La Época Helenística. Tras el periodo de guerras, las ciudades-estado griegas quedaron muy debilitadas y ya no alcanzarían de nuevo el esplendor que tuvieron en el pasado. En este momento, el reino de Macedonia, considerados por los propios griegos como extranjeros y no pertenecientes a la Hélade y su rey Filipo II, atacan a las polis griegas a mediados del S IV e impone su dominio sobre toda las polis, con excepción de Esparta.
El Imperio de Alejandro.
El Inicio. Alejandro cruzó el Helesponto hacia Asia Menor e hizo una breve parada en Troya, donde honró la tumba de su héroe Aquiles. El primer enfrentamiento fue la batalla del Gránico . Tras la batalla, decidió pasar el invierno en Gordión . Allí se encontraba el nudo gordiano. Según el oráculo quien supiera deshacerlo conquistaría Asia.
La conquista de Persia. En el levante mediterráneo, tuvo lugar la Batalla de Issos y el Sitio de Tiro. Tras esto Alejandro parte hacia Egipto, liberándolo y allí es nombrado Faraón. Una vez liberado Egipto, se dirige a Mesopotamia y vence de nuevo a Darío en la Batalla de Gaugamela , conquistado la ciudad de Babilonia. Tras esto, conquista las ciudades de Susa y Persépolis , cayendo la capital del Imperio.
El fín de la Dinastía La ambición de Alejandro no tiene limites y decide seguir expandiendo su Imperio y conquista Asia Menor , donde contrae matrimonio con la princesa Roxana . Pero en la India, luchando contra el rey Poros, cae herido y su ejército es derrotado. Alejandro muere en Babilonia a los 33 años por causas desconocidas. Sin un sucesor, sus principales generales , se reparten el imperio, nombrándose monarcas de sus distintos territorios. Este sistema se mantendrá vigente hasta que son conquistados por el Imperio Romano .