DESARROLLO :
Se conoce como Escolástica al movimiento doctrinal que, sin emplear el movimiento
racional-conceptual que se enseñaba en las escuelas, se mueve en el mismo entorno y
contexto. Buen ejemplo de esto sería la mística, así como buena parte de la filosofía
musulmana y judía que, a lo largo del período señalado, entró en contacto con la filosofía
de la Escolástica propiamente dicha.
Los programas donde se enseñaban estas materias gozaban de flexibilidad y, bajo el
nombre de dialéctica se enseñaba lógica, práctica y, en general, toda la materia filosófica
y, en la retórica, se incluía también la ética, de acuerdo con la tradición grecolatina
respecto a la teoría porque, respecto al contenido, hundía sus raíces en la Patrística. Las
formas literarias surgieron progresivamente al socaire de la aplicación de esta enseñanza.
De la lectio salieron los comentarios y, de los comentarios -al Lombardo, a Boecio, al
Pseudo Dionisio y, sobre todo a Aristóteles- nacieron las sumas cuando los maestros,
desembarazándose de esa fuerte dependencia con los libros de texto -Libros de
Sentencias- desarrollaron el corpus doctrinal de una forma libre, pero en un orden más
sistemático.
El movimiento escolástico se manifestaba a través de dos vertientes: la enseñanza y las
formas literarias. La base de la enseñanza en las escuelas fueron las artes liberales,
divididas en el trívium -gramática, dialéctica y retórica- y el quadrivium -aritmética,
geometría, música y astrología-.
La educación en la época del Renacimiento coincidió con la difusión de los nuevos
valores surgidos de la vuelta a la tradición grecolatina. La nueva visión del rol del ser
humano, orientado a cumplir sus fines no solo en el más allá, sino también en el mundo
terrenal lo impulsaron al conocimiento matemático, filosófico, histórico, geográfico,
científico y artístico, sin descuidar la educación física. Mente y cuerpo en desarrollo,
fueron el objetivo de esta concepción racional, libre y humanística de la enseñanza-
aprendizaje, que se facilitó con la invención de la imprenta. Las mujeres comenzaron a
ser tenidas en cuenta en la educación formal.
En América también tuvo influencia el Renacimiento europeo, especialmente por obra de
los jesuitas y dominicos.
En enseñanza superior estas ideas fueron reflejadas en la Universidad Santo Tomás de
Aquino, de Santo Domingo, que replicaba el ideario de la de Santo Tomás de Henares; y
en las de México y Lima. La primera del año 1538, y las segundas de 1551.
La transformación educativa que tuvo lugar durante el Renacimiento, antes del dominio
de la enseñanza escolástica, fue un hito importante en la historia de la educación. En mi
opinión, estos cambios son en su mayoría positivos y avanzan hacia un enfoque más
personal y holístico. Una de mis principales objeciones a la educación escolar es su
orientación teocrática, en la que la religión y la teología son los pilares principales de la
educación. Esto ha limitado la diversidad de conocimientos y puntos de vista, limitando
la búsqueda de la verdad por la fe y la razón. Por el contrario, la educación renacentista,
con su enfoque humanista, abrió nuevas posibilidades al enfatizar el estudio de la
literatura, la historia y el arte clásicos como medio de desarrollo intelectual y de mercado.
Esta extensión del plan de estudios proporciona una educación más completa y