la Patria y apoyarlo de alguna u otra manera en la lucha por la independencia. El
encuentro se realizó el 20 de octubre de 1810 por el rumbo de Charo e
Indaparapeo, hoy, estado de Michoacán, en el tránsito de los insurgentes de
Valladolid a la ciudad de México.
Las órdenes de Hidalgo a Morelos fue que reuniera un ejército y se encaminara al
sur para tomar esa región, sobre todo el puerto de Acapulco; con esa indicación,
Morelos se dirigió a Carácuaro con la idea de reunir a su ejército, sin embargo
apenas reunió a dos decenas de hombres mal armados, aun así con esas
limitantes partió el 25 de octubre de 1810 hacia el sur, región que conocía muy
bien por su actividad que había desarrollado anteriormente. En poco tiempo y
gracias a su sagacidad, para mediados de 1811, Morelos con el grado que le
confirió Hidalgo de lugarteniente logró conformar una verdadera milicia de
aproximadamente 30 mil hombres, con lo cual pudo controlar gran parte del hoy
estado de Guerrero.
Durante los 5 años que duraron las acciones militares de Morelos, tuvo diferentes
enfrentamientos con los realistas, algunas batallas perdidas pero hubo más
ganadas, eso le permitió controlar gran parte del territorio nacional desde
Guatemala hasta Colima; entre los espacios que estuvieron bajo su dominio y que
hoy forman parte de entidades federativas se pueden mencionar: Oaxaca,
Guerrero, sur de Veracruz, Puebla, México y Michoacán.
Una de las gestas militares que más han trascendido en la memoria fue el llamado
sitio de Cuautla, que se prolongó de febrero a mayo de 1812, donde rodeado por
las tropas del aguerrido realista, el Mariscal español Félix María Calleja, estuvo a
punto ser derrotado, ya que entre las bajas, las enfermedades, la falta de víveres y
agua diezmaron en gran medida a su contingente, pero aun así logró evadir el
cerco del mariscal español, ese fue uno de los sucesos que lo han encumbrado
como un gran estratega militar.