Fracturas de espina tibial

14,484 views 20 slides Apr 14, 2017
Slide 1
Slide 1 of 20
Slide 1
1
Slide 2
2
Slide 3
3
Slide 4
4
Slide 5
5
Slide 6
6
Slide 7
7
Slide 8
8
Slide 9
9
Slide 10
10
Slide 11
11
Slide 12
12
Slide 13
13
Slide 14
14
Slide 15
15
Slide 16
16
Slide 17
17
Slide 18
18
Slide 19
19
Slide 20
20

About This Presentation

Actualización sobre fracturas de espina tibial


Slide Content

SERVICIO DE ORTOPEDIA
Y TRAUMATOLOGíA
ROSARIO - 2017

Fracturas de espina tibial

Las fracturas de la eminencia intercondílea fueron descriptas por
primera vez en el año 1875 por Poncet.
Generalidades

Lesión poco frecuente, observándose típicamente en
adolescentes o adultos jóvenes, relacionada con accidentes
deportivos.
Su incidencia dentro del grupo de las fracturas de la parte proximal
de la tibia en adolescentes es de 3/100.000 casos
Generalidades

La eminencia intercondílea es la porción interauricular de los platillos
tibiales, consta de una base cuadrilátera y dos prominencias óseas
llamadas espinas tibiales, una medial y otra lateral.
Generalidades

El LCA se inserta en la parte anterointerna del tubérculo medial y en el espacio
preespinal. En su porción anterior este ligamento se une con fibras del cuerno
anterior de los meniscos interno y externo.
Generalidades

En los niños, incluidos los adolescentes, esta lesión fue
considerada como equivalente a la ruptura del LCA.

Debido a la incompleta osificación de la espina tibial, esta
estructura ósea, sometida a determinados traumatismos,
se lesiona antes que el LCA.
Generalidades

Según Wiley y Baxter (1990) el mecanismo de producción
de esta fractura consistiría en una rotación externa femoral
sobre la tibia con el pie fijo y la rodilla en extensión.
Generalidades

Manifestaciones Clínicas
Inestabilidad anterior de rodilla (maniobras semiológicas)
Hemartros con gotas de grasa.
Rodilla en flexión.

Diagnóstico
Clasificación Meyers – Mc Keever
TIPO I: No desplazadas.
TIPO II: Parcialmente desplazadas o en
bisagra, con levantamiento de toda la
parte anterior.
TIPO III: Completamente desplazadas,
sin rotación (IIIA) /con rotación (IIIB).
TIPO IV: Conminuta (Zariczny).

Tratamiento Conservador
Indicado en fracturas Meyers – Mc Keever I-II
Artrocentesis antes del enyesado si hay gran hemartrosis.
Colocar yeso cruropédico a 15 – 20º de flexión entre 4 y 6 semanas.
No se debe intentar reducir, es imposible por vía cerrada.
Tampoco hay que hiperextender (como se hacía antiguamente), con
esto se tensa más el LCA y se desplazan más los fragmentos.

Tratamiento Quirúrgico
Indicado si el desplazamiento es
mayor/igual a 2 mm (Meyers – Mc Keever
III – IV).
RAFI: Artrotomía pararrotuliana y fijación
con alambre a través de 2 orificios en la
tibia o con uno o más tornillos de
compresión (si el fragmento es grande).
RAFI Artroscópica: se reduce la fractura por
esta vía y se asegura con aguja de kirschner
percutáneas, seguido de una fijación con
alambres o tornillos canulados de Herbert.

Tratamiento Quirúrgico

Tratamiento Quirúrgico
Paciente adulto joven con fractura de la espina anterior totalmente desplazada (grado III A de Meyer y McKeever).
Reducción de manera completa y síntesis con tornillo canulado de Herbert.

Tratamiento Quirúrgico
En los casos de fractura en niños o adolescentes con fisis
abierta se puede producir una lesión del cartílago de crecimiento a nivel tibial
proximal por la utilización de material de osteosíntesis prominente, pudiendo
causar una epifisiodesis anterior ( deformidad en antecurvatum).
Esto se debe evitar con la utilización de sistemas de anclajes con sutura, agujas de
Kirschner, o bien utilizando tornillos de longitud tal que no llegue a afectar la fisis
tibial.

Tratamiento Quirúrgico
Cualquiera sea el sistema de fijación usado, no debe alcanzar la fisis.
Con frecuencia queda atrapado el menisco y debe moverse para
permitir la reducción.

Complicaciones
La artrofibrosis es común en las fracturas de la espina tibial tratadas
tanto quirúrgicamente como con métodos cerrados.
La movilización precoz tras la fijación quirúrgica parece reducir la
frecuencia de esta secuela.
La laxitud del LCA es frecuente pero no suele traer repercusión.
La consolidación viciosa con elevación persistente de los fragmentos
fracturados puede provocar pinzamiento en el surco intercondíleo.

Postoperatorio
Rápidamente se inician movimientos activos asistidos en una férula
en bisagra.
Se permite soportar peso según la tolerancia en extensión.
Se sigue con protocolo de rehabilitación, similar al de
ligamentoplastia de LCA.

Conclusiones
La fractura avulsión de la espina anterior de la meseta tibial es una lesión poco
frecuente dentro de las fracturas de la tibia proximal.
El tratamiento quirúrgico de estas lesiones está indicado en aquellas fracturas
desplazadas (grados II y III de la clasificación de Meyers y McKeever).
Las técnicas artroscópicas son ampliamente utilizadas debido al bajo riesgo
quirúrgico, a un menor número de complicaciones y a una más pronta
recuperación.

Muchas gracias
por su atención