Sordera Espiritual: Porfirio Martínez.
Éxodo 6:9. Sordera física y espiritual- enfermedades problemas, para que podamos oír su voz. Por
prestar atención a cosas que no debemos oír como murmuración (ext.) pensamientos malos (int.)
Graham Bell quería hacer que los sordos oyeran (el teléfono) teléfono = la cruz... Dios tratando de
hablarle a la gente. Somos culpable de nuestra sordera porque nos hemos negado a querer escuchar
su voz. Depresión nos cierra el oído espiritual, la tristeza igual, incredulidad, desanimo. “Por causa
de servidumbre”. Dios lleva un mensaje y el pueblo no cree. A veces decimos que Dios nos tiene en
esta situación. La sordera espiritual es responsabilidad del que la padece. No entiende el mensaje
(depresión) de salvación, creen que son inventos. A veces nos ponemos tapones en los oídos para
encerrarnos en los problemas. Dios: los quiero liberar los quiero bendecir y… el pueblo dice soy
pobre mi padre fue pobre mi abuelo fue pobre… Dios dice hare de ti una nación grande y no creo
porque tengo ideas que me impiden escuchar. A veces por escuchar sonidos dañinos hemos dañado
nuestros oídos, llega un momento en que ya no creemos realmente la palabra de Dios. El pueblo de
Israel era un pueblo pesimista, Dios ya no podía trabajar con ellos porque ellos simplemente no
querían a causa de su pesimismo. A veces no creemos y oramos por si acaso Dios quiere, después
pasaron 40 años murmurando… “Para que estudio, para que trabajo, para que me sano, para que…”
solamente tenemos que creer y mandar el pesimismo lejos, hablamos mal de nosotros mismo,
desde que se levantan están hablando mal de sí mismo, profetizan en contra de sí mismo y todo lo
que dicen se cumple… diez espías mataron todo un pueblo con su pesimismo, pero dos salvaron
todo un pueblo. Conforme a vuestra fe sea hecho. El que habla, hable conforme a las palabras de
Dios, nunca Dios habla mal de sí mismo. Porque felicitamos a nuestros hijos y no podemos hablar
bien de nosotros. La suerte no existe, existen leyes espirituales que activamos con nuestras palabra,
“y vio Dios que era bueno” “y Moisés era hermoso” “y dijo Dios que David era hermoso”, y vamos a
verlo y realmente no era tan hermoso, pero Dios los vio hermosos. Lo que acabo de hacer es bueno
en gran manera, porque no hablamos bien. No escuchemos a personas que hablen mal, tan feliz
que íbamos hasta que escuchamos un espía murmurador. Debemos aprender a decirle a los que
vienen a murmurar no quiero oir. Eva dejo de escuchar a Dios por ponerle cuidado a la serpiente.
Hoy soy bendecido por Dios no quiero dañar mis oídos para Dios. Escuchar lo correcto puedo afinar
mi oído para Dios, detecto cuando algo no viene de Dios. Hecho 28:15 Pablo escucho a la gente
correcto recibes aliento y ánimo. “mi mascota se murió de lo mismo”. Lo que escuchamos puede
dañar nuestros oídos y nuestro corazón. Si decimos que es para orar solamente oremos.
Terminamos por acostumbrarnos al ruido, nuestra alma también se acostumbra a la escasez,
problemas, gritos, malas palabras. Creemos que la vida en abundancia es para otro. Proverbios
13:12 tantos años escuchando que serían libres y mientras se acostumbraron a ser pobres. Cuando
Jesús resucito los encontró durmiendo, a causa de la tristeza. “Puedes ser tan feliz como quieras o
tan miserable como deseas”.
Cuando una persona no oye a Dios es mejor no hablarle. V10.11 Dios ya no volvió hablar con el
pueblo se fueron a hablar con el faraón. Hay gente que se enoja cuando le decimos que deje de vivir
como esta, esta sordera viene por que voluntariamente decidimos no escuchar. Cuando leemos y
no entendemos es porque no practicamos lo que leemos el Señor dice “ni para que le hablo igual
no obedece”. Mt 13:13-16 les hablo por parábolas porque viendo no ven y oyendo no oyen. Cambiar
de predicador no es la solución, mensaje encriptado. Si no amas la palabra y empiezas a creer y a
obedecer no estas entendiendo la palabra. Pablo dejo de predicar a los judíos y se fue a los gentiles
porque el Señor le envío porque estos ya no quieren oír. “Al que tenga oídos para oír, oiga”.
Deuteronomio 29:4 no entendemos porque no nos gusta oír. Poner en practica la palabra de Dios
nos abrirá los oídos, Ezequiel 12:2 Rebelde es el que no se sujeta a su autoridad y pierdes capacidad
de ver y de oír. “soy de palo y tengo orejas de pescado” cuando oigo un mensaje que viene de parte