Es una falta muy grande de un Babalawo minimizar el trabajo de un
Olorisha. Ningún Babalawo, por muy sabio que sea, debe usurpar el
trabajo de los Olorishas, cada quien a lo suyo. Es una falta muy
grande, el minimizar el trabajo de un Babalawo. Si bien es cierto
que la gran mayoría de los Babalawos pertenecientes a la Tradición
Afrocubana han pasado por Ocha y que al menos deben conocer
los pasos de la ceremonia, eso no significa que puede hacerle Ocha
a una persona.
En nuestra vertiente, el Babalawo al pasar a Ifá, deja el sacerdocio
de Ocha para los Olorishas, o sea, que él no puede realizar ninguna
consagración de Ocha. Lo primero que debe existir es el respeto al
sacerdocio de cada quien, respetando lo que es de los Olorishas y
los Olorishas respetando lo que es de Ifá, pero además, aun cuando
alguien pueda hacer algo, lo primero que debe tener para poder
hacerlo, es CONOCIMIENTO. El derecho a hacer algo, no le da a
nadie el poder para hacerlo y menos si no tiene ni idea de como se
hace.
Es muy triste ver como personas que nos hacemos llamar
religiosos, peleamos como perros por un hueso, cuando todos
tenemos un lugar. Nadie debe minimizar a nadie, es como que un
arquitecto le diga que un médico es menor que él. Un médico es
menor que el arquitecto en su campo, pero en el campo del médico,
el médico es mayor. Si alguien busca casa, necesitara quizá del
arquitecto o de sus obras, pero si necesita salud, si necesita ayuda
médica, tendrá que asistir con un doctor, porque el arquitecto no
puede quitarle ninguna enfermedad. Cada quien tiene su propia
corona, cada quien es rey en su tierra. La lucha no debe ser entre
religiosos. Todo ese tiempo que se pierde en peleas y disputas,
bien podríamos emplearlo en ganar la lucha contra la ignorancia
que muchas veces es nuestro principal enemigo y lo que da un
terreno fértil a la mala praxis y la estafa.
No es el Babalawo o el Olorisha el enemigo a vencer. Es la poca
preparación que se suele tener en uno y en otro lado. Si un Olorisha
no aprende nada, quizá es justificable, pero no puede entrar en
disputas de quien es mejor, porque al menos él, está igual que
aquel niño que va en su andadera por no saber caminar aun, solo
que el niño en la vida y el Olorisha en la religión. Si un Babalawo no