La Santidad

beatriztriz 17,902 views 12 slides Nov 28, 2007
Slide 1
Slide 1 of 12
Slide 1
1
Slide 2
2
Slide 3
3
Slide 4
4
Slide 5
5
Slide 6
6
Slide 7
7
Slide 8
8
Slide 9
9
Slide 10
10
Slide 11
11
Slide 12
12

About This Presentation

Creado por Gustavo


Slide Content

En el Antiguo Testamento el hebreo Kadosch (santo)
significaba estar separado de lo secular o profano y
dedicado al servicio de Dios. El pueblo de Israel se
conocía como santo por ser el pueblo de Dios.
La santidad de Dios identificaba su separación de todo lo
malo.
Los seres humanos son santos cuando se apartan del
pecado y viven según la voluntad de Dios.

Por el Bautismo todos somos llamados a la santidad.
La Santidad es obra de Jesús pero El no se impone.
Requiere la respuesta libre del hombre. Quien ama a
Dios desea responderle con todo el corazón, se esfuerza
y persevera con la ayuda de la gracia para vencer la
tendencia de la carne.
Lo que a nosotros nos aleja de la santidad es EL
PECADO.

Pecados Capitales
1-Soberbia
ante el deseo de alto honor y
gloria.
2-Avaricia
ante el deseo de acaparar
riquezas.
3- Lujuria
ante el apetito sexual.
4- Ira
ante un daño o dificultad.
5- Gula
ante la comida y bebida.
6- Envidia
resiente las cualidades, bienes o
logros de otro porque reducen
nuestra autoestima.
7- Pereza
del desgano por obrar en el
trabajo o por responder a los
bienes espirituales.
Virtudes para vencerles
Humildad Reconocer que de
nosotros mismos solo tenemos la
nada y el pecado.
Generosidad
Dar con gusto de lo propio a los
pobres y los que necesiten.
Castidad. Logra el dominio de los
apetitos sensuales.
Paciencia Sufrir con paz y serenidad
todas las adversidades.
Templanza Moderación en el comer
y en el beber.
Caridad Desear y hacer siempre el
bien al prójimo.
Diligencia. Prontitud de ánimo para
obrar el bien.

Los santos, hasta el siglo V eran aclamados después de
su muerte a "vox populi" (aclamación popular). Para
evitar abusos, a partir del siglo V, los obispos tomaron
responsabilidad por la declaración de santidad en su
diócesis. Ellos confirmaban la aclamación popular y
asignaban al santo un día de fiesta, generalmente el
aniversario de su muerte.
En 993, Ulric de Ausburg fue declarado santo en la
primera canonización aprobada directamente por un
Papa (Papa Juan XV). Gregorio IX formalizó el proceso y
en 1234 las canonizaciones se reservaron solo al Papa.
En el año 1588 el Papa Sixto V puso el proceso en
manos de la Congregación para las Causas de los
Santos y del Santo Padre.

Hay tres pasos en el proceso oficial de la causa de los santos:

Venerable. Con el título de venerable se reconoce que un fallecido vivió
virtudes heroicas.
Beato. Se reconoce por el proceso llamado de "beatificación". Además de los
atributos personales de caridad y virtudes heroicas, se requiere un milagro
obtenido a través de la intercesión de la persona y verificado después de su
muerte. El milagro requerido debe ser probado a través de una instrucción
canónica especial, que incluye tanto el parecer de un comité de médicos y de
teólogos. El milagro no es requerido si la persona ha sido reconocida mártir.
Los beatos son venerados públicamente por la iglesia local.
Santo. Con la canonización, al beato le corresponde el título de santo. Para la
canonización hace falta otro milagro atribuido a la intercesión del beato y
ocurrido después de su beatificación. Las modalidades de verificación del
milagro son iguales a las seguidas en la beatificación. El Papa puede obviar
estos requisitos. El martirio no requiere habitualmente un milagro. La
canonización compromete la infalibilidad pontificia.
Mediante la canonización se concede el culto público en la Iglesia universal. Se
le asigna un día de fiesta y se le pueden dedicar iglesias y santuarios.
La legislación actual supone la necesidad de algún milagro, tanto para la
beatificación como para la canonización.

SIGNIFICA:
Persona que padece el martirio en defensa en defensa de
su religión o de sus convicciones.
Los Mártires son personas SANTAS por dar la vida por el
cristianismo y a diferencia de los otros Santos no necesitan
haber hecho algún milagro para ser nombrados Santos.
Pero también llevaron una vida correcta.

ALGUIEN LLAMA
Debemos poner en claro antes que nada, que es Dios
quien llama, iluminados por la fe y experiencia enorme de
la Iglesia, sabemos ciertamente que toda vocación viene
de Dios. El uso de dicha palabra en otro contexto, es
abusivo o equivocado.
En la Santidad no es la excepción, ya que, Dios nos
llama a hacer personas santas, siguiendo algo tan
sencillo como los mandamientos.
Tags