Feria y Fiestas de Nogales 2018
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saludasaluda
Quiero aprovechar esta oportunidad para despedirme de todos los vecinos (institucionalmente
hablando) porque, el año que viene por esta fechas, seré un ciudadano de a pie, sin responsabilidades
públicas. Y hago ésto porque así se lo prometí a mi mujer, a mis hijos… y a toda mi familia, en realidad. Pero
me despido del cargo público que ahora ocupo habiendo cumplido con mi Pueblo.
En estas líneas quiero hacer una reflexión en voz alta; una reflexión entorno a San Cristóbal. En
lo tocante a San Cristóbal, todos los nogaleños nos sentimos hermanos y hacemos piña entorno a él,
porque es nuestro Santo Patrón. San Cristóbal no es ni de la directiva de turno, ni de los miembros de la
Hermandad… Entonces, yo me pregunto: ¿por qué no sentimos lo mismo entorno al Ayuntamiento? El
Ayuntamiento no es ni de los Concejales, ni del Alcalde de turno… sino que es de todos los nogaleños.
Después de estos últimos ocho años de trabajo por mi Pueblo, me voy super satisfecho. Sin
embargo me llevo una duda, algo que nunca entenderé y que me causa una gran decepción.
Me voy satisfecho porque hemos logrado crear un clima social de paz, por haberle dado la vuelta a nuestra
economía, a nuestras infraestructuras, por haber conseguido (en mi humilde entender) que Nogales sea
ese Pueblo, la casa en la que todos los nogaleños (y los que no) quieran vivir.
Esto ha sido posible gracias a todos los Concejales que forman la Corporación. Si recordáis, la
Legislatura anterior gobernó Juan José y nosotros (los actuales gestores municipales) le dejamos hacer.
Porque, ante todo, para nosotros lo importante era la estabilidad de Nogales, nuestro Pueblo. Por eso no
quiero dejar de dedicar unas palabras a los Concejales de la Oposición, por dejarnos ahora trabajar a
nosotros.
Todo esto ha permitido que podamos llevar a cabo muchos de los proyectos que nos propusimos
y que estén en marcha otros que queremos llevar a cabo antes de que finalice nuestro mandato.
Por todo lo expuesto estoy super satisfecho. Pero me queda una espinita: esa parte de los
nogaleños que te decepciona a cada paso, que no entiende que el Pueblo es de todos, que no es propiedad
del Gobierno de turno. Esos que rompen señales, arrancan plantas, aparcan donde quieren, se meten con
su coche en dirección prohibida… no son más que gente maleducada que no deja de faltarle el respeto a
los demás sin darse cuenta de que se están tirando piedras a su propio tejado, porque ellos también son
nogaleños. Personas que no se conciencian de que los desperfectos que ocasionan no los pagan ni el
Alcalde ni el Concejal de turno, sino que sale del bolsillo de todo el Pueblo.
Además, es gente vana que sólo se fija en si se han colocado tres macetas o si se han pintado dos
pasos de cebra. Son personas a las que no les interesa si la economía municipal va bien, que se hayan
pagado las deudas, que se hayan conseguido ingresos extra…
Porque hay quien no es capaz de reconocerse ni a sí mismo en la intimidad que desde el
Ayuntamiento se están haciendo las cosas bien, bien para todos, en la medida de lo posible. Y no son
capaces de interiorizar este hecho por una única y sencilla razón: el hecho de pensar de forma diferente a
como pensamos los que tomamos esas decisiones.