84 Temperamentos Controlados por el Espiritu Santo
mentar algún otro tipo de éxtasis emocional
son una misma cosa. Y hay otros cristianos que,
debido a los excesos que han observado o de los
cuales tienen noticias en este aspecto, práctica-
mente han descartado las enseñanzas en cuanto
a ser llenos con el Espiritu. Simplemente no
reconocen la importancia del Espíritu en sus
vidas. Satanás coloca dos obstáculos en el ca-
mino del hombre: (1) procura evitar que reciba
a Cristo como Salvador y (2) si fracasa en ésto,
trata de que no entienda la importancia del
Espíritu Santo y de su obra. Si a pesar de sus
esfuerzos en contrario, la persona se convierte,
Satanás tiene dos maneras de abordarla: hace
todo lo posible para que los hombres asocien
la idea de estar llenos del Espíritu con excesos
emocionales o, de lo contrario, se va al otro ex-
tremo del movimiento pendular tratando de que
ignoren totalmente la existencia del Espíritu
Santo.
Una de las falsas emociones en boga —nacida
de la enseñanza de alguna gente y no de la
Palabra de Dios— es que se produce una “sen-
sación” especial cuando se recibe la plenitud del
Espíritu Santo. Antes de explicar cómo se ad-
quiere esa plenitud, conviene repasar lo que la
enseñanza bíblica permite esperar que ocurra,
cuando somos llenos del Espíritu Santo.
Qué podemos esperar cuando somos llenos del
Espíritu Santo.
1. Los nueve componentes temperamenta-
les característicos de la vida llena del
Espíritu, tal cual los establece Gálatas
5:22-23 son amor, gozo, paz, paciencia,
benignidad, bondad, fe, mansedumbre,
Como Ser Llenos del Espíritu Santo 85
templanza (dominio de sí mismo).
Ya hemos examinado estos rasgos en detalle
en el capítulo 6, pero su presencia en la vida del
creyente comporta ulteriores manifestaciones.
¡Toda persona que ha recibido la plenitud
del Espiritu Santo manifestará esas caracteris-
ticas! Y lo manifestará no como resultado
de un esfuerzo o por desempeñar un papel o
hacer su parte, sino simplemente porque el Es-
píritu controla su naturaleza.
Muchos de los que aseguran que han sido
“llenos” o, como algunos lo llaman, “ungidos”,
nada saben de amor, gozo, paz, paciencia, genti-
leza, bondad, fe, mansedumbre o dominio pro-
pio. Sin embargo, ; esas virtudes constituyen el
sello de garantía de las personas llenas del
Espíritu Santo!
2. Un corazón gozoso y agradecido y un
espíritu sumiso (Ef. 5:18-21).
Cuando el Espíritu Santo llena la vida de un
creyente, la Biblia nos dice que le dará un cora-
zón canoro y agradecido y un espíritu sumiso.
No os embriagueis con vino, en lo cual hay
disolución; antes bien sed llenos del Espíritu,
hablando entre vosotros con salmos, con him-
nos y cánticos espirituales, cantando y ala-
bando al Señor en vuestros corazones; dando
gracias siempre por todo al Dios y Padre, en el
nombre de nuestro Señor Jesucristo.
Someteos unos a otros en el temor de Dios,
Un corazón canoro y agradecido y un corazón
sumiso, independiente de las circunstancias, no
son cualidades de la naturaleza humana, por lo
cual solamente podemos apropiárnoslas si conta-
mos con la plenitud del Espíritu Santo. El espí-