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4.9 Conocer la tipología textual: Este momento debe asumirse como una
oportunidad para el conocimiento del mundo por la variedad que estos textos
presentan, sean narrativos, descriptivos, instructivos, expositivos, o
argumentativos. Los lectores tendrán la ocasión y el momento para elegir la
lectura de su preferencia. Tener en cuenta que el lector tiene la libertad de
coger y dejar el texto cuantas veces sea, si no le agrada.
4.10 Proporcionar textos según su soporte: La lectura debe ser variada, distinta
y novedosa. Para ello el animador implementará materiales de textos
impresos, audiovisuales y digitales. Es importante que el lector conozca otras
formas de lectura. Tener en cuenta que los textos no deben ser solo aquellos
que guarden relación con un programa curricular, plan lector o curso de grado.
LEER AL CALOR DEL HOGAR
En este pequeño mundo que es el hogar, se aprende lo fundamental sobre la
vida. Sin tableros, ni pupitres, ni uniformes. Casi por ósmosis, sin que nadie se
dé cuenta de cómo, ni a qué hora, entre rutinas y sobremesas, entre lo que se
dice y lo que no se dice, as cuatro paredes de la casa son la primera imagen del
mundo. Los valores, las actitudes, los modos de ser, de sentir y de pensar, la
manera de mirar, tienen sus raíces en esa primera escuela a la que, por fortuna,
no han llegado aún las innovaciones de la tecnología educativa. Es realmente
una fortuna. En las casas no se habla de objetivos, ni de metodologías, ni se
evalúan periódicamente los resultados, ni se rinden informes. Se vive,
simplemente, en ese fluir de la vida, sin planificar, donde crece la gente. La
escuela tiene mucho que envidiarle a este sistema pedagógico, donde todo
sucede de manera más espontánea y más real. Sin compartimientos, ni
disciplinas separadas, ni horas asignadas para tal o cual destreza. Por eso,
hablar de lectura en el hogar es hablar de muchas cosas al mismo tiempo.
En primer lugar, no suena muy apropiado ese nuevo rótulo tan de moda de
“Promoción a la lectura” para lo que se hace en el hogar. No creo que en el
hogar se haga planes de ninguna clase. el término es tomado del lenguaje
comercial, tiene un sesgo cuantitativo que me parece sospechoso. Desde
siempre ha habido hogares con padres, madres, abuelos, tíos o nodrizas que
sembraron en los niños el amor por las historias y por los libros. Dudo que lo
hubieran hecho a propósito, siguiendo unos objetivos predeterminados… Lo más
probable es que solo quisieran pasar un buen rato, o domar a las pequeñas
fieras que suelen ser los niños, para que se estuvieran quietos unos minutos.
Las dos intenciones son, en sí mismas, maravillosas. Porque disfrutar
simplemente del placer de una historia o confiar en el poder de hipnótico de las
palabras, es creer de antemano en la lectura.
REYES, Yolanda: “La lectura en el hogar” en Caminos a la lectura. Pax, 1997
2004, Mexico (pp.24-25)
V.- METAS O POBLACIÓN BENEFICIARIA
5.1 El 75% de estudiantes leen de manera autónoma textos
diversos.
5.2 Uso permanente de los textos de la biblioteca de aula.
5.3 Visita de manera autónoma a la Biblioteca de la institución
educativa
5.4 El 50% de padres de familia inculcan la lectura en sus hogares.