VALORES
Los valores están presentes desde los inicios de la humanidad. Para el ser humano siempre han
existido las cosas valiosas: el bien, la verdad, la belleza, la felicidad, la virtud. Sin embargo, el
criterio para darles valor ha variado a través de los tiempos. Se puede valorar de acuerdo con
criterios estéticos, esquemas sociales, costumbres, principios éticos o, en otros términos, por
el costo, la utilidad, el bienestar, el placer, el prestigio.
Cuando hablamos de valor, generalmente nos referimos a las cosas materiales, espirituales,
instituciones, profesiones, derechos civiles, etc., que permiten al hombre realizarse de alguna
manera.
El proceso de valoración del ser humano incluye una compleja serie de condiciones
intelectuales y afectivas que suponen: la toma de decisiones, la estimación y la actuación. Las
personas valoran al preferir, al estimar, al elegir unas cosas en lugar de otras, al formular
metas y propósitos personales.
Las valoraciones se expresan mediante creencias, intereses, sentimientos, convicciones,
actitudes, juicios de valor y acciones. Desde el punto de vista ético, la importancia del proceso
de valoración deriva de su fuerza orientadora en miras a una moral autónoma del ser humano.
Los Valores están presentes en cualquier sociedad humana. La sociedad exige un
comportamiento digno en todas los que participan de ella, pero cada persona se convierte en
un promotor de los valores, por la manera en que vive y se conduce. Desde un punto de vista
socio-educativo, los valores son considerados referentes pautas o abstracciones que orientan
el comportamiento humano hacia la transformación social y la realización de la persona. Son
guías que dan determinada orientación a la conducta y a la vida de cada individuo y de cada
grupo social.
Los valores nos ayudan a despejar las principales interrogantes de la existencia: quiénes somos
y que medios nos pueden conducir al logro de ese objetivo fundamental al que todos
aspiramos: la felicidad. Los valores siempre están son influidos por nuestras motivaciones y
necesidades.
La importancia de los valores, radica en aceptar que son importantes, conocerlos y
reconocerlos, además, el ser humano no puede vivir aislado de ello, una sociedad que vive los
valores, es una sociedad sana.
VIVIR CON VALORES
Los valores humanos son aquellas virtudes a las que asignamos tanta importancia, que no
podemos ponerle precio, permitiéndonos orientar nuestras decisiones y conducta ante la vida
Vivir con valores no es más que aceptar conscientemente una responsabilidad en la vida al
momento de plasmar nuestros comportamientos. Nuestra sociedad es muy cambiante, todos
los días aparecen cosas nuevas. Existen prácticas generalizadas que ponen en duda normas de
urbanidad, moralidad, de convivencia y de ética, entre otras. La inversión de los valores
humanos sacude a nuestros semejantes tanto como a nosotros mismos.
Ante esta situación, los jóvenes necesitan orientaciones que les sirvan para caminar en la vida.
Una gran frase de la antigüedad lo afirma:
El viaje es tan importante como el destino.
Conclusión:
Vivir con valores es aceptar que somos humanos, con sentimiento y responsabilidad en la
vida, practicarlos es responsabilidad de todos, pero más aún es propia. Aplicarlos no sólo debe
ser una actitud, sino un estilo de vida y eso ayuda hasta incluso a formar el carácter.