ° ^
para recibir a Jesús como Salvador, y le . gsfá(| e||ferm
dÍ'e^UeSÍ- , ^ . , -EtúJ™
Después que le entregue mi vida al ()3.|5 aj¡os de
Señor, pude sentir su Espíritu obrando
en mí. Por primera vez en mi vida sentí
esperanza, y pude ver que tenía un futuro, No sabía con
exactitud cuál era, pero sabía que tenía uno. Y eso fue mucho
más de lo que podía concebir antes.
También pude ver que había una trama común en todas esas
otras prácticas ocultas y religiones orientales en las que antes
había tenido un interés superficial. La similitud entre ellos era
que los dioses de cada una de esas religiones no tenían poder

El poder del joven <gue ora
para salvar ni transformar a una persona y su vida. Sin embargo,
el Dios de la Biblia sí lo tenía. Él es el único, verdadero y viviente
Dios, y cuando recibimos a su Hijo, Jesús, como Salvador, el
Espíritu Santo de Dios viene a morar en nosotros (Juan 14:I§-17).
Es mediante el poder de su Espíritu que nos transforma de
adentro hacia fuera y de manera milagrosa nos cambia a noso-
tros, nuestras circunstancias y nuestra vida.
También aprendí que se puede conocer al Dios de la Biblia y
que Él quiere estar cerca de nosotros. Es por eso que se le llama
Emanuel, lo cual significa «Dios con nosotros». Él se acerca a
nosotros cuando nos acercamos a Él (Santiago 4:8).
Toito-la <na rwrtfflitaa "
Me gustaría poder sentarme y conversar contigo en persona
sobre tu vida. Si pudiera hacerlo, te diría que si has recibido a
Jesús, la respuesta a todo lo que necesitarás algún día en tu vida
está dentro de ti. Eso se debe a que el Espíritu Santo de Dios está
en ti. Él promete guiarte en tu vida y enseñarte cosas que necesi-
tas saber. Pero tienes que entregarle tu vida y ser paciente a fin de
dejarle obrar en ti a su manera y en su tiempo.
Ser transformado significa ser cambiado de forma perma-
nente. No quiere decir que sea un arreglo temporal ni un pequeño
cambio. Esto no se refiere a tratar de ser suficiente bueno para
lograr que Dios te ame. Dios ya te ama. Él te amó primero. Él
solo espera que lo ames. Me refiero a llegar a conocer a Jesús,
que es perfecto, y permitir que su perfecto amor te cambie y te
ayude a hacer lo bueno. Me refiero a andar cerca de Dios y las
grandes cosas que ocurrirán en ti gracias a esto.
J «a? je t xHorj ¡q.mr^y
Todos queremos que nos amen, pero nadie será capaz de
amarnos jamás como lo puede hacer Dios. Solo Dios puede suplir
tus necesidades a cada instante... cuando tienes una relación íntima
18

Señor, ayúdame a conocerte mejor
con Él. Ninguna persona puede alguna vez conmoverte de
manera tan profunda como lo puede»hacer Dios. Nadie puede
siquiera conocerte tan bien. Siempre que sientas un vacío den-
tro de ti que quieres que lo llenen los más cercanos a ti y estos no
lo hagan, recuerda que Dios puso allí ese vacío. Quiere que te
acerques a Él para poder llenarlo.
Dios quiere que lo quieras, Y cuando te das cuenta que es Él
lo que de veras quieres, eso te libera para que entiendas que los
anhelos, las soledades o vacíos dentro de ti son una señal de que
necesitas acercarte a Dios y pedirle que te llene con más de Él.
Pero esta profunda relación con Dios que todos queremos, ya
sea que en ese momento sepamos lo que queremos o no, no se
da por casualidad. Se tiene que buscar. Tenemos que orar por
una relación más profunda con Dios. Tenemos que orar para
que nuestro andar con Dios no sea superficial.
-oo maneras'He saber si tu -anéar ..
i moa «8 aMpftEliciíli - —
1. Si amas al Señor solo por lo que Élpuede hacerpor ti, tu andar
con el Señor es superficial. Si lo amas lo suficiente para pre-
guntarle qué puedes hacer tú por Él, tu relación con Dios
está profundizando.
2. Si solo oras a Dios cuando las cosas son difíciles o necesitas algo,
tu andar con Él es superficial. Si oras a menudo solo porque
te encanta estar cerca de Él, tu relación con Dios es cada vez
más profunda.
3» Si te enojas con Dios o te desilusionas de Él cuando no hace lo
que quieres, tu andar con Él es superficial. Si puedes alabar a
Dios y orar a Él sin importar lo que esté pasando en tu vida,
tu relación con Dios es cada vez más profunda.
4, Si alabas a Dios solo por lo que Él hace por ti, tu andar con
Dios es superficial. Si lo alabas también por lo que es Él, tu
relación con Dios es cada vez más profunda.

ex yodfcr del wv« ..¡ra
5, Si sientes que tienes que suplicarle a Dios o forzarlo para con-
seguir que responda a tus oraciones, tu andar con El es super-
ficial. Si crees que Dios quiere responder tus oraciones de
acuerdo con su voluntad, tu relación con Dios es cada vez
más profunda. : • •.•.,•,• ;
Ti^inEMjsolas coíVDiosr
Nunca podremos acercamos a Dios y llegar a conocerlo
bien si no pasamos tiempo a solas con Él. En esos momentos
privados con Dios es que nos renovamos y fortalecemos. És
donde podemos ver mejor nuestras vidas desde su perspectiva y
descubrir lo que es importante en realidad. Ahí es donde com-
prendemos quién es Dios en verdad y todo lo que tiene para
nosotros.
El mismo Jesús pasó tiempo a solas con Dios. Si alguien
pudo haber salido impune al no hacerlo, de seguro habría sido Jesús.
¿Cuánto más importante debe ser para nosotros?
Sé que encontrar tiempo a solas para orar a Dios puede ser
difícil, Pero si estás dispuesto a hacerlo una prioridad, verás res-
puestas a tus oraciones como nunca antes.
Recuerda, si no has estado orando mucho, no
puedes esperar que las cosas cambien de la
noche a la mañana. Cuando alguien trata
de lograr que un enorme transatlántico dé
la vuelta y se encamine en una dirección
diferente, no ocurre en el momento que
comienza a timonear. Es más, apenas ven
algún cambio al principio. La oración puede
darle la vuelta a tú' tódá, pero no siempre
sucede en el momento que dices las pri-
meras palabras. Si no has estado orando
mucho o nada, no puedes esperar que las
cosas cambien de inmediato. Pug^e tomar un tiempo de oración
continua antes de que ve^s que comienza a cambiar el escenario
20 ; • i
Pienso en ;
Dios como:
• Alguien que me
escucha
•Alguien que me ama
• Alguien con el que
puedo hablar
• Alguien que siempre
es bueno
• Alguien que me guía
(13-15 años de edad)

Señor, ayúdame a conocerte mejor
de tu vida. Esto es normal, así que no te rindas. Pronto te dirigi-
rás a toda velocidad en una nueva dirección.
Muy a menudo la gente se rinde antes de ver las respuestas a
sus oraciones. Solo recuerda que este no es un corto viaje alrededor
del puerto. Es un viaje de toda la vida para llegar a tu destino.
Rendirse no es una opción.
- '
¿Alguna vez has tenido problemas con recordar nombres?
Yo sí. En especial cuando conozco a un montón de personas a la
vez. Es más fácil recordar los rostros que los nombres. Con Dios,
la situación es diferente. El tiene un solo rostro, pero muchos,
muchísimos, nombres. Es que hay tanto que conocer de Dios
que necesitamos todos esos nombres para que nos ayuden a
recordar. En otras palabras, si no conocemos todos sus nombres,
quizá no comprendamos cabalmente cada aspecto de lo que es Él.
A Dios se le llama por muchos nombres
diferentes en la Biblia, pero a veces nos
cuesta trabajo recordar hasta algunos de los
básicos. Quizá olvidemos uno cuando
más necesitamos recordarlo. Por ejemplo,
es probable que pensemos en Dios como
nuestro Proveedor, pero que olvidemos
que es también nuestro Protector. O tal
vez lo recordemos como nuestro Padre celestial, pero que olvide-
mos que es también nuestro Amigo. Tal vez recordemos que es
nuestro Salvador, pero que olvidemos que es también nuestro
Libertador.
Cada uno de los nombres de Dios en la Biblia representa
una manera en que Dios quiere que confiemos en Él:
¿Confías en que Él es tu Fortaleza? (Salmo RV-60)
¿Es tu Paz (Efesios '. *)?
¿Es el Levantador de tu cabeza cuando estás abatido (Salmo
3:3, KV-60)? • • • : ••
Oré y Dios
respondió
Oré cuando me enferme'
y Dios me sano'.
113 años de edad)

SI poder del joven, que ora
¿Es Él tu Sabiduría (1 Corintios i;,24)?
¿Es tu Consejero (Salmo )?
Hay gran poder en cada uno de los nombres de Dios. Y cuando
los mencionas con fe y entendimiento, llegas a conocer mejor a Dios.
Mientras mejor lo conozcas, más fantástica será tu vida.
Por ejemplo, el nombre de Dios siempre es un lugar seguro
al cual correr cada vez que necesites ayuda. «Torre inexpugnable
es el nombre del SEÑOR; a ella corren los justos y se ponen a salvo»
(Proverbios 18:10).
Si estás enfermo, corre a tu Sanador.
Si tienes necesidad de algo, corre a tu Proveedor.
Si tienes miedo, corre a tu Refugio.
Al pronunciar uno de sus nombres, le
invitas a que sea eso para ti. A menudo
hay mucho que no tenemos en la vida
solo porque no buscamos a Dios como la
respuesta a esa necesidad.
En la siguiente lista de nombres de
Dios, solo incluí 20. Sin embargo, hay
cientos más en su Palabra, la Biblia. A
medida que analices cada uno de esos
nombres, dale gracias a Dios por ser eso para ti. Cuando lo
hagas, te asombrarás de cómo crecerá tu fe y cuán más cerca te
sentirás de Dios. Saber lo mucho que ha hecho por ti te ayudará
a amarlo más.
Veinte nombres «te Dios para recordar
1. Dios es mi Sanador (Salmo 103:3).
2. Dios es mi Redentor (Isaías 59:20).
3. Dios es mi Libertador (Salmo 705).
4. Dios es mi Fortaleza (Salmo 43:2).
5. Dios es mi Refugio (Joel 3:1*).
€. Dios es mi Amigo (Juan 15:15).
7. Dios es mi Restaurador (Salmo 23:3,1.BLA).
Mi oración
a Dios
Señor, ayüdame a recordar
que me vuelva \mme»o a V»
cuando estoy desanimado.
[\$ años do e<M)

Señor, ayúdame a conocert e mejor
8. Dios es mi Padre (Isaías £6). •>
9. Dios es mi Amor (1 Juan 4:M). i'
10. Dios es mi Refugio (Salmo 32".?).
11. Dios es mi Lugar de Descanso (Jeremías 50:6, LBLA).
12. Dios es mi Verdad (Juan lfcl3).
13. Dios es mi Vida Eterna (1 Juan 5:20).
14. Dios es mi Proveedor (Génesis 22:14).
15. Dios es mi Señor de Paz (2 Tesalonicenses 3:1$).
16. Dios es mi Escudo (Salmo 144:2).
17. Dios es mi Ayudador (Hebreos 13:6).
18. Dios es mi Consejero (Isaías 9:6).
19. Dios es mi Esperanza (Salmo 71:5).
20. Dios es mi Consolación (Romanos 15:5, LBD).
Lee estos nombres a menudo, y cada vez que lo hagas, escoge
el nombre que corresponda a lo que necesitas que Dios sea en
ese día y luego dale gracias por ser eso para ti. Y siempre que leas
la Biblia y te encuentres un nombre para Dios, subráyalo, anó-
talo al margen o añádelo a esta lista. Te recordará otro aspecto de
lo que es Dios para ti.
Señor, quiero tener un andar más íntimo contigo. Me acerco
a ti ahora mismo y te doy gracia porque mientras lo hago, tú te
acercas más a mí como lo prometiste en tu Palabra (Santiago 4:8).
Quiero una relación más profunda contigo. Quiero cono-
certe en todas las maneras que puedes ser conocido. Estoy
dispuesto a todo lo que quieras hacer en mí y en mi vida. No
quiero limitarte por descuidar conocerte en cada manera
posible. Enséñame lo que necesito aprender a fin de conocerte
mejor. No quiero ser de las personas que «siempre están apren-
diendo, pero nunca logran conocer la verdad» (2 Timoteo 3:7).
Quiero conocer la verdad sobre quién eres tú. Hoy necesito
sobre todo conocerte como mi (di un nombre del Señor que
más necesites que El sea hoy para ti).
23

El poífee «leí joven, ^ue ora .
Ayúdame a confiar en que tú siempre serás eso para mí.
Ayúdame a conocerte en esa manera cada vez más todos
los días. Te lo pido en el nombre de Jesús.
, Í '\,!£}£jr\ ' , . : , •
** X . A» .; '
Acerqúense a Dios, y él se acercará a ustedes.
; ' SANTIAGO 4:8
Hasta ahora ustedes no han pedido nada en mi
n,pmbre. Háganlo, y Dios les dará lo que pidan;
así serán completamente felices.
Juan TLÁ
Para el Padre es un placer darles el reino.
! •••••> LUCAS, 12:32, LBD

^ "• V * rt . *1f'
»
los nombres de Dios que más significan
çy
i'%
s nombres de Dios que representan las maneras en que
quiero conocer mejor a Dios son:
-Escribe una oración diciéndole a Dios cómo te sientes res-
pecto a Él y por qué quieres conocerlo mejor.
i' %
ù, t

n

mm
+ no "lo»
AXTB DL". QIE VAVAMQS l*\ POCO MÁS LEJOS, pongamos
.ilgo en orden: Todo el mundo comete errores. Nadie es perfecto.
Todos somos capaces de hacer algo malo.
¡Vaya! Es sabido.
Dije csro porque no quiero que mires a otras personas
pienses que están muy bien y tú no. Cuando haces eso, pones
expectativas demasiado alias en ti mismo.
Esic libro no es acerca de tratar de cumplir cierta norma, I'.s
acerca de dejar que Dios se convierta en tu norma. No es acerca
de tratar de ser perfecto. Hs acerca de rendirle tu vicia a Dios
dejar que FJ te perfeccione. No es acerca de encontrar formas de
evitar el juicio de Dios y luego semine fracasado si no lo haces
todo bien con exactitud, ts acerca de buscar la manera de expe-
rimental" el amor la gracia de Dios. Ls acerca de ser alguien que
110 eres. Es acerca de llegar a ser lo que eres en realidad. Pero a íin
de ver hechas realidad esas cosas, tienes que ser del todo sincero
contigo mismo y con Dios aceren de lo que eres en el momento.

SI poder del joven, que ora
Como joven, sabes que tu vida apenas comienza, Y quieres
vivir una vida de éxito. Quieres saber cómo resulta mejor la vida
para vivir de esa manera y tener la mejor
vida posible. Sin embargo, debido a que
todo el mundo comete errores, esto significa
que tú quizá ya has cometido errores y que
los cometerás de nuevo en el futuro.
A menudo, cuando hacemos cosas malas,
sabemos lo que estamos haciendo. Sabe-
mos si hemos mentido o desobedecido una
ley. Pero algunas veces cometemos errores
sin saberlo. No nos damos cuenta de que
lo que hacemos es malo a los ojos de Dios
porque no sabemos suficiente de los
caminos de Dios. (En el capítulo 4 verás
más al respecto de esto). Ya sea que sepa-
mos o no que lo que estamos haciendo es
malo, sigue siendo pecado. El pecado es un antiguo término de
tiro con arco que significa no dar en el blanco. Si no damos en el
blanco en la vida, no alcanzamos la marca que Dios tiene para
nosotros. Y entonces no podemos alcanzar todas las cosas bue-
nas que Él ha planeado para nuestro futuro.
El pecado nos destruye. Quizá pensemos que podemos no
vivir como Dios quiere y quedar sin castigo, pero el pecado
siempre trae destrucción a la vida. Lo bueno es que Dios nos
ama tanto que nos ha proporcionado la manera de escapar de la
destrucción que trae el pecado. Se llama confesión.
La confesión es algo que puedes hacer en cualquier momento
que vayas a Dios. Es contarle a Dios loque hiciste y decirle que lo
sientes. No le estarás contando algo que ya Él no sepa. ¡Ya lo
sabe! Él quiere saber que tú lo sabes. Y que tienes un corazón
dispuesto a cambiar de actitud.
Tener un cambio de actitudes lo que se llama arrepentimiento. A
fin de hacer estas dos cosas —confesión y arrepentimiento—,
Lo más difícil
de la oración es:
• Cuando no veo una
respuesta Inmediata
• Cuando no sí por qué
voy a orar
. Cuando he hecho
algo mato
• Cuando oourre
algo trágico
• Cuando Dios me muestra
algo sobre mi Vida
(16-19 años de edad)

Señor, ayúdame a liberarme ée los érr<vr*>s de i pasado
tienes que analizar bien tu vida. Tienes que ser muy valiente y
decir: «Señor, muéstrame lo que está- en mi mente, corazón y
vida que no debe estar allí. Muéstrame cómo no estoy dando en
el blanco. Ayúdame a ver la verdad sobre mí mismo. Ayúdame a
cambiar». • •
Hace falta valor para decir una oración como esa, Algunas
veces no queremos que Dios ponga al descubierto nuestro cora-
zón por miedo a lo que pueda revelar de
su interior. Sin embargo, podemos pedirle
el valor para hacerlo. A fín de recibir
todo lo que Dios tiene para ti, debes
estar dispuesto a tener un historial sin
mancha con El. Tienes que invitarlo a
dejar al descubierto cualquier pecado en
tu vida y permitirle que cree un corazón
limpio en ti.
Dios no quiere que andes por la vida
sintiéndote culpable. Quiere que saques el
pecado a la superficie ante Él a fin de que
te puedas librar de ese pecado. Llevar conti-
go la culpa de errores del pasado limitará lo
que Dios quiere hacer en tu vida. Y te hará
sentirte mal contigo mismo. Los sentimientos
de culpa no son agradables. Y uno no se
siente bien. No dejes que sean parte de tu
vida. No vale la pena. Si quieres ser libre de culpa de todos los errores
del pasado, disponte a hacer estas dos cosas:
]. Confiesa a Dios cualquier pecado de pensamiento o acción que
sepas que cometiste o que Él te muestre cuando se lo pides.
Arrepentirte de lo que acabas de confesar.
Oré y Dios
, respondió ..
Estaba saliendo con un
chico a escondidas de mis
padres. Le pedí a Dios
que me ayudara a tomar
buenas decisiones;.
El chico vino a verme
y dijo que todo había
terminado. No estaba
herida ni nada
por el estilo.
Soló sabía que Dios
lo había hecho. V ahora
he renunciado
a salir con muchachos.
(13 años de edad}
- •• - ; • " ' " ' r?
No creas que porque no eres un asesino en serie ni nunca
has robado un banco que no tienes algún pecado que confesar.
23

El potter del joven que ora
No creas que porque has andado con el Señor por varios años y
vas a la iglesia todos los domingos que no tienes nada de qué
arrepentirte. El pecado no tiene que ser manifiesto ni obvio para
ser pecado.
Por ejemplo, ¿alguna vez has dudado que Dios pueda hacer
lo que promete en su Palabra? La duda es pecado.
¿Alguna vez le has contado algo a alguien sobre otra persona
que no es necesariamente un elogio? El chisme es pecado.
¿Alguna vez evitaste a alguien porque pensabas que podía
pedirte algo que tú no querías dar? El egoísmo es pecado.
Por mucho que te esfuerces, no podrás siem-
pre evitar el pecado. Es por eso que la con-
fesión es crucial. Cuando no confesamos
nuestros pecados, faltas o errores, estos nos
separan de Dios. Y no obtenemos respues-
tas a nuestras oraciones. La Biblia dice: «Son
las iniquidades de ustedes las que los
separan de su Dios. Son estos pecados los
que lo llevan a ocultar su rostro para no escuchar» (Isaías 59:2).
Es un pensamiento temible. Imagina a Dios poniéndose los
dedos en los oídos y diciendo: «La, la, la, la, la, la» una y otra vez
y bien alto cuando tú oras.
Cuando no le confesamos nuestros pecados, terminamos
tratando de ocultarnos de Dios, tal y como lo hicieron Adán y
Eva en el huerto del Edén. Sentimos como que no podemos
darle la cara. Sin embargo, el problema con intentar ocultarnos
de Dios es que es imposible. La Biblia dice que Dios sabe todo
lo que hacemos. Incluso las cosas que decimos y pensamos en
secreto. «No hay nada encubierto que no llegue a revelarse, ni
nada escondido que no llegue a conocerse. Así que todo lo que
ustedes han dicho en la oscuridad se dará a conocer a plena luz,
y lo que han susurrado a puerta cerrada se proclamará desde las
azoteas» (Lucas 12:2-3).
Mi oración a Dios
Señor, no sé muy bien cómo
orar, pero necesito fortaleza
para resistir la tentación.
(18 años de edad)

Señor, ayúdame a liberarme ée los érr<vr*>s de i pasado
La Biblia también dice: «Ninguna cosa creada escapa a la
vista de Dios. Todo está al descubierto, expuesto a los ojos de
aquel a quien hemos de rendir cuentas» (Hebreos 4:13).
Si todos nosotros tendremos que rendir cuentas de nuestras
acciones y pensamientos, mientras más rápido estemos a bien
con Dios, mejor. Es más, mientras más rápido lidiemos con los
pecados que podemos ver, más rápido Dios puede revelarnos los
que no podemos ver. Y solo Dios sabe cuánto de eso hay en cada
uno de nosotros.
Siempre hay una consecuencia del pecado. El rey David lo
describió mejor cuando escribió de su propia confesión de pecado:
«Por causa de tu indignación no hay nada sano en mi cuerpo;
por causa de mi pecado mis huesos no hallan descanso. Mis
maldades me abruman, son una carga demasiado pesada» (Sal-
mo 38:3-4).
¿Alguna vez te has sentido de esa manera por algo que has
hecho? Yo sí. Sentía como una pesadez en corazón y en la cabeza
que me quitaba toda mi energía y mi vida. Sin duda alguna, el
pecado no me hace sentir bien conmigo misma.
Recuerdo que una vez tuve un resentimiento hacia una
persona porque las palabras que había
dicho me habían herido de manera pro-
funda. Mientras me aferraba a la herida y
el resentimiento, me sentía físicamente
enferma. No quería confesar esos senti-
mientos porque pensaba que estaban jus-
tificados y que la otra persona era la que
estaba equivocada. Sin embargo, al final
me di cuenta que todo pecado es pecado,
así que le confesé mi resentimiento a Dios.
En el momento que hice eso, la sensación
de estar enfermo abandonó mi cuerpo.
Nada es más pesado que el pecado.
No nos damos cuenta de cuán pesado
es hasta el día en que sentimos que su
"eo en
la oración
porque:
•Antes he tenido respues-
tas a mis oraciones
• He visto que cambia
«na situación
• He experimentado
milagros
•Me ha ayudado a través
de los tiempos difíciles
• Hace que lo imposible
parezca posible
(16-19 años de edad)
23

El poUer ele! joven <gue ora
Pienso en
Dios como:
• Un poderoso
Gobernador que
controla todas
las situaciones
• Un Juez que decide
si soy digno de tener
respuesta a mi oración
• Un Oyente con el que
puedo hablar y en el
que puedo confiar
• El único que me
conoce de veras
• Un Padre que me
ama de manera
incondicional
(16-19 afios de ^dad)
peso nos aplasta el alma. No damos cuenta de
cuán destructivo es hasta que nos hacemos
pedazos contra el muro que se ha levantado
entre nosotros y Dios debido a esto. Por eso
es mejor confesar cada pecado en cuanto lo
detectemos, para poder tener nuestros cora-
zones limpios de inmediato.
La confesión es más que una simple dis-
culpa. Cualquiera puede hacer esb. Todos
conocemos personas que son buenas para
disculparse. Son buenas en esto porque lo
practican mucho. Dicen «Lo siento» muchas
veces, pero nunca cambian sus costumbres.
Y sus confesiones no significan nada. La
verdadera confesión significa reconocer ante
Dios con lujo de detalles lo que has hecho y
luego arrepentirte por completo.
Una cosa es reconocer que has hecho algo malo; otra es
estar tan triste por lo que has hecho que estás decidido a no
hacerlo jamás de nuevo. Eso es arrepentimiento.
La confesión significa reconocer que hemos actuado mal y
admitir nuestro pecado. El arrepentimiento significa que lamen-
tamos nuestro pecado a tal punto de dolor, que nos volvemos y
nos alejamos del pecado.
El arrepentimiento por algo no necesariamente significa que
nunca haremos eso de nuevo. Significa que no intentaremos
hacerlo de nuevo. Por lo tanto, si descubres que has confesado el
mismo pecado otra vez después de una reciente confesión y
arrepentimiento, hazlo. No dejes que el enemigo te cargue con
la culpa y te venga encima diciéndote que has fallado. Confiesa
y arrepiéntete cuantas veces sea necesario para quitártelo de
encima y ver la victoria en la batalla sobre este problema. No

Señor, ayúdame a liberarme ée los érr<vr*>s de i pasado
creas que Dios no te perdona otra vez por la misma cosa que acabas
de confesar la semana pasada. Dios te perdona cada vez que le
confiesas tu pecado y te arrepientes por completo.
Pídele a Dios cada día que te muestre dónde tu corazón no
es limpio y recto ante Él. No dejes1 que nada te separe de todo lo
que Él tiene para ti.
EMC!» á© : ^Wftto - - - : * ; ; "
Imagina que participas en una carrera y estás tratando de
llegar a la meta y ganar el premio. Sin embargo, por mucho que
te esfuerzas, nunca logras la línea de meta debido a qué hay una
pesada carga atada alrededor de tus piernas. Luchas por arras-
trarla, pero te hace ir despacio y te agotas tanto que quieres darte
por vencido. No se te ocurre que es algo que no tienes que car-
gar, y que no puedes terminar la carrera mientrás no te liberes de
ella. Así sucede con los recuerdos malos de pasados fracasos que
llevamos a cuesta.
Muchos jóvenes son duros con ellos mismos por los fracasos
del pasado. O lo que perciben como fracasos del pasado. Pueden
llegar a estar tan desalentados por eso que sienten deseos de darse
por vencidos y salir de una vez de la carrera. Si alguna vez has
sentido algo similar, recuerda que Dios quiere eliminar esos
recuerdos malos a fin de que no tengas que cargarlos de nuevo.
(Si es un recuerdo de algo que te hizo alguien, hablaremos más
de eso en el capítulo siguiente).
Lo mismo si es algo que pasó hace mucho tiempo o tan recien-
temente como ayer, el pasado puede impedirte avanzar hacia
todo lo que Dios tiene para ti. Es por eso que quiere liberarte de
eso. Y no solo eso, sino que quiere redimir y restaurar lo que se
ha perdido o destruido en tu pasado y hacer que cuente para
algo importante en tu vida ahora.
Cuando recibes a Jesús, te conviertes en una nueva creación.
Él hace nuevas todas las cosas en tu vida. Dios quiere que
23

El poüer He! joven .«pie ora
olvides lo que queda atrás y te esfuerces por alcanzar lo que está
delante (Filipenses 3:13). El te ayudará a hacerlo. Uno de los
grandes misterios del Señor es cómo puede tomar los horribles,
trágicos, dolorosos, devastadores y penosos recuerdos y expe-
riencias de nuestras vidas y no solo sanarlos, sino usarlos para
bien. No es que Él haga que no puedas recordarlos, sino que te
sanará tan a fondo de sus efectos que ya no pensarás en ellos con
dolor. Te dará una nueva vida que disfrutarás tanto que no
desearás regresar otra vez en tu mente a la antigua.
Dios no quiere borrar por completo los recuerdos del pasado
porque quiere usar esa parte de tu vida para la obra que te ha lla-
mado a hacer, Él puede tomar lo peor de tu pasado y hacer que
sea la mayor bendición en el futuro. Te usará para dar esperanza
a otras personas que han atravesado una situación similar. Él
quiere que leas tu pasado como un libro de historia, no como
una profecía de tu futuro.
Dile a Dios que quieres permanecer en la carrera. Dile que
quieres correr de tal manera que logres obtener el premio
(1 Corintios 9:24).
*M \ >» Vi-' |ir | í„ .„ ,
Señor, ya sé que conoces los secretos de mi corazón (Salmo
44:21). Revélame algo que no vea. Perdóname por los
pensamientos que he tenido, o las palabras que he dicho,
o las cosas que he hecho que no te son agradables. Especí-
ficamente te confieso (nombra cualquier cosa que hayas
hecho que sabes que no le agrada a Dios). Lo confieso
como pecado y me arrepiento. Ayúdame a hacer los
cambios que sean necesarios.
Te ruego que me liberes de mi pasado. Ayúdame a dejar
cualquier recuerdo de mi pasado que me impida avanzar
hacia todo lo que tienes para mí. Específicamente, te pido
que me liberes de (nombra cualquier recuerdo doloroso o

Señor, ayúdame a liberarme de los e crores del pasado
malo que tengas). Todo lo que me han hecho, o lo que
yo he hecho, que me cause dolor, lo rindo a ti. Gracias
porque tú haces nuevas todas las cosas, y me haces nuevo
a mí en todo (Apocalipsis 2" --)• Libérame del pasado a
fin de que pueda marcharme de él y entrar en el futuro
que tienes para mí. Te lo pido en el nombre de Jesús.
•-PODER •
Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel
y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda
maldad.
1 JUAN 1:9
Amados, si nuestro corazón no nos reprende,
confianza tenemos en Dios; y cualquiera cosa
que pidiéremos la recibiremos de él, porque guar-
damos sus mandamientos, y hacemos las cosas
que son agradables delante de él.
1 JUAN 3:21-22, RV-60
Si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las
cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas
nuevas.
2 CORINTIOS 5:17, RV-60
35

^„.iíí
mejores razones para confesar tus pecados a Dios y arre-
pentirte?
O
. ¿Gómo te sientes después que confiesas tus pecados a Dios
y te arrepientes?
-Escribe una oración mencionándole a Dios cualquier momen-
to en que, sentiste que te equivocaste en tu vida. Dile que
quieres ser libre del tormento de cualquier error del pasado.
Si te resuleas difícil hablar con Dios sobre estas cosas, pídele
que te ayude a comunicarte con Él.

jm
AUN CUANDO MI MADRE ERA ABUSIVA durante ral crecimiento,
mi padre no lo era. Era amable. Cuando me convertí en cristia-
na, perdonar a mi madre era lo lógico, y eso es lo que hice por-
que quería ser libre del pasado. No me di cuenta hasta años más
rarde que ella no era la única a la que tenía que perdonar.
Un día estaba conversando con una amiga que era una cre-
veiue muv consagrada y le dije que me parecía que mi vida 110
iba a ninguna parre y que me sentía muy Irusrracla por eso. Me
comenió que pensaba que era porque necesitaba perdonar a mi
papá. Le respondí que estaba equivocada en cuanto a eso porque
mi papá era el padre luicrio.
•Pregúntaselo a Dios», me dijo.
Más tarde en ese día le piegunté a Dios: «Señor, ¿hay algo
que 110 le he perdonado a mi papá?».
Esperaba que Dios me asegurara que no tenía nada tic eso
en mi cora/ón. Sin embargo, de buenas a primeras me di cuenta
que en lo profundo sentía que mi papá nunca hizo por mí lo que
tenía que hacer. Nunca me rescató de la locura de mi madre.

El poder dei joven que ora
Nunca abrió el armario a fin de que pudiera salir. No me daba
cuenta de lo mucho que lo culpaba por permitir que mi madre,
quien sabía que tenía una enfermedad mental grave, me tratara
con tal crueldad.
Cuando perdoné a mi papá ese día, al final sentí una sensación
de paz como nunca antes. Y después de eso hubo un verdadero
progreso en mi vida. Podía sentir que mi vida se movía en una
buena dirección. Podía sentir que Dios me guiaba más que nunca.
Cuando no perdonamos, esto nos impide
avanzar en nuestras vidas.
Casi siempre sabemos cuando no hemos
perdonado a alguien. Lo sentimos en el corazón.
No queremos perdonar a esa persona por-
que nos hizo mucho daño y queremos que
lo pague de alguna manera. Y eso termina
en hacernos desdichados.
Si te das cuenta de que no has perdo-
nado a alguien por algo, confiésalo a Dios.
Y recuerda que perdonar a otro no le da la razón, pero te libera a ti.
En otras palabras, cuando perdonas a una persona, no estás jus-
tificando lo que hizo. No estás diciendo que lo que hicieron no
fue malo ni dañino. Estás diciendo que quieres olvidarlo y
seguir adelante con tu vida. Si no lo haces, terminarás como yo,
atascado y sintiendo que no vas a ninguna parte.
Algunas veces podemos estar guardándole rencor a alguien
sin siquiera darnos cuenta. Pensamos que estamos perdonando,
pero no es así en realidad. A fin de asegurarte de que no te suceda,
necesitas hacer lo mismo que yo y pedirle a Dios que te muestre
la verdad acerca de ti mismo. Dile: «Señor, muéstrame si hay
alguien a quien no he perdonado». Entonces, cuando te venga a
la mente una persona que te ha dicho algo malo o te ha hecho
algún mal, confiésalo al Señor y pídele que te ayude a liberarte
de eso. Te sentirás muy bien cuando te quites esa pesada carga
de falta de perdón de tus hombros.
Oré y Dio®
respondió
Mi relación con
mi madre estaba
al borde de una crisis,
así que oré y
ahora es fabulosa.
(16 años de edad)
38

Señor» ayúdame a perdón»! - otros
Sé que la palabra «odio» es muy füerte y que detestamos usar
la palabra «odio» a la ligera. Y ciertamente detestamos pensar
que quizá sintamos odio por otra persona. Sin embargo, eso no
es perdonar, es la raíz del odio. Cuando abrigamos pensamien-
tos de falta de perdón, dirigimos el odio a nuestro interior. Y eso
puede enfermarnos. Sin lugar a dudas, nos hace poco atractivos
para otros.
Jesús tenía opiniones tan contunden-
tes acerca de esto que dijo: «Todo el que odia
a su hermano es un asesino, y ustedes
saben que en ningún asesino permanece
la vida eterna» (1 Juan '^-lü). También dijo:
«Cuando estén orando, si tienen algo con-
tra alguien, perdónenlo, para que también
su Padre que está en el cielo les perdone
Lo más difícil
de la oración es:
•Cuando me parece
que mis oraciones
no pasan del techo
* Cuando no puedo
escuchar a Dios
a ustedes sus pecados» (Marcos Xl'is
Ahora, aclaremos bien esto. Jesús está
diciendo que si no perdonamos, se nos
considera asesinos, sin esperanza eterna
alguna, que no podemos esperar que
Dios nos perdone hasta que hayamos per-
donado a otros. Yo diría que si tenemos
que decidir entre perdonar y no perdo-
nar, el perdón parece la mejor decisión.
Cuando decidimos no perdonar,
terminamos andando en tinieblas
(1 Juan 2S 11, RV-60). No podemos ver con claridad y por eso
tropezamos en confusión. Esto descarría nuestros juicios y
cometemos errores. Llegamos a debilitarnos, enfermarnos y amar-
garnos. Otras personas notan todo esto porque la falta de perdón
se manifiesta en el rostro, en las palabras y en las acciones. Lo
ven incluso si no logran identificar con exactitud lo que es, y no
se sienten cómodos a nuestro alrededor.
mi corazón
* Cuando no sé
cómo orar por algo
• Cuando oro en voz
alta delante de otros
• Cuando no me
parece que me
conecto con Dios
(13.-15 años de edsd)

;¿'> M&er ¿el ¿ove!» ora
Es muy fácil no perdonar a nuestros familiares. Eso se debe a
que están más con nosotros, nos conocen mejor y pueden herirnos
de manera más profunda. Pero por esas mismas razones, la falta
de perdón hacia uno de ellos traerá la mayor devastación a nues-
tras vidas. Es por eso que el perdón debe comenzar en el hogar.
Ante todo, es muy importante asegurarte que has perdonado
a tu mamá y a tu papá. La Biblia es clara como el agua en esto. El
primero de los Diez Mandamientos dice: «Honra a tu padre y a
tu madre, para que disfrutes de una larga
vida en la tierra que te da el SEÑOR tu
Dios» (Éxodo i No honrar a tu padre
y a tu madre te hará un desdichado y acor-
tará tu vida. Y no los puedes honrar por
completo si no los has perdonado.
Esto es cierto no importa cuál sea la
situación de tu familia. Es cierto ya sea que
tengas padres biológicos o padres adopti-
vos. Si uno de tus padres, o ambos, murie-
ron, se separaron o te abandonaron, nece-
sitas perdonarlos de manera especial por
haberlo hecho. Conozco una muchacha
que ha perdonado a su mamá y su papá
por divorciarse. Conozco a otra que ha
perdonado a su madre porque esta viajaba muchísimo por su tra-
bajo y la dejaba con su abuela. La hija sabía que su madre la amaba,
pero de todos modos tenía que perdonarla por esos tiempos en
que se sentía abandonada por la ausencia de su madre.
Conozco a un muchacho que tuvo que perdonar a su papá
por abandonar a su mamá y sus hermanos y no regresar. Se sentía
abandonado y pensaba que su padre no lo amaba lo suficiente
para quedarse. Cuando el padre trató más tarde de reconciliarse
con su hijo, este no quería tener nada que ver con su papá. Car-
gaba esa herida y no quería curársela. No fue hasta años después
Mi oración
a Dios
Señor, esta es la primera
vez que te pido ayuda.
Caí en una tentación
y necesito alguien
en quien confiar.
Si no tengo tu ayuda,
sé que caeré de nuevo
y. no quiero caer.
Te ruego que me ayudes
a ser fuerte hoy.
(17 años de edad)

Señor, ayüéajfte a perAoáír a otros
que el hijo pudo perdonar al papá, y hoy están muy unidos. Pero
se malgastaron muchos años por cargar la falta del perdón.
Conozco a otro muchacho que necesitaba perdonar a su
madre las palabras duras y de crítica que le decía casi todos los
días. Sin embargo, nunca la perdonó y fue desdichado toda su
vida por eso. Mi mamá también me hablaba con crueldad. A
menudo me decía que yo era. una fracasada despreciable y que
nunca llegaría a nada. No fue hasta que la perdoné por todas
esas palabras que pude dejar de pensar que era la fracasada que
predijo ella y avanzar al éxito que tenía Dios para mí.
Cuando tomé la decisión de perdonar a
mi madre, lo hice porque quería obedecer
a Dios. Sin embargo, perdonarla una vez
no significaba que nunca tendría que preo-
cuparme de perdonarla de nuevo. Había una
capa tras otra de falta de perdón que había
construido en mí durante años, y descu-
brí que tenía que perdonarla cada vez
que un mal recuerdo de lo que me hizo o
dijo me venía a la mente. A la larga, llegué
a ser libre de todo.
Solo porque confieses un día que no
has perdonado a alguien, no significa que no tengas falta de per-
dón en ti al día siguiente por otra cosa. Es por eso que el perdón
es una decisión que debes tomar todos los días. Decides perdo-
nar ya sea que tengas deseos o no. Si esperas que te lleguen pri-
mero emociones positivas hacia esa persona, puedes quedarte
esperando toda la vida. Tu responsabilidad es confesarle a Dios
cualquier falta de perdón y pedirle que te ayude a perdonar por
completo y a seguir adelante con tu vida.
arma ^i^mt^ps^ «¿n^^ < •• v . •
• • v yuc^es pe/donar
El perdón nunca es fácil, pero a veces el perdón puede parecer
imposible debido al devastador dolor que has sufrido. Si piensas
Mis principales
motivos de
oración son:
• Pedirle perdón a Dios
•Asuntos políticos
• Que Dios bendiga
a mi escuela
• Mis problemas diarios
• Mis relaciones
(13-tS años de

poder del joven «fue ora
en alguien al que te es difícil perdonar, pídele a Dios que te ayude.
Si alguien te avergonzó, rechazó, fue rudo contigo o dijo algo malo
de ti en tu cara o a tus espaldas, pídele a Dios que te dé un cora-
zón perdonador hacia esa persona. Lo hará aun cuando parezca
imposible. En realidad, el perdón es la mejor venganza porque
no solo te libera de la persona que perdonas, sino que te libera
para avanzar hacia todas las buenas cosas que Dios tiene para ti.
Recuerda que perdonar a alguien no depende de que esa
persona reconozca su culpabilidad y pida disculpas. Si fuera así,
la mayoría de nosotros nunca podría perdonar a nadie. Perdo-
namos no importa lo que la otra persona haga.
Algunas veces tenemos que perdonarnos a nosotros mismos
por las cosas que hemos hecho. Algunas veces necesitamos per-
donar a Dios cuando han pasado ciertas cosas y le hemos echado
la culpa a Él. Pídele a Dios que te muestre si tienes alguna de
estas; cosas en tu corazón. No permitas que ningún tipo de falta
de perdón limite lo que Dios quiere hacer en tu vida.
Lou«»ñ¿fiiiificfiaa£iá - — — -
¡Cuatrocientas noventa veces! Esas son las veces que tenemos
que perdonar a una persona. Pedro le preguntó a Jesús: «Señor,
¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí?
¿Hasta siete?». Jesús le respondió: «No te digo hasta siete, sino
aun hasta setenta veces siete» (Mateo 18:21-22, RV-60).
Jesús quiere que perdones tantas veces como sea necesario.
Jesús narró una historia de un hombre al que le habían per-
donado una deuda inmensa que tenía con su amo. Sin embargo,
aquel hombre se dio la vuelta enseguida y mandó a su propio
siervo pobre a la cárcel por no pagarle una deuda pequeña.
Cuando el amo se enteró de esto, dijo: «Te perdoné toda aquella
deuda porque me lo suplicaste-. ¿No debías tú también haberte
compadecido de tu compañero, así como yo me compadecí de ti?».
42

Señor» ayúdame a perdón* a otros
El amo estaba tan enojado que e parece
mandó que torturaran al hombre hasta oro Inás cuando:
que pagara todo lo que debía. " Lucho contra una
Jesús dijo: «Así también mi Padre situación difícil
celestial los tratará a ustedes, a menos " ft o yo tenemos
que cada uno perdone de corazón a problemas de salud
su hermano» (Mateo 18:35 ). Esto es 'Nemito sabiduría
muy serio. A los que hemos aceptado
•Estoy triste o llorando
a Jesús se nos ha perdonado una deuda * apongo de tranquilidad
inmensa. No tenemos derecho a no ^ silencio
perdonar a otros. Dios dice: «Sean <iÍM <1« e<M)
bondadosos y compasivos unos con
otros, y perdónense mutuamente, así como Dios los perdonó a
ustedes en Cristo» (Efesios 4:32). Si no perdonamos, también
nuestro odio nos encarcelará y nuestra amargura nos torturará.
Todo lo que hacemos en la vida que dura para siempre gira
en torno a dos cosas: amar a Dios y amar a otros. Es muchísimo
más fácil amar a Dios que amar a otros, pero Dios lo ve del mismo
modo. Una de las cosas más lindas que podemos hacer es perdo-
nar. Es difícil perdonar a los que nos han herido, ofendido o
maltratado. Sin embargo, Dios quiere que amemos incluso a
nuestros enemigos. Y en el proceso de hacer eso, nos perfecciona
(Mateo 5:48).
Cuando perdonas a otros, le muestras a Dios lo mucho que
lo amas. Te abre el corazón y el intelecto y te libera para experi-
mentar el amor de Dios en una mayor medida. Te libera para
avanzar a todo lo que Dios tiene para ti.
Señor, ayúdame a comprender lo mucho que me has
perdonado a fin de que no vacile en perdonar a otros.
Ayúdame a perdonarme por las veces que he fallado. Y si
te he culpado por las cosas que he pasado en mi vida,
muéstramelo para que pueda reconocerlo ante ti.
43

E& pat®??-.^el- joven,.^«e ora
Ayúdame a orar por los que me han herido de modo
que mi corazón se suavice hacia ellos. Y si alguna persona
no me ha perdonado, muéstrame lo que puedo hacer
para ayudar a resolver este asunto entre nosotros. Te
ruego que suavices su corazón para que me perdone.
Señor, muéstrame si no he perdonado a mi madre o
a mi pádre por algo que hicieron o no hicieron. Ayúdame
a perdonar a cualquier miembro de mi familia o amigo
cada vez que necesite hacerlo. No quiero que nada se
interponga entre tú y yo, Señor. No quiero limitar con
mi falta de perdón lo que quieres hacer en mi vida. Te lo
pido en el nombre de Jesús.
i'/'l.F'Vf?11®!' -
íA PALABH.A ; • • • ; ••1 •':
No juzguen, y no se les juzgará. No condenen, y no
se les condenará. Perdonen, y se les perdonará.
'.'; •'"'• ' ' '"'LUCAS FI:37
El que aborrece a su hermano está en tinieblas, y
anda en tinieblas, y no sabe a dónde va, porque
las tinieblas le han cegado los ojos.
,,.7 . 7 o!.JUAN 2I11/RV-6O •"•>•'; •
Si perdonan a otros sus ofensas, también los per-
donará a ustedes su Padre celestial. Pero si no
perdonan a otros sus ofensas, tampoco su Padre
les perdonará a ustedes las suyas.
'' ' MATEÓ.fiÍ4~lS

Acribe una oración pidiéndole a Dios cjgt®'
alguien que no has perdonado. Si Dios te mue!fhS'á<
persona, pídele que te ayude a perdonarla por completó.
r Una de las maneras en que puedes perdonar con más facili-
dad a otros es orando por ellos. Escribe una oración por
alguien que necesites perdonar, no importa cuánto tiempo
haga que ocurrió la ofensa contra ti.
HÍ¡UWSj, • • i ..•'.•:. ••• I
'4
Eécribe una oración pidiéndole a Dios que te muestre si
hay alguien que no has perdonado por algo. Pídele que te
muestre como hacer bien las cosas entre tanto.

RUANDO ESTABA EN LA ESCUELA SUPERIOR EN CALIFORNIA,
"tuve que tomar una clase reglamentaria de natación por un
semestre. Lo detestaba porque era a las 7-.w cada mañana y que-
daba con el pelo húmedo y arruinado por el resto del día. Tenía
que nadar todos los días, lloviera o hubiera sol, y podía haber
mucho frío en esas nubladas mañanas de invierno de California.
La única manera en que podía excusarme de la natación era si
ípe estaba muriendo, y aun así tenía que presentar un certificado
médico.
A pesar de la desdicha de esa experiencia, me encantaba la
natación y llegué a ser buena en ella. Aprendí que si estaba en
Vina adecuada posición y hacía bien todos los movimientos,
Como me enseñaba mi instructor de natación, podía avanzar
fon rapidez en el agua. Se volvió una suave maniobra con la que
graba llegar con rapidez al otro lado de la piscina gigante. Y
da me hacía vacilar. iBfcssiqa^
dadpies':a:ambü5:W

El poájftr Éel joven q;ue ora
El mismo principio es cierto para ti y para mí. Si queremos
navegar con éxito por las aguas de la vida, debemos situarnos
como es debido y aprender los movimientos apropiados. Si no
lo hacemos, cuando lleguen las situaciones turbulentas, no
lograremos navegar a través de ellas. Terminaremos golpeándo-
nos y agotándonos solo para mantenernos a flote. Y nunca llega-
remos a ninguna parte. Sin embargo, cuando nos colocamos
bajo la dirección de Jesús y aprendemos a hacer lo que exige de
nosotros, hay un flujo del Espíritu Santo que nos lleva adonde-
quiera que necesitemos ir.
T^los los movimiento, ', '
La manera en que aprendemos lo que espera Dios de noso-
tros es leyendo su Palabra. No podemos comenzar a hacer los
movimientos adecuados si no sabemos cuáles son. Sin embargo,
eso es solo el comienzo. Podemos estudiar todo lo que deseemos
y aprender cada cosa que debemos hacer,
pero todavía tenemos qué hacerlo. El ins-
tructor de natación puede decirnos cómo
nadar, pero aun así tenemos que saltar al
agua en algún momento. Una cosa es hacer
una lista de lo que hay que hacer y lo que
hay que evitar; otra muy diferente es tener
un corazón que busca los caminos de Dios y
un alma que anhela andar por ellos. Una
cosa es leer sobre la vida; otra es vivirla.
La obediencia es algo que haces; tener
un corazón para obedecer a Dios y vivir en
sus caminos es algo por lo que hay que orar.
Es mucho más fácil descubrir lo que se espera
que hagamos que hacerlo. Es por eso que
necesitamos orar que Dios nos permita
ser lo bastante disciplinados para hacer lo
que tenemos que hacer.
Mis principales
motivos
de oración son:
• Por un corazón
por todo lo que
Dios ha hecho por mí
»Por la seguridad
y salvación
de mi escuela
• Por mis problemas y
preocupaciones diarias
• Que tenga el valor
para permanecer firme
• Que alabe a Dios cada
día por lo que El es
[16-19 años de edad)
48

Señor, -ayúé^me -a hacer lo «§t=.e es. bueno
Soy una persona disciplinada, pero no siempre fui así. Hubo
un tiempo en mi vida cuando era todo lo opuesto. Debido a que
estaba siempre deprimida, no podía pensar con claridad ni orga-
nizar bien mi vida. Es difícil hacer las
cosas que son buenas para uno cuando
no sabemos si valemos la pena. Es difí-
cil seguir adelante en la vida cuando
uno necesita toda las energías solo para
sobrevivir cada día.
Cuando comencé a aprender a orar
por todo, le pedí a Dios que me ayudara
a ser suficientemente disciplinada para
leer su Palabra y orar todos los días. Le
pedí que me ayudara a comprender
cómo quería que viviera y después que
me ayudara a vivir de esa forma. Dios
me respondió esas oraciones. Ahora
soy mucho más disciplinada y organi-
zada. Y soy obediente a Dios más allá de lo que sé que podría
hacer sin su ayuda. Esto no pasó de la noche a la mañana. Ocu-
rrió poco a poco mientras oraba por eso y Dios respondía mis
oraciones.
No te desanimes si no lo haces bien todo. No hay quién
pueda hacerlo. Es por eso que necesitamos al Señor. El apren-
dizaje para vivir a la manera de Dios lleva toda una vida. Siem-
pre hay cosas nuevas que aprender, y nos metemos en proble-
mas cuando creemos que sabemos lo que hay que hacer y deja-
mos de preguntarle a Dios si eso es cierto. Nunca podemos
enorgullecemos por la forma tan perfecta en que obedecemos
a Dios, porque Él nos está enseñando sin cesar acerca de sus
caminos. Y El nos ayudará a vivirlos si se lo pedimos. Todo lo
que tienes que decir es: «Señor, ayúdame a obedecerte de la
manera que quieres a fin de que pueda llegar a ser la persona
para la que me creaste». No debemos cansarnos «de hacer el
' 49
Creo en la
oración porgue:
• Sé que da resultados
• Tengo fe en que Dios
me escucha
• He visto respondidas
las oraciones de otros
• Es la manera de
comunicarnos con Dios
• La Biblia dice
que oremos
(16-19 año$ de edad

El poder dei joven que ora
bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos
por vencidos» (Gálatas ti^).
Las cosas «fue Dios nos. •
ni HUI wm MTifflnffll jyyfi^ümalmentffl,. - — -
Además de las reglas que Dios quiere que obedezca todo el
mundo, hay cosas específicas que nos pide a cada uno de noso-
tros que hagamos a fin de que avancemos hacia el propósito que
tiene con nuestras vidas. Este es diferente para cada persona. Por
ejemplo, Dios quizá te instruya a que aprendas una cierta des-
treza que no les pedirá a tus amigos que adquieran. Es posible
que te pida que tomes cierta clase, qu<2 trabajes en cierto empleo,
que dejes cierta actividad, que te unas a determinada iglesia o
que cambies la forma en que siempre has hecho algo. Lo que sea
que te pida que hagas, recuerda que Él hace esto para bendecirte
más. Es importante orar: «Señor, muéstrame lo que debo
hacer». Si no lo pides, no lo sabrás.
Macea cosas fue prefiere»,.,no Jiacer
Todos tenemos que hacer cosas que no queremos hacer.
Hasta en las más maravillosas clases o empleos, todavía hay cosas
que no disfrutamos. Sin embargo, parte de tener éxito en la vida
es hacer cosas aun cuando preferiríamos no hacerlas. Cuando
hacemos cosas que no nos gustan solo por-
oro por otros qLie sabemos que tenemos que hacerlas, se
cuando: forja el carácter en nosotros. Nos discipli-
• Tienen problemas namos, Nos convierten en un líder en el
con su familia que Dios puede confiar. Siempre hay un
• Están en apuros precio que pagar cuando solo hacemos las
. No son salvos cosas que nos gusta hacer y no hacemos las
• Necesitan aliento cosas que necesitamos hacer.
• Están sufriendo Tienes que sacrificarte por las cosas
(13-15 años de edad) buenas que quieres. Siempre que te sea
50

Señor, ayúdame a hacer loi'-:-ifue es bueno
difícil hacer lo que sabes que tienes que hacer, pídele al Espíritu
Santo que te ayude. Desde luego, aun así tienes que ser el que dé
el primer paso, no importa lo mucho que te pese darlo. Pero cuando
lo hagas, el Espíritu Santo te ayudará a lo largo del camino.
¿«t buenas rasopaaLpag»- otasdacas a.Sha9— -
Existen muchas razones para obedecer
a Dios, pero la mejor razón es que Él lo 0ró y Qi°3
dijo. Si no hubiera otra razón, esa cierta- respondió
mente bastaría. ¿Alguna vez le has pre- Oré que pudiera dejar
guntado a tus padres por qué tienes que de ser adicto a la Internet,
hacer algo y te dicen: «Porque yo lo digo»? Poco después, descubrí
Lo que eso significa es que quieren que que ya no deseaba entrar
hagas lo que te piden y confíes en que ®" 'a Internet; me parecía
saben lo que es mejor. Tratan de ense- aburrida. Tenía ganas
ñarte a ser obediente a lo que exigen de ti. ^ tmr ®' P'ano
Eso es lo que Dios quiere que tú hagas * cantar ®" adoración,
también. Más ,ard« m® <"
Existen muchas más razones para cuenta 1ue era una
obedecer a Dios que debes conocer, y mtmha .U.,rMW"-
he incluido diez buenas razones a conti- (13 anos de
nuación:
1. Cuando obedezco a Dios, Él escucha mis oraciones. «Si observo
iniquidad en mi corazón, el Señor no me escuchará. Pero
ciertamente Dios me ha oído; Él atendió a la voz de mi ora-
ción» (Salmo $6:18-1$, LBLA).
2. Cuando obedezco a Dios, tengo un mayor sentido de su presen-
cia en mi vida. «El que me ama, obedecerá mi palabra, y mi
Padre lo amará, y haremos nuestra vivienda en él» (Juan
3. Cuando obedezco a Dios, tengo más sabiduría. «Él provee de
sana sabiduría a los rectos; es escudo a los que caminan rec-
tamente» (Proverbios

El joven «me ora
4. Cuando obedezco a Dios, demuestro que soy su amigo. «Ustedes
son mis amigos si hacen lo que yo les mando» (Juan "i ;: *).
5» Cuando obedezco a Dios, vivo seguro. «Pongan en práctica
mis estatutos y observen mis preceptos, y habitarán seguros
en la tierra» (Levítico
6. Cuando obedezco a Dios, me vuelvo una persona más amorosa.
«El que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor
de Dios se ha perfeccionado» (1 Juan 2:5, RV-60).
7, Cuando obedezco a Dios, me ocurren cosas buenas. «Hoy les
doy a elegir entre la bendición y la maldición: bendición, si
obedecen los mandamientos que yo, el SEÑOR su Dios,
hoy les mando obedecer» (Deuteronomio 11:26 .27).
& Cuando obedezco a Dios, soy más dichoso. «¡Dichosos los que
son obedientes a la ley!» (Proverbios
Cuando obedezco a Dios, tengo paz. «Fíjate en el hombre
honrado y sin tacha: el futuro de ese hombre es la paz» (Salmo
147:37, DHH).
10. Cuando obedezco a Dios, viviré más tiempo. «Hijo mío, no te
olvides de mi enseñanza, y tu corazón guarde mis manda-
mientos, porque largura de días y años de vida y paz te aña-
dirán» (Proverbios 5:1 -2, LBLA).
Avanza hapia Xo Dios tiene para ti -
Dios tiene grandes planes para ti. Tiene cosas importantes
que quiere que hagas. Y Él tef está preparando para eso ahora
mismo. Sin embargo, tienes que dar los pasos de obediencia a
fin de llegar allí. Y tienes que confiar en que Él sabe lo que es
mejor y que no te hará daño en el proceso. Dios no ha puesto
reglas para hacerte un desdichado. Las reglas de Dios son para tu
beneficio. Cuando vivas por ellas, la vida va bien. Cuando no
vives por ellas, la vida se hace pedazos,

Señor, ayúdame a hacer loi'-:-ifue es bueno
Existe una concreta conexión entre .la
obediencia y el amor de Dios. Jesús dijo:
«¿Quién es el que me ama? El que hace
suyos mis mandamientos y los obedece.
Y al que me ama, mi Padre lo amará, y
yo también lo amaré y me manifestaré a
él» (Juan ¡4:'¿L). Eso significa que la
manera en que mostramos nuestro amor
por Dios es viviendo como El manda.
Y cuando no obedecemos a Dios, aun
cuando Dios nos ama, no sentiremos su amor como lo necesitamos.
Existe también una conexión directa entre la obediencia y la
respuesta a tus oraciones (I Juan 'M22). Si te sientes triste porque
no ves las respuestas a tus oraciones, pregúntale a Dios si se debe
a la desobediencia. Dile: «Señor, ¿existe alguna esfera en mi vida
donde no te estoy obedeciendo?». No sigas diciéndole a Dios lo
que tú quieres sin preguntarle lo que Él quiere.
Dios usó aquellas clases de natación en mi vida de una manera
que no me hubiera imaginado. Recordar lo que me había ense-
ñado mi instructor cuando estaba aprendiendo a nadar, y lo que
había practicado con diligencia por años, me salvó la vida. Un
día estaba en la playa con una amiga y nadábamos en el mar
cuando una corriente fuerte nos sacó mar afuera. No podíamos
regresar a la costa por nuestra cuenta, pero logramos nadar con la
marea y mantenernos a flote hasta que nos rescataron los salvavidas.
Si no hubiera obedecido a mi instructor de natación años antes, ni
hubiera aprendido todos los movimientos adecuados, rae
espanta pensar en lo podría haber pasado. La obediencia a Dios
te salvará la vida en más de una manera.
Uno nunca sabe cuándo se presentará un momento especial
para el cual nos ha preparado Dios. Y no es solo un momento;
Él tiene muchos momentos sucesivos preparados para tu vida.
Dios te está preparando cada día para algo fabuloso. Algo impor-
tante. Sin embargo, tienes que estar atento a tu Instructor. «El
Mi oración a Dios
Señor, dame fuerza
para mantenerme firme
por ti, aun si otros
se burlan de mf.
Dame las agallas
para permanecer
firme, aun euando
parezca Imposible.
{13 ¡ños de edadj

El poéer <dei joven que ora
que compite como atleta, no gana el premio si no compite de
acuerdo con las reglas» (2 Timoteo 2:5, LBLA). Tú no podrás
nadar bien en la corriente en esos momentos si no haces todos
los movimientos adecuados ahora. Pero si aprendes a hacer los
movimientos apropiados, estarás preparado para esos momentos
especiales y para cualquiera de las aguas profundas en que te
encuentres.
Señor, tu Palabra dice que los que amamos tu ley ten-
dremos gran paz y nada nos hará tropezar (Salmo
1U:1#S, LBLA). Amo tu ley porque sé que es buena y es
para mi bien. Ayúdame a obedecerte de cualquier
manera a fin de que no tropiece y caiga. Si hay pasos de
obediencia que necesito dar, ábreme los ojos para ver la
verdad y ayúdame a dar esos pasos. Sé que no puedo
hacer bien todas las cosas sin tu ayuda, por eso te pido
que me ayudes a vivir en obediencia a tus caminos (Salmo
119:10).
Tu Palabra dice que «si decimos que no tenemos
pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad
no está en nosotros» (1 Juan 1:8, RV-60). No quiero enga-
ñarme al no preguntarte dónde no estoy dando en el blanco
que tú has establecido para mi vida. Revélame cuándo
no estoy haciendo las cosas que debo hacer. Muéstrame
si estoy haciendo cosas que no debo hacer. Ayúdame a
escuchar tus instrucciones específicas. Háblame con
claridad a través de tu Palabra a fin de que comprenda lo
que es bueno y lo que es malo. No quiero entristecer al
Espíritu Santo en cualquier cosa que haga (Efesios 4:30,
LBLA). Ayúdame a aprender siempre de tus caminos
para que pueda vivir en la plenitud de tu presencia y
avanzar hacia todo lo que tienes para mí. Te lo pido en el
nombre de Jesús.
54

,-ienor, ayudam» » hacer Jo ^ue es bueno
Recibimos todo lo que le pedimos porque obe-
decemos sus mandamientos y hacemos lo que le
agrada.
1 JUAN 3:22
El SEÑOR es sol y escudo; Dios nos concede
honor y gloria. El SEÑOR brinda generosamente
su bondad a los que se conducen sin tacha.
SALMO 84:11
¡Pero más bienaventurados son los que oyen la
palabra de Dios y la ponen en práctica!
LUCAS 1.1:28, LBD

Jka ley de Dios que tengo más dificultad ^rt' cMed'fer es-'f'
Escribe una oración pidiéndole a Dios que te ayude a obe-
decerlo en esto.
;í5e las «Diez buenas razones para obedecer a Dios» en las
páginas 51 y 52, ¿cuáles son las tres más importantes para ti
en cuanto a inspirarte a obedecer las leyes de Dios?
La esfera de mi vida donde me gustaría tener más disciplina es:
Escribe una oración pidiéndole a Dios que te ayude a ser
más disciplinado en esa esfera de obediencia.

JIHSH
mm
- a »ant««« M
EXISTE UN LUGAR EN LA TIERRA DONDE puedas tener la
luta seguridad de que no existen malás influencias. Eso se
ebe a que la influencia del maligno puede estar en cualquier
e. Algunas veces rios parece que está en todas partes. Así que
vas a enfrentar con malas influencias en algún momento de tu
vida. Es probable que ya las hayas enfrentado, hasta cierto grado,
cuanto antes aprendas a reconocerlas, mejor.
T.o que necesitas saber es que cualquiera que haya entregado
u \ ida a Dios es blanco para las influencias del maligno. Eso se
debe a que lienes un enemigo. Cualquiera que ame a Dios y
delicada las cosas que defiende Dios tiene un enemigo. Ese ene-
migo se opone a Lodo k> que es de Dios, a todo lo que Él haces y
malquiera qu,e ciea en Él. Fl enemigo tratará de arfuinar tu
'da. Tú tienes que esiar lisio por él.
ILLenemigo es el diablo. Dios lo creó para bien, pero se con*
'ni(') en orgulloso \ decidió rebelarse contra Dios. Quería ser
ios \ que todos los seres creados le adoraran. Debido j eso

El poá^í joven que ora
cayó de la presencia de Dios en el cielo a la tierra, donde nunca
se cansa de buscar a alguien para destruirlo.
Lo bueno es que los que conocemos al Señor tenemos poder
sobre él. Nuestro enemigo no lo sabe todo, ni está siempre pre-
sente. No puede estar en todas partes, ni puede saber cada uno
de nuestros pensamientos. Pero si no nos damos cuenta de que
ya es un enemigo derrotado, nos puede acosar a cada instante.:
Puede usar a otras personas que no conocen a Dios para tratar
de ejercer influencia en nosotros y tratar de alejarnos de la vida
que Dios tiene para nosotros.
Una de las cosas que Jesús logró cuando murió en la cruz y
resucitó fue romper con el poder del enemigo sobre nuestra^
vidas. Dio a los creyentes autoridad sobre él, diciendo: «Les he
dado autoridad a ustedes para [...] vencer todo el poder del ene-
migo; nada les podrá hacer daño» (Lucas 10:14).
Todos estamos involucrados en una continua batalla espiri-
tual con un enemigo que nunca descansa. La Biblia nos dice que
«no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados;
contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas dí
este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones
celestes» (Efesios #:12, RV-60). Aun cuando nos traten de mala
manera o alguna persona en particular ejerza influencia para
que hagamos lo malo, tenemos que seguil
Lo más difícil reconociendo quién es nuestro verdadero
Ae la oración es. enemjg0 gste será el primer paso en man
• Quedarme quieto tenernos firmes en contra de él y de las
por mucho tiempo personas en las que influye y que tratarárí
• Saber por qué orar de influir en tó.
. Estar preocupado M iguaj qug Dios tiene un pían para
de que no dé resultados ^ ^ ^^ ^ ^ R[ pla¿
• No saber si Dios de Satanás es destruirte. «El ladrón no
esta escuc ^ viene más que a robar, matar y destruir;
• Ser veraz y sincero -j „ -j i
• 7 , „ yo he venido para que tengan vida, y la;
(15-15 años de edad) . ,T f, , c „1
1 tengan en abundancia» (Juanxüilü). Satanas

Señor, ayúdame -a mantener*1« firme,..
nunca toma un día de descanso, así que
trata a cada momento de ver cumplido
el plan que tiene contigo. Es por eso que
tienes que cuidarte de las malas influen-
cias. La Biblia dice: «Practiquen el domi-
nio propio y manténganse alerta. Su ene-
migo el diablo ronda como león rugiente,
buscando a quién devorar» (1 Pedro
La mayoría de las veces uno puede
reconocer los ataque obvios del enemigo.
Por ejemplo, si alguien te brinda alcohol
o una droga ilegal, sabes que es malo. Tienes que decir no de
inmediato y alejarte de esa persona. Las drogas y el alcohol des-
truyen la mente y el alma, así como también el cuerpo. Pregún-
tale a cualquiera que esté muriendo de alguna enfermedad cau-
sada por las drogas y el alcohol si no lamentan haber caído en el
vicio. Te dirán que lamentan desde lo más profundo haberse
dejado engañar por el pensamiento de: No me hará daño si tomo
solo un poco. Esta es una mentira del enemigo concebida para
nuestra destrucción, pues las adicciones ocurren poco a poco
hasta que la persona es adicta y no puede parar. Parte del plan
del enemigo para destruirte es que te entusiasmes por las drogas
y el alcohol.
La pornografía es otra mala influencia obvia. Casi todas las
personas saben que la pornografía es mala en el momento que la
--yen por casualidad, y enseguida apartan los ojos de ella. La verdad
s que daña a las personas que la ven más de lo que se dan cuenta.
Jplanta un gancho en su interior que las arrastrará cada vez más a
¡fila. Es adictiva y a la larga destruye la vida de las personas. La
(pornografía es otra parte del plan del enemigo para destruirte,
fe',
jpDn' irír Vmift M ——
f- Antes de que me convirtiera en creyente, entré en las drogas
y el alcohol para tratar de librarme del dolor y la depresión que
55
Tengo más líeseos
fie orar cuando:
•Tengo miedo
•Me siento culpable
• Después que
leo la Biblia
• Estoy solo
•Siempre
(16-19 años de edad)

El po#sr «te/ «ven fue ora
sentía a cada instante. Pensaba que me ayudarían, pero no fue
así. Aunque parecían ayudarme de forma temporal, después me
sentía peor que nunca en cuanto a mi persona y mi vida. Me
volví descuidada y por poco me mato varias veces. Una vez
estando casi bajo una sobredosis, le aseguré a un Dios que ni
siquiera conocía que si podía salvarme de la muerte, no tomaría
drogas de nueyo. Él cumplió su parte del convenio, pero yo no
pude cumplir la mía.
En cierta ocasión cuando conducía bájo la influencia de las
drogas, casi tuve Un choque de frente. Conducía al aeropuerto
para alcanzar un vuelo muy temprano y no me daba cuenta de
que las drogas que había tomado la noche antes todavía me esta-
ban afectando. Pensaba que las había tomado otro día y que
estaba bien, pero en realidad solo había sido unas horas antes.
Conducía rápido porque había dormido demasiado y era muy
tarde, lo cual en sí fue un gran error. Mientras ascendía una colina,
una ambulancia venía a toda velocidad en dirección contraría a
la mía. No la vi ni escuché la estridente sirena hasta que estaba
prácticamente encima de mí. La ambulancia se desvió a la
izquierda y yo me desvié a la derecha y evitamos un choque
frontal por una fracción de centímetro. Nuestros vehículos
pasaron tan cerca uno del otro que mi auto
se estremeció con violencia. Sabía que aca-
baba de librarme de la muerte o de una
severa discapacidad.
Ese incidente me conmocionó de muchas
maneras. Me espantó que estuviera bajo la
influencia de esas drogas y que ni siquiera
me diera cuenta. Estaba tan fuera de mis
cabales que ni escuché siquiera la sirena.
Sabía que si no cambiaba mis hábitos, todo
iba a acabar para mí. Lo que había comen-
zado un par de años antes como una simple
prueba de algo que me ofrecieron en una
Mis principales
motivos de
oración son:
. Que sepa la voluntad
de Dios para mi vida
• Que me lleve bien
con mi madrastra
• Que mi papa'se salve
• Que esté protegido
del mal
• Que mi familia Y yo
tengamos salud
[13-15 años de edad)

Señor, ayúdame a mar>teneteme firme.
reunión social se convirtió en algo que y Dios
estaba a punto de destruir mí vida. Había respondió
caído bajo una mala influencia y no tuve Cuando mi abuelo tuvo
suficiente fuerza para detenerla hasta un ataque al corazón
que encontré al Señor. solo contaba con veinticinco
Existen muchas malas influencias a for «tonto de posibilidades
nuestro alrededor, algunas evidentes y ^ sobrevivir. Mis primos
otras no tan obvias. Las sutiles pueden Y Vo oramos y oramos,
seducirte a recibir algo malo en tu Vida Lí fue un éxito
sin que te des cuenta. Algo que a la larga y sobwivió.
te apartará del camino que Dios tiene °r muY «decido
para ti y que destruirá tu vida. Un ejem- ¿«Dios" k"1*"
pío de eso es la promiscuidad sexual, Se ¡nfluenel/
ve tanto de esto en la televisión y en las ^ 8" ""
películas que es fácil que nos lleguemos "" '
a acostumbrar tanto a la idea que nos parezca que no tiene
tanta importancia. Pareciera como que «todo el mundo lo hace».
Sin embargo, no es cierto. Tiene mucha importancia. Y todo el
mundo no lo hace;
A fin de evitar estos y otros tipos de influencias malas, nece-
sitas estar bajo la influencia del Señor, Pídele a Dios que te ayude
a discernir las influencias que te rodean. Si te mantienes cerca de
Dios y su Palabra, Él te revelará la obra del enemigo en tu vida.
Te mostrará en los casos en que estás en territorio peligroso. Te
dará discernimiento cuando te estén;endiendo tina trampa y te
ayudará a ver la verdad.
Si ya estás bajo una mala influencia, Dios t e dará el poder
para ponerle fin. Él promete que podes resistir «al diablo, y él
huirá de [ti]» (Santiago 4:7).
, armas contra el enej^fo
Dios nos ha dado muchas arma^ntra el enemigo. He aquí
las cinco principales:

El poder" del- joven que ora
1. Una poderosa arma ,contra el enemigo es la Palabra de Dios.
Jesús mismo usó está arma contra el diablo cuando el Espí-
ritu Santo lo guió al desierto y Satanás fue a tentarlo
(Mateo 4:1). Uno pensaría que si era el Hijo de Dios no
tenía por qué haber entrado al desierto, y mucho menos
para que lo tentara el diablo. Sin embargo, «el tentador se le
acercó» (versículo 3) de la misma manera que viene a todos
nosotros, y Jesús usó la Palabra de Dios para desmentirlo.
Le dijo: «No solo de pan vive el hombre, sino de toda pala-
bra que sale de la boca de Dios» (versículo 4).
Cuando el diablo trate de influir en tu vida de alguna
manera, cítale la Biblia como lo hizo Jesús. En el momento
que sientas que te persuaden las malas influencias, corre a la
Palabra de Dios y comienza a citarla. Di: «Todo lo puedo
en Cristo que me fortalece» (Filipenses 4:13). El diablo
aborrece eso y te dejará tranquilo.
2. Una poderosa arma contra el enemigo es la alabanza. El diablo
también aborrece que adoremos a Dios. No puede tolerar
que la agente adore a otro que no sea él. Lo detesta tanto
que no puede siquiera estar cerca. Cuando alabamos y ado-
ramos al Señor, la presencia de Dios mora de forma pode-
rosa en medio nuestro y el diablo tiene que huir.
3. Una gran arma contra el enemigo es la obediencia. Si vivimos
en pecado o andamos en desobediencia, estamos dejando
abierta la puerta en nuestras vidas para que el diablo tenga
entrada y a la larga una posición establecida. Cosas malas
ocurren cuando nuestro pecado continuo le extiende una
invitación al enemigo a erigir una fortaleza en n,uestra vida.
Satanás no tiene jurisdicción sobre ti, pero la desobediencia
a las leyes de Dios le tiende una alfombra para, que entre.
Tú puedes cerrarle la puerta en la cara mediante, la. confe-
sión de tus errores y arrepintiéndote de ellos ante él Señor.
4. Una poderosa arma contra el enemigo es la fe mente
que el enemigo siempre está plantando minasféiljacite de ti.
12

Señor» ayúdame a mantenerme firme,,.
No tienes idea dónde están porque no son visibles a la vista
humana, Se eluden caminando cerca de Dios y permitién-
dole que guíe nuestros pasos. Dios dice sobre el enemigo:
«Resístanlo, manteniéndose firmes en la fe, sabiendo que
sus hermanos en todo el mundo están soportando la misma
clase de sufrimientos» (1 Pedro 5:9). Eso significa que
ponemos nuestra fe en Dios y nos negamos a hacer lo que
quiere el enemigo. Andar bajo la influencia dé Dios mediante
la fe en la Palabra de Dios es una manera poderosa de eludir
las trampas del enemigo.
5. Una poderosa arpia contra el enemigo es la oración. El enemigo
detesta que hablemos con Dios. Sabe que Dios escucha
nuestras oraciones y las responde. El enemigo tratará de
lograr que dudemos que Dios nos escucha, a fin de debili-
tarnos. Sin embargo, no te dejes engañar por esa mentira.
Di: «Señor, ayúdame a resistir al enemigo y las influencias
del mal qüe trae a mi vida», y luego consuélate al saber que
esta sencilla oración tiene poder suficiente para destruir al
enemigo.
3i hwú m* «s atacad
¿Por qué atacan a las personas buenas? La respuesta está en la
pregunta misma. El enemigo te ataca porque eres una persona
buena. El diablo quiere destruir a todo el que puede, pero en
especial quiere destruir a cualquiera que ame a Dios y viva en sus
caminos. Es más, esta es la principal razón de que sea tu enemigo.
La única manera en que no consigues hacer eso es llegando a ser
como él. Tendrías que defender lo que representa él.
Recuerda que mientras mayor sea tu compromiso con el
Señor, más tratará de molestarte el diablo. Hará todo lo posible
por debilitarte con confusión, desaliento, culpa, temor, depre-
sión, tentación o derrota. Aun cuando ni con mucho está cerca
de ser tan poderoso como Dios, tratará de hacerte pensar que lo
€3

El poiey «leí joven «jua ora
es. Intentará con engaños ganar entrada en tu vida y gobernarla.
Tratará de convencerte de que es el vencedor de la batalla, pero
la verdad es que ya la perdió. La perdió en el momento en que
rendiste tu vida al Señor.
:¡tlt .,x|la . ''' ''' "
No hay lugar a dudas; nadie te ama más que Dios. Debido a
que te ama, siempre tiene en mente lo mejor para ti, pero quiere
que le entregues tu vida a Ély no a otra persona ni a otra cosa. La
verdad es que no puedes adentrarte en todo lo que Dios tiene
para ti hasta que lo hagas. Esto significa estar dispuesto a decir:
«Señor, todo lo que quieras que haga lo haré. Diré sí a cualquier
cosa que me pidas. Haré lo que me digas a fin de agradarte y
avanzar hacia todo lo que tienes para mí».
Al rendirte estás diciendo que pones a Dios en primer lugar
y te sometes a El. Y eso es determinante. Cuando declaramos en
persona que Jesús es Señor de nuestra vida, eso demuestra que
estamos controlados por el Espíritu y no por la carne. «Nadie
puede decir:. "Jesús es el Señor" sino por el Espíritu Santo»
(1 Corintios 1 i;.}). Cuando estamos dominados por el Espíritu
y no por la carne, es mucho más fácil resistir
Mi oración d enemig0
a Dios ¿Por qué a veces nos resulta difícil decir:
Señor, te doy gracias «Lo que quieras, Señor. Haré cualquier cosa
hoy. Dirígeme en cuanto qU£ me p¿¿as>>? £so se Jebe a qUe queremos
al alcohol, las drogas |0 qUe queremos, y tememos que Dios quizá
y |os asuntos sexuales. nos p^ qUe abandonemos algo que queremos.
Las cosas de este mun o pensamos que podría pedirnos que hicié-
son muy difíciles , ,
' . , ramos algo que no nos conviene mucho. Sin
de vencer, y embargo, eso es falso. Cuando le permitimos
también con esto & , /
. „ a Dios que gobierne nuestra vida, El nara
a mis amigos 1 6
de la escuela. grandes cosas por medio de nosotros y nos
, , ,, dará más de lo que jamás soñamos posible.
(13 años de edad) ^ ' r
•••.sé-"

Señor» ayüéame a mantener?-firme.,»
Pídele a Dios que te ayude a darle lo que i;/quiere de modo que
nunca le des al enemigo lo que quiere.
Señor, gracias por morir en la cruz por mí y resucitar a
fin de derrotar a mi enemigo. Gracias porque me has
dado toda autoridad sobre él (Lucas 1,0:19).; Gracias
porque a través dèi poder de tu Espíritu Santo puedo
resistir bien, al, diablo y tiene que dejarme tranquilo
(Santiago 4:7).1
La manera én que siento que el enemigo está tratando
de influir con más fuerza en mi vida es (nombra cual-
quier lugar en el que sientas qué te atrae una mala
influencia). Ayúdame a ser fuerte para resistir ésa atracción.
Muéstrame qué hacer para evitarlo. Si necesito hablar
con alguien al respecto, muéstrame en quién puedo
confiar que toe va escuchar dé forma confidencial y me
va a dai consejo sano. Me rindo a mí mismo y mi vida a
ti, y té invito que gobiernes en rhi mente, alma, cuerpo y
espíritu. Declaro que tú eres Señor sobre cada esfera de
mi vida. Ayúdame a andar en el Espíritu y no en la carne
dé modo que pueda alejarme sièmpre de las malas influen-
cias y no acercarme a ellas.
Señor, sé que no tengo que temer al enemigo (Deu-
teronomio 20:3). Gracias porque aun cuando el enemigo
trate de ejercer influencia en mí para que haga su voluntad,
tú me has dado el poder para escapar por completo de él
(2 Timoteo 2:26). Gracias porque me has librado de él
(Salmo 18:17). Gracias porque el enemigo nunca me
derribará mientras permanezca fuerte en ti. Te lo pido
en el nombre de Jesús.

El poiey «leí joven «jua ora
tf! i ' ! f 1 i V
* II f"s'3 "li
1 < « ! , «
El Señor es fiel, y él los fortalecerá y los protegerá
del maligno.
2 THSALONICENSES 3:3
Los justos claman, y el SEÑOR los oye; los libra
de todas sus angustias.
SALMO 34:17
Pónganse toda la armadura de Dios, para que
cuando llegue el día malo puedan resistir hasta el
fin con firmeza. Manténganse firmes, ceñidos con
el cinturón de la verdad, protegidos por la coraza
de justicia, y calzados con la disposición de pro-
clamar el evangelio de la paz. Además de todo
esto, tomen el escudo de la fe, con el cual pueden
apagar todas las flechas encendidas del maligno.
Tomen el casco de la salvación y la espada del
Espíritu, que es la palabra de Dios. Oren en el
Espíritu en todo momento, con peticiones y ruegos.
Manténganse alerta y perseveren en oración por
todos los santos.

¿'Qué es lo que más te preocupa acerca de lg| rtijjjías, Íjf|uéÍ3.- '
cias que ves en el mundo que te rodea? ¿Cómo ptifed« evi-
tarlas?
!il>
qué malas influencias crees que eres más susceptible en
este momento y lugar en tu vida? Escribe una oración
pidiéndole a. Dios que te ayude a ser fuerte especialmente
en esa esfera. (Por ejemplo: «Señor, no quiero siquiera tro-
pezar con cualquier tipo de cosa mala en la Internet. Ayú-
dame a reconocer siempre los lugares y las personas que no
son buenas y a ser capaz de resistir el impulso a ir donde
están ellas»).
•Sfalguna vez has caído en una trampa del enemigo, escribe
una oración pidiéndole a Dios que te libere por completo
de ella. Si no te ha ocurrido algo así, escribe una oración
pidiéndole a Dios que te guarde bajo su influencia > te aleje
de las malas influencias.

t
¿ülpUNA VEZ HAS TENIDO PENSAMIENTÓS que te molestan y
que al parecer no te puedès deshacer de ellos? ¿Alguna vez has
tenido pensamientos que te hacen sentir triste o solo? ¿O depri-
mido o ansiosp^O desalentado? ¿Alguna vez te has sentido tan
mal cohtigo'mísmo y con tu vida que rio quieres ir á'ninguna
parte ni ver a nadie? Yo he tenido esas clases de pensamientos,
también. • - , .
Muchas personas lienen pensamientos conio esos iilgtnhis mn.
( )tras personas piensan de esa manera por ínuclusinio tiempo. 1.1
enemigo quiere que siempre tengamos pensamientos malos. Sin
embargo, Dios quiere que no pensemos de esa manera en lo
iibioluío.
Illiliiii IBI
;
I
Solía LTCCI que cada pensamiento que venía a mi mente era
leal. Si csiab.i deprimida, eso significaba que tenía que \ i\ ir con
esa emoción. Solo era la manera en que estaba y no podía hacer
nada para cambiarla. Pero estaba muy equi\ocada. l sraba cre-
yendo una mentira. ÜP»
•I i

El poder «iel -^overi q^i&e ora
Algunas veces los pensamientos que ^tfitíes son bien válidos.
Sin lugar a dudas, existe algo concreto que'hace que pienses y te
sientas de esa manera. Pero muy a menudo puedes tener emo-
ciones negativas y ni siquiera sabes por qué. Quizá no haya nada
malo en realidad contigo ni con tu vida, y por eso te preguntas
por qué no consigues superarlos. Cuando ocurre eso, puedes
tener la certeza de que el enemigo esta tratando de que creas una
mentira.
Aprese a tomar el goiit«
OI
¿Te das cuenta que no tienes que permitir ciertos pensa-
mientos en tu mente? Es cierto. Tienes el control sobre eso. Algo
bien importante en cuanto a mantenernos firmes contra el ene-
migo es tomar el control de nuestra mente. La Biblia dice que
debemos aprender a llevar «cautivo todo pensamiento para que
se someta a Cristo» (2 Corintios 10:5). Eso fue una sorprendente
revelación para mí cuando me convertí y aprendí que no tenía
que aceptar cada pensamiento que viniera a mi cabeza. Tenía
que decidir si escuchaba o no a mis pensamientos. ¿No es asombroso?
Muchos criminales hablan sobre cómo escuchaban una voz
en su cabeza diciéndoles que cometieran un
Oro por otros . . . 1 ,
crimen y ellos solo siguieron ordenes. Cuando
cuando: , , ¿ j • •
a las personas no se Ies ensena a discernir
. Necesitan un milagro ks yoces £n su cabeza; no „conocen k voz
"l0S V aleuda8 PaSÍll°S del enemiSa É1 es un engañador astuto
de la escue a que vendrá a cada uno de nosotros y tratará
• Están en problemas i , L1 •
. r . de hablar mentiras en nuestra mente. lene-
por actuar mal . .
' . mos que estar preparados para eso al ser
• Se sienten n . . , r ,„r f .
desesperados capaces de identificar y resistir sus menti-
• Quiero invitarlos ras< Tenemos <Iue percibir sus mentiras en
a la iglesia el minuto que entren a nuestras mentes a
(16-19 años de edad) fi" de <lue no acojamos como verdad y
nos convirtamos en unos desdichados.
70

Señor» ayúdame a tomar el control de mí mente
Una de las cosas más difíciles de ser un joven es que eres un
pensador muy apasionado. Sientes las cosas con mucha fuerza.
Esto es bueno, pero en este período de tu vida puede causarte
emociones que van de un extremo al otro en poco tiempo.
Extremadamente feliz o emocionado en un minuto; extremada-
mente triste o deprimido en el siguiente. Extremadamente
ansioso o preocupado un día; extremadamente despreocupado
e indiferente al siguiente. ;
Es posible que también sientas que no Pienso en
Dios como:
• Un Consejero
• Uno que Responde
• Un Consolador
• Mi Sanador
• Mi ayudador
(16-19 años de edad)
a ser como un volcán listo para hacer erupción. (Más
sobre esto en el capítulo 13). Al enemigo le gustaría intervenir
en esa situación y sacarle partido a tu pasión. Le gustaría que
perdieras tu compostura o que te deprimieras tanto que le hicie-
ras daño a alguien o a ti mismo. Esta maravillosa pasión tuya,
que se debe u?ar para la gloria de Dios, en un momento el ene-
migo pudiera convertirla en un arma en tu contra si consigue
que creas sus mentiras.
¿Alguna, vez has tenido ciertos pensamientos que juguetean
una y otra vez en tu mente como para batir un antiguo récord?
¿Alguna vez has tenido pensamientos que te producen efectos
físicos en el cuerpo como dolor en el corazón, sensación nausea-
bunda en la boca del estómago, un nudo en la garganta, debilidad
en brazos y piernas, temor o espanto, nerviosismo o ansiedad,
-i-i.
i X
puedes expresar tus pensamientos y senti-
mientos con la profundidad que te gustaría.
Quizá te dé vergüenza que alguien sepa
cómo te estás sintiendo. Es más, tus pen-
samientos y sentimientos quizá sean tan
complejos que ni siquiera sepas cómo expre-
sarlos. No estás seguro de comprenderlos
del todo. Y por eso se intensifican y llegan

El poiey «leí joven «jua ora
lágrimas en los ojos, erupción en la cara y el cuello o acelerados
latidos del corazón?
Quizá alguna vez han plagado tu mente pensamientos tipo
«qué si»; «¿Qué si salto del balcón?» «¿Qué si choco el auto con-
tra un muro?» «¿Qué si mueren mis padres?» «¿Qué si no puedo
. triunfar?» 7 : !
¿Alguna vez has tenido pensamientos tipo «si no» que te
hacen desdichado? Pensamientos como «Si rio hubiera hecho eso».
«Si no hubiera estado allí, eso no hubiera pasado». «Si no le
hubiera dicho esas palabras a esa persona».
¿Alguna vez has tenido pensamientos que castigan? Pensa-
mientos como «Nadie se preocupa por mí». «Soy un fracaso».
«No soy bueno». «Nada de lo que hago sale bien». «No soy
atractivo». '.'
Si has tenido pensamientos como cualquiera de esos men-
cionados arriba, quiero que sepas que no es que Dios está
hablando a tu vida. Es el enemigo de tu alma tratando de lograr
el control de tu mente.
Los tiempos difíciles a veces se presentan, pero demasiado a
menudo sufrimos sin necesidad debido a las mentiras que creemos
sobre nosotros mismos y nuestras circunstancias. Aceptamos
como realidad las palabras que expresa un enemigo que quiere
destruirnos. Podemos llegar a sentirnos temerosos, deprimidos,
, a solitarios, enojados, desconfiados, confundi-
Mis pri V dos, inseguros, desesperados, derrotados, preo-
motivos ^ cupados y desalentados debido a las mentiras
oración son. que creemos. Lo bueno es qi¿e podemos
. Por sabiduría vencer cada una de esas mentiras con ora-
• Mantenerme firme ción, la verdad de la Palabra de Dios y ala-
. por ayuda banza a Dios.
• Por mis mascotas Ten en cuenta que una de las tácticas
• Por mis amigos del enemigo es poner a prueba la Palabra
(13-15 años de edad) de Dios y sacarla de ti. En primer lugar,
hará que llegues a cuestionar la Palabra de

Señor» ayúdame a tomar- el control de mi urente
Dios, como lo hizo con Eva en el jardín del Edén. Te dirá cosas
como: «¿Dijo Dios eso?» «¿Le importará de verdad a Dios que
hagas eso?» Refutará la Palabra de Dios y te llevará a pensar algo
así: «No, eso no es lo que Dios quiere decir».
El enemigo también tratará de lograr que dudes del amor de
Dios hacia ti. «Dios no cree que eres tan especial». «Si te amara
de verdad, no te negaría nada». Siempre que tus pensamientos
comiencen a cuestionar y contradecir la Palabra Dios, puedes
estar seguro de que te los está poniendo el enemigo. Recuerda:
«Hay caminos que al hombre le parecen
rectos, pero que acaban por ser caminos 0ré y Dios
de muerte» (Proverbios 14:1,?). Ciertos respondió
pensamientos quizá te parezcan ciertos, Qrg fuv¡efa ^
pero cuando los pones a la par de la Pala- va|or je Mj.
bra de Dios, la mentira sale a la luz. hacer amistades
El engaño es el continuo plan de y no ai$|afme<
ataque del enemigo. Jesús dijo que «desde Ahora Dios
el principio [el diablo] ha sido un asesino, me ha dado grandes
y no se mantiene en la verdad, porque amigos que son
no hay verdad en él. Cuando miente, fuertes en Señor
expresa su propia naturaleza, porque es 1 s«r franco
un mentiroso. ¡Es el padre de la mentira!» " sincero con ellos
(Juan 8:44). El único poder que el dia- en cuanto« Dios,
blo tiene sobre ti es el de conseguir que ',6 aíos <•« edad)
creas sus mentiras. Si no crees sus men-
tiras, está imposibilitado de hacer algo en tu vida.
B^gie tus pena^jsntfos.cosri cui*ua0
Al igual que puedes encender y apagar el televisor, puedes
decidir lo que estás dispuesto a aceptar en tu mente o no. Puedes
decidir llevar cada pensamiento cautivo como dice la Biblia que
lo hagas ("' Corintios i C»:r:) y tener «la misma manerade pensar
que tuvo Jesucristo» (FilipensesTLA) o puedes permitirle al
diablo que alimente tus mentiras y manipule tu vida.
•n.%

El poíler del joven que ora
Cada pecado comienza como un pensamiento en la mente.
«Porque de adentro, del corazón humano, salen los malos pen-
samientos, la inmoralidad sexual, los robos, los homicidios, los
adulterios, la avaricia, la maldad, el engaño, el libertinaje, la envi-
dia, la calumnia, la arrogancia y la necedad» (Marcos 7:21-22).
La verdad es que si rio tomas el control de tu mente, el diablo
lo hará. Es por eso que debes ser diligente en vigilar lo que per-
mites que entre en tu mente. ¿Qué programas de televisión,
revistas y libros buscas? ¿Qué música, programas de radio o dis-
cos escuchas? ¿Llenan tu mente de pensamientos que agradan a
Dios y alimentan tu espíritu a fin de que te sientas feliz, lúcido,
tranquilo y bien contigo mismo y con tu vida, o hace que te ago-
tes y te dejen cori un sentimiento de vacío, confundido, ansioso,
temeroso y mal contigo mismo y con tu vida? «Dios no es un
Dios de desorden sino de paz» (1 Corintios 14:33). Cuando nos
llenamos la mente con la Palabra de Dios y libros, revistas y
música que glorifican a Dios, no le damos cabida a la propagan-
da del enemigo.
Si quieres saber si tus pensamientos son del enemigo o del
Señor, pregúntate: «¿Son esos los pensamientos que escogería
tener? ¿Quiero pensar de esta manera?». Si tu respuesta es,no, es
probable que procedan de tu enemigo. Si, por ejemplo, estás
sentado en la escuela o en la iglesia y de repente tienes pensa-
mientos impuros sobre alguien, antes de que te castigues por
eso, dile al enemigó que salga de tu cerebro. Dile que no vas a
convertirte basurero de sus deshechos. Dile que tú tienes «la
mente de Cristo» y que no escucharás nada que no sea coherente
con eso (1 Corintios 2:M).
Negarnos a abrigar pensamientos malos o depresivos es parte
de nuestra tarea de resistir al diablo. ¿Cuántas personas has
conocido, o de las que te han contado, qüe debían haber hecho algo
que no hicieron? La Biblia dice que debes dejar tus viejas cos-
tumbres de siempre, ser renovado «en la actitud de [tu] mente»

Señor» ayúdame a tomar el control de mi mente
y permitir que Dios te dé una nueva oración a Dios
manera de pensar que es verdadera y justa Señor, a veces me pareen
(Efesios 4:22-24). J
Tú no tienes que vivir con confusión
ni con opresión mental. No tienes que
escuchar ninguna voz que te diga que hagas
algo que sabes que no debes hacer. No tie-
nes que vivir «más con pensamientos frivo-
los como los paganos. A causa de la igno-
rancia que los domina y por la dureza de su corazón, estos
tienen oscurecido el entendimiento y están alejados de la vida
que proviene de Dios» (Efesios 4:17-18). Puedes tener claridad,
conocimiento y verdad. Puedes optar por tener pensamientos
positivos y no negativos.
Si alguna vez tu enemigo trata de convencerte de que tu
futuro es tan desesperado como el suyo, o que eres un fracaso sin
propósito, valores, dones ni habilidades, entérate de que Dios
dice exactamente lo opuesto. La lectura de lo que Él dice en su
Palabra es el primer paso hacia la toma del control de tu mente.
Por ejemplo, cuando venga un pensamiento a tu mente que te
diga: «Dios no se preocupa por ti y por eso no responde tus ora-
ciones», puedes identificarlo enseguida como una mentira del
abismo. Dios dice en su Palabra: «Si permanecen en mí y mis
palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran, y se les
concederá» (Juan 15:7). Si te llenas la mente con lo que dice
Dios, nunca te dejarás llevar por una falsedad.
I"« nadie en el mundo ?«e
me rodea se preocupa
S">uiera' «'1M t* pido m
m« tómeles y me mmt;es
?«« alguien lo haee.
I'4 años de edad)
-jt
i

ELl poéer «•»! joven tfjLts ora
Señor, muéstrame cualquier sitió en mi mente donde
haya aceptado una mentira como si fuera verdad. No
quiero tener pensamientos vanos ni tontos, ni darle
lugar a pensamientos que no te glorifican a ti (Romanos
.1.21). No quiero andar de acuerdo a mis propias ideas
(Isaías'$hi"2). Quiero llevar cautivo cada pensamiento a
Cristo para tener el control de mi mente.
Tu Palabra «juzga los pensamientos y las intencio-
nes del corazón» (Hebreos 4:12). A medida que leo tu
Palabra, habla a mi corazón sobre cualquier mal pensa-
miento en mí. Que tu Palabra esté tan grabada en mi
menté que yo sea capaz de identificar una mentira del
enemigo éit cuanto la escuche. Espíritu de Verdad,
guárdame del engaño. Sé que tú me has dado autoridad
paira «vencer todo el poder del enemigo» (Lucas 13:1
y por eso me niego a escuchar mentiras. Me niego a
tener confusión en mi mente porque tú, Señor, me das
claridad de pensamiento.
Gracias porque tengo «la mente de Cristo» (1 Corin-
tios Quiero que tus pensamientos sean mis pen-
samientos. Muéstrame dónde he llenado mi mente con
algo que sea impío. Muéstrame cada vez que permito
que entren pensamientos en mi mente a través de la
televisión, la Internet, los libros, las revistas, las películas
o la música que no son de ti. Ayúdame a negarme a
hacer eso y en su lugar llena mi mente con pensamientos,
palabras, música e imágenes que te glorifiquen. Ayúdame
a pensar en todo lo que sea verdadero, respetable, justo,
puro, amable, digno de admiración, excelente o merece-
dor de elogio (Filipenses 4:8). Me apropio del «buen
juicio» que tú me has dado (2 Timoteo 5.., DHH). Te lo
pido en el nombre de Jesús.

Señor,, ayúdame a tomar el control de mi mente
LA FALABKA
No se amolden al mundo actual, sino sean trans-
formados mediante la renovación de su mente.
Así podrán comprobar cuál es la voluntad de
Dios, buena, agradable y perfecta.
> ROMANOS
Aunque andamos en la carne, no luchamos según
la carne; porque las armas de nuestra contienda
no son carnales, sino poderosas en Dios para la
destrucción de fortalezas; destruyendo especula-
ciones y todo razonamiento altivo que se levanta
contra el conocimiento de Dios, y poniendo
todo pensamiento en cautiverio a la obediencia
de Cristo.
2 CORINTIOS 10:3-5, LELA
Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pen-
samiento en ti persevera; porque en ti ha confiado.
. ISAÍAS RV-60

'«I»
1 • """ %w
'iíi
Jbuedes identificar cualquier pensamienta'!rie^.tiV&o co'tl-,
fuso qué tengas del que te gustaría libráfte? pEs£ffl|e Puh|
oración a Dios pidiéndole que te ayude a tomar el control
de tu mente y a deshacerte de ellos.
i«.*1*,.
algunos de los pensamientos que he tenido en el pasado
qué quizá eran del enemigo y no del Señor son:.
•«««I
«Escribe una oración diciéndole a Dios cualquier pensa-
miento que tengas ahora o tuviste hace poco que te está
atormentando o molestando y sabes que son destructivos para
tu vida. (Por ejemplo, di: «Señor, he estado luchando con
pensamientos sobre la muerte y esto me hace sentir triste».
O: «Tengo pensamientos de fracaso no muy razonables»).

JtÑOll,
.»«Mi*
1 1 111«'11 J i • '"»?, -{.w
Tlf MEXTL V TL CIT.RPO NECESITAN AL I MEXICO IODOS
LOS
DÍAS. ¿Sabías que tu espíritu y tu alma necesitan alimentos
iodos los días también: El tipo de alimento que nutre IU espíritu
y tu alma es la Palabra de Dios. .Al igual que tu mente y tu cuerpo
no se alimentan si no comes, tu espíritu y tu alma no reciben ali-
mento si no lees la Palabra de Dios. No puedes vivir con éxito
sin alimentar tu espíritu y tu alma.
Antes de convenirme en creyente, había veces que leía pasa-
jes de la Biblia, pero no podía comprenderlos mtt\ bien. No
cobraban vida para mí. Después que recibí al Señor, la historia lúe
diferente. Como ya tenía el Espíritu Santo en'mí que me enseña-
ba mientras leía, podía comprender cada ve/, más siempre que
leía la Palabra de Dios. Podía sentir que mi espíritu se iluminaba
y mi mente estaba más clara. Cada ve/ que leía algo en la Biblia,
sentía que conocía mejor a Dios y que mi fe en El era mucho
más fuerte. Cuando me sentía triste, temerosa, ansiosa o depri-
mida, leía la Biblia y mis pensamientos se elevaban y se llenaban
tic paz, esperanza y gozo. Pronto me daba cuenta que no podía
pasar un día sin leer algo de la Palabra de Dios.
81

El Hel jove.i ^a» >í.a
Si la Palabra de Dios es alimento para el alma, no podemos
vivir sin ella. Jesús citó la Palabra de Dios al decir: «No solo de
pan vive el hombre, sino de toda palabra que
sale de la boca de Dios» (Mateo 4:4). Eso
significa que solo ingerir alimentos nunca
será suficiente para nosotros porque siempre
estaremos vacíos a menos que, alimente-
mos también el espíritu. Si no nos alimen-
tamos de continuo con la Palabra de Dios,
estaremos muertos de hambre y debilita-
dos en lo espiritual.
Te asombrarás de lo diferente que será
tu vida si lees cada día la Palabra de Dios.
No tienes que leer un montón, sino un poco.
Algo es mejor que nada. De ahí que sea tan
importante pedirle a Dios que te ayude a
encontrar el tiempo para hacerlo y que te
permita comprenderla. Y tienes que orar para que su Palabra
permanezca en tu corazón a fin de que no la olvides, ni pierdas
todo su beneficio. La Biblia dice que «prestemos más atención a
lo que hemos oído, no sea que perdamos el rumbo» (Hebreos íul).
No nos damos cuenta de lo rápido que la olvidamos.
Aun en práctica la fi^ibrrf
Cada vez que lees la Biblia, aprendes algo nuevo, aun si es
un pasaje que has leído cientos de veces antes. No importa
cuánto tiempo hace que caminas con Dios; Él siempre tiene
algo nuevo para que aprendas en su Palabra. Quizá sean nuevas
dimensiones de lo que ya sabes, o tal vez sea algo nunca antes
visto. De cualquier manera, no basta con aprender la verdad;
también debes actuar de acuerdo a ella. Dios dice que «no basta
con oír el mensaje; hay que ponerlo en práctica, pues de lo con-
trario se estarían engañando ustedes mismos. El que solamente
oye el mensaje, y no lo practica, es como el hombre que se mira
Lo más difícil
£e la oración es:
• Obligarme yo
misma a orar,
• Tener paciencia
para las respuestas
• Reconocer lo que
de verdad necesito
• Ser fiel en
orar cada día
• Todo en la
oración es difícil
(16-19 años de edad)

Señor» ayúdame a comprender tu Palabra
la cara en un espejo: se ve a sí mismo, pero en cuanto da la vuelta
se olvida de cómo es» (Santiago j.:.t.¿ -4,- DHH).
Eso significa que si leemos la Palabra y no practicamos lo
que dice, no solo olvidamos lo que dice, sino que también olvi-^
damos quiénes somos en el Señor. Santiago sigue diciendo que
cuando hacemos lo que dice la Palabra de
Dios, recibiremos bendición al practicarla Tengo más deseo
(Santiago ' :2':). Esa es una gran promesa. de orar cuando:
Siempre que leas la Palabra, pídele a Dios # ^ ^ ,
que te ayude a aplicarla a tu vida y a hacer 0 confun j¡Ji0 °
lo que dice. Luego da un paso que mués- .
. i i 'Me levanto por
tre que comprendes y crees lo que lees y ^ _ '
que vas a vivir de esa manera.
Es posible escuchar la Palabra, leer la en 'a cama
Palabra e incluso enseñar la Palabra y seguir 8 oscur,<'a<'
igual y sin su influencia. No queremos 'Nemito un esfín>«l<>
que eso nos ocurra. Cualquier pasaje nos " Slen^° abatido,
enseñará, acusará, enriquecerá, sanará, ínsíe 0 mo'esto
aconsejará y descubrirá nuestros sentí- I'6"19 a"os edad)
mientos, pero tenemos que ponerla en
práctica. Es por eso que necesitas pedirle a Dios que hable a tu
corazón cada vez que leas su Palabra y te muestre lo que debes
hacer en respuesta.
íg> »ñUvMa jate-lA ¿W51
Muchas personas tienen problemas leyendo la Palabra de
Dios cada vez que la necesitan. Si eres una de esas personas, revi-
sa los diez motivos siguientes para leer la Biblia. Sé que te inspirarán.,
. Leo la Palabra de Dios a fin de saber hacia dónde voy en la
vida. Tú no puedes ver el futuro ni saber con exactitud hacia
dónde te diriges, pero la Palabra de Dios te guiará. Te man-
tendrá por el buen camino. Pone una brújula santa en tu
corazón y te ayuda a permanecer en el camino que Dios
81

El poder del joven <gu»:<oxfa
tiene para ti. «Hazme andar conforme atu palabra; no per-
mitas que la maldad me domi ne» (Salmo 119 -1 , DHH).
2. Leo la Palabra de Dios a fin de que.pueda tener sabiduría.
Nada es más importante que tener sabiduría porque te diri-
girá y evitará que cometas grandes errores. En el conoci-
miento de la Palabra de Dios es donde comienza a desarro-
llarse la sabiduría en ti. «La ley de Jehová es perfecta, que
convierte el alma; el testimonio de Jehová es fiel, que hace
sabio al sencillo» (Salmo 19:7, RV-60).
3. Leo la Palabra de Dios a fin de que pueda triunfar en la vida.
Cuando vives de acuerdo a las enseñanzas de la Biblia, la
vida marcha bien y las cosas salen bien. «Este libro de la ley
no se apartará de tu boca, sino que meditarás en él día y
noche, para que cuides de hacer todo lo que en él está escri-
to; porque entonces harás prosperar tu camino y tendrás
éxito» (Josué 1:8, LBLA).
4 Leo la Palabra de Dios para estar limpio y preparado para la
presencia del Señor. Tú no quieres ir por la vida sin sentir
que la presencia del Señor te guía y ayuda. Dios quiere que
seas limpio de todo lo que sea impuro para que disfrutes
más de su presencia. Una de las maneras en que puedes ser
puro es mediante la lectura de su Palabra. Esta lava tu espí-
ritu y tu alma. «¿Con qué limpiará el joven su camino? Con
guardar tu palabra» (Salmo .119:9, RV-60).
5, Leo la Palabra de Diosa fin de obedecerlo. Si no comprendes
lo que son las leyes de Dios, ¿cómo puedes obedecerlas? Y
tú quieres vivir a la manera de Dios porque así es que salen
bien las cosas. «Enséñame, oh Señor, el camino de tus esta-
tutos, y ló guardaré hasta el fin. Dame entendimiento para
que guarde tu ley y la cumpla de todo corazón. Hazme
andar por la senda de tus mandamientos, porque en ella me
deleito» (Salmo 119:33-35» LBLA).

Señor» ayúdame A comprender tu Palabra
Leo la Palabra de Dios para poder tener gozo. El gozo es algo
que puedes tener no importa lo que esté pasando en tu
vida. Tú no puedes vivir bien sin ella. Tú no puedes ser
libre de la ansiedad y de la inquietud sin la Palabra de Dios
en tu corazón. «Las leyes de Dios son perfectas: nos protegen,
nos hacen sabios y nos dan gozo y luz» (Salmo 19:7-8, LBD).
7. Leo la Palabra de Dios para tener más fe. La fe en la Palabra
de Dios es lo que la activa en tu vida. La fe hace que ocu-
rran las cosas de la manera en que deben suceder. Uno no
puede crecer en la fe sin leer y escuchar la Palabra de Dios.
«Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios»
(Romanos 13:17, RV-60).
8. Leo la Palabra de Dios para poder librarme de las cosas que me
impiden avanzar hacia todo lo que Dios tiene para mí. Tú
nunca sabrás lo que necesitas para ser libre a no ser que
estudies la Palabra de Dios para averiguarlo. «Si se mantie-
nen fieles a mis enseñanzas, serán realmente mis discípulos;
y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres» (Juan
8:31-32).
£>. Leo la Palabra de Dios para tener paz. Todo el mundo nece-
sita paz en la vida. La paz da fortaleza para enfrentar cada
día sabiendo que todo saldrá bien. La paz de Dios es más
grande que cualquier paz que el mundo ofrece. Pero tienes
que hallarla leyendo la Biblia. «Mucha paz tienen los que
aman tú ley, y no hay para ellos tropiezo» (Salmo llfílfS,
RV-60).
10. Leo la Palabra de Dios para diferenciar entre el bien del mal.
Hoy en día, las personas enseñan que las cosas malas son
buenas y las cosas buenas son malas. Cada vez es más difícil
saber con seguridad lo que es bueno y lo que es malo. Solo
la Palabra de Dios te lo dirá con claridad. «En mi corazón
atesoro tus dichos para no pecar contra ti» (Salmo 119:11).
83

El poder" del- joven que ora
tí t*»I I'NIS'ÍA «c? ÍJ3D>
Dios tiene oro y diamantes en todas partes de su Palabra,
pero debemos descubrirlos. Y al igual que todas las gemas y los
metales preciosos cuando se extraen del suelo, los tesoros que
encuentras en la Palabra de Dios hay que pulirlos y refinarlos en
, nosotros a fin de que tengan la belleza y el
Oré y ; brillo que pueden revelar. Cada vez que
respondió examines en tu corazón una de las pro-
Oré durante tres mesas de Dios, quedará más refinadas y
años que yo pudiera pulida en ti y brillará con gran resplandor
comprar mi caballo en tu alma.
preferido. No estaba Una de las más invaluables gemas que
en venta. Ahora, encontrarás en la Palabra es la voz de
ya hace dos a"« Dios. Él nos habla a través de su Palabra
que tenjo ese caba^^ a medida que la leemos o la escuchamos,
y significa muc o para • £s n0 podemos aprender a reco-
(15 «»os de edad) nocer de verdad la voz de Dios cuando
le habla al alma si primero no lo escu-
chamos hablar en su Palabra. Mientras más escuches su voz en la
Palabra, más fácil te será reconocerlo cuando te habla al corazón
cuando sales al mundo. Mientras más disciernas la voz de Dios,
menos oportunidad habrá de que aceptes cualquier tipo de fal-
sedad..,
I,a Palabra de Dios nos endereza la mente y el alma y nos
ayuda a pensar con claridad las cosas. Nos aparta de pensamientos
autodestructivos y nos permite disfrutar una sensación de bie-
nestar. Nos da esperanza y nos mantiene en el camino. Nos pro-
vee un sólido cimiento sobre el cual edificar una vida de victoria
y paz, Dios espera con ansias reunirse contigo cada día en su
Palabra, y quiere que te sientas de la misma manera.
No existe manera de acercarse uno a Dios, ni de tener un
corazón limpio y recto, ni de ser una persona perdonadora, ni
de hacer lo que es recto, ni de enfrentarte al enemigo, ni de
dominar lá mente a menos que uno se adentre en la Palabra de
84

Señor» ayúdame a comprender tu Palabra
Dios todos los días. Aun si solo lees uno
o dos versículos. O si tornas un versículo
y lo repites muchas veces para que penetre
en tu mente y en tu corazón. Por ejemplo,
si tornas el versículo «Todo lo puedo en
Cristo que me fortalece» (Filipenses -i:13)
y lo dices repetidas veces durante el día,
influirá enormemente en tu vida ese día. ?
La Palabra de Dios es tu brújula y tu
guía. Sin ella no puedes llegar adonde
tienes que ir.
Mi oración a Dios
Señor, gracias por
morir por mí, resucitar
Í entrar a mi corazón.
Gracias por aclararme
mi llamado y mi futuro.
Te ruego que me enseñes
a ser un mejor discípulo,
a aprender más de fu
Palabra y a comprender
más de ti a fin de que
pueda llevar más
personas a ti.
(14 años de edad)
• ' i 4,í i'll/A'-tl(¡¿' T
Señor, graa^poirque '«láta^difá eü
y lumbrera a mi camino» (Salmo 113:105 , RV-60). Tam-
bién sé que es alimento para mi alma y que no puedo
vivir sin ella. Ayúdame a comprenderla cada vez que la lea.
Muéstrame los tesoros ocultos que encierra. Enséñame
las cosas que necesito ver. Muéstrame lo que quieres que
sepa. Ayúdame a leer algo en tu Palabra cada día. Ayú-
dame a memorizar ciertos versículos. Cámbiame a
medida que la lea. No quiero ser solo un oidor de tu
Palabra; quiero ponerla en práctica también. Ayúdame
a hacer las cosas que tu Palabra dice que haga. Muéstrame
cuando no esté haciendo lo que dice.
Te ruego que tu Palabra me limpie el corazón y
corrija cualquier mala actitud que tenga. Te pido que
me des esperanza y la capacidad de elevarme por encima
85

El poiey «leí joven «jua ora
de mis limitaciones. Te ruego que me prepares para
avanzar hacia el propósito que tienes para mí en esta tierra.
Te suplico que aumentes mi fe y me recuerdes quién eres
y lo mucho que me amas.
Gracias, Señor, porque cuando investigo en tu Palabra
puedo verte con más claridad. Ayúdame a escuchar tu
voz hablando a mi corazón cada vez que la lea o la escuche.
No quiero jamás apartarme del camino en el que me
estás guiando. Te lo pido en el nombre de Jesús.
La palabra de Dios es viva y poderosa, y más cor-
tante que cualquier espada de dos filos [...] y juzga
los pensamientos y las intenciones del corazón.
HEBREOS 4:12
El que atiende a la palabra, prospera. ¡Dichoso el
que confía en el SEÑOR!
PROVERBIOS 16:20
Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los
malvados, ni se detiene en la senda de los peca-
dores ni cultiva la amistad de los blasfemos, sino
que en la ley del SEÑOR se deleita, y día y noche
medita en ella. Es como el árbol plantado a la ori-
lla de un río que, cuando llega su tiempo, da fruto y
sus hojas jamás se marchitan. ¡Todo cuanto hace
prospera!
SALMO 1:1-3

JUM
r ||
í t $
i "í
'W ->3
"Jmmm
•P
-lio más difícil para mí en cuanto a la lectjpra pli
Palabra de Dios es:
de-la
.;£© más difícil para mí en cuanto a comprender la Palabra
de Dios es:
ios tres pasajes bíblicos que más quiero memorizar a fin de
que pueda tener siempre la Palabra de Dios en mi corazón son:

L'W \EZ FSCLCHt t"N'\ ENTREVISTA UN I \ RADIO CON" J
algunos miembros de una pandilla en Los Angeles, donde yo
\ ivía. En ese tiempo, la delincuencia era muy alta en esa ciudad
debido a. una espantosa ola de ocasionales tiroteos y asesínalos
dirigidos y cometidos por las pandillas. L1 presentador del pro-
grama de debate entrevistaba a esos muchachos, algunos eran
apenas adolescentes y otros con poco más ele veinte años. Dije-
ron que Ja principal razón de haberse unido a su pandilla era
para tener un sentido de pertenencia. En declaraciones que hie-
lan la sangre, los muchachos dijeron que harían cualquier cosa
que hiciera falta para que el grupo los aceptara v respetara.
Incluso cometer asesinato.
Algunos de los muchachos revelaron que la prueba principal
tic si podían aceptarlos en la pandilla era salir y matar a alguien.
A cualquiera. El asesinato era por completo al a7nr. No había
otra razón para matar que terminar el requerimiento de la ini-
ciación y probar que harían cualquier cosa por el grupo. Algu-
nos de los mui.hat.hos entrevistados confesaron que detestaban

El poder «1« joven ora
hacer eso y deseaban que hubiera otra manera de convertirse en
miembro. Sin embargo, estaban tan desesperados por pertene-
cer a una familia de personas donde se sintieran aceptados que
lo hacían. Esto fue una aterradora revelación para todos los que
vivíamos allí, pues significaba que ningún lugar era seguro.
Alrededor de ese mismo tiempo, un amigo nuestro estaba
fuera delante de su propia casa a plena luz del día cuando se le
acercaron dos muchachos. Avanzaban por la calle en un vecin-
dario agradable y tranquilo, cuando uno de los muchachos sacó
una pistola y le disparó a nuestro amigo a quemarropa. No hubo
robo ni intento de cometer otro delito, y los muchachos huye-
ron a pie. Nuestro amigo sobrevivió, pero el daño a su cuerpo le
afectó en gran medida sus habilidades para hacer el trabajo en el
que era un experto, y le llevó años recuperarse.
Era obvio que aquellos jóvenes en la entrevista no tenían
sentido de propósito en la vida fuera de ser parte de una pandilla.
La mayoría se había criado sin padre, y en algunos casos también
sin la madre. Estoy segura de que si cada uno de ellos hubiera
tenido un fuerte sentido de familia, y amor y aceptación de otras
personas, nunca hubieran escogido este estilo de vida destructiyo.
Esta historia ilustra con cuánta desesperación las personas
necesitan a otras personas. Y cuánto necesitan al Señor. A todo
el mundo le hace falta sentirse aceptado. Todos necesitamos con
desesperación sentir que pertenece a una familia, que tiene rela-
ciones, que pertenecemos a algo. Si no te das cuenta de esto, es
probable que se deba a que siempre lo has tenido. Dios nos creó
para estar en familias. Tenemos por naturaleza hambre de ser
parte de algo que nos dé un sentido de aceptación y respaldo, y
que nos necesiten y aprecien. Y los adolescentes sienten eso con
mayor intensidad que las personas de cualquier otra edad.
Cuando los jóvenes se ven privados de buenas, saludables y
amplias relaciones, buscarán algunas que no lo son. Así es cómo
empiezan a andar en malas compañías. Así es como se forman
las pandillas.

Señor» ayúdame a liberarme la la presión.
r^tl?-™ ^cepk^ciitíl-. - - - -
Como joven, el sentimiento de aceptación de los pares es una
de las cosas más importantes en tu vida. No reconocer esa nece-
sidad de aceptación puede meterte en problemas si no te das
cuenta de cuán fuerte puede ser la presión social a tu edad. No
creo que sea nunca tan fuerte en ninguna otra etapa de la vida.
Las reglas sociales tácitas de los adolescentes son a menudo
muy estrictas, y los amigos pueden ser crueles e intolerantes
cuando alguien viola esas reglas. Por ejemplo, en algunos lugares
una violación de esta estructura social ocurre si una persona no
viste lo que debe en el lugar adecuado, ni luce de cierta manera.
No verse de la «manera aceptada» puede impedir qug se acepte a
esa persona en la estratosfera de la elite. O si una persona no
actúa de cierta manera, no hace ciertas cosas, ni tiene ciertas
habilidades, quizá no la acepten en un grupo en particular. Los
adultos experimentan algo de eso también, pero tienen la liber-
tad de buscar su lugar específico en la vida y estar donde se sien-
tan más cómodos. Los jóvenes casi nunca tienen esa libertad.
Tienen que dar lo mejor de sí donde estén y con los que estén. Y
eso puede ser muy difícil.
Ser aceptados es algo grande, y no sentirse aceptado puede
ser la raíz de muchos problemas en la vida de un joven. Cual-
quier sentido de rechazo puede ser devastador, y el recuerdo de
esto puede torturar a alguien por muchos años. Ya sea que otras
personas te acepten o no, eso va a influir en la manera en que te
sientes respecto a ti mismo y a tu vida. La falta de aceptación de
las personas que quieres que te acepten puede hacer que te
parezca que tienes que hacer un esfuerzo y que te acepten otras
personas que quizá no sean en absoluto un reflejo de lo que tú
eres en realidad. Eso es lo que les ocurrió a esos miembros de la
pandilla que entrevistaron. Las cosas que les exigían los líderes
de las pandillas no eran algo que querían hacer, pero su deseo de
aceptación era más fuerte que su sentido del bien y el mal.
§1

El pcÜÉr del joven tfue ora
Eso es lo que se llama presión de los pares o de los iguales:
Adaptarte a lo que otras personas de tu edad quieren a fin de
obtener su aceptación. Es temer la opinión de otros. Y puede ser
muy perjudicial para tu vida cuando te lleva a hacer cosas que
no harías normalmente con el propósito de ganar la aprobación
de cierto grupo de personas. Desde luego, esta ilustración de la
pandilla es un ejemplo muy extremo de eso, pero muestra lo
fuerte que es la presión de los iguales.
Si sientes la presión intensa de las personas que te rodean, com-
prendo lo difícil que es. Sin embargo, hay una manera de llegar
a ser suficiente fuerte para liberarte. No es que no la sentirás, sino
que no te importará tanto.
El rechazo de ciertas personas puede ser muy doloroso. Y
debido a que tu mundo es tan pequeño, quizá te parezca que no
existe escapatoria. Cuando estás en décimo grado, los tres años
que tienes por delante antes de que te puedas graduar y dejar ese
ambiente puede parecer una eternidad. Sin embargo, Dios no
quiere que sufras en una incómoda situación social en que la
presión de los demás te está haciendo un desdichado. No quiere
que toleres el problema ni que a duras penas logres pasarlo.
Quiere que puedas sobreponerte a él. Y puedes hacerlo cuando
te das cuenta de lo mucho que Dios te acepta y
. .u. te ama y cuando comprendes el poder que tienen
Mis principales r M
_ tus oraciones para cambiar las circunstancias,
""ración son: Los problemas surgen cuando tratas de
conocer v*v'r con^orrne a normas de otras personas
• Que Pue^ en JUgar vivir conforme a las de Dios. Para
ffl evitar eso debes hacer de la norma divina una
. Que Dios me perdone .
_ ,„„„„ prioridad en tu vida y pasar tiempo con otras
• Que tenga pureza r / r . r
en mis relaciones personas que hacen lo mismo.
. por la renovación
de mi mente ""' " ; ÍQSlI^^v , . T ;
. Por la salvación de _ . . r
mi familia y amigos Podemos vivir felices y con éxito si tene-
(16 19 años de edad) mos nuestras prioridades bien claras en nuestra
m

Señor» ayúdame a liberarme éM la presión,.
mente. Si nuestras prioridades no están en orden, nos arrastrarán
las expectativas de nuestros pares. Las. prioridades adecuadas no
son algo que podamos entender por cuenta nuestra. Tenemos
que saber lo que Dios dice que nuestras prioridades deben ser.
Necesitamos tener un claro conocimiento de la Palabra de Dios
y la dirección de su Espíritu Santo.
Nuestras dos prioridades más importantes vienen de forma
directa de la Palabra de Dios. Estas son:
Prioridad #1: Amar a Dios 0r® y ©ios
Prioridad #2: Amar a los demás re3Poní(ió
Jesús nos habló sobre estas dos máximas oramos'i'* ^
prioridades diciendo: «Amarás al Señor tu CUjli.. . " 6
T-v 1 , J . 0 *nos por
Dios con todo tu corazon, y con toda tu una niña y Dios
alma, y con toda tu mente. Este es el pri- we dio una hermanita
mero y grande mandamiento. Y el según- Ii4 años
do es semejante: Amarás a tu prójimo
como a ti mismo» (Mateo 22-'.i 1- 39, RV-60). No puede haber
nada más claro que eso. Si mantienes estas principales priorida-
des: el amor a Dios y el amor a otros, te guiarán a establecer
todas las demás prioridades en tu vida.
Tu relación con el Señor debe tener siempre la más alta prio-
ridad por encima de todas las demás. Cuando el Señor dijo: «No
tendrás dioses ajenos delante de mí» (Éxodo 2ú;3, RV-60), lo dio
a entender. Dios quiere tu atención total. Cuando lo buscas pri-
mero a Él cada día y le pides que te ayude a poner en orden tu
vida, lo hará. Sé por experiencia, y estoy segura que tú también,
que cuando no buscamos primero a Dios, nuestra vida se des-
controla. Cuando eso ocurre, la vida comienza a gobernarnos en
vez de que nosotros la gobernemos. La gente comienza a tener
más influencia en ti que Dios.
Dios es un Dios de orden. Lo podemos afirmar al observar
el universo. Nada es por casualidad ni accidental. El tampoco
quiere que lo sea en nuestra vida. Su voluntad es que «todo se

El poder" del- joven que ora
haga decentemente y con. orden» (. Corintios 14:40, LBLA). Y
cuando se lo pedimos, Él nos ayuda a que sea exactamente así¿-
Nos muestra cómo ponern os en línea bajo una autoridad adecuada-
de modo que podamos esitar bajo la cobertura de su protección,?
Esto es crucial para resistir la presión social. -<%
UpiRpren^e a .fmiéri sirves' *
Mi
La sumisión es una condición del corazón. Es algo que noso-,
tros decidimos hacer, no algo que alguien nos obliga a hacer. Tener'
un corazón sometido significa que estás dispuesto a entrar en una,;
adecuada alineación con 1 a voluntad de Dios.
Nuestra primera prioridad en la sumisión debe ser siempre;
«[someternos] a Dios» (Santiago 4:7). Esto significa que no tienes";
que someterte a los deseos: de alguien que trate de presionarte áj
hacer algo que va en contra de las leyes de Dios. Tú puedes tener'
un corazón sometido y todavía ser capaz de decir hasta aquí";
cuando lo que se te pide viola tu conciencia y las leyes de Dios. '„
El mismo Jesús se sometió a Dios. Parecería que si alguien'
no tuviese que estar en perfecta sumisión a Dios, ese sería Jesús.,
Sin embargo, a fin de cumplir él propósito de Dios con su vida,
se sometió a la voluntad «del Padre, hasta el punto de sufrir y,
morir. Dios quiere que tengas «la misma manera de pensar que.
tuvo Jesucristo» (Filipenses ,2:5-8, TLA). Eso no significa que
tengas que morir, pues Jesús ya lo hizo. Significa que tienes qué
hacer de la voluntad de Dios tu primera prioridad. Lo que Él
quiere es más importante que lo que otra persona quizá te esté
presionando para que hagas.
SranftriwintRtQ
Más allá de la sumisión a Dios, la Biblia dice que debes
someterte a las personas de autoridad que Dios ha puesto en tu
familia, iglesia, trabajo y gobierno. Necesitas someterte antes
que nada a tus padres. La vida va a ser desdichada para ti si no lo haces.
94

Señor» ayúdame a liberarme éM la presión,.
También debes someterte a tus maestros, tu director, tu pastor y
a la policía. Sumisión es hacer lo que esa persona quiere. Sin
embargo, nunca debes someterte a alguien si sabes que te están
pidiendo que hagas algo que viola las leyes de Dios y tu conciencia.
Y eso se aplica hasta a esas personas importantes en tu vida.
Si una persona que es una autoridad designada te pide que
hagas algo que es malo, o si esa persona dice o hace algo que es
inapropiado y viola lo que es recto a los ojos de Dios, debes
declinar ser parte de esto y declararlo como malo, Dios nunca
quiere que seas objeto del abuso o la mala dirección de otra per-
sona. Si sabes que estás de acuerdo con alguien que está violando
la Palabra de Dios o las leyes de tu mundo, sin mencionar tu
propia conciencia, eso no es sumisión. Eso es una tontería. No
caigas en eso.
Cuando estás de acuerdo con lo que tus compañeros están
haciendo aun cuando sabes que no es bueno, te estás sometien-
do a ellos y no a Dios. He oído de jóvenes y muchachas que con-
fesaron que tuvieron relaciones sexuales en la adolescencia, a
pesar de que no querían hacerlo, solo porque otra persona lo
estaba haciendo y ellos querían que los aceptaran. Sométete a
Dios y a las autoridades que Él ha puesto en tu vida y no te
someterás a la presión de los demás.
el oompAnero «ue, presiona
Más allá de la sumisión a Dios y a otras autoridades designa-
das en tu vida, debes tener buenas relaciones con otras personas,
sometiéndose «unos a otros en el temor de Dios» (Efesios 5:21,
RV-60). La sumisión a otros requiere un corazón que artte a otras
personas como a sí mismo. Significa respetarlas como seres huma-
nos. Significa tratarlas con cortesía. Significa no despreciarlas ni
tratarlas con rudeza porque no tengan tu misma apariencia. Sig-
nifica ser amable con alguien que viste que maltrataron, y defender
esas personas contra esos que los maltratan.

El poder «iel -^overi q^i&e ora
Esto es un asunto serio. Cosas terribles y perjudiciales han!
venido sobre algunas personas debido a que otras las han tratado
con rechazo. El resultado final es la muerte y la destrucción. Los
peores ejemplos son los numerosos casos de muchachos qiu se
sintieron rechazados y terminaron matando a sus compañeros y a;
ellos mismos en las masacres en las escuelas. Quizá puedas hacer;
algo para ayudar a impedir que ocurra ese tipo de cosas en tu
mundo, orando por las personas que ves que rechazan. Como;
estás en ese mundo, puedes ver lo que no ven los adultos. Pídele;
a Dios que te muestre si alguien a tu aire--
dedor se está perdiendo debido a que sé'
sintieron rechazados por sus pares. Cu ando
te revele a alguien, ora que esa persona
encuentre aceptación. Ora para que encuen-
tre al Señor y llegue a comprender el pro-
pósito que Él tiene con su vida. Pregún-
tale a Dios si quiere que seas un instru-
mento de su amor para que esto sea así.
Dios es un Dios de amor, y nos pide
que tratemos con cariño a otros. Dios no
dice que tienes que ser el mejor amigo
de todos. Te dice que tienes que amarlos.
Él pondrá en ti la disposición de hacerlo. Cuando
eres amoroso y te preocupas por las personas lo suficiente para
respetarlas y aceptarlas como el hijo de Dios que eres tú, es una
cualidad muy popular que atrae a los demás a ti. Algunas veces
con una simple sonrisa y un reconocimiento de la presencia de
alguien puedes cambiar todo su día. Quizá hasta el curso de su
vida. Tú tienes poder para hacerlo porque eres un hijo de Dios y
el Espíritu Santo vive en ti. Dios te usará como un instrumento
de paz si se lo pides.
Cuando amas a Dios primero y a los demás después, las
demás prioridades de tu vida caerán en su debido sitio. Y
Oró y Bio»
respondió
Extrañé mucho
a mis viejas amistades
en mi nueva escuela.
As( que le pedí
a Dios que me hiciera
sentir mejor.
Ahora disfruto
mucho más de mi escuela.
(13 años de edad)
36

3 iibfti'arine é*
cuando tienes tus prioridades en orden, 1 oración a Dios
los pares no pueden presionarte para que Señor, te pido que
hagas algo que no agrada a Dios. me des fortaleza,
vahr f energía
fara queme siga
yendo bien en la escuela.
Impárteme tu gran
Her de modo
q«e pueda influir en otros.
(15 años de edad)
Señor, ayúdame a ponerte síéffipfé' trr primer lugar en
mi vida. Enséñame a amarte de todo corazón, mente y
alma. Muéstrame cuando no haga eso. Someto mi vida
a ti. Ayúdame a someterme siempre a las autoridades
que has puesto en mi vida. Ayúdame a resistir la presión
de los demás que quieren que sea parte de algo que no es
agradable a tus ojos. Ayúdame a juzgarme según tus
normas y no las suyas.
Revélame a alguien en mi mundo que está sufriendo
de sentimientos de rechazo y muéstrame cómo orar por
ellos. Haz que me dé cuenta y muéstrame cómo puedo
ser para ellos un instrumento de tu amor y de tu paz.
Sé que si mi vida no está en un orden adecuado, no
recibiré todo lo que tienes para mí. También sé que si te
busco primero, todo lo que necesite me será añadido
(Mateo *¡ ' -*). Te busco primero en este día y te ruego
que me permitas poner mi vida en un perfecto orden. Te
lo pido en el nombre de Jesús.

El poíler del joven que ora
Busquen primeramente el reino de Dios y su jus-
ticia, y todas estas cosas les serán añadidas.
MATEO #S33
El que encuentre su vida, la perderá, y el que la
pierda por mi causa, la encontrará.
MATEO 10:3:1
Obedezcan a sus dirigentes y sométanse a ellos,
porque ellos cuidan sin descanso de ustedes, sabiendo
que tienen que rendir cuentas a Dios. Procuren
hacerles el trabajo agradable y no penoso, pues lo
contrario no sería de ningún provecho para ustedes.
HEBREOS 13:17, DHH

Jl J
Tf S
tít t,>,
1 " !l
m>tr
manera en que más siento la presión de tes dpiná|jfen ¿m
vida es: 7*
'I
Las maneras en que puedo poner primero a Dios en mi
vida son:
Escribe una oración pidiéndole a Dios que te muestre qué
figuras de autoridad están en tu vida y qué puedes hacer
para estar sometido a ellas. Pídele que te muestre a alguien
que se sienta rechazado y que necesite tus oraciones.

a ione=>
•f
NO HAY NADA MÁS IMPORTANTE EN" la vida de un ¡oven que
tener amigos buenos que amen a Dios. La Biblia habla tanto
sobre la importancia de tener amigos buenos que no podemos
iraiar a la ligera esta pane de nuestra vida. Dice que -el justo es
guía de su prójimo, pero el camino del malvado lleva a la perdición»
(Proverbios Si es cierto que llegamos a ser como los ami-
gos con los que pasamos riempo, debemos seleccionar nuesiras
amistades con cuidado. Debemos seleccionar con camela .1
nuestros amigos y preguntarnos: «;Fs ese el lipo de persona a la
que me quiero parecer?». Si 110 es así, debemos pedirle a Dios
que nos ayude a libelarnos de esa relación y que 1 raiga a alguien
mejoi a nuestra vida.
La principal cualidad que debemos tener en mente al buscar
amigos fluimos 110 es lo atraethos. talentosos, ricos, inteligentes,
inllmentes, listos o populares que sean. Ls lo mucho que amen
y teman a Dios. 1.a persona que haga lo que sea necesario para
vi\ir en la perlccta voluntad de Dios es el tipo de amigo que te
impartirá algo de la bondad del Señor cada ve/ que estés a su lado.
¡M

El poíler del joven que ora
Pienso en Dios no quiere que nos unamos en
Dios como. yunta desigual con los incrédulos. Eso no
. Mi Salvador significá que nunca debamos relacionarnos
. Mi Proveedor COJtl personas que no lo conocen a Él. Sin
• Mi Creador embargo, nuestras relaciones más íntimas,
• Mi Amty° las que más influyen en nosotros, deben ser
. Mi Sefior con personas que amen y teman a Dios. Si
(16-19 aüos de edad) no tienes amigos íntimos que sean creyen-
tes, pídele a Dios que te envíe alguno. Él lo
hará. Usa las siguientes señales de amigos deseables e indeseables
para ayudarte a ver la verdad sobre tus relaciones.
iete sañales #1« un ami«o deseable
1. Un amigo deseable te habla la verdad con amor. «Fieles son
las heridas del amigo, pero engañosos los besos del enemigo»
(Proverbios 27:*. LBLA).
2. Un amigo deseable te da consejos sanos. «Para alegrar el corazón,
buenos perfumes; para endulzar el alma, un consejo de
amigos» (Proverbios 27:9, DHH).
3. Un amigo deseable te ayuda a convertirte en una mejorpersona.
«Hierro con hierro se aguza; y así el hombre aguza el rostro
de su amigo» (Proverbios 27:17, RV-60).
4. Un amigo deseable te ayuda a convertirte en una persona sabia.
«El que anda con sabios será sabio, mas el compañero de los
necios sufrirá daño» (Proverbios 13:20, LBLA).
5. Un amigo deseable permanece cerca de ti, incluso en los tiempos
difíciles. «El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo;
y amigo hay más unido que un hermano» (Proverbios 18:24,
RV-60).
i. Un amigo deseable te ama y no te abandona, aun cuando hagas
cosas tontas. «En todo tiempo ama el amigo, y es como un
hermano en tiempo de angustia» (Proverbios 17:17, RV-60).

Señor» ayúdame a tener buena« relaciones
1. Un amigo deseable te ayuda cuando
vida a fin de que no tengas que atrave-
sarlos solo. «Más valen dos que uno, por-
que obtienen más fruto de su esfuerzo.
Si caen, el uno levanta al otro. ¡Ay
del que cae y no tiene quien lo levante!»
(Éclesiastés 4:9-10).
Si tienes amigos con las cualidades
señaladas arriba, protege esas amistades
con oración. Si tienes amigos con algunas
de las cualidades indeseables anotadas
abajo, tienes que orar también por ellas.
Pregúntale a Dios si son personas con
las que Él quiere que pases tiempo o no.
Si es no, pídele que saque esas relaciones
nuevas que sean mejores.
wr.í Les «le aa aaú*Q ¿afiaseatol®
I. Un amigo indeseable no ama a Dios y no le interesa si daña a
otras personas. «En esta carta quiero aclararles que no deben
relacionarse con nadie que, llamándose hermano, sea inmoral
o avaro, idólatra, calumniador, borracho o estafador. Con tal
persona ni siquiera deben juntarse para comer» (1 Corin-
tios 5:11).
• 2- Un amigo indeseable es voluble e inestable, y uno nunca sabe
cómo va a actuar de un día para el otro. «No te asocies con
los que son inestables; porque de repente se levantará su
desgracia, y la destrucción que vendrá de ambos, ¿quién la
sabe?» (Proverbios 24:21-22, LBLA).
I Un amigo indeseable se enoja a menudo. «No te hagas amigo
ni compañero de gente violenta y malhumorada, no sea
tienes problemas en la
Mis principales
motivos de
oración son:
•Mis padres / mi familia
• Por un futuro cónyuge
• Q«e pueda hacer
buenos amigos
• Que Wva en
pureza sexual
• Que OÍOS me ayude a
hablarles a otros de Él
(13-15 años de edad)
de tu vida y te traiga
103

F.I pot^i-" del jo ver- «<ue ora
que aprendas sus malas costumbres y te eches la soga al cuello»
(Proverbios , DHH).
•i Un amigo indeseable te da consejos malos e impíos. «Cuán
bienaventurado es el hombre que no anda en el consejo de
los impíos, ni se detiene en el camino de los pecadores, ni se
sienta en la silla de los escarnecedores» (Salmo l'l, LBLA).
Un amigo indeseable es un incrédulo que no obedece la ley.
«No formen yunta con los incrédulos. ¿Qué tienen en común
la justicia y la maldad? ¿O qué comunión puede tener la luz
con la oscuridad? ¿Qué armonía tiene Cristo con el diablo?
¿Qué tiene en común un creyente con un incrédulo?»
( •" Corintios « ; i
Un amigo indeseable hace cosas necias; un necio hace cosas sin
considerar muy bien las consecuencias. «El que anda con
sabios será sabio, mas el compañero de los necios sufrirá daño»
(Proverbios 13:20, LBLA).,
7. Un amigo indeseable no es reverente hacia Dios y sus leyes. «Yo
soy amigo de los que te honran y de los que cumplen tus
preceptos» (Salmo 1í,9:|3, PHH).
a;¿»i3Qr1;át:icía «fe f:ener
Dios es nuestro Padre. Nosotros somos sus hijos. Eso signi-
fica que los que son creyentes err Jesús son nuestros hermanos y
hermanas. Somos muchos y no podemos vivir en la misma casa,
así que Dios nós pone en casas separadas. Podemos llamarlas
iglesias. Nuestras relaciones dentro de la familia de la iglesia son
cruciales para nuestro bienestar. La manera en que nos relacio-
namos con las demás personas allí influirá en gran manera en la
calidad de nuestra vida en el Señor. Nunca podremos alcanzar
nuestro pleno destino separados délas personas piadosas que El
pone en nuestra vida. No quiero decir que esas personas necesa-
riamente nos ayuden a hacer lo que hacemos, sino que nuestras
relaciones con ellas contribuirán a nuestro éxito.

Señor, ayúdame a tienar fouenás relacionen
Oré y Dios
respondió
Una noche oré que
mi amigo se diera
cuenta de que su vida
se estaba saliendo
de sus casillas. Lo llame'
esa noche y me dijo:
«Mi vida se esta' saliendo
de sus casillas»
y le entrego' su vida
a Cristo. Asf supe
que mis oraciones
fueron poderosas.
(18 »ños de «M)
Todos tenemos puntos ciegos. Todos
necesitamos personas que nos ayuden a
ver la verdad sobre nosotros mismos y nues-
tra vida. Necesitamos personas que nos
digan si nos estamos apartando del camino.
Y necesitamos tener el tipo de relación
que no se rompe cuando se habla la ver-
dad en amor.
Esto no quiere decir que nunca tendrás
un problema en alguna de tus relaciones
de la iglesia, ni que si lo tengas sea una
señal de que estás donde no debes estar.
Todas las relaciones tienen cosas que hay
que pulir. Sobreponerse a esos problemas
enriquece las relaciones. Aun así, tene-
mos que aprender a proteger en oración nuestras relaciones con
nuestra familia espiritual.
Es de suma importancia ir a una buena iglesia. Te brinda el
mejor ambiente donde se pueden formar relaciones saludables.
Si no vas a una iglesia ahora, pídele a Dios que te muestre dónde
debes ir. Si te sientes muy descontento en la iglesia a la que asistes
ahora, pídele a tus padres que te ayuden a encontrar otra iglesia.
Si se oponen a qúe cambies de iglesia porque quieren que asistas
con ellos, haz lo qué te piden. Es importante mantener la familia
unida. Si todavía Sientes que no es el lugar adecuado para ti, pídele
a Dios que cambie el parecer de tus padres en cuanto a esto ó al
menos que sean receptivos y te escuchen.
Suelo decirles a los padres que es suma-
mente importante para un joven asistir a
una iglesia con una buena enseñanza
bíblica que le guste y con un grupo de
jóvenes que disfrute. Sí tu iglesia no tiene
uno y la iglesia de un amigo sí, pregúnta-
les a tus padres si te permiten asistir al
grupo de jóvenes de tu amigo. Invítalos a (|j año: de edad)
Oré y Dios
respondió "
Mi mama' no podía tener
más hijos, pero yo oré
y pedí un hermanito
y unos meses m5s tardes

El poder ¿el-joven••.<!»« ora
que vayan allí también, para que vean
cómo es y sentirse cómodos con esto. Sin
embargo, respeta su decisión final, pues
Dios les da sabiduría como padres que
siempre tienes que respetar. En fin, que la
permanencia en la iglesia debe ser una
prioridad. Lo que tienes que enfrentar como joven es
demasiado difícil sin el apoyo de una buena familia espiritual en
el Señor.
Ten en cuenta que tu enemigo no quiere que estés en una
familia espiritual ni que tengas relaciones piadosas. Es por eso
que sabe lo beneficiosas que son para ti. Sabe que sin una familia
espiritual no crecerías como debes. Sabe que si no estás unido y
comprometido con una buena iglesia, terminarás viviendo en
rebelión de alguna forma, ya sea que te des cuenta o no. Sabe
que nunca serás todo para lo que Dios te creó si no estás conec-
tado a otras personas que amen al Señor de una manera profun-
da y significativa.
La i ición j^r \ im relacione^,.
No dejes la cuestión de tus relaciones al azar. Ora por cada
una de ellas. Es más fácil protegerlas en oración primero que
arreglarlas más tarde. Pídele a Dios que te ayude a ser un buen
amigo para otros y brindar en todas tus relaciones un corazón
puro y amoroso. Ora que lleguen a tu vida personas piadosas
con las que puedas conectarte. No fuerces las relaciones; ora por
ellas para que surjan.
A través de toda tu vida, las relaciones serán decisivas para tu
felicidad. Las buenas relaciones harán que tu vida sea más rica y
equilibrada y te darán un punto de vista más positivo. Las personas
que aman a Dios te ayudarán a andar por el buen camino. Lo
bueno en ellas te pulirá. La calidad de tus relaciones determinará
la calidad de tu vida. Y esto es algo por lo que vale la pena orar.
IQé
ííi oración a Dios
Señor, ayúdame
á hablarle
a la gente de ti.
{13 años de edad)

Señor, ayúdame a tener buenas relaciones
:sJÍÍor!^evo ante ti a cada unjáide mis relaciones a ti y te
pido que las bendigas. Ayúdame a escoger a mis amigos
con sabiduría a fin de quesee me descarríen. Dame dis-
cernimiento y fortaleza pára separarme de quien no sea
una buena influencia. , j
Te pido por mis ¿.elaciones con cada uno de los
miembros de mi familia. En especial, te ruego por mi
relación con (nombra el familiar que más te preocupa). Te
pido que restaures la relación que tengo con esa persona
de modo que sea buena y fuerte. Que tu perdón y amor
fluyan entre nosotros.
Te ruego que vengan a mi vida amigos que te amen,
modelos a imitar y mentores. Envía personas que sean
confiables, amables y amorosas. Sobre todo, te pido que
sean personas que tengan fe fuerte en ti y que me inspiren
a tener una fe más fuerte también. Ayúdame a estar
siempre en la iglesia adecuada con el fin de que pueda
estar conectado a una familia de iglesia buena y fuerte.
Te lo pido en el nombre de Jesús.
PODER
LA PJU .ABRA
Abandonen toda amargura, ira y enojo, gritos y
calumnias, y toda forma de malicia. Más bien,
sean bondadosos y compasivos unos con otros, y
perdónense mutuamente, así como Dios los per-
donó a ustedes en Cristo.
. EFESIOS 4:31-32
Y él nos ha dado este mandamiento: el que ama a
Dios, ame también a su hermano.
I JUAN 4:21
Dios hace habitar en familia a los desamparados.
SALMO #8:6, R.v-6O

, % ti
i
I ( ' % J f '
Anota todos los amigos y familiares por los-qj.fé'qui§ies orar
con regularidad. •••
-áensa en tus amigos íntimos. ¿Eres un amigo deseable para
esas personas? Revisa la lista de los amigos deseables e inde-
seables en las páginas 102-104. ¿Tienes algunas de esas
características indeseables? Si es así, enuméralas en una oración
pidiéndole a Dios que te ayude a eliminar esas características.
Si no, pídele que te ayude a ser el mejor de los amigos.
¿Tienes aríiistad con alguien que sientes que no es una bue-
na influencia para tu vida, alguien que cae en la categoría
de Amigo Indeseable? Si ese el caso, escribe una oración
pidiéndole a DióS1 qti'e o bien cambie a esa persona o la
saque de tu vida.. Si -nb puedes pensar en alguien así, escribe
una oración pidiéndole a Dios que te revele cualquier amis-
tad que está teniendo un efectp negativo en ti.

i:, : •••••'•Í::
'• «n»
ZV
C;u -vxno MVL\ C-VI IhOR\I-\, l"R \B \| VU \ mmi) cantante y
bailarina eti la televisión. Tenía que estar cantando codo'el día la
misma cana ó n mientias ensa\aba la coreografía. Solía ir a casa
en la noche y apenas1 podía dormir porque la música y la letra de
lás canciones en las que habíamos estado trabajando las seguía
escuchando una y otra \cz en mi mente. No me las podía sacar
de la cabeza.
Eso es lo que pasa cuando esc licitamos \ cantamos canciones
de alabanza y adoración una y otra vez. Siguen resonando en
nuestra mente, alma y espíritu, aun cuando en realidad no estemos
adorando a Dios. Incluso cuando estemos durmiendo.
\piendí esc principio hacernos cuando me convertí. Antes,
cuando sufría-de temor y depresión, muchas veces me despertaba
con un terrible sentimiento de temor, ansiedad y espanto, \ can-
taba o alababa a Dios hasta qu'e se iban esos sentimientos. Me
asombraba de que la alaban/.a siempie diera buenos resultados.
Había ido a ver varios médicos por el temor, la depresión
la ansiedad que sentía, pero la medicina no me avudaba lo que
Í
I

El poíler del joven que ora
debía, solo parecía cubrir el problema, sin librarme de él. El pro-
blema seguía allí cuando desaparecía la medicina. No estoy
diciendo que la gente no debe tomar medicina si está deprimida.
Estoy diciendo que esta no me resolvía el problema. Sufría de
depresión desde que era pequeña y mi madre me encerraba en
un armario. La desesperación, la impotencia y la tristeza que sentía
en cuanto a mí misma y mi vida hacían que me fuera difícil ter-
minar cada día. Necesitaba una infusión del gozo del Señor, y
eso es lo que la alabanza a Dios hacía por mí.
Cuando alababa y adoraba a Dios, era como estar conectada
a un suero medicinal espiritual por vía intravenosa. Mientras
tenía mi corazón y mis ojos elevados a Él en adoración y alaban-
za, el gozo del Señor se derramaba en mi mente, alma y espíritu
y hacía salir las tinieblas y la depresión.
Tengo más deseos Siempre me daba resuita(jos.
de orar cuando. Comencé a comprar canciones de ala-
• Estoy preocupado banza y adoración para ponerlas en el auto
• Mo sé qué hacer mientras conducía, en mi cuarto antes de
• Estoy agobiado acostarme, en el baño cuando me preparaba
espiritualmente para ir a algdn lugar, en la cocina mientras
• Estoy agradecido ^ cocinaba algo para comer, en toda la casa
• Siento que el spiri « donde estaba viviendo y, si era posible, en
Santo está conmigo ^ ^ en ej ue estaba trabajando. Algu-
[16-19 años de edad) ° . • ' V
1 ñas veces cantaba junto con ellas, pero en
otras ocasiones solo dejaba que la música
resonara en mi mente y espíritu. Me asombraba que la confu-
sión, la opresión, el temor y la ansiedad no pudieran existir en la
misma habitación donde se tocaba o cantaba la música de ala-
banza. Al final, me libré por completo de todas esas eniociones
negativas, pero seguía poniendo la música de adoración cada vez
que, quería tener paz y un mayor sentido de la presencia de Dios.
Me sorprendió descubrir el poder de la alabanza a Dios.
Aprendí que en cualquier momento que comenzara a sentirme mal
o triste, si alababa a Dios por lo que es y ha hecho, esos sentimientos
11 A
AXU

Señor» -ayúdame a alabarte en toáo tiempo
^desaparecían. Nada que hagamos es más
¡"poderoso ni más transformador. Es una
rde las maneras en que Dios nos transfor-
hma a nosotros y nuestras circunstancias.
íCada vez que alabamos y adoramos a
|Dios, su presencia viene a estar con noso-
tros y cambia nuestra actitud. Le permi-
Ite al Espíritu Santo ablandar y moldear
l'nuestro corazón a su antojo.
|Í Debido a que la alabanza y la adora-
|pión no son cosas que hacemos por natu-
raleza, tenemos que disponernos a hacerlo.
Y debido a que no es la primera cosa en que
I pensamos, tenemos que decidir hacerlo
I sin importar lo que nos esté pasando. Si
| tenemos un mal día, en lugar de sentir-
|nos desdichados, tenemos que decir: «Alabaré al Señor en todo
Bnomento». Desde luego, mientras más lleguemos a conocer a
|ÍDios, más fácil será la alabanza. Y mientras más comprendamos
jdo que se logra cuando le alabamos, menos podemos (dejar de
falabarle. Si alguna vez descubres que no tienes deseos de alabar a
|»Dios, lee las siguientes 20 razones de adorar a Dios del Salmo 103
8RV-60).
¡jP. ' '
fpinXñ casaaaa para aiaSaajLaJüoa-ahflca
«'. .1. Él perdona mis pecados.
; 2. Él sana mis enfermedades. .
- 3, Él rescata mi vida del hoyo.
[" 4 Él me llena de amor y favores.
Él me da alimentos buenos para comer.
(íti fe, Él ve que se haga justicia,
s Él me muestra cómo vivir.
Creo en la
oración porque:
* Mis oraciones ya
han sido contestadas
* Recibo lo que necesito
en lo emocional y
lo espiritual
* Dios escucha siempre
mis oraciones
* Es la única manera
en que puedo hablar
con Dios
* OÍOS hacía un milagro
en mi vida cuando
oraba antes
(13-15 años do edad)
'i.

.Ei pode*? '.fi^ip^eri que ora
1 K
Él me da misericordia. > mi:.
Él es clemente conmigo. i
Él es lento para la ira.
Él no contenderá conmigo
Él no estará enojado conmigo.
El no me castiga como lo merezco.
Él me muestra especial misericordia cuando lo adoro.
Él me quita todos mis pecados.
1A Él se compadece de mí. : •.••-• •. 'ÍV.-."
i. /. Él recuerda de lo que estoy hecho,
id Su misericordia hacia mí permanece para siempre.
X?-. Él me bendice cuando le obedezco.
J Él es el gobernador de todo.
Podemos decir que conocemos y amamos a Dios, pero si no
lo adorarnos y alabamos cada día, estamos en oscuridad respecto
, a quién es Él en realidad. «A pesar de haber conocido a Dios, no
lo glorificaron como a Dios ni le dieron gracias, sino que se
extraviaron en sus inútiles razonamientos, y se les oscureció su
Oré y Dios insensato corazón» (Romanos V ). Nos
respondió privamos muchísimo en la vida cuando no
. „ , , le damos gracias a Dios como debiéramos.
Me fracture cuatro v ° , , ,
„ . . . „. No queremos estar vagando en la oscuridad,
discos de mi columna „ n , . ,b..
.¡J.-J.« »» albergando cosas mutiles en nuestra mente,
en un accidente en ••',,,., ,
la gimnasia y me to"° bebido a que no adoramos a Dios.
dijeron que nunca más
podría hacer
"'i"! >f5Sk 1' f'jf ^ ^ -i»;» 'i"
A yiitífie <?*Iftv.;ir
gimnasia ni danzar. Al igual que un ave sabe cómo encon-
Oré que Dios me curara. trar la corriente de aire adecuada a fin de
Pos meses mls_tarde poder elevarse del sueJo y voIai. existe una
d rob|ema manera de elevarte para que puedas remontar
e ningún pr . - también el vuelo. Es a través de la alabanza
(15 años de edad)

Señor, ayúdame «* a¿abarte «-» toldo tiempo
¿,ia adoración. Y el momento más poderoso de hacerlo es cuanto
está en unión de otros creyentes. Cuando estás en un culto de
doración en la iglesia, en un grupo de jóve-
nes, en una reunión o en compañía de otros
''uStianos, ocurren grandes cosas en tu vida
:>en tu alma que quizá no ocurran en nin-
'n otro momento. La Biblia dice: «En
11 edio de la congregación te cantaré himnos»
Jebreos ¿. I ¿, LBLA). No olvides tener
'empos de alabanza junto a otros creyentes,
orque mientras elevas a Dios en alabanza,
• 1 Espíritu Santo levantará también tu espí-
itu y surcarás los cielos por encima de todo a liacer eso' suPe 1ue Dios
\ demás. era real y que me escuchaba.
Recuerda: «Estén siempre alegres, oren (13 anos «fe edad)
sin cesar, den gracias a Dios en toda situa-
ción, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús»
(1 Tesalonicenses 5:i#-18) . Haz que la alabanzá sea tu primera
reacción alas cosas difíciles q ue té Sucedan y no un pensamiento
después de los hechos. Dios siempre es digno de alabanza no
importa lo que esté pasando en tu vida.
Oré y Dios
respondió
Estaba viviendo en otro
país, pero ore' que Dios
me llevara a los
Estados Unidos.
Cuando Dios envió una
persona especial
para que me ayudara
Señor, no hay nada que me haga más feliz que adorarte.
Pido tu presencia ahora mismo mientras voy ante ti con
alabanza por lo maravilloso que eres. Te doy gracias por
todo lo que has hecho pór mí. Tú eres grande y digno de
ser alabado. Señor, gracias porque «has hecho que mi corazón
rebose de alegría» (Salmo1 &:?). - ¡ -
Gracias porque tú eres mi Sanador, mi Libertador,
mi Proveedor, mi Redentor, mi Padre y mi Consolador.
Gracias por revelarte a través de tu Palabra, por medio
de tu Hijo Jesús y por medio de tu Espíritu Santo. Gracias
por tu amor, paz, gozo, fidelidad, gracia, misericordia,

El potar éél -jjwmn qi*« ora
bondad, verdad y salud. Gracias porque puedo depender
de ti debido a que tú y tu Palabra son infalibles. Gracias
porque eres el mismo ayer, boy y por los siglos.
Alabo tu nombre en .este 'día, Señor, porque eres
bueno y porque para siempre es tu misericordia (Salmo
13§:I,, RV-60). «Porque tu misericordia es mejor que la
vida, mis labios te alabarán. Así te bendeciré mientras viva,
en tu nombre alzaré mis manos» (Salmo h:.: "<-4, LBLA).
Enséñame a adorarte con todo mi corazón de la manera
que quieres que lo haga. Ayúdame a hacer que la alabanza
y la adoración a ti sea mi respuesta a todo lo que me ocurra
en la vida. Te lo pido en el nombre de Jesús.
, ..... . •. 1
Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verda-
deros adoradores adorarán al Padre en espíritu y
en verdad; porque también el Padre tales adora-
dores busca que le adoren. Dios es Espíritu; y los
que le adoran, en espíritu y en verdad es necesa-
rio que adoren.
JUAN 4:23-24, RV-6O
¡Ofrece a Dios tu gratitud, Cumple tus promesas
al Altísimo! Invócame en el día de la angustia; yo
te libraré y tú me honrarás.
• • ' ' ' Salmo 50:14-15-
Alégrense todos los que en ti se refugian; para
siempre canten con júbilo, porque tú los proteges;
regocíjense en ti los que aman tu nombre. Porque
tú, oh SEÑOR, bendices al justo, como con un
escudo lo rodeas de tu favor.
SALMO 5:11-12, LBLA

. . . ,!li
"' : %M .«¿r ,
«¿Qué es lo que más agradeces a Dios hoy? J|scrroel§|i cc%-'
tmuacion como una oracion
de alabanza a Dios. (Pó^ejik|¿Kl'
«Señor estoy muy agradecido a ti por...»).
.Recuerdas la lista de los nombres de Dios del capítulo 1 en
las páginas 22 y 23? Escribe una oración de alabanza a Dios
escogiendo los nombres del Señor que más significado ten-
gan para ti hoy.
¿Te resulta difícil alabar a Dios cuando te suceden cosas que
te molestan? Piensa en la última vez que te ocurrió algo
malo o preocupante y cómo reaccionaste. Ahora escribe a
continuación de qué manera puedes reaccionar con ala-
banza la próxima vez-que te suceda algo desfavorable o per-
turbador. ¿Por qué.puédes alabar a Dios?

; I1'' '
y /

propo»1^
JANDO ERA ADOLESCENTE, NO SABÍA QUE Dios tenía un
>i opósito con mi vida. No sabía qu? Él tenía grandes cosas para
* ' ; hiciera por su reino. Si lo hubiera sabido, nunca habría mal-
lo mi tiempo haciendo cosas destructivas, ni hubiera ter-
íinado en serios problemas. No quiero que tú malgastes ninguna
te de tu vida haciendo eso. Quiero que sepas quién eres en el
eñor. Quiero que tengas la seguridad de que Dios tiene un plan
y un alto propósito para tu vida, a fin de que puedas avanzar
.hacia el de inmediato.
Muchas personas de entre veinte y treinta años de edad me
•.•han contado cómo malgastaron su tiempo tratando de descu-
brir lo que se esperaba que hicieran., y ahora sienten que no han
^alcanzado el ptopósito que-Dios tenía con sus vidas. Les digo:
»«Por mucho que el camino que elegiste se. apartara de los planes
iy propósitos que Dios tiene para ti, cuando rindes tu vida al
íSenoi, Él abre un sendero de donde estás a donde debieras estar,
' \ te pone en él. Qui/á Le Uc\e más tiempo llegar a donde debes ir
que si nunca te hubieras apartado del camino desde un

SI poeer del joven ^ite ora
principio, pero si sigues caminando cerca de Dios, Él te llevará a
donde debes estar. Y verás cumplido su propósito para tu vida».
La Biblia nos dice que «irrevocables son los dones y el llama-
miento de Dios» (Romanos 2 1 : s RV-60). Eso significa que no
te quitará los dones y las habilidades que te ha dado. No te los
retirará, abolirá, ni anulará. Siempre tendrás tus dones/Siempre
los podrás usar para su reino cuando los sometas a Él.
VMÍO í*l Mun¿o .tiene un proponr^
Cada uno de nosotros tiene un propósito en el Señor, pero
no todo el mundo se da cuenta de eso, Cuando no tenemos un
buen entendimiento de para qué nos ha hecho Dios, luchamos
por ser lo que no somos. Nos comparamos a otros y sentimos
como si siempre nos quedáramos cortos. Cuando no llegamos a
ser lo que pensamos que debemos ser, nos criticamos a nosotros
mismos y a nuestras vidas. Esto nos causa inseguridad, hiper-
sensibilidad, deseos de criticár, frustración e insatisfacción. Lle-
gamos a estar absortos en nosotros mismos, pues tenemos que
pensar a cada momento en nosotros y lo que debemos ser. Esto
nos obliga a tratar de esforzarnos demasia-
Lo más difícil d0 para lograr qüe la vida transcurra de la
de la oración es: manera que se supone que sea. Hasta tal
• No saber si Dios extremó, que nos lleva a decir falsedades
me escucha en realidad sobre nosotros mismos y a convertirnos en
• No saber si se mentirosos en cuanto lo que somos en
responderán mis realidad.
oraciones Guando estás rodeado de personas que
• Bajar la guardia para no tienen idea de quiénes son y a qué están
darle entrada al Espíritu llamadas a hacer, sientes su malestar, su
• Orar por otros insatisfacción, su ansiedad y su falta de paz.
además de mí Esto hace que te sientas incómodo con
• Saber que no siempre ella. Dios no quiere eso para ti. Él quiere
recibiré lo que quiero qUe tengas una clara visión de tu vida.
(16-19 años de edad) Quiere revelarte cuáles son tus dones y

Señor» ayúdame a encontrar ti propósito...
talentos y mostrarte cómo desarrollarlos mejor y usarlos para su
gloria.,
Mei«, j» ría atufe... .be,r*árf •« AJAU ** «nal««» -
¿i Todo el mundo tiene algún tipo de trabajo que hacer. No
íiimporta si eres un estudiante a tiempo completo, una niñera, un
jguardián, un voluntario en una misión de rescate o el jefe de tu
propio negocio. Tu trabajo es importante. No importa si estás
'recibiendo mucho dinero o si estás trabajando por casi nada o
gratis. Tu trabajo es valioso. No importa si lo reconoce todo el
jnundo, solo unas pocas personas o nada
«$nás que Dios. Tu trabajo es determinante,
j Cualquier trabajo que estés haciendo,
"incluso si es solo un empleo temporal,
^quieres hacerlo bien y quieres tener éxito.
Si eres estudiante, el estudio es tu empleo.
A ti no te pagan con dinero por eso, pero
recibes el pago con buenas calificacio-
nes, autoestima, buenas oportunidades
|en el futuro y la satisfacción de que lo
«lias hecho bien. Cuando el trabajo que
^realizas es bueno, hace que te sientas bien contigo mismo y con
ttu vida. Incluso si es algo que no crees importante, te está prepa-
rando de cierto modo para lo que Dios tiene para ti en el futuro.
La Biblia nos dice que el «trabajador merece que se le pague
'su salario» (X Timoteo 5:18). Eso significa que mereces que se te
pague o recompense por tu trabajo. Algunas veces la recompensa
'está en el resultado?A ti no tienen que pagarte por limpiar tu
"fcuarto, servir sopa en la misión de rescate o enseñarle a un niño
a atarse sus zapatos, pero tu recompensa por ver el resultado de
-tu labor es de gran valor. «El salario del justo es la vida» (Prover-
bios .i C);l|). Sea cual sea tu trabajo, es importante para Dios, es
importante para otros y es importante para ti. Dedícale tu tra-
bajo al Señor y pídele que lo bendiga.
!' — ¡
Tenf o más deseos
de orar cuando:
•Estoy solo
• Me siento desanimado
• Antes de acostarme
• Dios me dice
que lo haga
• Veo sufrir a otros
(13-15 años de edad)

Si pofflwr del jpven «jue ora
' " . y ,iirc«e vas '
La predestinación significa que tu destino ya está determi-
nado. La Biblia dice que nosotros somos predestinados de acuerdo
a los propósitos y la voluntad de Dios (Efesios 1:11, RV-60). Eso
significa que Dios sabe adonde debes ir. Y sabe cómo vas a llegar
allí. Sin embargo, aun cuando tienes un des-
tino, no puedes llegar allí sin estar conectado
al Señor que te lo di;o en un principio.
Cuando no te mantienes conectado a
Dios, en un momento de debilidad, tales como
de pasión o enojo, puedes acabar con tu des-
tino. A cada momento nosotros vemos per-
sonas en las noticias que hacen eso. Cual-
quier criminal que roba, mata y destruye no
tiene idea de para qué lo hizo Dios. Si com-
prendieran con claridad que Dios tiene un
alto propósito con su vida, no la perderían
con tales acciones y decisiones tontas.
Cuando comprendas que Dios tiene
un propósito para tu vida, dejarás de tener
inseguridad acerca de tu futuro. Él te capa-
citará para hacer lo que debes hacer. Debido
a la grandeza de Dios en ti, Élpuede lograr grandes
cosas por medio de ti. Cuando sepas lo que eres en el Señor, y que
Él te está llevando, te sentirás muy seguro.
ZQfliftfr « a • * ;
Una de las cosas a que todos estamos llamados es a darnos a
otras personas. Dar a Dios y a otras personas es una parte de tan
vital importancia en nuestra vida en esta tierra que nunca pode-
mos lógraf todo lo que queremos ver que pase en nuestras vidas
si no lo hacemos. Cuando nos damos a Dios y a otros, eso crea
un vacío en el cual Dios derrama más bendiciones. Si impedi-
mos que fluya, nos taponamos la vida.
Mis principales
motivos de
oración son:
• Conseguir entrar en
una buena universidad
• Comunicarme mejor
con mis padres
• Que Dios me revele
su voluntad
• Por mi destino, mi
futuro y mi propósito
• Por protección para
mí y mi familia
(16-19 años de edad)

Señor, ayúéame a encontrar tjk$r<opc*ato
Oré y Dios
respondió
No tenia amibas a
principios de año.
U pedí a Dios
que me diera una buena
amiga. Ahora tengo
la mejor amiga,
/ ella me ha ayudado
a que mi vida tenga
«n nuevo rumbo
y que vaya por
el buen camino.
(14 años de edad)
Una de las mejores cosas que puec|¡§
liarle a alguien es tus oraciones. Tú puedes
arar por su protección, salud, salvación,
familia, finanzas o cualquier o traposa
jjue quizá necesiten. A la oración por» ptros
jg le llama oración de intercesión.¿Esta es
|tna parte de nuestro llamado que todos
junemos en común porque a todos nos
jan llamado a interceder por. los demás,
¡ia, oración es el mayor regalo-. Yo preferiría
jpner a alguien que orara por mí que
íjaalquier otra cosa que pudieran darme.
Kío olvides que parte de tu llamado en
:a vida es orar por otros,
fe .-.:, .• ; ••• , .• • ' •
|i<ic» tus sueños ' 1 •• ' ' '
Tú nunca puedes avanzar hacia todo lo que Dios tiene para
ti y llegar a ser todo para lo que te creó sin rendirle a Él tus sueños,
esús dijo: «El que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que
|ierda su vida por mi causa, la encontrará» (Mateo 3J;55). Eso
jignifica que si quieres tener una vida que sea segura en el Señor,
¿enes que soltar tus planes y decir: «No se haga voluntad, sino
la tuya, Señor».
Esto es difícil de hacer, porque soltar tus sueños es lo menos
•que queremos hacer. Pero si le pides a Dios que se lleve los sue-
gros de tu corazón que no proceden de Él y ponga en ti los que
Json suyos, no te puedes equivocan Si tienes un sueño que no es
pe Dios, cuando se lo rindas, te quitará tu deseo por eso y te dará
lo que i?/desea para ti. Esto puede ser muy doloroso, sobré todo
¡si es un sueño al que has estado apegado por mucho tiempo. Sin
¡embargo, tú no quieres pasarte la vida yendo detrás de un sueño
'que Dios no bendecirá. Si lo haces, estarás frustrado a cada ins-
tante, y el sueño jamás se hará realidad.

El poder del gs>v®n «|ue ora
Uno siempre quieres vivir los sueños que Dios pone en el
corazón. Aun si los sueños que tienes en tu corazón ahora mis-
mo son de Dios, tienes todavía que .rendírselos. Es por eso que
Dios quiere que te apegues a El y no.a tus sueños. El no quiere
que te esfuerces para hacer que se cumplan. Quiere que confíes
en que El puede hacer que se cumplan .
EaJbu** 4«*- tu pcopóaito.
Todos necesitamos tener un sentido del porqué estamos aquí.
Todos necesitamos saber que nos crearon con un propósito. Noso-
tros nunca encontraremos satisfacción ni felicidad mientras no
hagamos las cosas para las que nos crearon.
Aun así, Dios no nos llevará a las grandes cosas
a las que nos ha llamado a menos que no nos
haya hallado fieles en las pequeñas cosas que
nos ha dado. Por lo tanto, si lo que estás
haciendo ahora mismo te parece ser algo
muy pequeño, ¡alégrate! Dios te está prepa-
rando para las grandes cosas del futuro.
Dios tiene un propósito para ti en este
momento. Él tiene algo para que tú hagas
hoy. Si no estás seguro de lo que Dios quiere
que hagas hoy, pídele que te lo muestre y lue-
go haz lo que Él le dice a tu corazón. Cuando eres fiel en las cosas
pequeñas, te llevará hacia cosas mayores.
En cuanto al llamado de Dios en tu vida, la Biblia dice que
Dios «nos salvó y nos llamó a una vida santa, no por nuestras
propias obras, sino por su propia determinación y gracia. Nos
concedió este favor en Cristo Jesús antes del comienzo del tiempo»
(2 Timoteo «Tenemos dones diferentes, según la gracia que
se nos ha dado» (Romanos Pues «cada uno tiene su propio
don de Dios, uno a la verdad de un modo, y otro de otro» (1 Corin-
tios 7:7, RV-60). Así que entonces, «según el Señor ha asignado a
Mi oración
a Dios
Señor, muéstrame
tu Voluntad
y abre puertas en
la vida de otros
a fin de que
comprendan también
tu voluntad.
[14 años de edad)

Señor» ayúdame a encontrar ti propósito...
da uno, según Dios llamó a cada cuál, así ande» (1 Corintios
I7, LBLA). Pido que Dios «les dé el-Espíritu de sabiduría Y de
delación, para que lo conozcan Mejor. Pido también que les
in iluminados los ojos del corazón para que sepan a qué espe-
jpzá él los ha llamado» (Efesios iil7-18). «Que te conceda lo
|e tu corazón desea; que haga que se cumplan todos tus planes»
ialmo 20:4).
Recuerda que Dios tiene cosas importantes para que hagas
í»n tu vida, y Él ha colocado dones, talentos y habilidades en ti
ara ese propósito. No impórta si los demás no lo ven en este
tomento. Dios se los revela a otros cuando ya Él está listo para
icerlo.
Señor, gracias porque tienes un plan y un propósito para
mi vida. Sé que tu plan para mí existía antes de que te
conociera y hará que se cumplan. Sé que tengo el llamado
a servir y ayudar a otros, así que úsame como tu instru-
mento para producir un cambio positivo. Muéstrame lo
que quieres que haga para servir a mi familia, a mis amis-
tades, a la iglesia y a las personas que pongas en mi vida.
Ayúdame a sobresalir en mi trabajo a fin de que el
resultado de lo que hago agrade a los demás. Abre puer-
tas de oportunidades para usar mis habilidades y cierra
las puertas que no deba atravesar. Dame sabiduría y
dirección en esto. Bendice el trabajo que estoy haciendo
ahora y todo el que me llames a hacer en el futuro.
Dame la capacidad para hacerlo con éxito.
Sé que para cualquier cosa que me has llamado a
hacer, tú me capacitarás. Te ruego que nada me aparte
de cumplir el plan que tienes para mí. Rindo mis sueños
a ti. Que nunca me aparte de lo que tú me has llamado a
hacer y a ser. Dame visión en la vida y un fuerte sentido
de propósito. Te lo pido en el nombre de Jesús.

poííer flel joven, que or-i
Vivan de una manera digna del llamamiento que
han recibido, siempre humildes y amables, pacien-
tes, tolerantes unos con otros en amor. Esfuércense
por mantener la unidad del Espíritu mediante el
vínculo de la paz.
EFESIOS - .I
Esfuércense más todavía por asegurarse del lla-
mado de Dios, que fue quien los eligió. Si hacen
estas cosas, no caerán jamás.
', PEDRO 1;1£¡
Sea la gracia del Señor nuestro Dios sobre nosotros.
Confirma, pues, sobre nosotros la obra de nuestras
manos; sí, la obra de nuestras manos confirma.
7\". .,:.:•• ' SAUMO.ÍÍOÍJ?, UJLA

/Cuáles son tus dones, talentos y habilidades?,¿scállb ctfcak
• i-i ^At J^y T*
quier cosa que te gusta nacer, quieres hacer, eres üuéfi'ó'
haciéndolo o que te gustaría aprender a ser bueno hacién-
dole. •••..• :,
es lo que más te gustaría hacer en la vida? Esto no
quiere decir que tengas que hacerlo ni que cambies de opi-
nión más tarde, sino que casi siempre las cosas que disfrutas
al hacerlas de algún modo se usarán a fin de prepararte para
lo que Dios te está llamando a hacer.
.Escribe una oración a Dios pidiéndole que te revele su lla-
mado para tu vida. Pídele que te ayude a entender y desa-
rrollar los dones, talentos y habilidades que Él ha puesto en ti.

g?v
<f
r*
\ VEZ PASÉ UNA SEMANA DE VACACIONES EN LA FLORIDA,
•nic' quedé en un alto condominio con vista al mar. Mientras
íab«i parada en el balcón del séptimo piso mirando hacia el
Üvano. tenía una interesante vista del agua debajo. Desde donde
k\iba, podía ver con claridad dónde estaban los lugares bajos, y
)iide el fondo del mar caía de repente y el agua era muy honda,
^servaba a la gente nadar como acostumbraba y de pronto se
íían en un lugar poco profundo y estaban obligados a ponerse
pie. El agua en esos lugares bajos llegaba apenas a las rodillas.
IM fascinante observar a los nadadores andar por la meseta are-
qsa y luego caer de buenas a primeras por la orilla dentro del
*ua profunda.
• Me daba cuenta de que si .hubiera podido estar conectada a
da uno de esos nadadores mediante un celular a prueba de agua,
idí.i haberles dicho cuándo estaban cerca del borde para que no
Cayeran. Sin embargo, ellos no tenían comunicación conmigo,
que no podía decirles lo que veía desde mi perspectiva.
-W son las cosas con Dios. Él ve todo lo qúe nos está pasando
rque se encuentra por encima de todo. Si estuviéramos conectados

El poieir. ile|J joven, que ora
con Él de forma regular y le dijéramos: «Señor, guíame a fin de
que no caiga», Él podría evitar que nos cayéramos. A pesar de eso,
demasiado a menudo no hacemos esa llamada. No buscamos su
dirección. No le pedimos sabiduría. No consideramos su pers-
pectiva. Y con mucha frecuencia caemos de cabeza debido a esto.
Un hombre llamado Lot, el sobrino de Abraham en la
Biblia, terminó capturado por el enemigo porque decidió estar
en un lugar que él pensaba que era bueno para vivir (Génesis
j r«-.' 1). No obstante, estaba entre personas malvadas que a
la larga tendrían una gran parte en su caída (Génesis ').
Escogió lo que él pensaba que era lo mejor, en lugar de pedir lo
que Dios sabía que era mejor. ¿Cuántas veces la gente se sale de la
protección de Dios y se aleja de lo mejor que puede darles, todo
porque ha escogido lo que piensa que es mejor para su vida? No
piden la sabiduría y la dirección de Dios. Todos hacemos eso en
algún momento u otro. Por fortuna, a veces tenemos que apren-
der primero algunas lecciones duras.
¿Alguna vez has visto a alguien que es evidente que no tiene
sabiduría haciendo cosas malas o tomando una decisión tonta?
Las consecuencias son claras como el agua para ti, pero ellos no
las ven en absoluto. Siempre es más fácil ver la falta de sabiduría en
otra persona que en nosotros mismos. Es
por eso que debemos orar a menudo por
sabiduría.
Sabiduría es tener comprensión y enten-
dimiento claros. Significa saber cómo apli-
car la verdad en cada caso. Es discernir lo que
es bueno y malo. Es tener buen juicio. Es
poder sentir cuándo te estás acercando al
borde. Es hacer una buena elección o deci-
sión. Y a menudo el único que sabe eso es
Dios, «Cuando venga el Espíritu de la ver-
dad, él los guiará a toda la verdad, porque
no hablará por su propia cuenta sino que
Tengo más deseos
de orar cuando:
• Puedo
en Dios
> Estoy atravesando
tiempos difíciles
o i
• Me siento abatido
(13-15 años de edad)
128

Señor, ayúdame a fcowair «É«-1 imo'ie*. sabias
Pirá solo lo que oiga y les anunciará, las Pienso «[Ue
lapsas por venir» (Juan .1» Eios es:
No tenemos idea de cuántas veces una * Bueno
encilla sabiduría ha salvado nuestras vidas 'Santo
•fjnos ha librado del mal camino. Ni cuán-
tas veces lo hará de nuevo en el futuro. Es • Perfecto
or eso que necesitamos pedirle a Dios «Confiable
|?biduría para andar cada día. (16-Í9 años de edad)
¡§S' 'maneras ^ , • .
i aaáat en - - :
Lee la Biblia. «Hijo mío, si haces tuyas mis palabras y atesorás
mis mandamientos; si tu oído inclinas hacia la sabiduría y
de corazón te entregas a la inteligencia [...] entonces com-
prenderás el temor del SEÑOR y hallarás el conocimiento
de Dios» (Proverbios 2;I-2, 5).
Pídele a Dios que te dé sabiduría. «Si a alguno de ustedes le
falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a
todos generosamente sin menospreciar a nadie» (Santiago 1;5).
Trae a Dios a todo lo que haces. «Reconócelo en todos tus cami-
nos, y él allanará tus sendas» (Proverbios 3:(»)•
Ten reverencia en tu corazón hacia Dios. «El comienzo de la
sabiduría es el temor del SEÑOR» (Proverbios ifclü).
Presta atención a lo que dice y hace la gente sabia. «Presta aten-
ción, escucha mis palabras; aplica tu corazón a mi conoci-
miento» (Proverbios 22:17).
Valora la sabiduría más que cualquier otra cosa. «Adquiere
sabiduría, adquiere inteligencia; no olvides mis palabras ni
te apartes de ellas. No abandones nunca a la sabiduría, y ella
te protegerá; ámala, y ella te cuidará» (Proverbios 4:5;•*#).

El poder del' joven «fue ora
7. Vive a la manera de Dios. «Éhreserva la prosperidad para los
rectos, es escudo para los que andan en integridad» (Pro-
verbios 2:7, LBLA).
8, Sé humilde. «Con el orgullo viene el oprobio; con la humildad,
la sabiduría» (Proverbios »'-').
3. Ama a otros y sé amable con ellos. «El falto de j uicio desprecia
a su prójimo, pero el entendido refrena su lengua» (Prover-
bios 11:12).
10. Busca la sabiduría de Dios, no la del mundo. «Por Dios es
que ustedes están en Jesucristo, quien ante Dios es nuestra
sabiduría» (1 Corintios 1:30, LBD); «¿No ha convertido Dios
en locura la sabiduría de este mundo?» (1 Corintios 1:20).
íez motivo» para pedirle a Dios sabMtiría
1. Para disfrutar una larga vida. «Con la mano derecha ofrece
larga vida; con la izquierda, honor y riquezas» (Proverbios 3:16)
(Aunque no se mencione la palabra «sabiduría», en los pro-
verbios que aparecen en esta sección se refiere a esta).
2. Para tener una buena vida. «Sus caminos son placenteros y
en sus senderos hay paz» (Proverbios 3:17).
3. Para disfrutar una vida de felicidad. «Es árbol de vida para
los que de ella echan mano, y felices son los que la abrazan»
(Proverbios 3:18, LBLA).
4. Para estar protegido del peligro. «Podrás recorrer tranquilo tu
camino, y tus pies no tropezarán» (Proverbios 3:23).
5. Para dormir sin temor en la noche. «Al acostarte, no tendrás
temor alguno; te acostarás y dormirás tranquilo» (Prover-
' bios 3:24).
i. Para tener confianza. «Porque el Señor será tu confianza, y
guardará tu pie de ser apresado» (Proverbios 3:26, LBLA).

Señor, ayúdame a tomar ¿«cisiones sabias
/. Para estar seguro. «No abandones nunca ala sabiduría, y ella
te protegerá; ámala, y ella te cuidará [...] Cuando camines,
no encontrarás obstáculos; cuando corras, no tropezarás»
(Proverbios 4iS( 12). ..<• .
' 8. Para recibir reconocimiento en la vida. «Si exaltas la sabidu-
ría, ella te exaltará. Aférrate a ella y te guiará a gran honra»
(Proverbios 4:8, LBD).
j .9, Para estar protegido del mal. «Cuando la sabiduría entrare
en tu corazón, y la ciencia fuere grata a tu alma, la discre-
ción te guardará; te preservará la inteligencia, para librarte
del mal Camino, de los hombres que hablan perversidades»
(Proverbios ,::1>1RV-60).
i, 10. Para tener entendimiento y conocimiento. «Escuche esto el
sabio, y aumente su saber; reciba dirección el entendido»
(Proverbios 1:5).
»ca.-sifimíí», sLíioasfiáQ to Bia^
Siempre pídele a Dios las cosas antes de oraci®n
pedírselas a otra persona. Eso no significa que a D:*-os
no puedas tomar consejo de personas con- Señor, te pido que
fiables. Me refiero a que antes de que vayas me consueles en tiempos
a ellas, pregúntale a Dios lo que debes hacer. ^ prueba. Sé que tú
Después ora que la persona a la que vayas °')ras en todo,
tenga sabiduría e inteligencia para impar- Pero ^9unas veces
tírtelas. Pídele a Dios que te muestre si estás <"fc" creflr-
recibiendo consejo y dirección de una fuente 8m 1," W0
i • , ,, l«e me des fortaleza
que no sea sabia. Pídele que te aparte del ^ resistir (|
consejo impío y te dirija a personas que No qu¡ero |ffc •
tengan sabiduría de Dios. Antes de tomar muc()0 e|) m
cualquier decisión, incluso antes ir a algún pero se- qUe ^
lugar con alguien, pídele a Dios su sabiduría. trabajando en esta
Si tú haces un hábito pedirle siempre esfera de mi vida.
sabiduría a Dios, cuando tengas que tomar (u años de edad)

El poder del' joven «fue ora
Oré y Dios decisiones rápidas sin tiempo para pre-
respondio guntarle algo a alguien, lo harás con
Mi hermana necesitaba sabiduría porque Dios la ha puesto en ti.
salud, así que todas las Solo por curiosidad, bajé a la playa
noches le pedía a Dios que ese día y nadé en el mar a una de esas
la sanara. Al final, los mesetas poco profundas que había estado
médicos encontraron una observando desde el balcón. Caminé por
manera de ayudarla. allí para ver exactamente cuánto se.podía
(13 años de edad) determinar la profundidad desde tan
cerca. Debido a que tenía la ventaja de
saber que allí había un declive de un lado, caminé con seguridad
hasta el borde. De repente, toda la orilla se derrumbó y caí en el
mismo lugar en el que había visto caer a otros nadadores. Me di
cuenta que ni siquiera cuando pensamos que sabemos algo,
podemos presumir de ello. Ninguno de nosotros debe ser dema-
siado orgulloso para pedirle a Dios su sabiduría y consejo, por-
que Él eS el único que conoce toda la verdad.
? \ i r'u'fj, ''¿'¡iñ /:'f* '»• 4 fi'rt A i yr.o
Señor, te pido que me des sabiduría en-todo lo que haga.
Sé que la sabiduría vale más que el oro y que la inteli-
gencia vale más que la plata (Proverbios iérlfr), por éso
hazme rico en sabiduría y millonario en inteligencia.
Aumenta mi sabiduría y conocimiento a fin de que pue-
da ver tu verdad en cada situación. Dame discernimien-
to para cada decisión que tornei
Señor, ayúdame a buscar siempre el consejo piadoso
y a no confiar en el mundo y en las personas que no te
conocen en cuanto a las respuestas. Gracias, Señor, por-
que tú «me mostrarás la senda de la vida» (Salmo
.. RV-60).
Ayúdame a conocer y comprènder tu Palabra de
modo que logre qué penetre en mi alma y corazón. Señor,
tú has dicho que «él que confía en su propio corazón es

un necio, pero el que anda con sabiduría será librado»
(Proverbios , LBLA). No quiero confiar en mi pro-
pio corazón. Quiero confiar en tu Palabra y tus instruc-
ciones a fin de andar con sabiduría y nunca hacer cosas
tontas, ni por ignorancia. Hazme una persona sabia.
Dame la sabiduría, el conocimiento, el entendi-
miento, la dirección y el discernimiento que necesito
para alejarme de los planes de los malvados y así andaré
seguro y no tropezaré (Proverbios 2:10 13). Señor, sé
que en ti «están escondidos todos los tesoros de la sabi-
duríay del conocimiento» (Colosenses 2:3). Ayúdame a
descubrir esos tesoros. Te lo pido en el nombre de Jesús.
.•Ilj luí ' fij|J4fi í ,é
El comienzo de la sabiduría es el temor: del
SEÑOR; conocer al Santo es tener discernimiento.
Por mí aumentarán tus días; muchos años de
vida te serán añadidos.
, ' ' PROVERBIO?
ta boca del justo habla sabiduría, y su lengua
habla justicia. La ley de su Dios está en su corazón;
por tanto, sus pies no resbalarán.
.. SALMO 37:30r3l, RVt6O
Si llamas a la inteligencia y pides discernimiento;
si la buscas cómo a la plata, como a un tesoro
escondido, entonces comprenderás el temor del
SEÑOR y hallarás el conocimiento de Dios.
• , ' PROVERBIOS

Creo que es más importante buscar la sabiduna de Dios
que la sabiduría del mundo porque: '''\s'j
•tas cosas en que más necesito sabiduría para este tiempo son:
(Escribe esto como una oración a Dios pidiéndole la sabi-
duría que necesitas para estas cosas).
I . *
«¿leí comienzo de la sabiduría en nuestra vida es el temor
del Señor, escribe una oración a Dios diciéndole lo mucho
que lo amas y lo reverencias. Pídele que te haga una persona
sabia a fin de que cada decisión que tomes sea sabia.

»41
jjtífe
PENSAR QUE ESTAR ANSIOSA, DEPRIMIDA y temerosa
era algo con lo que tenía que vivir. Pensaba: Soy de esa manéra, y.
/ no hay nada que pueda hacer. Pero cuando conocí al Señor y
ti Comencé a vivir a su manera, empecé a ver que todas las cosas son
• posibles para cualquiera que cree y obedece a Dios. Incluso es
posible vivir sin emociones negativas. Dios nos las quitará si se
lo pedimos. Pero tenemos que orar.
¿Alguna vez has sentido como si Dios te hubiera abandona-
do? ¿O que no escucha tus oraciones? Pues bien, si es así, no
estás solo. Es más, hay muchos así. No solo millones de otras
personas están sintiéndose de esa manera ahora mismo, sino
que Jesús también se sintió de1 esa manera una vez. En el punto
más duro de su vida, Jesús dijo: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué
me has desamparado?» (Mateo ?7:4»),
Todos atravesamos tiempos difíciles. Tiempos en los que
nos sentimos solos,y abandonados. Sin embargo, la verdad es
que no lo estamos. Dios está con nosotros durante esos tiempos
a fin de que logremos atravesarlos. Solo tenemos que llamarlo.
I

El poicar del ¿>.»ve" ora
En medio de los tiempos difíciles, tenemos que oponernos a que
nos controlen las emociones negativas. Nos oponemos mediante
la oración, averiguando la verdad de lo que dice la Palabra de
Dios acerca de esas emociones, y al dar los siguientes pasos.
N-\4«ve maneras £e libefarriív:
«04» emor^or^m nefatjvas
I. Proponte no estar ansioso por nada, sabiendo que Dios toma el
control de tu vida cuando se lo pides. No importa qué problemas
tengas, Jesús los ha vencido. «En este mundo afrontarán
aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo»
(Juan Podemos librarnos de la ansiedad pasando
tiempo con Dios. «Cuando en mí la angustia iba en aumento,
tu consuelo llenaba mi alma de alegría» (Salmo iM;ls>).
Si estás ansioso es que no estás confian-
Tengo más deseos do en que Dios cuida de ti. Sé que confiar
en que Dios tiene cuidado de todo es más
fácil decirlo que hacerlo. Pero Dios te pro-
bará que es fiel para ayudarte si acudes a Él
para todo. «Así que no se afanen por lo que
han de comer o beber; dejen de atormen-
tarse. El mundo pagano anda tras todas
estas cosas, pero el Padre sabe que ustedes
las necesitan. Ustedes, por el contrario,
busquen el reino de Dios, y estas cosas les
serán añadidas»- (tucas: 12:2;S-31). Dios
dice que no tenemos que estar ansiosos
por nada-, solo tenemos que orar por todo.
Y eso es algo que podemos hacer.
L No te dejes dominar por el enojo. El enojo es una trampa a la
espera de que caigas. Cuando permites que el enojo gobier-
ne tus pensamientos y acciones, este provoca que hagaS o
digas cosas de las que un día te arrepentirás. Y cierra todo lo
de orar cuando:
• Ha pasado algo malo
• Lucho con algo
• Me siento triste
y confundido
• Estoy contento
• Estoy molesto
y necesito ayuda
(13-15 añas de edad)
13€

Señor» ayúdame a destacarme de ias.%mc>ciones negativas
que Dios tiene para ti al igual que pre-
sionar una manguera impide que flu-
ya el agua. He visto un sinnúmero de
veces que ocurre esto en las personas.
Cuando Dios está interviniendo de
una forma extraordinaria en sus vidas,
ceden al enojo y le cierran la puerta al
Señor. Cuando le damos cabida al
enojo en el alma, les abrimos la puer-
ta al pecado y al diablo. «"Si se enojan, no
pequen". No dejen que el sol se ponga estando aún enojados,
ni den cabida al diablo» (Efesios 4:2#-~27). Una persona
enojada molesta a todos los que le rodean, y como resultado
comete serios errores. «El hombre iracundo levanta con-
tiendas, y el furioso muchas veces peca» (Proverbios 25*22,
RV-60).
¿Cuántas personan se violentaron y destruyeron sus
vidas y la vida de otros debido a un enojó sin control?
¿Cuántas personas enojadas destruyen sus relaciones y Sus
familias y sacrifican lo que Dios tiene para ellas? Solo los
necios se enojan con rapidez. La gente sabia no quiere
pagar el precio. «No te dejes llevar por el enojo que solo
abriga el corazón del necio» (Eclesiastés 7; 9). Pídele a Dios
que te libere del enojo a fin de que puedas permanecer en el
flujo de todo lo que Él tiene para ti. .
3. Niégate a estar insatisfecho y siempre quejándote. Es fácil
enfocarse a cada momento en lo negativo y buscar todo lo
que está mal en tu vida. Pero eso hace que tengas una
inquietud constante y que nunca estés en paz. No solo te
hace un desdichado a ti, sino que hace que todos los que te
rodean sean desdichados también. No hay nada malo con
desear cosas para ser diferentes cuando se necesita que sea
^ así, pero cuando esa actitud se convierte en una costumbre,
sacrificas tu paz.
Oré y Dios
respondió
Oré para que los ojos
de mi padre se abrieran
a su descuido por
su familia. Dios
lo respondió de manera
extraordinaria.
137

El pofier Sel joven que ora
Cada vez que te sientas insatisfecho con tus circunstan-
cias, recuerda que el apóstol Pablo dijo: «He aprendido a
estar satisfecho en cualquier situación en que me encuen-
tre» (Filipenses 4:11). Ese tipo de actitud demanda fe. Fe
para creer que Él está en control de tu vida. Fe para creer
que te ama y sabe lo que es mejor para ti. Fe para creer que
su concepto del tiempo es perfecto.
Dios promete: «Queda todavía un reposo especial para
el pueblo de Dios» (Hebreos 4:9). Eso significa que es posible
encontrar contentamiento, descanso, paz y gozo en cual-
quier circunstancia. Uno de los mejores pasajes de la Escri-
tura para memorizar es: «Todo lo puedo en Cristo que me
fortalece» (Filipenses 4:13). Eso significa que puedes pasar
por cualquier circunstancia, incluso por tiempos de insatis-
facción y miseria, porque Jesús te capacitará para hacerlo.
4, Niégate a envidiar lo que tienen otras personas. Nada bueno
sale de envidiar a otra persona. Cuándo te fijas en otras per-
sonas y lo que ellas tienen, en lugar de hacerlo en el Señor y
lo qUe Él tiene, un espíritu de codicia llega a confundirte y
hacerte la vida desdichada. «Porque donde hay envidias y
rivalidades, también hay confusión y toda clase de acciones
malvadas» (Santiago 3:LI).
No te permitas albergar pensamientos como: Si-tuviera su
• cabelló... su cara... su cüerpo].. sus ropas.}, su talento... su for-
taleza... sus dones... su riqueza... su popularidad. En su lugar,
enfoca tus pensamientos en Jesús. Piensa en su belleza, su
riqueza, sus talentos, su naturaleza, su provisión, su ayuda y
su poder. Dale gracias por la rica herencia que tienes en Él,
y dile que tienes muchas ganas de experimentarla toda.
La codicia comenzó cuando Caín quiso lo que tenía Abel,
y lo mató por eso. Sin embargo, Caín sufrió el resto de su
vida como resultado. «Mientras haya entre ustedes envidias
y discordias, es que todavía son débiles y actúan con criterios
puramente humanos» (1 Corintios 3:3, DHH). No queremos
138

Señor, ayúdame a deshacerme <ie t emociones negativas
sufrir por el resto de la vida a causa de foración
la envidia. «El corazón tranquilo da a Dios
vida al cuerpo, pero la envidia'corroe Señor, ayúdame
los huesos» (Proverbios iv-.iv). Ora a tener fe
que él amor se manifieste en ti y a través en que tú estás
tuyo en todo momento. «El amor es siempre conmigo,
paciente, es bondadoso. El amor no (17 años de edad)
es envidioso» (1 Corintios 3 3:4)
No le permitas a la depresión que gobierne tu vida. De todas
las emociones negativas, creo que la depresión es la única
que aceptamos con más facilidad como parte de la vida.
Muchas personas viven con depresión sin siquiera darse
cuenta debido a que lo que sienten les es muy conocido.
Aun así, Dios no quiere que aceptemos esto como una forma
de vida.
No estoy hablando de la depresión clínica que se debe a
un desequilibrio en el cuerpo y requiere medicina para
corregirla; Si necesitas medicina, tómala. Estoy hablando
de una herida en el alma que necesita el toque restaurador
del Señor y el conocimiento de la verdad de la Palabra de
Dios que libera. Sentirte mal contigo mismo o con tu vida,
y sentirte desesperado porque no ves cómo soltarte de las
cosas que te molestan, puede deprimirte.
La buena noticia es que Dios no quiere que vivas con
esos sentimientos. Él quiere que el gozo del Señor se eleve
en tu corazón y ahuyente los espíritus de pesadumbre.
«¡Apártense de mí, todos los malhechores, que el SEÑOR ha
escuchado mi llanto! El SEÑOR ha escuchado mis ruegos;
el SEÑORha tomado en cuenta mi oración» (Salmo .9).
Dios quiere que ores y le pidas que te quite la depresión. Si
estás experimentando depresión, no la toleres ni siquiera
por un momento más.
Proponte no amargarte por cualquier cosa. La amargura con-
sume el cuerpo y el alma como el ácido se come la piel.

Si poder dej. joven <fUe ota
Cuando una raíz de amargura se arraiga en tu corazón, crece
e interrumpe las bendiciones de Dios. «Veo que vas camino a
la amargura y a la esclavitud del pecado» (Hechos S:'í >).
Cuando a cada instante tienes pensamientos como Nunca
podré olvidar lo que me hizo esa persona; Debí haber ganado
ese premio y no esa otra persona, la amargura va creciendo en
ti como un cáncer. Pero si logras identificar esos pensa-
mientos cuando apenas comienzan a tomar control de tu
mente, y no les das albergue en tu corazón, no pueden echar
raíces ni crecer.
Cuando estamos amargados, nos volvemos hostiles, resen-
tidos, llenos de odio o tenemos rivalidades con alguien o algo.
Pídele a Dios que te ayude a identificar y a resistir la amar-
gura en ti. «Mirad bien de que nadie deje de alcanzar la gracia
de Dios; de que ninguna raíz de amargura, brotando, caüse
dificultades y por ella muchos sean contaminados» (Hebreos
5, RV-60). Pídele a Dios que te libere de la amargura y
que te dé un espíritu agradecido y de alabanza. Que quite
cualquier cosa en tu corazón que no sea de El.
Proponte no vivir con sentimientos de rechazo. Muchas personas
que sintieron rechazo en su pasado, por una razón u otra,
viven con el temor de que las rechacen ahora y en el futuro.
Como esperan que las rechacen, que leen el rechazo en las
palabras y las acciones de otras personas. Esto da pie a que
siempre se sientan heridos, temerosos, enojados o amargados.
Los hace supersensibles a los comentarios y acciones de
otros. Esto vuelve locas a las personas que los rodean. En
otras palabras, su temor al rechazo motiva el mismo rechazo
que temen. Se convierte en un ciclo interminable. Si alguna
vez te has sentido de esa manera, recuerda que Dios no te
ha rechazado. Te aceptó aun antes de que tú lo conocieras a
El. No puedes hacer que todo el mundo te ame, pero Dios
te ama, y cuando lo haces el centro de tu vida, te dará favor
con las demás personas.

ayúdame a deshacerme <ie j.tn e«.c<
Niégate a desesperarte por cualquier cosa,
no importa cuán desesperada parezca.
La desesperación es una asesina lenta
que a la larga afectará la salud de tu
cuerpo y de tu alma. Pero cuando a
propósito decidas poner tu esperanza
en el Señor, Él te quitará esa desespe-
ración. Al igual que podemos escoger
la ropa que nos vamos a poner cada
día, también podemos escoger poner
nuestra esperanza en Dios. Podemos
cuidarnos el alma. «Espinas y trampas
hay en la senda de los impíos, pero el
que cuida su vida se aleja de ellas» (Pro-
verbios .TI:'.:).
La desesperación es muerte para
el alma. Niégate a vivir con ella. No
importa cuántas cosas malas lleguen
a tú vida, pues en el Señor siempre
tendrás esperanza. Cuando oras, Él
puede hacer lo imposible. Puede hacer
Mi oración a Dios
Señor, por favor,
sé conmigo. Estoy muy
temeroso y no sé qué hacer.
Me siento muy solo
y necesito saber
que estás conmigo.
Haz que me sienta
seguro y dame consuelo.
Sé mi fortaleza;
sé mi protector.
Quítame el temor
V no permitas
que me paralice
a fín de que pueda
Wvir pira ti.
Te atno más qué nadá
en el mundo
y sé que tu perfecto
amor echa fuera
todo temor.
(16 años de edad)
cosas que ni siquiera soñaste. Puede
encontrar una salida que no puedes
ver. Pídele que te dé esperanza y una actitud de agradeci-
miento cada día de tu vida.
9, Niégate a dejar que el temor gobierne tu vida. Le he temido a
muchas cosas en mi vida, pero Dios me ha liberado de
todas ellas. Me he liberado del temor a la muerte, a morir
de hambre, a fallar, a volar, a los accidentes, a los cuchillos,
a perderme, a estar abandonada, a enfermarme, a estar
herida, a la oscuridad, a las opiniones de los demás y al
rechazo, solo por nombrar unos pocos. Algunos de esos
temores desaparecieron cuando oré por ellos uno por uno.
Otros desaparecieron cuando aprendí a hablar con el Señor
y a pasar tiempo en su presencia.

El poder joyen. ora
Dios no quiere que vivamos- con- temor. El temor no viene
de Él. El mundo es el que nos enseña-a temer. Las cosas que
vemos en las películas, los vídeos, losperiódicos, los libros y en
la televisión nos hacen temerosos. Las cosas que escuchamos
decir a las personas y les vemos hacer dan pie a que tengamos
temor. El enemigo puede hacer que le tengamos miedo a todo y
a desgastarnos con el temor de lo que puede pasar. Sin embargo,
el temor no tiene por qué estar atormentándonos.
Uno de los tipos más comunes de temor es el temor de lo
que piensa la gente. Tememos que nos rechacen. Esta es una
trampa eñ la que podemos caer sin siquiera darnos cuenta. A fin
de protegernos de esto, tenemos que atender más a lo que Dios
dice que a lo que dice la gente. Debemos procurar la aprobación
y la aceptación de Dios y no de los demás. Si Dios no tiene el
primer lugar en nuestros corazones, le estaremos temiendo al
hombre a cada instante. «Temer a los hombres resulta una trampa,
pero el que confía en el SEÑOR sale bien librado» (Proverbios
29:25),-
Dios quiere liberarnos de todo temor, La Biblia dice que «en
el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el
temor» (1 Juan 4:18, RV-60). El único amor que es perfecto es el
amor de Dios. Uno se perfecciona en su amor acercándose a Él y
permitiéndole que Jo llene de su amor. Cuando , lo hagas, Él te
librará de todo temor.
Algunas de las maneras en que te deshaces del temor es vigi-
lando lo que permites que entre en tu mente, orando a menudo,
alabando a Dios con regularidad y leyendo la Palabra de Dios.
Muchas veces en mi vida, cuando he tenido miedo, he encon-
trado que todo temor me abandona con solo leer la Biblia o
repetir algunos versículos bíblicos como: «Dios no nos ha dado un
espíritu de temor, sino un espíritu de poder, de amor y de buen
juicio» (2 Timoteo i:*?, DHH).
Dios quiere que andes y hables con Él, y que tengas con Él
un tipo de relación donde Él te diga cosas que no sabías antes y

Señor» ayúdame a deshacerme de Jaa$®mociones negativas
que no las conocerías a menos que te las
revelara. Cuando te acerques lo suficiente
a Él, se irán todos tus temores. r:
Las emociones negativas revelan que
tenemos dudas. Si confiamos por completo
en Dios en nuestra vida, ¿por qué tenemos
que estar ansiosos? Cada uno dé nosotros
es susceptible de tener emociones negativas
en algún momento, así que no te sientas
mal si las tienes. Pero no tienes que vivir
con ellas tampoco. No permitas que la
fealdad de las emociones negativas dañe
la belleza de la vida que Dios tiene para ti.
LA ORACIÓN, . ,
Señor, te pido' qüg' me'TC las
¿mociones negativas tales como la ansiedad, el enojo, el
descontento, la envidia, la depresión, la amargura, el
rechazo, la desesperación y el temor. Rescátame cuando
«ya no me [quede] aliento; dentro de mí [siento] paralizado
el corazón» (Salmo 143:4). Me niego a dejar que las emo-
ciones negativas derrumben mi vida porque sé que tienes
una mejor calidad de vida para mí que esa. Guando me
sienta tentado a rendirme a esos sentimientos, ayúdame
a recordar todo lo que es verdad sobre ti.
Tú dijiste en tu Palabra que con paciencia ganaremos
nuestras almas (Lucas 21:19, RV-60). Dame paciencia y
entendimiento para controlar mis emociones. Ayúdame
a guardar mi corazón «con toda diligencia», pues sé que
«de él brotan los manantiales de la vida» (Proverbios
4:23, LBLA). Ayúdame a no ser inseguro ni a enfocarme
Oré y Dios
respondió
Luchaba con una baja
autoestima. Oré por eso
y le pedía Dios
que me diera
el deseo de conocerlo
mejor. Él se me revelé
y asó esa situación
para cambiarme
y ahora me siento
mejor conmigo mismo
y con mi vida.
(18 años de edad)
143

> • • . El poíer fiel jo.v.en ijme qya ..
en mí. Ayúdame a enfocarme en ti y en otras personas.
Ayúdame a no ser hipersensible conmigo mismo, sino
más bien a ser sensible a las necesidades de otros. Gracias,
Señor, porque escuchas mi voz y me respondes (Salmo
1.'*'«>). Permite que el gozo de conocerte llene siempre
mi corazón de modo que pueda vivir en tu gozo y paz.
Te lo pido en el nombre de Jesús.
No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión,
con oración y ruego, presenten sus peticiones a
Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobre-
pasa todo entendimiento, cuidará sus corazones
y sus pensamientos en Cristo Jesús.
FILIP'ENSES A'4'7
Vengan a mí todos ustedes que están cansados y
agobiados, y yo les daré descanso. Carguen con
mi yugo y aprendan de mí, pues yo soy apacible
y humilde de corazón, y encontrarán descanso
para su alma. Porque mi yugo es suave y mi carga
es liviana..
.:,, . ; MATEO 11:28-30
Los justos claman, y el SEÑOR los oye; los libra
de todas sus angustias. El SEÑOR está cerca de
los quebrantados de corazón, y salva a los de
espíritu abatido.

;fiaz una lista de las emociones negativas ¿¿rí jfs^^
luchas y por qué crees que las tienes. Escribe una^orafcfefl^
pidiéndole a Dios que te ayude a ser libre por completó de
todas las emociones negativas, en especial esas con las qtte
luchas más.
.;|Ü¿ué cambios en ti o tus circunstancias te gustaría ver que
hace Dios? Escribe tu respuesta como una oración a Dios
pidiéndole que haga esos cambios.
¿Alguna vez temes que te rechacen? Escribe una oración
pidiéndole á Dios que te libere del temor de las opiniones
de los demás.

|Hp
'pH
•MWiiaii!«^
f AllODO EL MUNDO LETIENTAALGO. Cuándo estamos tentado,
£ nos halan1 hada algo que sabemos que es malo. La tentación en
yj sí no significa que haya algo malo en ti, Todos tenemos pensa-
* miemos carnales algunaá veces. Y todos tenemos un enemigo
£ que nos tienta a poner en acción esos pensamientos a fin de arrui-
t narnos la vida y privarnos de todo lo que Dios tiene para nosotros.
El rey David sintió la tentación. Cuando cedió a ella, la ten-
tación por poco le arruina la vida. Era un joven con todo a su
favor. Tenía buena apariencia, talento musical, valor, riqueza,
, prominencia, autoridad, una buena familia y la gracia de Dios.
¡ Sin embargo, cayó en-?lai tentación y tuvo que cometer un pecado
tras otro poi tintar de ocultajdo.'Es obvio que tenía mucho tiempo
a su disposición y no estaba'donde debía estar. Estaba en la azotea
de su palacio observando a la mujer de al lado que estaba toman-
do un baño en lugar de ir a la gucna con sus hombres como lo
hacían otros reyes. Su mayor error no fue la tentación en sí, pues
eso le puede pasar a cualquiera, sino que no se alejó ni corrió
enseguida a Dios arrepentido.

póHer fiel -fc&iín.«Se ora
Oro P^3^^ Se quedó allí mirando con fijeza. Pensó y
otros <• . maquinó. Dejó que lo gobernara su deseo sexual
• Se sienten depri en [Ugar ¿e qUe j0 hiciera Dios. Tuvo un amo-
• Siento que acecha ri'0 con esta mujer casada, Betsabé, mientras su
el peligro esposo estaba lejos en la guerra. Cuando quedó
• Veo el potencia embarazada, David tuvo que asesinar al esposo
en e"°S | ^ a fin de ocultar la aventura amorosa. Como
• Están so os resultado de sucumbir a la tentación, se con-
. No viven bien . ,
de edad) virtió en un asesino y un adultero y termino
't6 9,10 pagándolo por el resto de su vida, hasta el punto
de tener que ver la muerte de dos de sus hijos.
La tentación le sobrevino también a Jesús. Sin embargo, Él
hizo lo correcto y David no. Jesús se mantuvo firme en la Palabra
de Dios y David la olvidó.
He visto demasiadas personas sacrificar la vida por ceder a la
tentación. Hay muchos tipos de tentación, como mentir, engañar,
robar, tomar drogas, violar la ley y desobedecer las reglas. La que
parece hacer tropezar con más frecuencias a la gente es la tenta-
ción sexual. He visto personas con talento que han sucumbido a
la tentación sexual y renunciar a la prometedora vida que Dios
tiene para ellos. Como meteoros, cayeron y se consumieron en
vez de seguir siendo un brillante lucero.
Cuando alguien cae en un pecado sexual de cualquier tipo,
incluso cuando se arrepiente y recibe el perdón de Dios, pierde
lo que podía haber sido si no hubiera caído en ese pecado. David
recibió perdón y restauración, pero perdió lo que más amaba, su
hijo, y desde ese momento su reino se fue
0 y Dios deteriorando con un desastre tras otro,
^ spondió incluyendo la muerte de otro hijo y muchos
me d'6^ *•*U>S 'Ue familiares. Dios lo seguía amando, pero
we jera dinero para su pecado tuvo consecuencias. La gente
Aa u ¡„i -1"1 reJ!r° no se da cuenta de lo grandes que son las
de la iglesia y El lo hizo j j ,
,1B . , consecuencias cuando ceden a la tenta-
(18 anos de edad) -V
cion sexual.
148

Srtnor» .iy juiAne a resiStA». la t^sntaoxó1 <
Si alguna vez sientes que te atraer'algo o
alguien de una manera que no agrada a Dios,
confiésalo enseguida y pídele que te libere de eso.
No esperes ni un minuto. Luego dile a Satanás
que reconoces sus planes para destruir tu vida
y apartarte de todo lo que Dios tiene para ti,
y que no estás dispuesto a permitirle que lo
haga. No dejes de orar por eso hasta que desa-
parezca la tentación. «Velen y oren, para que la
tentación no los venza. Porque es cierto que el
espíritu está dispuesto, pero la carne es débil»
(Mateo -á.; , LBD).
Seis COSAS para recordar
.tentación - -
X. Quién: La tentación le puede ocurrir a cualquiera. No importa
cuán espiritual ni firme creas que estás, puedes caer en la
tentación. Las personas que he visto caer con más fuerza
fueron personas que estaban orgullosas de lo buenas cristianás
que eran. Se jactaban de su fortaleza espiritual y piedad, y
su orgullo les impidió ver la verdad hasta que fue demasia-
• v . do tarde..
'}. Qué: A ti te puede tentar cualquier cosa. La tentación más
común hoy es la sexual porque la oportunidad para esto se
encuentra en todas partes y nuestra cultura la acepta muy
bien. Sin embargo, hay otros tipos de tentaciones, tales
como la pornografía, las prácticas ocultistas y la enfermiza
necesidad de reconocimiento, admiración, dinero y poder.
«Cada uno es tentado cuando sus propios malos deseos lo
arrastran y seducen. Luego, cuando el deseo ha concebido,
engendra el pecado; y el pecado, una vez que ha sido consu-
mado, da a luz la muerte. Mis queridos hermanos, no se
engañen» (Santiago • :14- LS); El enemigo te tentará en la
Creo en la
oración porque:
* Mueve montañas
y hace milagros
* Dios me da fortaleza
cuando oro
* Dios es fiel para
responder mis
oraciones
•Hace cambiar
a las personas
* Es poderosa y
cambia vidas
(16-19 años de edad)

El poder del' joven «fue ora
forma en que eres más susceptible. Cuando algo te tiente,
pídele a Dios que te dé fortaleza' para resistir. Guarda tus
puntos vulnerables con oración.
3. Cuándo-. La tentación puede ocurrir en cualquier momento
y a menudo cuando menos lo esperas. Cuando ocurre, el
peligro es pensar que puedes manejarla tú solo. Es mejor
llevarla a Dios y confesarla de inmediato, y luego buscar a
alguien confiable para que ore contigo al respecto. No creas
que la tentación pasará y nada más. El tirón es demasiado
potente. El riesgo es demasiado grande. Enfréntala como una
amenaza grave sin importar cuándo se presente.
4. Dónde: La tentación puede ocurrir en cualquier parte. En la
iglesia, en la escuela, en el trabajo, en la casa, en un ómnibus o
en un avión. Pasará en el lugar que menos esperas. Donde
sea, sepárate de ella enseguida. Si te tienta el chocolate, no
andes por donde lo venden. Su olor te volverá loco y debilitará
tu resistencia. Si una cierta persona te tienta a hacer cosas
que sabes que no debes hacer, no estés a su alrededor, y si
tienes que estar con ella, no estés solo. Sepárate de la tenta-
ción y pídele a Dios que mate esa lujuria en ti. ¡Él ló hará!
5. Por qué. El enemigo te tienta porque sabe las grandes cosas
que Dios quiere que hagas en la vida, y cree que eres lo sufi-
ciente tonto como para rendirlo todp por unos momentos
de placer mundano. Sabe que no solo perderás con ello,
sino que otras personas se dañarán también por tu pecado.
Cuando reconozcas la trampa que te está tendiendo, decide
en ese momento que no vas a caer ni a permitirle que des-
truya tu vida.
i. Cómo-. Tienes que recordar que no importa cómo te estén
tentando, se trata de un plan del enemigo para derrumbarte.
Él buscará tus mayores debilidades, necesidades o inseguri-
dades y tratará de seducirte con cualquier cosa que te atraiga
con más facilidad. Esta es la mejor razón para deshacerte de

Señor, Ayúdame a resistir lf. tentación
tus inseguridades y llegar a ser ungjpersona íntegra. Eso eli-
mina una de las maneras en que^l enemigo tiene acceso a
tu vida. Por ejemplo, quizá te. sientas tentado a hacer algo
malo a fin de caer bien o que tg^acepten. Pero si sabes quién
eres en el Señor, no caerás poseso.
Para evadir i* Zfir.rxcxéé'' '
- SlSjffljJJb^ * (
La mejor manera de no ca'er'en la tentación es orar al respecto
antes de que ocurra. Después'que la tentación misma se presenta,
resistirla llega a ser mucho' más difícil. Jesús nos enseñó a orar:
«No nos dejes caer en tentación, sino líbranos del maligno»
(Mateo -: Esto quizá te parezca como que Dios es el que
nos tienta, pero El- no lo hace. A nosotros nos tienta el enemigo
y los deseos de nuestra carne.
Dios nos dice: «Cristo nos libertó para que y BÍos
vivamos en libertad. Por lo tanto, man- respondió
ténganse firmes y no se sometan nueva- -. . , ,
6 , j , • , Estaba atravesando
mente al yugo de escíavttud» (CjálatasiíxJ. „„„
„ , , , j , c una depresión y mis amigos
Podemos pedir en el nombre del Señor, m invifaron t (| |m|'(
pues «por haber sufrido él mismo la ten- y me Oblaron de Dios,
tación, puede socorrer a los que son ten- Le pedí a Dios que entrara
tados» (Hebíeos 2Ü.8). Nunca pienses que en mi corazón y que nunca
eres inmune ala tentación. Jesús instruyó me abandonara. V ahora
a sus discípulos: «Levántense y oren para me siento mejor
que no caigan en tentación» (Lucas 22:4$). con elación a mi vida.
Tú debes hacer eso también. (18 años de edad)
Con respecto a la tentación sexual,
pídele aDios que te guarde puro y sin mancha. Si ya has caído en
esto, pídele a Dios que haga que este día sea un nuevo comienzo
para ti. Él lo hará. A todos nosotros nos llegan ocasiones en que esta-
mos desesperados por saber qüe Dios está cerca y que Él escucha
nuestras oraciones y las responderá. No tenemos tiempo para
ponernos a bien con Dios; tenemos que prepararnos para estar a
bien con Dios. Este es el momento de comenzar a vivir vidas
1S1

El pofitsr del joven fü® ora
puras si queremos ver respuestas a nuestras
oraciones en el futuro.
La tentación de Jesús ocurrió precisa-
mente antes del mayor logro en su vida. Ocu-
rrirá antes de tu mayor logro también. Pre-
párate para esto. Y recuerda que no importa
lo grande que sea la tentación que enfrentes,
«el que está en [ti] es más poderoso que el
que está en el mundo» (, Juan 4-4). Debido
ti, tienes poder para vencer la tentación.
í DE LA OH \CICW
Señor, fortaléceme de tal manera queno caiga en ninguna
de las trampas del enemigo. No me dejes caer en tenta-
ción, sino líbrame del maligno y sus planes para mi rui-
na. La esfera que más me preocupa es (nombra cual-
quier esfera donde podrían tentarte). En el nombre de
Jesús, rompo cualquier atadura de tentación que haya
en mí. Ayúdame a resistir cualquier cosa que pudiera
tentarme a apartarme de todo lo que tienes para mí.
Te ruego que no tenga pensamientos secretos donde
albergue deseos impíos de hacer o decir algo que no
debo. Te pido que no tenga una vida secreta donde haga
cosas que me avergonzaría que vieran otros. No permi-
tas que el enemigo se deslice por mi lado ciego y me
tome por sorpresa.
Señor, sé que me llamaste a la pureza. Ayúdame a
«[aferrarme] al bien» (RómanOs y á conservarme
puro (X Timoteo 5:22). Ayúdame a separarme de todo
lo que no procede de ti y a no tener confusión en cuanto
a esto. Dame discernimiento para reconocer cualquier
cosa sin valor en mi vida a fin de que pueda deshacerme
de ella. Libérame de cualquier debilidad que pudiera
apartarme de todo lo que tienes para mí (Salmo 145:18-ld).
Mi oración
a Dios
Señor, por favor,
elimina cualquier
tentación de mi mente
y corazón. Llévatela
y destruyela por completo.
[14 años de edad)
a que Jesús está en

; Señor" :»yu4ajr.e a resis-ír la tentación
Gracias porque tú sabes «rescatar de tentación a los pia-
dosos» ( Pedro .., LBLA). Gracias por librarme de
toda tentación y mantenerla lejos de mí. Te lo pido en el
nombre de Jesús.
Jg ff ^ ¡r, ,
Dichoso el que resiste la tentación porque, al
salir aprobado, recibirá la corona de la vida que
Dios ha prometido a quienes lo aman.
SANTIAGO J :1
Ustedes no han sufrido ninguna tentación que
no sea común al género humano. Pero Dios es fiel,
y no permitirá que ustedes sean tentados más allá
de lo que puedan aguantar. Más bien, cuando
llegue la tentación, él les dará también una salida
a fin de que puedan resistir.
• I CORINTIOS I&13
Por lo tanto, si alguien piensa qué está firme,
tenga cuidado de no caer.
' R CORINTIOS 10:12
153

¿Guales son las mayores tentaciones quq¡,-enfp<en|á$ en-tüg
vida hoy en la escuela, el hogar, el trabajo o ;dojn<fe,,quiera
que vas? ¿Qué necesitas hacer para evitar esas tentaciones?
Escribe tu propia oración pidiéndole a Dios que te aparte
de las cosas que te tienten a hacer lo que no es bueno ante
sus ojos. Pídele que te perdone por alguna vez en que has
cedido.
s!S¡!¡¡!>! - • , 1 •
scribe una vez cuando Dios impidió que cayeras en la
tentación. ¿Cuáles son las razones por las que crees que
resistir la téntación es bueno para tu futuro?

;ALGUNA \L/. HA> DI SPI C\DO L\ I \ AMON en un día
nublado, gris, deprimente} lluvioso? Cada vez que he hecho eso
siempre nie sorprende cómo podemos volar a través de las oscu-
ras y húmedas nubes que son un espesas que no vemos nada por
la ventanilla. Y entonces de repente nos elevamos por encima de
todo eso y tenemos la facultad de -ver kilómetros y ki1ómerros¿
.Allá arriba el cielo es soleado, claro y azul. A cada rato me olvido
de que no importa lo malo que se ponga el tiempo allá abajo, es
posible elevarse por encima de la tormenta a un lugar en el que
rodo esiá bien.
lis lo mismo también con nuestras vidas espirituales y emo-
cionales. ¿Sabías que1 cuando las oscuras nubes de las pruebas,
los problemas, las luchas, las penas o los sufrimientos aparecen
en nuesuas A idas y se asientan en nosorros tan densas y oscuras
que apenas vemos delante de nosorros, ha} un lugar de luz, cal-
ma > pa¿ al que podemos elevarnos? Si tomamos la mano de
Dios en oración en esos tiempos difíciles, Él 110.1 elevnrá por
eiiuma de nuestras circunstancias al lugar de bienestar que tiene
Rplf^

El poder ©i
Lo más difícil Uno de los nombres del Espíritu Santo
de la oración es: preferidos es Consolador (Juan ¿ i: •:.?). Al
• Expresar lo que siento igual que no tenemos que suplicarle al sol
• Saber qué decir que nos dé luz, no tenemos que suplicarle
• Sentir la presencia al Espíritu Santo que nos consuele. El es
de Dios consuelo. Cada vez que estés pasando un
• Saber que hay tiempo malo, ora que el Espíritu Santo te
mucho por lo dé un mayor sentido de su consuelo. Eso es
cual orar algo que Él quiere hacer. Jesús dijo: «Dichosos
T No saber si a Dios jQS qUe ]]oran; p0rqUe serán consolados»
le importa (Mateo .1:4). Es un trato hecho.
(16-19 anos e e ^^ tiempos difíciles nos llegan a todos
nosotros de vez en cuando. El dolor y la
pérdida son partes de la vida. Todo el mundo tendrá a alguien
que le importa a punto de morir, mudarse o divorciarse. Todo el
mundo perderá algo o alguien en algún momento de la vida.
Todo el mundo experimentará desilusión, desaliento o algún
tipo de desastre. Hay muchas razones diferentes del porqué ocu-
rren esas cosas, pero no importa lo que suceda, Dios siempre
sacará un bien de esto cuando le pedimos que lo haga. Com-
prender las posibles razones de tu sufrimiento, te ayudará a
comprender tu dolor y a ver crecer tu fe en medio de esto.
uatro rabones htienaa para Ion tiempos
malos
Algunas veces nos ocurren cosas difíciles afín de que la gloria y
elpoder de Dios se puedan manifestar en nosotros y por medio
de nosotros. Cuando Jesús pasó junto a un hombre ciego de
nacimiento, sus discípulos le preguntaron si el hombre
estaba ciego porque había pecado o porque habían pecado
sus padres. Jesús respondió: «No es que pecó este, ni sus
padres, sino para que las obras de Dios se manifiesten en él»
(Juan RV-60). Quizá no seas capaz de comprender por
qué te suceden ciertas cosas entonces, y quizá nunca llegues

h*riort Ayúdame ¿t ser fuerte ruaryáí^^san cosas r,aM5
a saber por qué tendrás que estar aj¡ia-
vesándolas hasta que vayas a estatjpan
el Señor, pero cuando te vuelves gplios
en medio de una situación di»il; Él
sacará bien de esa situación da
esperanza a las personas. Sentirán que
Dios puede hacer lo misme^jar ellas.
Cuando ven la fortaleza que .t-ú tienes
en medio de lo que estápasando, ten-
drán valor para enfrentar sus propios
problemas.
2. Algunas veces Dios permite que atravesemos tiempos difíciles a
fin de hacernos mejores personas. La Biblia dice: «Puesto que
Cristo ha padecido ppr nosotros en la carne, vosotros también
armaos del mismo pensamiento; pues quien ha padecido
en la carne, terminó con el pecado» (l Pedro 4.1, RV-60).
Esto significa que nuestros sufrimientos durante los tiempos
difíciles quemarán el pecado y el egoísmo de nuestras vidas.
Dios permite que ocurra el sufrimiento con el propósito de
que aprendamos a vivir para Ély no para nosotros mismos.
Para que vayamos tras su voluntad y no tras la nuestra. No
es agradable en el momento, pero Dios quiere que nos des-
prendamos de todo lo demás y nos aferremos a lo que es
más importante en la vida: Él. Si andas con Dios a través de
los tiempos difíciles, Él te dará fortaleza.
3, Algunas vecés nuestra desdicha se debe a que Dios nos está dis-
ciplinando. Nunca nos sentimos bien cuando nos disciplinan,
péro siempre aprendemos algo importante. Nos salva la vida,
«Ninguna disciplina, en el momento de recibirla, parece agra-
dable, sino más bien penosa; sin embargo, después produce
una cosecha de justicia y paz para quienes han sido entré-
nados por ella» (Hebreos llásll), Dios siempre está tratando
de enseñarnos algo en los tiempos difíciles que atravesamos.
«No tomes a la ligera la disciplina del Señor ni te desanimes
Oro por
otros cuando:
• Están enfermos
o heridos
• No viven bien
• Están en mi corazón
• No conocen al Señor
• Están en necesidad
(16-19 años dé edad)

El poder del' joven «fue ora
cuando te reprenda, porque el Señor disáj
ciplina a los que ama, y azota a todo el que
redbe corno hijo» (Hebreos 12:S~f). Cuandc|¡
atravieses tiempos malos, pídele a Diósl
que te muestre lo que necesitas Ver en 1^1
situación. Todo lo que te enseñe te hará '
más fuerte. J
4 Algunas veces la aflicción, la tristeza, el sufrimiento o el dolor
de los tiempos difíciles proceden enteramente del enemigo. No
es culpa tuya ni de otra persona. El enemigo está siempre
deseando hacerte desdichado y destruirte la vida. Sin embargo,
Dios quiere que clames a Él a fin de librarte del enemigo.
Dios quiere que andes con Él en fe mientras atraviesas los
tiempos difíciles. Quiere que confíes en Él en medio de ellos.
Nadie quiere escuchar lo bueno que les resulta el dolor y el
sufrimiento. Cuando estás experimentando problema, tra-
gedia, pérdida, devastación o desilusión, no puedes pensar
más allá del hecho de que te está haciendo daño y de que
quieres liberarte del dolor. Pero debes recordar que si oras y
alabas a Dios en medio de tu dolor, Él derrotará al enemigo
por ti y sacará un bien de esto que ni siquiera puedes imaginar,
TÚ rniTrmfñl pOTÉffl r^imt^nr — — —
En algunas traducciones de la Biblia, al Espíritu Santo se le
llama Defensor. Jesús dijo: «Yo le pediré al Padre que les mande
otro Defensor, el Espíritu de la verdad, para que esté siempre
con ustedes» (Juan 14-l<rI7, DHH). Cuando nos volvemos al
Espíritu Santo por ayuda y consuelo, Él no solo nos dará ayuda,
sino que nos dará más de su presencia como no hemos tenido
jamás (Mateo 5:4).
Cuando murió mi mejor amiga, quedé devastada con la pena.
Habíamos sido amigas durante años y no sabia cómo podría
vivir sin ella. El día después del funeral fue el peor de todos,
Oré y ©ios
respondió
Mi abuelo y yo oramos
por las migrañas de mi
abuela y desaparecieron.
(16 años de edad)

Señor, ayúdame a ser fuerte cuando pasan cosas malas
, , c ij/ u " "i oración,
debido a que fue el día en que se abrió
paso la realidad y comprendí que nunca
más la volvería a ver. Pero fui a Dios ese S®fior' Ven9® ant« t¡
día en busca de consuelo y le pedí que se sa0l8nd01ue eres
llevara mi dolor y me ayudara: a sobre- |a 'esfue$tTa a toda$
c . . i • mis luchas. Tíí siempre
ponerme, Sentí que lo hizo. , .. , .
r TT ,, ^ i,, "enes una solucion.
Una de las cosas que aprendí durante ^ ^ ^
ese tiempo fue cómo consolar a otras m¡ f|)tl)|1()i ^mih qmMo
personas que sufren ese mismo tipo de [o que ha3a te Jea ajra(|ab|e-
pérdida. Aprendí lo importante que es Sin importar adonde
estar a su lado y solo escuchar. Aprendí me lleve el futuro,
cómo hablarles del consuelo del Señor. ayúdame a guardar
No habría sabido todo eso si yo misma mi corazón de modo que
no lo hubiera experimentado. Una de las siempre te pertenezca,
cosas que Dios nos enseña en los tiempos (ts años de edad)
difíciles es cómo no solo recibimos su
consuelo, sino cómo podemos dar consuelo a otros cuando atra-
viesan una situación similar. El sufrimiento aumenta tu compa-
sión por el sufrimiento de los demás.
Otra cosa que aprendí fue que uno puede tener paz y gozo
en medio de la situación más difícil y desdichada. Es que el gozo
viene del Señor. No es que de repente uno se sienta ilusionado o
feliz por la dificultad. Es que uno sabe que Dios tiene las riendas
de nuestra vida, y que no solo te ayudará a pasar por el problema,
sino que algo bueno sacará de eso.
Guando ocurran cosas malas, vuélvete a Dios en oración y el
te quitará el dolor, cambiará la situación, te ayudará a atravesarla
o te capacitará para elevarte por encima de ella. Si perseveras en
vivir en la presencia del Señor, su gloria se revelará en ti. Otros la
verán y les dará esperanza.

El poder «leí y;vari que ora
Señor, ayúdáme strecordar que no importacuán malos
sean los tiempos que atraviese, ni qué tipo de nubes
oscuras se asienten en mi vida, tú eres mi Consolador.
Solo tú puedes elevarme por encima de la tormenta y
llevarme a tu presencia. Solo tú puedes tomar cualquier
pérdida que experimente y llenar ese lugar vacío con
biela. Solo tú puedes tomar la carga de mi pena y dolor y
sacar algo positivo de ello. «Responde a mi clamor, Dios
mío y defensor mío, Dame alivio cuando esté angustiado,
apiádate de mí y escucha mi oración» (Salmo 4:1).
Cuando atraviese tiempos difíciles, te pido que sienta
tu presencia conmigo. Quiero volverme más fuerte en
esos tiempos y no más débil. Quiero que aumente mi fe
y no llenarme de dudas. Quiero tener esperanza en medio
de ellos y no estar desesperado. Quiero mantenerme fir-
me en tu verdad y no dejarme llevar por mis emociones.
Ayúdame a recodar darte gracias pase lo que pase
porque tú eres mayor que cualquier cosa que enfrente.
Sé que cuando cruce las aguas, tú estarás conmigo y los
ríos no me cubrirán. Cuando camine por el fuego, no
me quemaré, ni me tocarán las llamas (Isaías 43;1 -2). Es
que tú eres un Dios bueno y enviaste a tu Espíritu Santo
para que fuera mi Consolador y mi Ayudador. Gracias
porque me llenarás de gozo y paz a fin de que rebose «de
esperanza por el poder del Espíritu Santo» (Romanos
Te lo pido en el nombre de Jesús.

Señor, ayMame a ser fuerte cuando pasan cosas malas
Queridos hermanos, no se extrañen del fuego de
la prueba que están soportando, como si fuera
algo insólito. Al contrario, alégrense de tener parte
en los sufrimientos de Cristo, para que también
sea inmensa su alegría cuando se revele la gloria
de Cristo.
1 PEDRO 4:12-13
Después de que ustedes hayan sufrido un poco
de tiempo, Dios mismo, el Dios de toda gracia
que los llamó a su gloria eterna en Cristo, los res-
taurará y los hará fuertes, firmes y estables.
1 PEDRO 5:10
Considérense muy dichosos cuando tengan que
enfrentarse con diversas pruebas, pues ya saben
que la prueba de sü fe produce constancia. Y la
constancia debe llevar a feliz término la obra,
para que sean perfectos e íntegros, sin que les falte
nada.
SANTIAGO 1:2-4
161

n> «te . '
I* ' ^ ' «^A
* Hfc, / $
,¿Guál fue el tiempo más difícil que atravesaste í^lo^l timos
dos o tres años? ¿Sentiste el consuelo deDi^dtiraátf gse
tiempo? ¿Extendiste la mano a Dios en oración para que te
ayudara a atravesarlo? ¿Qué harías diferente la próxima vez?
¿Qué harías igual?
Escribe una oración pidiéndole a Dios que esté contigo
cada vez que atravieses tiempos difíciles. Pídele que te ayude
a volverte a Él enseguida y a no tratar de atravesarlos solo.
"4
«¿Qué has aprendido de atravesar tiempos difíciles que te
hacen más capaz de ayudar a otra persona a atravesar su
propio tiempo difícil?

MÍJNTRAS ESTABA ESCRIBIENDO ESTE LIBRO, realicé por mi
cuanta una encuesta,entre jóvenes respecto a sus mayores preo-
cupaciones y a qué papel desempeñaba la oración en sus vidas.
Fue maravilloso hablar con ellos y leer lo que escribieron en los
formularios de la encuesta que debían llenar. Como decidí hacer
que todp lo que me revelaran fuera anónimo, tuvieron la liber-
tad de expresar con sinceridad las cosas que estaban experimen-
tando y cómo se sentían al respecto.
In esta generación de jóvenes, descubrí que la masuría de
ustedes están muy conscientes de lo que está pasando en el mun-
do a su alrededor. Sienten un montón de presión para triunfar y
saben que la competencia es intensa. Pero también tienen una
gran esperanza de que hay un buen futuro por delante en el mundo
que los rodea.
L-n.i di. las cosas por la que ustedes tienen tremenda preocu-
pación es por su seguridad personal v la seguridad de las personas
que quieren. \ con r.i/ón. Ven la k'le\ isión. Leen íevistas. L.niran
a la Iniernet. 1 icnen. o al menos tienen acceso, a un teléfono o

El poder «leí joven que ora
un teléfono móvil. Están enchufados y saben
las cosas espantosas que están sucediendo en
el mundo, y algunas de ellas están pasando
demasiado cerca. En realidad, es probable
que sepas más de lo que necesitas sobre lo que
está pasando y esto te perturba. Sin embargo,
hay una manera de evitar vivir en temor por
tu seguridad y la seguridad de los demás, y
es orar por eso. Cuando tú elevas esas preo-
cupaciones a Dios cada vez que las tengas, y
le pides que te proteja a ti y a tus seres queri-
on más paz al respecto.
•iaz ée. la.oración i«i territorio <?Qn.oqi#o,
Hace mucho tiempo aprendí a orar todos los días por mi
seguridad y la de mis amistades y familiares. Siempre me daba,
paz hacerlo, y sé que Dios nos ha protegido a todos debido a eso.
La oración no significa que nunca nos pasará algo malo, sino
que aun én medio de las cosas que pasan, veremos la mano pro-
tectora de Dios. [
Recuerdo una vez cuando conducía mi vehículo de tracción
en las cuatro ruedas unos días después de una gran tormenta de •
nieve. Mientras me acercaba con lentitud a una luz roja en una !
intersección de mucho tránsito, puse el pie en el freno, pero no,
ocurrió nada. Había dado con una capa de hielo que era invisible
por completo para mí. La intersección consistía de dos carreteras'
estrechas que se cruzaban la una con la otra, con profundas zanjas
de drenaje de agua a ambos lados. Había autos que iban en
ambas vías por la intersección delante de mí, y me di cuenta que
mi auto estaba del todo fuera de control y no lo podía detener. <
«Jesús, ayúdame», oré en voz alta. Hacía todo lo posible por '
mantener el control del auto y evitar ir a parar a una de esas zanjas .
a ambos lados de mí. En un esfuerzo por hacer eso, sin embargo, •
fui a dar al centro de la intersección. Todos los autos se echaban
Tengo más deseos
de orar cuando:
• Estoy ansioso
• Me dirijo al trabajo
• He estado con
amigos inconversos
• Tengo un tremendo
examen por delante
• Tengo una gran
carga en mi corazón
(16-19 años de edad)
dos, puedes vivir
li4

Señor, ayúdame a estar seguro
Pienso en
Dios como:
•Mi única esperanza
• Omnipresente,
siempre esta'allí
• Un Rey poderoso
> Alguien que está cerca
> Demasiado lejos
para escucharme
(16-19 años de edad)
a un lado o al otro a mi alrededor al tratar
también de mantener el control. Un auto
verde se dirigía directo hacia mí, y ni siquiera
sé cómo impedí que me golpeara, excepto
decir que estaba otando con mucha fuerza
en el momento y que la mano de Dios debe
haber intervenido. Fue un milagro que no
nos sucediera algo a mí ni a otra persona.
Antes de salir de casa ese día, oré de
forma específica que Dios me protegiera.
No hay duda en mi mente de que Él respondió esa ora-
ción. En esos momentos difíciles en que tu futuro cuelga de la
balanza, deseas la confianza de saber que has estado en constan-
te comunicación con tu Padre celestial y que Él tiene sus ojos en
ti. Son momentos, como el que yo experimenté, en que se nece-
sita que la oración reciba respuesta al instante. Pero para estar
seguro de que ocurra, debes orar todos los días. Dios es un lugar de
seguridad al que puedes correr, pero es mejor si corres a Él cada
día y con regularidad, de modo que estés en territorio conocido.
La Biblia dice: «El temor del SEÑOR es un baluarte seguro
que sirve de refugio a los hijos. El temor del SEÑOR es fuente de
vida, y aleja al hombre de las redes de la muerte» (Proverbios
14:26*27). Cuando tenernos los ojos en Dios, Él mantiene los
suyos en nosotros.
.acemas,
En lo personal, creo que nuestro Padre
Celestial tiene cuidado de nosotros y nos pro-
tege del peligro más de lo que iios damos
cuenta. No tenemos la menor idea dé cuántas
veces hemos escapado por los pelos y nos
han apartado del camino hacia algo perju-
dicial. Sin embargo, este tipo de protección
no es algo que solo debemos dar por senta-
do. Tenemos que orar por ella.
Mi oración
a Dios
Señor, guíame
en tu voluntad.
Usame para lograr
cosas en este mundo
y para hacer tus tareas,
no las mías.
(13 años de edad)

El poder del' joven «fue ora
Creo en la
oración porgue:
• Hace que
la gente cambie
• Es poderosa
• Puede mover montañas
. Cambia las situaciones
• Da resultado
(13-15 años de edad)
Parte de la protección de Dios tiene que
ver con obedecerlo y vivir dentro de su volun-
tad. Cuando no hacemos alguna de estas cosas,
podemos salimos fuera de la sombrilla de
Dios. Dejamos de escuchar su voz que nos
dice por cuál camino ir y qué hacer. ¿Cuántas
veces las personas se ahorrarían algo desas-
troso si le hubieran pedido a Dios que les
mostrara el camino y luego hubieran seguido
su dirección? Si al menos se hubieran comu-
nicado más a menudo con El a fin de poder reconocer su suave
voz cuando nos habla al corazón. Si se hubieran tomado el tiem-
po de pedirle a Dios sü dirección. Si hubieran escuchado a Dios
cuando les hablaba a través de su Palabra o por medio de una
autoridad que había puesto en sus vidas.
Es importante recordar en especial todo esto cuando estás
conduciendo un auto. Siempre ora por seguridad cuando entras
en un auto. No te arriesgues al no obedecer todas las reglas de la
carretera. El precio es demasiado alto. Pídele a Dios que te man-
tenga alerta y sensible a lo están haciendo los
autos a tu alrededor. Tú puedes ser el mejor
conductor y sin embargo tener un acciden-
te debido a la imprudencia ele otra perdona.
Si tienes un pequeño accidente, permite que
sea una lección que aprendiste, Los conduc-
tores más precavidos que conozco son los
que han tenido un accidente y han aprendi-
do de la forma más dura. No creas ni por
un momento que no te puede suceder a ti.
¡Te puede pasar! Así que pide Ja protección
de Dios cada vez que conduzcas. ,, •
Que ores por protección sobre tu escuela
también es muy importante. Cada vez que
asistas a clases, pídele a Dios que derrame su
Oré y OÍOS
respondió
Tuve un mal
presentimiento en
cuanto a una de mis
amigas que tiene
un trastorno alimenticio.
Oré por ella. A la mañana
siguiente, descubrí
que se desmayó en su auto,
se salió de la carretera
y fue a dar a una zanja.
Dios respondió mi oración
porque ella está bien.
(16 años de edad)

Señor» ayúdame A estaohwfuro
''•••1 • • " lí5:";v "'
Espíritu en tu escuela y la proteja d^fbualquier peligro o mal.
Ora por la paz entre los demás estudiantes. Ora que cualquier
plan del enemigo quede al descutylit'o y se frustre.
Solo recuerda que si alguna veZ"fpstíen esas preocupaciones en
ti por tu seguridad o la segundadle otros, permite que sea una
señal de que debes orar al respecto. No dejes tu vida al azar en nin-
guna manera cuando puedes jj^ótegerla con oración.
Señor, te ruego que siempre^me protejas' cada vez que
salga y me guardes a salvo de cualquier accidente, enfer-
medad o malas influencias. Guárdame a salvo cada vez que
conduzco o paseo en un auto con otra persona. Quiero
estar protegido bajo tu sombra (Salmo 41:1). Ayúdame
a escuchar siempre tu voz cuando me dirige y guía. Envía
a tus ángeles para que me cuiden (Salmo 41:12). Espe-
cialmente, te ruego por (nombra cualquier preocupación
que tengas en cuanto a tu seguridad).
Señor, te pido que me cures. En especial, te pido por
(nombra cualquier esfera donde necesitas curación). Te pido
lo mismo por mi familia y amigos. De forma específica
te ruego por (nombra la persona que necesita que la
curen). Gracias, Señor, porque tú eres nuestro Sanador.
Tú, Señor, eres mi amparo y mi fortaleza y mi «pronto
auxilio en las tribulaciones» (Salmo 4<SJ1, RV-óO). Por lo
tanto, no temeré. Protégeme de la violencia y no permitas
que ningún arma se use contra mí (Isaías 54:17). Gracias
porque tú no me dejarás en manos de los malvados que
tratarían de destruirme (Salmo 37:32-33). Protégeme
de los planes de la gente mala. Guárdame de peligros
repentinos. Gracias «porque solo tú, SEÑOR, me haces
habitar seguro» (Salmo 4:8; LBLA). Te lo pido en el nombre
de Jesús.
íi?

El poder del.- jpjtféiv. ^ue ora
Porque has puesto al Señor, que es mi refugio, al
Altísimo por tu habitación. No te sucederá ningún
mal, ni plaga se acercará a tu morada.
SALMO LBLA
Ningún arma forjada contra ti prosperará.
ISAÍAS 54:17-, LBLA
Él ordenará que sus ángeles te cuiden en todos
tus caminos:
SALMO .91:11
103

Éíaz una lista de las personas1 cuya segurida<¿^jte p^pcúpa.
Luego di una oración, nombrando a cada una cíe eíasjipeíi
sonas y pidiéndole a Dios que las protejas. No te olvides de ti.
.M
/|'Qué cosas te atemorizan más? Escríbelas a continuación
como una oración pidiéndole a Dios que te proteja de esas
cosas y te libere de cualquier temor. (Por ejemplo: «Señor,
tengo miedo de...»)
Üíiljtfflí.
4
n¿euándo te sientes más seguro? ¿Por qué? Dale gracias a
Dios por esos momentos de seguridad y paz.

•a-- ' i :

^CUANDO TENÍA ( \IOR( I WOs, PRESENTÉ A UN MUCHACHO
i, vecino a una de mis amigas (.orno (<el .gordo Mike». Todos los
otros chacos, lo llamaban el gordo Mike para distinguirlo de los
• otros Mike que no eran tan gruesos. En el momento en que lo
i hice, sin embargo, vi una mirada de dolor en sus ojos y me di
cuenta que así no se llamaba a sí mismo. Me sentí rnuy mal por
i eso debido a que nunca intenté lastimarlo. Es más, pensaba que
; Mike era bien pareci4p y. yo, no encontraba poco atractiva su
gordura, Pero se veía qwe;Ál-sív;Yo pensaba que era un apodo
| cómico que no je molestajba,; Sjn duda alguna, sí le molestaba. ,
; En esa época yo^ta demasjadO^noraote para darme cuenta que
nadie se sientfiJbien cpn 'un(n,pnabre como ese. Y también era
mttehala< verguéiií a y la iñm^krpz que-sentfa para disculparme.
Esperaba que al fingii que iodo el inücknte nunca había sucedi-
; do, lo olvidaría y todo estaría bien.
Poco después-me mudé de aquel vecindario y no \ olví a ver-
lo jamás. No pensé mucho en el inciden re hasta años más tarde,
después de mi conversión. Deseaba esiar del iodo a bien con

El poder del' joven «fue ora
Dios y enmendar el pasado, así que le pedí al Señor que trajera a
mi mente cualquier cosa que necesitara perdón a fin de podérse-
la confesar. Mi mente se inundó de muchos recuerdos de cosas
malas que había hecho y una de ellas fue ,mi presentación de
Mike. Me sentí terrible por mis no malintencionadas y crueles
palabras y el daño que debían haber hecho. No podía creer que
después que en mi vida me hirieran siempre los insensibles comen-
tarios de otros, hubiera hecho la misma cosa con otra persona.
Le pedí a Dios que me perdonara por ser tan insensible, poco
amorosa y estúpida.
Si hubiera podido encontrar a Mike y disculparme en persona,
lo hubiera hecho. Sin embargo, no pude, así que traté de arre-
glarlo orando a Dios que lo bendijera en todo. Oré que de algún
modo las palabras que le dije se borraran de su memoria o que al
menos perdieran su aguijón y sanara de cualquier dolor que
debe haberle causado mi comentario. Oré que pudiera perdo-
narme. Oré que yo pudiera perdonarme.
Una de las partes que puede causarnos los más grandes pro-
blema en la vida está localizada en la cara entre la barbilla y la
nariz. Con la boca podemos decir cosas que no debemos y ter-
minar hiriendo a otros y pagando las consecuencias. Yó estaba
pagando las consecuencias de las palabras que dije años atrás.
No podemos retirar nuestras palabras una vez que las pro-
nunciamos. Todo lo que podemos hacer es pedir perdón y esperar
el perdón de la persona herida o agraviada.
Lo más difícil La mejor manera de asegurarnos que es bueno
£e la oración es: lo que sale de nuestra boca es poniendo en nues-
• Poder alabar a Dios tro corazón pensamientos que sean buenos.
N°0 tornad demasiado Biblia dice que «de la abundancia del corazón
tiempo para orar habla la boca» (Mateo 12:34) . Si nos llenamos
• No saber si a Dios corazón con la verdad y el amor de Dios,
de verdad le importa eso eslo que saldrá.
• Orar por mí ¿Has estado alguna vez al lado de alguien
• Nada és difícil en esto que se queja o habla de forma negativa sobre
(16-19 años de edad) sí mismo y los demás a cada momento? ¿No

Señor» ayúdame a decir palabras que vivifiquen
es agotador? La Biblia dice que hagan¿fcos
«todo sin murmuraciones y con ti encías»
(Filipenses 2-": i). Si nos quejamos,¡peso
refleja nuestra falta de fe en Dios. Mileba
que no creemos que El tenga ej^imón
en sus manos, ni que pueda^.cg^dár de
nosotros. Sugiere que no confiamos en
qué Dios responderá nuestra^raciones.
Demuestra que no estamos-, ©rando. Es
deprimente estar cerca '¿te personas con
una falta de fe tan obvia..
Imagínate lo que séría-si cada vez que abres tu boca hablaras
palabras relacionadasico'ñ restauración, aliento, consuelo, sabi-
duría, amor y verdad. Serías la persona más popular a la redonda.
(Excepto con los pensadores quejosos y negativos, por supuesto).
Es difícil hablar siempre de esa manera, pero es posible hacerlo
si le pides la ayuda a Dios. Es peligroso decir todo lo que te viene
a la mente, a menos que lo que te venga a la mente sea bueno. Si
tienes la mente fija en cosas buenas y tu corazón está lleno de
cosas buenas, se reflejará en las palabras de tu boca.
: (De Filipenses 4:8, RY-60)
1. Piensa en todo lo que es verdadero. SÍ piensas en lo que es
honesto, genuino, auténtico, sincero, fiel, preciso y veraz,
no dirás nada falso, indebido, erróneo, engañoso ni incierto.
2. Piensa en todo lo que es honesto. Si piensas en todo lo que es
admirable, de gran calidad, excelente, magnánimo, supe-
rior y honorable, no dirás nada bajo, mezquino, malo, des-
honroso, ni vulgar.
3. Piensa en todo lo que es justo. Si piensas en lo que es justo,
razonable, decente, legal, bueno, adecuado, merecedor y
Tengo más deseos
de orar cuando:
• Estoy deprimido
• En medio de la noche
• Soy tentado
•Siento la presencia
de Dios
• Acabo de salir
de la iglesia
(13-15 lios de eitá)
173

goüar del ..joven; ¡ orá
honorable, no dirás nada que sea injustificado, prejuiciado,
disparatado, ilegal, ni injusto.
4. Piensa en todo lo que es puro. Si piensas en lo que es limpio,
claro, sin tacha, casto, inmaculado y no contaminado con
el mal, no dirás nada que sea inferior, impuro, corrupto,
contaminado, impío, ni sucio.
5. Piensa en todo lo que es amable. Si piensas en lo que es agra-
dable, grato, encantador, satisfactorio o espléndido, no dirás
nada que sea horrible, ofensivo, desagradable, repugnante,
ordinario, lamentable, ni feo.
<». Piensa en todo lo que es de buen nombre. Si piensas en lo que
es admirable, atractivo, valioso, recomendable, positivo o
digno de repetirse, no dirás nada que sea negativo, desalentador,
indeseable, ni lleno de malas noticias, chismes y murmura-
ciones.
Piensa en todo lo que es virtuoso. Si piensas en todo lo que es
moral, ético, recto, excelente, bueno, impresionante o de
acuerdo a altos valores morales, no dirás nada depravado, falto
de ética, desvergonzado, malo, indulgente, corrompido, malo,
ni inmoral.
8. Piensa en todo lo que es digno de alabanza. Si piensas en todo
lo que es admirable, elogiable, valioso, alabado, aplaudido,
glorificado, exaltado, honrado o aprobado, no dirás hada
crítico, condenatorio, censurable, reprobable, denigrante,
condenatorio, despectivo, ni deprimente.
ico cosas qim pasan '
ary^j hablan las personas? sabia»
1. Cuando las personas sabias hablan, dan razones de la esperanza
que llevan dentro. Las palabras más importantes que pode-
mos decir son las que le explican nuestra fe a alguien que
pregunta o que está dispuesto a escuchar. Dios dice que
debemos ser capaces de dar razón de la esperanza que hay

S^ñor. ayúdame a decir palabraá,4|ue vivifiquen
en nosotros (I Pedro Tejemos que pedirle a Dios
que nos ayude a ser lo bastante sabios y atrevidos para
explicar con claridad nuestra fe,jen El. Tenemos que pedirle
que nos ayude a explicar a oj0s>s por qué llamamos a Jesús
nuestro Mesías, por qué noápodemos vivir sin el Espíritu
Santo y por qué decidimos a'ndar en los caminos de Dios. Y
debemos lograr hacer esto.dfe una manera amable y húmilde,
porque si no nos distanciará de esos que Dios quiere acercar
a Él. Si el amor de Di^s no está en tu corazón, no saldrá dé
tu boca. Y lo queídigás no acercará a la gente al Señor. Es
más, quizá haga todo lo contrario.
Cuando las personas sabias hablan, saben que el momento en
que se hace es'importante. Cuando hace falta decir cosas que
al oyente le resulta difícil recibir, el momento oportuno lo
es todo. Ciertas palabras no se pueden pronunciar con
buen resultado si la persona que escucha no está dispuesta
ni preparada para escucharlas. Es importante discernir eso,
y la única manera de saber con certeza cuándo hablar y qué
decir es orar con antelación por sabiduría. La Biblia dice que
no seamos precipitados al hablar (Prover-
bios 2^:20, LBLA). Una persona sabia > . .•.•.,
, r 13 Principales
sabe que no debe expresar todos los . ,
n . f , motivos
pensamientos que le vengan a, la oración
TM ' • • 1 • I 1 • + «9UI i»
cabeza. «El necio da rienda suelta a sus ,
impulsos, pero el sabio acaba por refre- j 9a
naríos» (Proverbios 29:11, DHH)., Uno1 , aLe"to?
, , , . a la hora de la comida
puede tener cosas buenas que decir, - , .. ,
r , . .V «Quesea valiente
pero la gente no siempre está lista para « ; j
> i c&, , , » Que drezea en mi
oírlo. Solo Dios sabe con segundad andar con Dios
cuándo alguien está listo. Pídele que te . Q«e m¡s amfg0s
lo muestre. ¡»conversos
Cuando laspevsonas sabias hablan, dicen conozcan a Jesús
la verdad. Cuando no hablamos la ver- ' Que P tenga fortaleza
dad, hacemos daño a otros, así como a ',6"19 aíos ie
175

El poder del jo vea. que. ora
Oré y Dios nosotros mismos. «Por lo tanto, dejando la
respondió mentira, hable cada uno a su prójimo con la
Oré que pudiera verdad, porque todossomos miembros de un
hablarle a la gente mismo cuerpo» (Efesios 4;2S). Las mentiras le
en mi escuela sobre hacen daño a todo el mundo. Por otra parte,
Dios, y hasta ahora no podemos ir de un sitio para otro hablan-
be guiado a quince do Ja verdad sin sabiduría, sin sensibilidad,
personas e sin saber si el Señor lo cree oportuno. Eso le
escuela al Señor. l j - i ¿ t
, „ nace daño a la gente. Las personas no quieren
(13 años de edad) . r • r j i i
escuchar cada pizca de verdad sobre su per-
sona a cada momento. Es demasiado para ellas.
Es demasiado para nosotros también. Algunas veces es mejor
no decir nada y orar que Dios nos muestre cuándo una per-
sona está preparada para escuchar la verdad. La verdad que
necesitas hablar, en especial sobre ti y otros, es la verdad de
Dios. No digas cosas negativas sobre ti ni cualquier otro
debido a que esas clases de palabras no van de acuerdo con la
Palabra de Dios.
4. Cuando las personas sabias hablan, no dicen demasiado. Tenemos
que ser cuidadosos para no pasar más tiempo hablando del
necesario. La Biblia dice: «Quien mucho habla dice tonterías»
(Eclesiastés 5:3). Siempre les digo a mis grupos de oración
que no deben pasar más tiempo hablando sobre nuestras
peticionés de oración que orando por ellas. Y no podemos
dejar salir palabras de nuestra boca sin pensar lo que esta-
mos diciendo1. La Biblia dice que en el día del juicio tendre-
mos que dar cuenta de toda palabra ociosa (Mateo 12:36). Es
un pensamiento que asusta. Debemos pedirle a Dios que
nos haga sabios en el tiempo que debemos pasar hablando.
5, Cuando las personas sabias hablan, lo hacen con gracia. No
podemos decir palabras que sean malas, insensibles, ásperas,
groseras, rudas, engañosas, ofensivas, ni arrogantes sin cose-
char las coñsecuencias. Con nuestras palabras o bien cons-
truiremos vidas o las derribaremos. Y eso incluye la nuestra.

,señor» ayúdame a derñr pA;ahraq» que vívxtiqueri
«Llenas de gracia son las palabfis de la boca del sabio,
mientras que los labios del necios/él consumen» (Eclesiastés
a i:" » , LBLA). Pídele a Dios quejcree en ti un corazón limpio
tan lleno de su Espíritu, su arriar y su verdad que se desbor-
de de amor, verdad y sanaci^ñ en tu conversación. Pídele
que te ayude a encontrar pál'abras que den vida a los que te
rodean. •
Cuando trabajaba en la industria del entretenimiento secular
en Los Angeles, escuchaba la palabra «Jesús» cientos de veces al
día. Pero la gente la decía en sus pleitos y sin reverencia, amor, ni
entendimiento de lo que es El. No fue hasta que recibí a Jesús
que me di cuenta bien de cuánta maldición era ese nombre
cuando se usaba de manera tan profana. Tomar el nombre de Dios
en vano trae maldición a quienquiera que lo haga porque que-
branta uno de los Diez Mandamientos. «No tomarás el nombre
del SEÑOR tu Dios en vano» (Éxodo LBLA). Al usar el
nombre de Dios como una maldición también viola el manda-
miento más importante de Dios, el cual es: «Ama al Señor tu
Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente
y con todas tus fuerzas» (Marcos i.?:3¿). Nadie que ama a Dios
usa su nombre en vano. Sin embargo, cuando alguien que le
reverencia dice con amor, esta misma palabra, Jesús, tiene gran
poder. Tiene poder para salvar, sanar, proveer, proteger y muchí-
simo más. Usarla de manera profana cierra las puertas a esas
mismas cosas de nuestrá vida.
Lo que dices influye en tu vida más de lo Mi oración
que sabes. Cuando bendices a otros, Dios te a Dios
bendice a ti; Las personas sabias saben esto Señor, man teme puro
y escogen con cuidado sus palabras y el Te pido también por
momento oportuno. No permitas que nin- mi futuro cónyuge,
guna de las grandes cosas que Dios quiere Ayúdanos a permanecer
hacer en tu futuro queden fuera debido a Pms «no para el otro
las palabras ociosas que digas hoy. 'Iasta matrimonio.
(13 anos de edad)
f f

El poder del* jpyen ora
Señor, ayúdame a ser uña persona quesiempre hable la
verdad y nunca mienta. Ayúdame a decir palabras que
edifiquen a las personas y no que las derriben. Ayúdame
a hablar vida en las situaciones y las personas que me
rodean, y no muerte. Llena mi corazón cada día con tu
amor y bondad a fin de que fluyan de mi boca. Ayúdame
a hablar solo acerca de cosas que sean verdaderas, honestas,
justas, puras, amables, de buen nombre, virtuosas y dignas
de alabanza. «Sean, pues, aceptables ante ti mis palabras
y mis pensamientos, oh SEÑOR, roca mía y redentor mío»
(Salmo 19:14).
Tu Palabra dice que «del hombre son los propósitos
del corazón, mas del SEÑOR es la respuesta de la lengua»
(Proverbios 16:1). Ayúdame a prepararme el corazón
permaneciendo en tu Palabra. Lléname el corazón de tu
amor de modo que salga en las palabras que hablo. Con-
dena mi corazón cuando me queje o hable de forma
negativa. Guárdame de decir palabras que dañen a otras
personas. Ayúdame a no hablar muy rápido ni demasiado.
Muéstrame cuándo hablar y cuándo no. Y cuando
hable, dame palabras que ayuden a las personas y las hagan
sentirse bien con ellas mismas y con su vida. Dame pala-
bras para explicar mi fe de una manera que atraiga a las
personas a ti. Te lo pido en el nombre de Jesús.

Señor, ayúdarne a decir palabras' fue vivifiquen
El que quiere amar la vida y ver días buenos,
refrene su lengua de mal, y sus labios no hablen
engaño,
' I PEDRO 3:10, RV-6O
El sabio de corazón controla su boca; con sus
labios promuévé él sáber.
PROVERBIOS 16:23
Panal de miel son las palabras agradables, dulces
al alma y salud para los huesos.
PROVERBIOS 16:24, LBLA
179

¿Alguna vez alguien te dijo algo que hirió}tus$en JBhientos
o te hicieron sentir mal contigo mismo o cóntft^a%|C}Íál
ha sido el tiempo más doloroso que recuerdas? ¿Cómo ese
recuerdo influye en la manera de hablarles a otros?
. ¿Alguna vez le has dicho palabras a alguien que quizá la
hirieron o que lamentaste decir? Si es así, confiésale eso a
Dios y pídele que te ayude a pedirle perdón a esa persona.
¡Escribe una oración pidiéndole a Dios que te revele alguna
vez en que dijiste palabras que hirieron a alguien, o en que
usaste un lenguaje que no le es agradable, de lo que ni
siquiera te diste cuenta. Escribe lo que Él te muestre y pídele
que te perdone.

íÉ^TES DE SER ADOLESCENTE, ALGUIEN me regaló una pequeña;
tola de vidrio transparente qué parecía Una canica que colgaba
} de una cadena de oro. Dentro de la bolita estaba la más diminuta
, dé las semillas. Una semilla de mostaza. En ese momento pensé:
" «¿Por qué se molestaron en poner allí dentro una semilla tan pequeña
% que a duras penas se puede ver?», Claro, no captaba la idea.
; No fue hasta años más tarde que aprendí el significado de
: aquella semillita. Jesús dijo: «Les aseguro que si tienen fe tan
pequeña como un grano de mostaza, podrán decirle a esta mon-
taña: "Trasládate de aquí para allá ", y Se trasladará. Pára ustedes
nada será imposible- (Mateo \ "!'•'?'o). Desde entonces he pensado
mucho en lo pequeña que era ésa semilla. Llegué a la conclusión
de que si esa es toda la fe que Se n ex t si ta para mover una montaña,
puedo tener suficiente íe para mo%er las montañas en mi vida.
;No es fantástico que Dios tome la pequeñísimn le que tenemos
y l>i convierta en algo grande cuando actuamos con estar lis;
Biblia habla de una "medida de fe que Dios ha distribuido a
í cada uno- (Romanos , 11M ). Fso significa queya El nos ha

El poder del' joven «fue ora
dado un poco de fe para comenzar. Pero cuando
actuamos basados en nuestra fe, cuando nos
atrevemos a dar un paso y hacemos algo que
requiera fe de nuestra parte, Dios aumenta
nuestra fe.
Ya sea que te des cuenta o no, vives por
fe cada día. Siempre qué vas al médico, confías
en que no te va a matar. Cuando le compras
medicina al farmacéutico, crees que te dará
la prescripción como es debido. Cuando
Vas a un restaurante, tienes fe de que el per-
sonal no te va a envenenar (aunque algunos
restaurantes requieren más fe que otros).
¿Cuánto más debemos confiar en Dios?
Cómo suceden franges cosas
No tenemos idea de cuán grandes cosas Dios quiere hacer
por medio de nosotros si damos el paso de fe cuando nos lo
pide. Es por eso que nos deja pasar por algunos tiempos difíci-
les. Tiempos cuando nos sentimos débiles y vulnerables. Dios
permite que ciertas cosas pasen para que nos volvamos a Él y le
demos nuestra total atención. Es en esos tiempos, cuando nos
vemos obligados a orar con una mayor fe, que se fortalece nues-
tra fe. Jesús dijo: «Se hará con ustedes conforme a su fe» (Mateo
9:29). Este quizá sea un pensamiento que asusta, dependiendo
del tipo de fe que tengamos. Sin embargo, hay cosas que pode-
mos hacer para aumentar nuestra fe.
Una de las cosas que puedes hacer para aumentar tufe es leer la
Palabra de Dios. La fe viene con solo oírla (Romanos 10:17).
Cada vez que tomas las promesas y las verdades de la Palabra de
Dios y las declaras en voz alta, podrás sentir el aumento de tu fe.
Cuando crees lo que Dios dice y confías que es totalmente cierto,
tu fe aumenta.
Lo más difícil
fie la oración es:
• Esperar cuando Dios
lo crea oportuno
• Oraren voz alta delante
de otras personas
• Orar por las cosas
malas que están
haciendo mis amigos
• No pedirle a Dios
que castigue a otros
• No saber cuándo
responderá Dios
[16-19 años de edad)

Señor, ayúdame a tener ie pojólo .imposible
Orar es otra cosa que puedes hacapara
aumentar tu fe. Eso se debe a que lalación
ya es un acto de fe. Es una manejen que
puedes extender la mano y tocar^jjj^ios. En
cierta oportunidad, una mujer alegró la mano
hacia el Señor creyendo esto: «.Sijlogro tocar
su manto, quedaré sana». Jes^le dijo que
su fe la había sanado, y ella sa^p^en ese mismo
momento (Mateo vez que
extendemos la mano y^camos al Señor en ^e Mo
oración, de alguna manera nuestra vida sana a"os de edad)
y aumenta nuestra fe.
Cada día esmáscruciaLque tengamos fe. Habrá momentos en
la vida de cada uno de nosotros en que necesitaremos el tipo de
fe que será determinante entre el éxito o el fracaso, la victoria o
la derrota, la vida o la muerte. Es por eso que pedir más fe debe
ser una oración constante. No importa cuánta fe tengas, Dios puede
aumentarla. Aun cuando tu fe parezca pequeña, puedes hablar
con fe a las montañas de tu vida y decirles que se muevan, y Dios
hará lo imposible. Puedes orar para que sanen las partes dañadas
de tu vida y Dios las restaurará. Puedes pedirle a Dios que
aumente tu fe y te dé valentía para actuar basado en ella, y Él lo hará.
¿De qué promesa de Dios te gustaría tomar posesión por fe
ahora mismo? ¿Qué oración te gustaría atreverte a orar con fe y verla
contestada? ¿Qué te gustaría lograr en tu vida, o en la de alguien
que conoces, que requeriría una oración con gran fe? Pídele a Dios
que tome la semilla de fe que-tienes y la convierta en un árbol
gigantesco de fe a fin de que puedas ver que suceden estas cosas.
Dios me ha liberado de muchas cosas, incluyendo el alcohol,
las drogas, los temores, la depresión, la ansiedad y la falta de perdón,
por solo mencionar algunas. He visto al Señor liberarme en un
Pienso en
Dios como:
• Un anciano
sobrenatural de
ochenta años de edad
•Un Proveedor
•Un Redentor
• Un Líder Santo
• El Soberano Señor
183

El poder del jo vea. que. ora
ílis principales
motivos de
oración son:
• Que me case con
la persona que Dios
tiene para mí
instante, y también mediante un proceso que tomó mucho
tiempo, No importa el tiempo que tomó, lo que importa es que
sucedió. Sin embargo, no sucedió sin fe de mi parte y sin la fe de
las personas que oraron conmigo y por mí.
Todos necesitamos liberación en un momento u otro. Es que
no importa cuán espirituales seamos, seguimos siendo humanos.
Y no importa con cuánta perfección tratemos de vivir, seguimos
teniendo un enemigo que intenta levantar fortalezas del mal en
nuestra vida. Dios quiere liberarnos de cada atadura que nos
separa de El. Jesús nos enseñó a orar: «Líbranos
del maligno» (Mateo €:13). No nos habría
dicho eso si no necesitáramos liberación. Sin
embargo, muchas veces no oramos así porque
no tenemos fe en lo que dice Dios. Dema-
siado a menudo vivimos como si no ños dié-
ramos cuenta de que Jesús pagó un enorme
precio para que pudiéramos ser libres. La
Biblia dice que «Jesucristo dio su vida por
nuestros pecados para rescatarnos de éste
mundo malvado, según la voluntad de nuestro
Dios y Padre» (Gálatas 1:4).
¿Alguna vez te has sentido lejos dé Dios
hagas lo que hagas? ¿Pareciera como si tus
oraciones nunca se escucharan ni recibieran
respuesta? ¿Experimentas más desaliento y
tristeza que el gozo que sientes en el Señor?
¿Descubres que vuelves una vez tras otra a
los mismos problemas de siempre, a los mismos viejos hábitos
en tus acciones o pensamientos? ¿Te sientes siempre mal contigo
mismo? Si dijiste sí a cualquiera de estas preguntas, te tengo
buenas noticias. Dios quiere liberarte. Pero debes tener la fe de
que Él puede hacerlo y lo hará. Y tienes que orar una oración de fe.
Muy a menudo nos dejamos llevar por los planes del diablo
con nuestra vida, sin saber que no tenemos que soportarlo. Jesús
que amen a Dios
' Que me sienta
esperanzado
y no desesperanzado
• Que Dios me quite
las dudas
• Que pueda
conocer mejor a Dios
(16-19 años de

Señor, ayúdame a tener ie pojólo .imposible
vino para levantarnos por encimaj
enemigo que quiere destruirnos,
que tengamos fe en El como el Libi
y creamos que El nos liberará de
que no es lo mejor para nuestra
Biblia dice: «Si el Hijo los
ustedes verdaderamente libr
Eso significa que por mujd
eso con lo que luchas, del!
Oré y Dios
respondió
Oré porque nuestra
escuela es mu/
pequeña. El jueves
pasado tuvimos
una reunión en nuestra
escuela y ahora un
montón de chicos
vendrá' a nuestra escuela
el año que viene.
(13 años de edad)
que el poder de Dios, para liberar es
mucho más fuerte.
La adoración a Dios es un gran acto
de fe. Cada vez que lo adoras, sucede algo en el campo
espiritual que rompe el poder del mal. Es que estás en su presencia,
y dondequiera que El está, hay libertad y liberación. «El Señor
és el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad»
(2 Corintios 3:1*7). Cada vez que el enemigo trate de decirte que
nunca te liberarás de algo, échalo fuera con alabanza. Da grácias
a Dios que Él es el Libertador y tú te estás liberando en el momento
mismo en que lo alabas. La Biblia dice: «El ángel del SEÑOR
acampa en torno a los que le ternen; a su lado está para librarlos»
(Salmo 34:7).
Si alguna vez te parece que te estás deslizando de nuevo
hacia lo mismo de lo que ya eres libre, no malgastes tu tiempo
con desalientos. Recuerda que la liberación viene del Señor y es
un proceso continuo. Dios hace el trabajo completo y lo hará
hasta el final. Así que no te rindas porque lleve más tiempo del que
esperabas. Ten fe, pues «el que comenzó tan buena obra en ustedes
la irá perfeccionando hasta el día de Cristo Jesús» (Filipenses !;<§>).
Dios es el Dios de lo imposible. He visto probada esta verdad
muchísimas veces en mi vida. Existía una situación imposible
185

1
El poder «ftèl joven «pi« .ora
Mi oración
à Dios
en la que parecía que no había forma en
que las cosas resultaran. Sin embargo, oraba
con fe en que Dios escucha y responde la
oración, y a la mañana siguiente algo grande
cambiaba y Dios hacía algo que nunca
había soñado que podría suceder. Proveía
un camino a través de la situación o en torno
a la misma, o si no me elevaba por encima
de ella.
Cada vez que te veas en una situación
imposible, no te desalientes ni té deprimas,
a permitirte que me guíes Acude a Dios enseguida y ora por la
en todo lo que hago. situación. Cuéntale el problema. Y luego
(16 años de edad) dale gracias porque no hay nada dema-
' siado difícil para Él. Pídele que te afirme
en tu fe con tal fuerza que no vaciles, a pesar de los
obstáculos, problemas, pruebas y retos que enfrentes. Te asom-
brarás de cómo una semillita de fe dentro de ti puede convertirse
en una fe capaz de mover una gran montaña en tu vida.
Señor, gracias porque
tú dijiste én tu Palabra
que tienes un plan para
mi vida, un plan para
que prosperara y triunfara
Te ruego que se haga
tu voluntad en mi vida,
y que yo ponga tus
prioridades antes
que las mías.
i» rm
M
Señor, aumenta mi fe. Enséñame a andar «por fe, no por
vista» (2 Corintios 5:7). Dame fortaleza a fin de pararme
firme en tus promesas y creer cada una de tus palabras.
Sé que «la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios»
(Romanos 10:17, RV-60). Haz que mi fe aumente cada
vez que escuche o lea tu Palabra.
Sé que soy salvo «mediante la fe» y esa salvación es
un regalo tuyo (Efesios 2:8). Auméntame la fe de modo
que pueda orar con poder. Dame fe para creer que habrá
curación cada vez que ore por los enfermos. No quiero ver
una necesidad y luego no tener una fe suficientemente
fuerte para orar y creer que la situación va a cambiar.
18*

Señor, ayúdame a tener te pdafoo imposible
Señor, ayúdame a pedir «con fann dudar», pues «quien
duda es como las olas del mar, agitdiSs y llevadas de un lado a
otro por el viento». Sé que el que d»a¿es indeciso e inconstante
y no recibirá nada de ti (Santiagoffll^p). Sé que «todo lo que no
proviene de fe, es pecado» (Rorfflfbs 14:23, RV-60). Confieso
cualquier duda que tenga comQ||¡g¿ádo y te pido que me perdo-
nes. No quiero que las dudajg^pfgÉben lo que quieres hacer en
mí y por medio de mí. Auñ^B!>mi fe cada día a fin de que sea
capaz de mover montaña^piíá tu gloria. Te lo pido en el nom-
bre de Jesús. -
'M,;'-"''r
\ . .• T \LABF A
Si puedes creer, al que cree todo le es posible.
MARCOS 9:23, RV-60
Sin fe es imposible agradar a Dios; porque es nece-
sario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y
que es galardonador de los que le buscan.
HEBREOS 11:$, RV-6O
Esto es para ustedes motivo de gran alegría, a pesar
de que hasta ahora han tenido que sufrir diversas
pruebas por un tiempo. El oro, aunque perece-
dero, se acrisola al fuego. Así también la fe de uste-
des, que vale mucho más que el oro, al ser acrisolada
por las pruebas demostrará que es digna de apro-
bación, gloria y honor cuando Jesucristo se revele.
1 PEDRO l:§-7

lié necesitas en especial para tener fe
mismo? ¿Qué montaña o dificultad quisieras
¿t^ué te gustaría ver que sucede en tu futuro que demanda-
ría mucha fe hasta para orar por eso? Escríbele una oración
a Dios y pídele que aumente tu fe para creer.
•>» 1
• ¿(íjhié gran milagro te gustaría pedir en cuanto a las perso-
nas y circunstancias que te rodean en tu mundo?

Q \NDOMIl WHIIU ^O NOS \íl LUMOS 1H" California, no
pudimos. vender la tasa ames di. mart.hainos. Fn primer lugai,
no quena mudaimt, peio después de mucha oiación y lucha
interna, supe en mi corazón que aquella mudada era la voluntad
de Dios. Y supe que se supon/a que nos mudáramos enseguida y
no esperáramos por la venta de nuestra casa.
No mucho después que nos mudáramos a nuestro nuevo
hogar en Tennessee. un devastador terremoto golpeó el área donde
vivíamos en California. Es más, nuestra vieja casa estaba exactas
mente en el epicentro del terremoto, lo cual significa que ol
impacto del temblor fue más fuérie allí que en cualquier oirá parte;
Catando fue lo suficiente seguro volar a Lo.s Ángeles, fui a
ver lo que quedaba de nuesira antigua casa. En tiiamo vi lo que
le pasó, le di gracias a Dios que nadie había estado dentro
durante el lerremoto. Si no hubiéramos buscado ta voluntad de
Dios, si no le hubiéramos escuchado, ni hubiéramos hecho lo
que nos dirigió a hacer, habríamos estado allí. Y cualquiera de
ío.sorros pudiera haber estado muerto.

El poder del jofén «fue ora
Lo más difícil • , ,
rac'ónes- En esos meses despues de mudarnos y
antes del terremoto, había luchado de verdad
• Pensar en i"" con la mudada. Fue mucho más difícil de
quien orar }0 qUe pensaba. Extrañaba muchísimo mi
• Sacar tiempo antigua casa y mis amistades. Y, para ser
para hacerlo ^ sincera, había estado un poco contrariada
•No tener a alguien CQn Dios pof hacer que m£ mudara Sin
a mi alrededor embargo, cuando recorrí nuestra casa en
1ue 6 ruinas, le pedí perdón a Dios por apreciar
• Ponerla tan poco lo que había hecho por nosotros.
Pa a Le dije que lamentaba no haber confiado en
. Estar fuera É1 Quc nQ habfa creído en realidad que el
de mi zona -i „ i „ j
... , mejor lugar para estar era su voluntad,
de comodidad / , . r, , ,
, , „ Uue había luchado muchísimo porque se
(16-19 años de edad) r . . , , , ^r
hiciera mi voluntad y no la suya. Y que me
. había quejado de mi vida en lugar de darme
cuenta que su voluntad siempre es un lugar de suprema bendi-
ción, aun cuando no lo podamos ver en el momento. Si mi
familia y yo no hubiéramos buscado la voluntad de Dios y no la
hubiéramos seguido, aun de mala gana, habríamos estado allí
durante el terremoto.
vüuntaCfle D^ea un luaair sealrp
No me refiero a que los que estaban en California durante el
terremoto estaban fuera de lavoluntad.de Dios. Sin embargo,
creo que nosotros lo hubiéramos estado. Y creo que la casa no se
vendió porque cualquiera que hubiera estado allí en ese momento
hubiera muerto o estaría herido. Cuando caminamos en la
voluntad de Dios, encontramos seguridad. Cuando caminamos
fuera de la voluntad de Dios, perdemos el derecho a su protección.
Pídele siempre a Dios que te mantenga en el centro de su
voluntad. No escojas una universidad, procures una carrera, te
mudes a otro lugar, ni hagas cualquier decisión importante o
cambio en la vida sin preguntarle primero a Dios. Y entonces

Señor, ayúdame a conocer tu valllhtad para mi vida
espera antes de actuar hasta que sepas¡pn tu
corazón cuál es la voluntad de Diosj®'
Parte de estar protegido por Dios tiene
que ver con obedecerlo y vivir en su &®luntad.
Guando no haces cualquiera déá'esas dos
cosas, sales de debajo de la protección de
Dios. ¿Cuántas veces la gente ,se hubiera
librado de algo desastroso s^» le hubiera
pedido a Dios que les mostrara qué hacer
y después le hubiera obedecido?
Si oras a menudo, y le pides siempre a Dios que te revele su
voluntad, Él lo hará. El Espíritu Santo te guiará en todas las
cosas y hablará a tu corazón- La Biblia dice: «Ya sea que te desvíes
a la derecha o a la izquierda, tus oídos percibirán a tus espaldas
una voz que te dirá: "Este es el camino; sigúelo"» (Isaías 30:21).
Nunca olvides eso, y siempre caminarás en un lugar seguro.
uatro cosas íjvie son veréaé
abmla iiüImatM-Afe.Siaa — — - —
1. Seguir la voluntad de Dios no significa que nunca tendremos
problemas. Muchas personas creen que cuando uno está en
la voluntad de Dios todo marcha sobre ruedas. Y si todo no va
bien, es que uno no está en la voluntad de Dios. Sin embargo,
eso no es cierto. Los problemas son parte de la vida. No
podemos evadirlos por completo, aun cuando estemos
viviendo en el centro mismo de la voluntad de Dios. Tener
satisfacción y paz en medio de los problemas es el resultado
de vivir en la voluntad de Dios. Sientes confianza cuando
tienes la certeza de que andas en la voluntad de Dios y que
haces lo que Él quiere que hagas. Cuando estás seguro de
eso, puedes enfrentar mejor lo que te depara la vida.
Así que no pienses que los problemas en tu vida signifi-
can que estás fuera de la voluntad de Dios. El Señor usa el
Pienso en
Dios como:
•Siempre presente
' El Creador
•Mi Amigo
•Mi Padre celestial
• Un Rey
(13-15 años de edad)

El poder dtóíjpá^Sft ;<gue •oscá.
Mis principales
motivos de
oración son:
• Que no tenga
sentimientos
lujuriosos
• Que nuestras
tropas del
ejército estén
seguras
• Que tenga una
larga vida
• Por la ayuda y
la dirección de Dios
• Por mis finanzas
y las de mi familia
(16-19 años de edad)
cumplió a la perfección. Y ahora nos ayu-
dará a nosotros a hacerlo también.
ii Seguir la voluntad de Dios quizá te haga sentir muy incómodo.
La verdad es que si nunca sientes las exigencias y las inco-
modidades en tu caminar con el Señor, pondré en duda si
en verdad estás en la voluntad de Dios. Sé por experiencia
que las pruebas y las molestias son parte de la vida cuando
uno anda en la voluntad de Dios Eso se debe a que Dios
siempre nos pedirá que hagamos cosas que no quiere hacer
nuestra carne. El siempre nos pedirá que vayamos más allá
de lo que nos hace sentir cómodos. Lo hace porque quiere
saber que estamos decididos a poner su voluntad por enci-
ma de nuestra voluntad. Quiere que tengamos la misma
actitud de Jesús y que digamos: «No se haga mi voluntad,
sino la tuya, Señor».
4, Seguir la voluntad de Dios no sucede de manera automática.
Dios siempre nos da la posibilidad de escoger si vamos a
problema que tienes para perfeccionarte. Hay una
gran diferencia entre ¡estar fuera de la voluntad
de Dios y que El nos pode o pruebe. Las dos-
cosas son molestas, pero una conduce a la vida
y la otra no. En una tendrás paz, por molesto
que se ponga. En la otra no.
Seguir la voluntad de Dios no es fácil. La vida
de Jesús confirma que seguir la voluntad de
Dios no siempre será divertido. No siempre
será agradable, indoloro, ni sencillo. Jesús
estaba haciendo la voluntad de Dios cuando
fue a la cruz. Dijo: «He descendido del cielo,
no para hacer mi voluntad, sino la voluntad
del que me envió» (Juan 6:38, RV-60). Si
alguien hubiera podido decir: «No quiero
seguir la voluntad de Dios hoy», pienso
que podría haber sido Jesús. Pero Él la

Señor» ayúdame a conocer tu voM¡|teaá para mi vida
Mia, principales
motivos de
oración son:
• Por mi banda
• Por mi iglesia
• Por mi grupo
de jóvenes
• Por mí
•Per la presión de
mis compañeros
(16-19 años de sdad)
porque la voluntad de,Dios nos pide que hagamos cosas que van
más allá de nosotros mismos. En otras palabras, van más allá de
lo que podemos hacer por nuestra cuenta. Dios hace eso porque
quiere que dependamos de El para ayudarnos a hacerlo. Yo nun-
ca hubiera escrito un libro por mi propia cuenta. Pues bien, qui-
zá podría escribir suficientes palabras para llenar uno, pero nunca
lo podría hacer lo bastante bien para conseguir que millones de
personas lo compraran. Y no había manera en que yo sola pudiera
ser determinante en las vidas de las personas. Sin embargo, esas
cosas pasaron porque busqué primero la voluntad de Dios al
respecto. Y cuando Él habló a mi corazón sobre lo que quería
que hiciera, le dije que no podía hacerlo sin su ayuda. Le pedí
que obrara por medio de mí para ver cumplida su voluntad. Y
eso fue lo que Él hizo.
voluntad éi* Dios M tu bien
Los caminos de Dios son para tu bien. Sus leyes no pretenden
hacerte un desdichado ni impedir que te diviertas. Él te pide
cosas porque sabe lo que es mejor para ti. Confía en Él en esto.
Dios no quiere que vivas tu vida solo para ti, «sino cumpliendo
la voluntad de Dios» (1 Pedro 4:2). Él quiere capacitarnos «en todo
lo bueno para hacer su voluntad. Y que, por medio de Jesucristo,
.someter nuestra voluntad a ÉliÉfMio.
Todos los días tenemos oportu^p'ades
de tomar esa decisión. ¿Buscajfmos su
voluntad? ¿Le pediremos, .^pfiduría?
¿Haremos lo que Él dice? Lá|p®ália dice:
«No sean insensatos, sino>eáfilmdan cuál
es la voluntad del Señor»,:(lf£es;ios 7).
La voluntad de Dios,/esíf|'i3amino que
decidimos vivir cada díayde nuestra vida.
<, • Pli ' <
A menudo no pensamos que podemos
hacer lo que Dios nos picje que hagamos,
193

El poder del' joven «fue ora
Ore y Dios Dios cumpla en nosotros lo que le agrada»
respondí© (Hebreos í 5;¿i). Recuerden que «Dios es
Mi familia y yo oramos quien produce en ustedes tanto el querer
por mi abuelo cuando como el hacer para qup se cumpla su buena
se enfermó de gravedad, vojuntaci» (Filipensés 2:13). A Dios le agra-
. V san®' da cuando hacemos su voluntad. Mi ora-
El todavía no es salvo, ., __ , . , m _
cion es que todos ustedes «se mantengan
pero le seguimos p ,. , , , , f,
. ,, , , . firmes, cumpliendo en todo la voluntad de
hablando de esto, • ' á ^
. ... Dios» (Colosenses 4:x,¿).
(14 anos de edad) ... . . i ,
hl mejor lugar para comenzar a buscar
la voluntad de Dios es haciendo de la acción de gracias y la
alabanza en tu corazón una costumbre. La Biblia dice: «Den
gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para
ustedes en Cristo Jesús» (1 Tesalonicenses 5:18). Entonces ora
que Dios te guíe en cada paso, y dale gracias por adelantado por
hacer éso. Si has hecho algunas cosas que sabes que no son la
voluntad de Dios, necesitas confesárselas y pedirle que te traiga
de nuevo al camino. Estar fuera de la voluntad de Dios puede
hacerte de todo punto un desdichado. Cuando tú estás en el
buen camino y haces lo que quiere Dios, te sentirás bien, en paz
y confiado. Esos sentimientos por sí solos te inspirarán a desear
hacer lo que sea a fin de experimentarlos.
Cuando vives en el centro de la voluntad de Dios, estás en
un lugar de seguridad, protección, bendición, abundancia y
paz. No vale la pena vivir de otra manera.

Señor, ayúdame a conocer tu valllhtad para mi vida
r
Señor, te pido que me ayudesm cónocer siempre tu voluntad.
Dame sabiduría y comprensión en cuanto a esto (Colo-
senses 1 - ). Guíame en cadáípaso que dé y ayúdame a andar
de una manera que te «agrade a ti. Al caminar contigo
cada día, muéstrame efiréidebo hacer. Al igual que Jesús,
pido que no se cumpla jtíii voluntad, sino la tuya. «Me agrada,
Dios mío, hacer tu voluntad» (Salmo 40:8). Eres más
importante paramí que cualquier otra cosa. Tu voluntad
es más importante para mí que mis deseos. Quiero vivir
como tu siervo* haciendo tu voluntad de corazón (Efesios
«:i„ RV-60).
Señor, haz qúe mi corazón esté en línea con el tuyo.
Ayúdame a escuchar siempre tu voz diciendo: «Este es el
camino, ve por él». Si estoy haciendo algo fuera de tu
voluntad, muéstramelo. Háblame desde tu Palabra a fin
de tener un nuevo entendimiento. Muéstrame cualquier
esfera de mi vida donde no esté en el camino correcto. Si
hay algo que debo estar haciendo, revélamelo para que
pueda corregir mi manera de actuar. Quiero moverme
hacia todo lo que tienes para mí y transformarme en
todo para lo que me creaste al andar en tu perfecta
voluntad para mi vida. Te lo pido en el nombre de Jesús.

E" poéer del joven que ora
No todo el que me dice: «Señor, Señor», entrará
en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad
de mi Padre que está en los cielos.
• .••••:'•..••.•<.•••. • ; MATEO;7,:21
El mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la
voluntad de Dios permanece para siempre.
,,.••,.•:•;•,, 1 ,.,••. 1 JUAN 2:17,, RV-6.0'
Confía en el SEÑOR de todo corazón, y no en tu
propia inteligencia. Reconócelo en todos tus
caminos, y él allanará tus sendas.
PROVERBIOS 3:5

f ¿Alguna vez has hecho algo que sabes queüd
de Dios para tu vida? ¿Cómo te hizo sentir? ¿Qu^háríls dé
forma diferente ahora?
•••¿En qué esfera específica de tu vida te gustaría conocer de
manera especial la voluntad de Dios ahora mismo? Escríbelo
como una oración a Dios pidiéndole que te muestre su voluntad
en ese asunto.
.¿Alguna vez has hecho algo que sabías que era la voluntad
de Dios, aun cuando no era algo que querías hacer? Si es así,
¿te sentiste bien sabiendo que agradabas a Dios? (Si no puedes
acordarte de algo, ¿qué de cuando te levantas y te vas para la
escuela, u obedeces, a tus padres, o vas a la iglesia cuando
quieres dormir el domingo? Eso es importante).

JtÑoa,
fMfWf0* para»3-
t
JIERO QUE SEPAS QUE EL FUTURO que Dios tiene para ti es
jor que cualquier cosa que puedas imaginar. Dios lo dice en
su Palabra. A fin de recordártelo, escribo este capítulo como una
carta personal dirigida a ti de modo que si llegas a preocuparte
por tu futuro, o necesitas que te anime en cuanto a lo que está
por delante, puedes leerla las veces que quieras y escuchar con
optimismo a Dios hablando a tu corazón.
Estimado • (pon tu nombre):
Dios tiene un gran futuro para ti. Sé esto porque así lo
dijo. Dios dice que t ú no has visto, ni escuchado, ni siquiera ima-
ginado las grandes cosas que Él tiene para ti (i Corintios 2:¡í).
Eso significa que tú no tienes idea de cuán fabuloso es tu
futuro. Sin embargo, todas estas cosas buenas que Dios tiene
para ti en tu futuro no van a ocurrir automáticamente. Tienes
que hacer va parte, y Dios hará la suya después.
Una de las cosas que tienes que hacer es vivir como Dios
quiere. Esto es muy importante de verdad, porque es. la--única

El poder del' joven «fue ora
manera en que tu vida tendrá resultado. Si no vives a la manera
de Dios, perderás mucho de lo bueno que Dios quiere traer a tu vida.
Pero no te preocupes de si puedes hacerlo todo a la perfección.
Nadie puede. El Espíritu Santo en i. i es el que t,e ayudará a
hacer bien las cosas si se lo pides.
Otra cosa que necesitas hacer es orar por cada aspecto de tu
vida (Jeremías 29:11-1?). El Espíritu Santo en ti es la garantía
de Dios que te ayudará a orar de una manera que hará que se
haga realidad todo lo que Él ha prometido (Efesios 1:13 .14).
Cada vez que tú oras y obedeces a Dios, estás invirtiendo en
tu futuro. •"•••• ,¡ ' ;:.;•••.'
Aunque vives en un mundo donde no puedes tener la certeza
de lo que va a ocurrir mañana, al menos puedes tener la certeza
de que Dios nunca cambia. No sabes todos los detalles de lo que
te espera, pero puedes confiar en que Dios lo sabe. Y Él te llevará
con seguridad a donde necesitas ir. Es más, la única manera de
alcanzar el futuro que Dios tiene para ti es caminar junto a Él hoy.
Recuerda que andar con Dios no significa que no tendrías
obstáculos en el camino. El enemigo se ocupará de que los tengas.
Dios tiene un plan para tu futuro que es bueno, pero el diablo
tiene uno también, y no es bueno. Quizá hasta se acerque a t í y
ta haga sentir que ya no quieres vivir más. Si alguna vez has teni-
do pensamientos como esos, comprende que son por completo
del enemigo. Dios te creó con el deseo, la voluntad y el instinto
de vivir. Cualquier otro pensamiento es del abismo del infierno.
No te dejes engañar. Reconócelo por lo que gs de inmediato; y
alaba a Dios porque Él, te ha dado la vida y un gran futuro.
Los planes del diablo para tu vida no pueden tener éxito
mientras tú andes con Dios, viviendo en obediencia a sus cami-
nos, adorando solo al Señor, permaneciendo firme en su Palabra
y orando por todo. El plan de Dios para tu vida no va a desa-
rrollarse sin una lucha, así que no te rindas cuando las cosas se
pongan difíciles. Solo sigue haciendo lo que sabes que es bueno.

Señor, ayiMairié a adentrarme er. <*i futuro ^me tiene»,,.
Sigue pidiéndole a Dios que te dé fortaleza para hacer lo que tie-
nes que hacer.
No juzgues tampoco tu futuro por lo que lees en los periódi-
cos, ni por las palabras negativas que te dijo alguien una vez, ni
por los pensamientos malos y negativos que el enemigó trata de
poner en tu cerebro. Tu futuro está en las manos de Dios. La
única cosa que es importante es lo que dice El. Te dice que de
ninguna manera te preocupes por tu futuro. Preocúpate, por
Él, porque Él es lií futuro.
Siempre recuerda que tú eres hijo de Dios y Él te. ama. Así
que no te desalientes si tus oraciones no se responden tan rápi-
do cómo te hubiera gustado. Dios las escucha y las responderá
a su manera y en su tiempo. Solo sigue hablando la Palabra de
Dios en fe y no dejes de orar. Creo que se nos niegan algunas
cosas por un tiempo debido a que Dios quiere que oremos más.
Es que Él quiere hacer algo grande en respuesta a nuestras ora-
ciones, algo que sólo puede suceder porque estamos orando
mucho. ;
Aunque es bueno establecer metas, no mires tan lejos por
delante en tü vida que llegues a abrumarte. Tienes que andar
con Dios de día en día. Sé fiel en hacer las cosas que tienes que
hacer hoy, y deja que Dios se encargue de lo que está delante.
Recuerda que «El SEÑOR está cerca de quienes lo invocan, de
quienes lo invocan en verdad. Cumple los deseos de quienes le
temen; atiende a su clamor y los salva» (Salmo 19).
Lo más importante que puedes hacer en la vida es servir a
Dios y a los demás. El futuro que Dios tiene para tí incluye
darte a ti mismo, t,\á tiempo, tu dinero, tlf. conocimiento,
tus dones o tus talentos a fin de ayudar a otras personas.
Dios nos dice que si no ayudamos a otros en necesidad, no lo
amamos a Él. Jesús dijo que «si alguien que posee bienes mate-
riales ve que su hermano está pasando necesidad, y no tiene
compasión de él, ¿cómo se puede decir que el amor de Dios habita en
él?» (1 Juan ). «Ninguno busque su propio bien, sino el del

El poder del' joven «fue ora
otro» (1 Corintios 10;24, RV-60). «El que es generoso será bende-
cido, pues comparte su comida con los pobres» (Proverbios
22:9). La mayor bendición te llegará cuando le pidas a Dios que
te use para influir en la vida de otros. .
Tú estás plantando algo en \,«. vida todos los días, ya sea
que te des cuenta o no. Y estás también cosechando todo lo que
has plantado en el pasado. La calidad de t a Vida ahora mismo
es el resultado de lo que plantaste algún tiempo atrás. Tü cosechas
el bien y el mal durante años después que sembraste. Por eso es
tan importante plantar buenas semillas ahora.
Jesús dijo que Él es la vid y tú y yo somos las ramas. Si per-
manecemos en Él, llevaremos fruto (Juan 15:5). «Permanecer»
significa mantenerse, quedarse, morar. En otras palabras, si
moramos con Él y Él mora con nosotros, llevaremos el fruto de
su Espíritu (Gálatas 5:22-23). Eso es lo que queremos. Pídele a
Dios que te ayude a plantar semillas de amor, bondad, amabilidad
y paz, a fin de que eso sea lo que tengas en tu vida. Alimenta el
terreno de tu corazón con el alimento de la Palabra de Dios y
pídele al Espíritu Santo que lo riegue cada día. Siempre y cuando
permanezcas fiel en la vid verdadera, te garantizo que producirás
una cosecha de fruto espiritual que enorgullecerá a tu Padre.
Dios quiere hacer algo grande por medio de ti. Si estás dis-
puesto a decir: «No se haga mi voluntad, sino la tuya, Señor», Él
puede usarte. Y Él te preparará para que avances a través de las
puertas que abre para ti. Recuerda, Dios «puede hacer muchísi-
mo más que todo lo que podamos imaginarnos o pedir, por el
poder que obra eficazmente en nosotros» (Efesios 3:20). Él tiene
más para ti de lo que te puedes imaginar. Así que aférrate a
Dios y Él te ayudará a convertirte en todo para lo que te creó
y a avanzar hacia el futuro que tiene para tí.
Tu hermana en Cristo,

Señor» ayúdame a adentrarme en el futuro que tienes...
Señor, pongo mi futuro en tus manos y te pido que me
des una paz total en cuanto a esto. No quiero tratar de
labrar mi futuro con mis planes. Quiero estar en el centro
de tus planes, sabiendo que tú me darás todo lo que
necesite para lo que está delante. Te ruego que me forta-
lezcas a fin de permanecer firme sin darme por vencido.
Ayúdame a correr la carrera de modo que la termine
fuerte y reciba el premio que tienes para mí (1 Corintios
9:24).
Ayúdame a plantar buenas semillas en mi vida para
que lo que coseche sea bueno. Ayúdame a permanecer
siempre en ti. Planta el fruto de tu Espíritu en mí: amor,
alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad,
humildad y dominio propio, y dar pie a que fluya por
medio de mí a otros (Gálatas 5:22-23). Gracias porque
prometiste que si permanezco en ti y tu Palabra perma-
nece en mí, puedo pedir lo que desee y se me concederá
(Juan 15:7). Te invito, Espíritu Santo, a que me llenes
de nuevo hoy, pues sé que sin ti no puedo hacer nada.
Señor, hazme para todo lo que me creaste y ayúdame
a hacer algo grande para tu reino y para tu gloria. Me
humillo bajo tu poderosa mano, oh Dios, sabiendo que
me exaltarás a su debido tiempo. Deposito todas mis
ansiedades en ti, sabiendo que tú me cuidas y no me dejarás
caer (1 Pedro 5:f-7). Tiendo mi mano a la tuya hoy a
fin de que pueda andar contigo en el futuro que tienes para
mí. Te lo pido en el nombre de Jesús.

El ps#sr «tel. -joven que ora.
«Porque yo sé muy bien los planes que tengo
para ustedes —afirma el SEÑOI^i.—, planes de
bienestar y no de calamidad, a fin de darles un
futuro y una esperanza. Entonces ustedes me
invocarán, y vendrán a suplicarme, y yo los escu-
charé. Me buscarán y me encontrarán, cuando
me busquen de todo corazón».
JEREMÍAS 2^:11-1 3
Cualquier cosa que ustedes pidan en mi nombre,
yo la haré; así será glorificado el Padre en el Hijo.
Lo que pidan en mi nombre, yo lo haré.
JUAN 14:13 -14
¡Levántate y resplandece, que tu luz ha llegado!
¡La gloria del SEÑOR brilla sobre ti! Mira, las
tinieblas cubren la tierra, y una densa oscuridad
se cierne sobre los pueblos. Pero la aurora del
SEÑOR brillará sobre ti; ¡sobre ti se manifestará
su gloria!
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.-¿Qué te gustaría ver que suceda en tu fut^o?$r 4fÍ|
• |iias tenido alguna vez temores por el futuro? Si es así, ¿qué
has temido? Escribe una oración pidiéndole a Dios que te
quite esos temores.
Escribe una oración pidiéndole a Dios que bendiga los sueños
que tienes para tu futuro que estén dentro de su voluntad, y
que se lleve los que no son su voluntad.

Una joven conforme al corazón de Dios
Por Elizabeth George
En este libro escrito solo para ellas, las jóvenes descubrirán las
prioridades de Dios para sus vidas, incluyendo la oración, la
sumisión, la fidelidad y el gozo, y cómo adoptar esas prioridades
en la vida diaria.
El llamado de una mujer joven a la oración
Por Elizabeth George
Elizabeth George nos brinda otro emocionante libro para las jóvenes:
El llamado de una mujer joven a la oración. Partiendo de su propia
peregrinación, la Biblia y la vida de otros, Elizabeth revela el
explosivo poder y dinámico impacto de la oración en la vida diaria.
Pureza bajo presión
Por Neil Anderson y Dave Park
Pocas cosas provocan tanta confusión y conflictos en los jóvenes
como el asunto de la pureza sexual. En un reconfortante estilo,
se presentan las verdades espirituales detrás de la pureza sexual y se
proveen las sencillas maneras de desarrollar relaciones piadosas.
Rompiendo las cadenas: Edición de jóvenes
Por Neil Anderson y Dave Park
Ayudando a los jóvenes a despojarse de la superficialidad y a
vivir vidas centradas en Cristo, Neil y Dave brindan los pasos
para romper los hábitos pecaminosos; aumentar la seguridad de
que por medio*de Cristo el pecado no ejerce poder; y descansar
en el Espíritu Santo para la dirección.
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