Los orígenes de este carnaval se remontan al siglo XIII cuando fue
declarado como festividad pública, pero ya en el siglo XI y aún antes
se pueden encontrar las primeras noticias acerca de esta fiesta.
Sin embargo, la época de mayor esplendor del Carnaval de
Venecia se ubica alrededor del siglo XVIII, cuando numerosos
aristócratas de Europa venía a participar en él, y no era extraño
encontrarse en la calle, o en los bailes, a nobles, y hasta a algún
príncipe, oculto tras una máscara (justamente allí está el origen de la
tradicionales máscaras, los nobles salían a mezclarse con el pueblo
ocultos tras su disfraces).
Actualmente, el Carnaval de Venecia dura 10 días y se trata de una
fiesta en algunos aspectos exclusiva y muy destinada al turista, y si
bien el ciudadano común de Venecia se disfraza y sale a la calle a
vivir unas horas de esparcimiento y diversión, en las fiestas privadas
que se realizan, debido al prestigio de esta fiesta popular y al lujo
que la rodea, los ticket pueden costar varios ciento de euros.
Sin duda, una de las particularidades más llamativa de la fiesta son
las hermosas máscaras y los hermosos trajes de época, que en
algunos casos datan de varios siglos atrás. Debido a ello es que
muchos turistas optan en los días de carnaval por salir a pasear
por Venecia, cámara en mano y prontos para fotografiarse con las
personas que están disfrazadas con estos llamativos atuendos.
Por otra parte, el frío es una características distintiva de este
carnaval, y en algunos años la nieve acompaña las celebraciones,
dándole un matiz bastante particular al evento en comparación con
otros carnavales del mundo.
Pero este año, el Carnaval de Venecia se desarrollará entre el 13 y el
24 de febrero y se presagia un relativo buen tiempo para acompañar
las festividades… Así que, quien pueda ir, que vaya, y que después
nos cuente lo que nos estamos perdiendo…
El Carnaval de Venecia es único en el mundo y su tradición se
remonta al siglo XI, aunque no se declaró festividad pública hasta
dos siglos después.
El Carnaval de Venecia alcanzó su máximo apogeo en el siglo XVIII,
época en la que acudían a la festividad algunos aristócratas llegados
de lugares muy diversos, y lo más normal era que los príncipes y
nobles se escaparan a disfrutar del acontecimiento.
Durante siglos fue la vía de escape de los ciudadanos para evadirse
del gran control del gobierno veneciano. Con la ocupación de
Venecia por el ejército de Napoleón el Carnaval quedó prohibido por
miedo a que se generaran conspiraciones. El Carnaval se recuperó
en 1979.