Ensayo. "El arte de amar"

Breve ensayo acerca del libro "El arte de amar" de Erich Fromm, en donde nos acerca un poco a su teoría de la personalidad, en la que enfatiza el amor y la libertad.

1. EL ARTE DE AMAR
Ensayo.


16 DE OCTUBRE DE 2015
PAULA POLLET ARÉVALO VELÁZQUEZ
DPTO. DE PSICOLOGÍA

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INTRODUCCIÓN
En el presente ensayo, tocaré los puntos más destacados del libro “El arte de amar” escrito
por el Psicólogo Erich Fromm, mi interés por el libro comienza desde que observé la
portada; Fromm, distinto a los demás psicólogos se centra en un enfoque psicoanalista en
el cual el amor y la libertad tienen el mayor crédito ante la formación de la personalidad y el
desarrollo de la misma de un individuo.
Considero al igual que el autor de dicho libro, que el amor es parte fundamental de la vida
de todo individuo, desde que estamos en el vientre de nuestra madre o cuando nacemos y
estamos en los brazos de nuestros padres por primera vez, lo inicial que nuestros padres
nos demuestran es amor, conforme vamos creciendo este amor se va proyectando de
diferente manera en diferentes situaciones, razón por la cual debemos saber amarnos para
poder amar a los demás y desarrollarnos de la mejor manera por la vida, de lo contrario
¿Qué sería del mundo sin amor?, en la escuela con los amigos se demuestra amor, con la
familia, con tu pareja, a dios, a la vida, en todos lados esta la búsqueda del amor, sin
embargo, se busca sin querer darlo, en la actualidad el amor es algo que va y viene según
la sociedad, este libro hace reflexionar y de alguna forma entender que el amor va más allá
de algo pasajero, como el tema del libro lo dice, “El amor es un arte”, por ende, sentirlo y
demostrarlo debe de llevar cierta dedicación especial.
El autor afirma que el libro no da enseñanzas acerca del arte de amar, de lo contrario
menciona que la finalidad del libro es “convencer al lector de que todos sus intentos de
amar están condenados al fracaso…”, pero ¿como saber realmente que todos esos intentos
fracasan?, eso dependería en su totalidad del nivel de madurez de personalidad que todo
sujeto tenga de forma individual.
En los siguientes apartados explicaré mi punto de vista acerca del amor, basándome en los
fragmentos más relevantes de dicho libro.

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DESARROLLO
“¿Es el amor un arte? […] ¿O es el amor una sensación placentera, cuya experiencia es
una cuestión de azar, algo con lo que uno «tropieza» si tiene suerte?”; Dar una respuesta
a estas preguntas es sin duda alguna algo complejo, podría decir que en efecto desde mi
punto de vista el amor es algo con lo que se tropieza si se tiene suerte, no por el hecho de
que el amor no sea un “arte”, sino porque son pocas las personas que realmente saben y
llevan a cabo el amor como tal, por tanto, muy pocos experimentan un amor maduro, es
una suerte encontrar a alguien que te haga sentir y aprender que el amor es algo más que
un sentimiento, que es algo que necesita hacerse con dedicación y esfuerzo, es algo que
necesita ser constantemente atendido, a lo que respondo que el amor es un arte el cual
solo pocas personas tienen la suerte de experimentarlo.
Algo muy cierto mencionado en el libro es que “Para la mayoría de la gente, el problema
del amor, consiste fundamentalmente en ser amado, y no en amar […]. De ahí que para
ellos el problema sea cómo lograr que se los ame, cómo ser dignos de amor”; Enfatizando
varias ideologías actuales, la sociedad ha sido guiada por el materialismo, por las etiquetas,
status, y la imagen que se presenta ante los demás, los medios de comunicación
presentando miles de productos y modelos de personas “perfectas” por así decirlo, han
cambiado totalmente el significado del valor de una persona, ¿Cómo saber si eres digno de
amor?, la mayoría de gente piensa que únicamente lo sería si cumple con todos estos
requisitos impuestos por ¿quién?, en tal caso, no estaríamos amando a una persona,
estaríamos amando a un objeto formado por un modelo inalcanzable, una persona falsa,
una persona oculta dentro de la sociedad, y de esa forma estaríamos esperando un amor
romántico que sin duda alguna no existe, como las películas de amor que de igual forma
influyen en nuestras expectativas para un amor de toda la vida, que no es imposible, sin
embargo habrá que hacer más que regalar un ramo de rosas o ser una excelente ama de
casa para lograrlo, no es cumplir con las expectativas de la otra persona para lograr ser
amada, significa hacer un intercambio de muchas cosas con las cuales ambas partes
sientan satisfacción y bienestar estando cerca, es dar amor y recibir amor, lo que se quiere
dar a entender en el primer capítulo es que el amor no es algo que se pueda comprar y tirar
cuantas veces uno lo desee, no es algo que tenga que ser de la noche a la mañana, es algo
que se tiene que llevar a la practica en toda la extensión de la palabra, para llegar a ser lo
suficientemente capaces de aprender a amar.

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El autor hace mención de la separatidad de la siguiente forma: “La separatidad es la fuente
de una intensa angustia. Por otra parte, produce vergüenza y un sentimiento de culpa.”,
estoy totalmente de acuerdo con que el separarnos de algo o alguien, sea nuestra sociedad,
la familia, la pareja o el mismo abandono de una actividad que era costumbre realizarla día
a día va a generar un estado específico de emociones no tan favorables, de igual forma
considero que solo cuando el sujeto comprenda que el evolucionar también está dentro de
la individualización podrá superar este miedo de ser diferente, de dejar de sumergirse en
cualquier espacio de la sociedad para evitar la soledad.
Todas las formas de amor planteadas por Fromm, tienen un objetivo en específico que sería
el de cumplir con una necesidad del hombre, una necesidad importante dentro de su
desarrollo; el amor fraternal tiene la necesidad de ayuda y apoyo, el amor materno satisface
la necesidad de supervivencia del niño y la necesidad de protección que la madre le da al
mismo, el amor erótico da a conocer la necesidad de fusión con alguien en específico, el
amor a sí mismo tiene la necesidad de comprensión a sí mismo, puesto que amarte a ti es
amar a los demás, el amor a Dios en la que surge la unión y la necesidad de sentirse
protegido; Todas estas necesidades están ligadas a la satisfacción de saciar las mismas
del individuo, quizá todas estas necesidades son la razón por las cuales el sujeto no llega
a comprender que el amar es algo que debe de llevarse a cabo día a día; Fromm enfatiza
la parte de que en el occidente se tiene un punto de vista acerca del amor, distinto a otros
lugares, pero al final de todo la sociedad únicamente está guiada por los cambios y el
ambiente, y en el mundo entero, lo actualmente importante va guiado a lo materialista.
Con relación a la sociedad, Fromm menciona que “El hombre moderno está actualmente
muy cerca de la imagen que Huxley describe en Un mundo feliz: Bien alimentado, bien
vestido, sexualmente satisfecho, y no obstante sin yo, sin contacto alguno, salvo el más
superficial […]”, y considero que no únicamente existen el tipo de personas provenientes
de “un mundo feliz” como el autor Fromm cree que la sociedad es o será, también en el
mundo real existen personas como las provenientes de “la isla”, capaces de ser todo lo
contrario, de ser una sociedad unida sin miedo a la individualidad sin dejar de estar
acompañados de todos.

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CONCLUSIÓN
El libro deja muchas reflexiones acerca de lo que es el amor, y con la lectura considero que
el amor es una necesidad que el ser humano tiene que satisfacer para evitar la soledad,
porque no somos suficientemente maduros para aceptar la individualidad que deberíamos
llevar acabo, sin dejar de lado el amor, pero el verdadero amor que necesita ser dedicado,
paciente, comprensible, el amor a los hermanos, el amor maternal, el erótico y el amor a
Dios, evitando la fusión completa en todos los sentidos, es decir, encontrar un equilibrio en
el cual podamos disfrutar de la compañía y el amor de todos sin evitar trascender
individualmente.
“El amor intenta entender, convencer, vivificar. Por ese motivo, el que ama se transforma constantemente. Capta más, observa más, es más
productivo, es más él mismo”
- Erich Fromm