Observación El hielo seco cuando hace contacto con la temperatura del ambiente se convierte en gas sin dejar residuos húmedos.
Hipótesis El dióxido de carbono al convertirse en gas puede hacer burbujas sin dejar rastros de líquidos al mezclarse con una solución de agua y jabón.
Experimentación Materiales: Dióxido de carbono en su estado sólido (hielo seco) Jabón (5 cucharadas) Glicerina (4 cucharadas) Agua destilada (1 taza) Envase Cinta Guantes de protección Método: Preparar la mezcla de jabón, agua y glicerina en un recipiente Poner el hielo en un envase de cristal Mojar la cinta en la mezcla Pasar la cinta por encima de la superficie del recipiente
Procedimiento
Conclusión El dióxido de carbono en su estado sólido es muy frío y seco. El agua acelera el proceso de sublimación del dióxido de carbono. Al pasar la solución de agua y jabón por encima de la superficie del envase crea una capa transparente. Esta capa se vuelve grande cuando el gas trata de escapar. Al romperse tan solo sale el gas atrapado sin dejar residuos de agua.