GÉNESIS 49:9 “Cachorro de león es Judá; de la presa subiste, hijo mío. Se encorvó, se echó como león, o como león viejo: ¿Quién los despertará?”
Dependencia y Confianza: Al igual que los cachorros de león dependen de su madre para sobrevivir, nosotros dependemos de Dios para nuestra supervivencia espiritual. La dependencia de Dios nos enseña a confiar en Él y a buscar su guía protección en nuestras vidas.
Crecimiento y Maduración: Los cachorros de león crecen y se desarrollan con el tiempo, y de igual manera, nosotros debemos crecer y madurar en nuestra fe. El crecimiento espiritual requiere esfuerzo y dedicación, pero es esencial para convertirnos en personas fuertes y maduras en Cristo.
“Nuestro trabajo como líderes es ayudar a nuestros niños como pequeños cachorros de león, acompañándolos, protegiéndolos, buscando su potencial y propósito en la vida, para que ellos lleven luz a personas que solo ven oscuridad.