VIOLENCIA: UN VISIÓN BIOPSICOSOCIAL PROF. ENRIQUE EDUARDO BIEBER
Agresividad es una característica innata al individuo que sirve para responder defensivamente a situaciones amenazantes. Es una respuesta adaptativa que, por tanto, posee una connotación positiva. La violencia, sin embargo, no es adaptativa, es destructiva y tiene como finalidad causar daño sin por ello obtener ningún beneficio. “ Todos somos potencialmente agresivos pero no violentos.”
Según la OMS la violencia consiste en el uso deliberado de la fuerza física o el poder, ya sea en grado de amenaza o efectivo, contra uno mismo, otra persona o un grupo o comunidad, que cause o tenga muchas probabilidades de causar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos del desarrollo o privaciones. (Krug, 2002). Los pensamientos agresivos son innatos a todo ser humano (sueños, ideas de venganza, fantasías). Todos somos potencialmente violentos pero unos canalizan la agresión de forma adecuada, mientras otros la exteriorizan violentamente.
La agresión está regulada por códigos morales internos (freno moral), ética, empatía por los demás y control del nivel de impulso. El refrenar los impulsos antisociales es una tarea aprendida en la infancia dentro del núcleo familiar y a través de estructuras sociales. Los padres y los cuidadores ayudan a los niños a internalizar los valores éticos, culturales, filosóficos y también a refrenar los impulsos antisociales. Más adelante el sistema político de la sociedad trata de asegurar que estos principios se cumplan . Pero aún los genes más sanos, las familias más cálidas, los mejores educadores y las sociedades más humanas, no pueden erradicar esa parte destructiva de nuestra personalidad o de nuestra esencia.
Perspectiva Psicosocial Algunas teorías sociológicas establecen las causas de la violencia en diversos factores de la estructura social. La pobreza y la participación desigual en los recursos económicos contribuyen a alienar a las personas de clases sociales bajas las cuales estarían expuestas a frustraciones y limitaciones que les harían reaccionar violentamente. El crimen, pues, sería un problema de la estructura social la cual en lugar de intentar prevenir, crearía estereotipos que afectarían más a las poblaciones más pobres. La carencia de recursos de esta población les haría optar por estrategias ilegales para obtener la satisfacción de sus necesidades.
El factor crítico no es el entorno sino la manera en que el individuo escoge como hacerle frente. El criminal siempre culpará a su entorno para explicar la naturaleza de sus actos, a pesar de que sus vecinos o hermanos, crecidos en el mismo entorno, hayan rechazado las tentaciones de la calle y hayan decidido vivir alejados de problemas. Si bien no podemos descontar el efecto del entorno, ya que en algunas áreas la oportunidad de impunidad es mayor que en otras, sin embargo, sin embargo no conviene ignorar que aún en estos ambientes hay individuos que eligen no usar drogas o delinquir. Los individuos pueden crear problemas por la manera en como responden a ciertas situaciones. No es la situación estresante la que fomentaría la perpetración de un crimen sino la manera característica de hacerle frente al estrés que el individuo ha desarrollado antes de encontrarse con esa situación.
Desde los conocidos estudios de Bandura (Morales, op. cit.), se admite la posibilidad de aprendizaje de la conducta violenta por medio de la observación y la imitación de modelos. No obstante, la conducta agresiva aprendida sólo se pone en práctica si las consecuencias de su ejercicio reportan un beneficio al modelo y al observador. En otras palabras, las respuestas agresivas que se aprenden por imitación acaban por extinguirse si no son recompensadas. Por tanto, la agresión no escapa a las leyes del aprendizaje. Como cualquier otra conducta, es reforzada por sus consecuencias, de tal forma que si éstas son positivas para el agresor, tenderá a afianzarse en el repertorio del sujeto.
Además, dentro de ciertos ambientes familiares y sociales existe una inclinación a usar la violencia como medio para resolver problemas . Es habitual que los padres recurran (al menos cuando han agotado otros recursos) a la reprensión como forma de imponer disciplina y orden en el hogar. La consecuencia es que el niño aprende que la fuerza física constituye un procedimiento adecuado para resolver conflictos. En resumen, la psicología ha puesto de manifiesto que la conducta agresiva es producto del aprendizaje y cumple una función de ordenar y manejar el medio ambiente, si bien de una forma disfuncional.
Resulta más interesante, en cuanto que aporta pistas sobre un eventual origen explicativo de la conducta violenta, la taxonomía establecida por Megargee para seis tipos de agresores, que transcribimos a continuación de forma sintetizada (citado en Echeburúa, 2.000): 1. Sujetos normales en graves circunstancias situacionales (consumo ocasional de alcohol). 2. Sujetos con severas patologías (psicosis orgánica, abuso y dependencia de sustancias psicoactivas). 3. Sujetos con un estilo de vida agresivo, socializados en un contexto en que la violencia se considera normal para desenvolverse en el medio, o un instrumento para la obtención de fines, como dinero, sexo, etc. 4. Sujetos proclives a explosiones de cólera, hostilidad, inducidas por situaciones de frustración o de excesivo control.
La violencia puede desencadenarse de una manera: I mpulsiva (discusiones, contagio emocional, fanatismo religioso o político, alcohol) E laborada, planificada y fría A islada o repetitiva E xtrema o leve C on agresión física o sin ella (timadores, psicópatas de guante blanco) S ádica o ritual
Las teorías de Allan Schore proponen que las interacciones afectivas tempranas del niño con el ambiente social humano influyen en la maduración postnatal de las estructuras cerebrales que regulan las funciones socioemocionales futuras, es decir, los intercambios socioemocionales entre el cerebro de la madre y el del niño moldean no solo la personalidad del niño sino también la modulación de su afecto. Estos intercambios tienen lugar en la corteza orbito-prefrontal y en sus conexiones con el sistema límbico. Los intercambios producen cambios bioquímicos en ambos (madre e hijo) con capacidad de retroalimentación. La personalidad antisocial y psicopática tendría su base en estos procesos cerebrales de los dos primeros años de vida.
S egún P. Zimbardo, en la explicación de sucesos sorprendentemente “anormales” por su crueldad, no podemos centrarnos exclusivamente en factores disposicionales, creyendo que tras estas conductas se e ncuentran personas trastornadas, distintas a la mayoría y con alguna característica que los hace actuar así. Lo más relevante, y así lo demuestran años de investigación en psicología, son las variables situacionales, que hacen que en determinados contextos, cuando concurren factores oportunos, las personas actúen en un sentido en que nunca hubiéramos imaginado.
El psicoanalista Dr. Kart Goldberg, del colegio de medicina Albert Einstein, de Nueva York afirma: “Si un niño sufre la crueldad de alguna persona, sobre todo si es amigo o familiar, las consecuencias serán humillación y decepción: “No recibí amor de las personas que yo más quiero”. Esos sentimientos, si no son colmados por la compasión de otros, pueden aumentar hasta que la única manera de vivir es “ser indiferente hacia los demás”; dice Goldberg.
BIOLOGÍA DE LA VIOLENCIA
Corteza orbito-frontal Amígdala temporal Opérculo frontal Control de la respuesta emocional Conducta antisocial Desinhibición Ausencia de empatía Memoria emocional Aprendizaje recompensado Agresividad, violencia impulsiva Ausencia de empatía Psicopatía Trastorno bordeline Expresión facial y manipulación
A la izquierda el cerebro de una persona normal. Al medio y a la derecha el cerebro de un Psicópata. Las áreas rojas y amarillas tienen alto metabolismo, en cambio las áreas azules y negras poseen una baja actividad. Es notable la ausencia de actividad metabólica en el área superior.
Mayor predisposición a la violencia impulsiva por activación y regulación anormales de la amígdala. Deficiente control cognitivo, especialmente el inhibitorio. No se suprime la conducta inapropiada. Mayor status de dominancia. MAO-AL y varón: más impulsivo y más violento. Gen MAO-A L Triptófano-hidroxilasa Transportador de serotonina
MAO-AL. COMT. Transp. 5-HT sesgo hacia la respuesta violenta Cambios estructurales y neuroquímicos AGRESIÓN MALTRATO EMOCIONES NEGATIVAS ALMACENADAS FALLO EN CIRCUITOS CONTROLADORES
Agresividad INSTRUMENTAL. El criminal “predatorio” Asocia Psicopatía Disminución de la empatía Rencor Disminución de la activación de la amígdala y del volumen del OCF
¿ Qué parámetros biológicos definen a un criminal? ↑ T3 y ↓ T4 (hormonas tiroideas). Asociado a psicopatía y personalidad asociada a agresividad. En violentos recidivantes, correlacionado con irritabilidad y detachment. ↓ MAO-B (plaquetas) de violentos recidivantes. Stalenheim EG, Psychiatr Res 204;121;281-291
Hipocortisolismo (estrés crónico) Mayor variación diurna Mayor número de TCE previos Mayor número de actos violentos previos condenados Mayor número de abusos sexuales y físicos durante la infancia Mayor número de intentos de suicidio
Neurobiología de la agresividad La serotonina (5-HT) es el principal neurotr. de la agresividad Su principal metabolito (5-HIAA) está disminuido en el LCR de varones violentos, impulsivos, suicidas violentos. Predice conductas violentas y recidivas violentas. La respuesta a agonistas 5-HT son menores en agresivos, personalidad antisocial y conducta suicida. La dieta pobre en triptófano (precursor 5-HT) provoca incremento de conductas violentas en sujetos sanos.
Los violentos tienen menor volumen y actividad del lóbulo frontal y de la corteza cingulada. La amígdala temporal tiene una actividad alterada. Es mayor en el impulsivo. Estas alteraciones se correlacionan con los hallazgos químicos. ¿Está determinada genéticamente esta predisposición en sujetos sanos, no violentos?
Mayor actividad en las circunvoluciones anteriores (conductores de la mente que permiten pasar de un pensamiento a otro) y anormalidades en el lóbulo temporal izquierdo (que controla el modo y el temperamento). “Si hay un problema en el lóbulo temporal izquierdo, habrá pensamiento malos y violentos” Pocos niveles de serotonina no frenan los impulsos; los criminales generalmente reciben poca serotonina en el cerebro. Pueden ser diagnosticados en la niñez mediante la medición de testosterona + serotonina.
¿ Por qué existen criminales? Fallas en la conexiones neuronales (células gliales) Falta de neuronas Cortezas menos “anchas” Lesiones causan “neurotóxicos” que llevan a la violencia
Lóbulo prefrontal (dorso lateral) si se daña no funciona la “moral”, concentración. Lesiones de la corteza Orbito frontal, causan “desinhibición”, híper -sexualidad (violadores). Cíngulo (da emociones a la intelectualidad) si falla, lleva a la agresividad). Lesión del cíngulo anterior (falta de arrepentimiento). Los asesinos seriales tienen el gen MAO “alterado”, proteínas anormales.
Estos estudios indican que la violencia es un fenómeno multifactorial, mejor entendido dentro de un marco de interacciones gen-ambiente, con diferencias genéticas que crean una susceptibilidad a factores de riesgo ambientales particulares. Este paradigma puede indicar una tendencia dentro de una población en particular, pero no puede hacer predicciones específicas a nivel individual, donde otros factores aparte de la genética juegan un papel igualmente importante . Aunque múltiples genes pueden interactuar para predisponer a los individuos a comportamientos violentos, la tasa de heredabilidad general de aproximadamente el 50% es similar a la de muchos otros comportamientos, lo que indica un papel igualmente importante de los factores ambientales.
Cuando los daños cerebrales ocurren temprano en la vida, los efectos psicopáticos son más pronunciados. Un hallazgo que se ha interpretado como un apoyo a la visión de la psicopatía como un déficit del neurodesarrollo. Comparado con el daño adquirido en la edad adulta, el daño a la vmPFC antes de los 16 meses se ha vinculado a un riesgo significativamente mayor para el desarrollo de conductas abusivas / criminales más severas y una menor empatía / remordimiento, porque el daño temprano a la vmPFC perturba el desarrollo moral.
LA 2DA IMAGEN ES LA DE UN HOMBRE QUE MATÓ A 64 PERSONAS. ÉL TIENE EXELENTE FUNCION FRONTAL. Y ÉSTA ES LA EXCEPCION A LA REGLA A LA PRUEBA. ES UN HOMBRE QUE PUEDE MATAR Y PLANEAR UN COMPORTAMIENTO, SIN SER ATRAPADO. ¿CÓMO PUEDE ÉL LOGRAR ESTO? ÉL TIENE UN BUEN FUNCIONAMIENTO FRONTAL PARA PLANEAR Y CONTROLARSE. A. Raine.
A ) CONTROL- NORMAL. B) ASESINOS AFECTIVOS. (ASESINOS IMPULSIVOS, EMOCIONALES) BAJA FUNCION FRONTAL C) ASESINOS PREDADORES. (ASESINOS SERIALES) BUENA FUNCION FRONTAL *DIVIDIMOS A LOS ASESINOS EN BAJA FUNCION FRONTAL VS ASESINOS EN SERIE. EN UNA CORTE NO LE PUEDE EXCUSAR AL AFECTIVO IMPULSIVO DE UN CASTIGO MAS PESADO Y SEVERO.???
EL CASO DE KIP KINKER UN CHICO QUE MATÓ A AMBOS PADRES Y LUEGO FUE A LA ESCUELA Y TRATÓ DE MATAR A LA MAYOR PARTE DE LAS PERSONAS QUE PUDO. LOGRÓ MATAR A 2. HIRIENDO A 20 MÁS. SU DEFENSA TAMBIÉN TESTIFICÓ QUE TENÍA UN POBRE FUNCIONAMIENTO FRONTAL. IMAGEN 1: AGUJEROS EN LA PARTE FRONTAL. MIRANDO DESDE LA BASE DEL CEREBRO. IMAGEN 2: ANATOMÍA. CONTROVERSIAL CUESTION. 711 AÑOS EN PRISION, SIN NINGUNA POSIBILIDAD DE LIBERTAD. CUESTION NEUROETICA
LOS CRIMINALES PUEDEN SABER LO BUENO DE LO MALO, PERO ... TIENEN EL SENTIMIENTO DE QUÉ ES BUENO Y MALO? * COGNITIVAMENTE: LOS CRIMINALES DIFERENCIAN LO BUENO DE LO MALO? ESO ES LO QUE LA CORTE PREGUNTA. ¿TIENEN EL SENTIMIENTO DE QUÉ ES BUENO Y QUE ES MALO? PORQUE SI NO TIENEN EL SENTIMIENTO DE QUÉ ES BUENO, TAL VEZ ACTÚE DE FORMA ERRADA. Y TAL VEZ UD. NO SEA RESPONSABLE DE TENER NEUROLOGICAMENTE LOS CIRCUITOS INADAPTADOS. NO TENIENDO ESE CIRCUITO MORAL ACTIVADO DURANTE UN DILEMA MORAL.
PSICOFARMACOLOGIA DE LA AGRESION
NIÑOS: 45 ESTUDIOS MEDICOS ALEATORIZADOS Y CONTROLADOS CON PLACEBO ANTIPSICOTICOS ATIPICOS d = 0.90 ANTIPSICOTICOS TIPICOS d= 0.70 ESTIMULANTES d= 0.78 ESTABILIZADORES DE HUMOR d=0.40 ANTIDEPRESIVOS d=0.30 ADULTOS: -ANTICONVULSIVANTES ENSAYOS CLINICOS ALEATORIOS Y CONTROL DE LA COMUNIDAD (PHENYTOIN, CARBAMAZEPINE, VALPROATO) -PRISIONEROS (IMPULSIVO - AGRESIVO) -DEPO-PROVERA DELINCUENTES SEXUALES— CASTRACION QUÍMICA ESTO ES UN METRO ANALISIS QUE HAN USADO DROGAS FARMACOLOGICAS PARA REDUCIR LA AGRESION. “MEDIDA DE EFECTO”: ES LA EXTENSION, LA FUERZA DE ASOCIACION ENTRE DAR MEDICACION A NIÑOS Y CUANTO REDUCE LA AGRESION EN EL COMPORTAMIENTO. EJ: d= 0.80 ( ES EFECTIVO ) = EFECTIVO EN UN 80%. TERAPIA DE COMPORTAMIENTO COGNITIVO REDUCE LA MEDIDA DE EFECTO EN 0.30% LOS ANTICONVULSIVANTES EN ADULTOS PRISIONEROS SON MUY EFECTIVOS
¿ DEBERIAMOS MEDICAR A NIÑOS PARA REDUCIR LA AGRESION? ¿ ESTO CONSTITUYE ASALTO ILÍCITO AL ORGANISMO? ¿ MEDICALIZACIÓN INDEBIDA DE UN PROBLEMA SOCIAL? ¿DONDE ESTO TERMINA? MUCHOS NIÑOS AGRESIVOS SERAN “NO AYUDADOS” Y TRATADOS AGRESIVIDAD EN LA INFANCIA PREDICE SERIAMENTE UNA ADULTEZ VIOLENTA UN “ARREGLO RAPIDO” PUEDE POTENCIAR INTERVENCIONES SOCIALES LOS PADRES TIENEN EL DERECHO DE SABER QUÉ FUNCIONA DEBERIAMOS MEDICAR A NIÑOS PARA REDUCIR LA AGRESION? RESPUESTA: ES INCONSTITUCIONAL. ES UN ASALTO ILEGAL AL ORGANISMO DE ESE NIÑO. ESTASMOS HACIENDO ALGO INNATURAL EN ELLOS PARA REDUCIR EL COMPORTAMIENTO AGRESIVO. EL USO DE TECNICAS MEDICAS EN UN PROBLEMA SOCIAL. EL ARGUMENTO QUE LES PUEDO DAR ES QUE LA AGRESION ES UN PROBLEMA EN LA SOCIEDAD LO QUE ESTAMOS HACIENDO ES ARTIFICIALMENTE MEDICANDO A UNA CONDICION NO MEDICABLE. LA AGRESION Y VIOLENCIA NO SON CONDICIONES MEDICABLES, ESQUIZOFRENIA TALVEZ, DEPRESION TALVEZ. PERO NO CON LA VIOLENCIA Y LA AGRESION
IMAGEN ISLA MAURICIO
MALNUTRICION Y EXTERNALIZACION DE PROBLEMAS
1795 MAURICIANOS DE EDAD 3 AÑOS MASCULINO + FEMENINO BAJA HEMOGLOBINA STOMATITIS ANGULAR (EN BOCA O LABIO) KWASHIORKOR CABELLO FINO, ESPARCIDO INDICADORES DEL MALNUTRICION EVALUADOS LA EDAD DE 3 AÑOS POR PEDIATRAS, 1972 CONTROLADOS MALNUTRIDOS ES UN ESTUDIO DE EVLUACION DE MAL NUTRICION. KWASHIORKOR: DIALECTO AFRICANO. SIGNIFICA TINTE NARANJA, DESPIGMENTACION . EVALUADOS CON MEDIDAS DE DIFERENTES COMPORTAMIENTOS ANTI-SOCIALES ( CBQ, CBC, RBPC) TAMBIEN LOS EVALUAMOS CON “IQ” A LAS EDADES DE 8 Y 11 AÑOS.
HALLAZGOS: COMPORTAMIENTO AGRESIVO ANTI-SOCIAL ROJO: NIÑOS MAL NUTRIDOS AMARILLO: NIÑOS SIN SIGNO DE MAL NUTRICION VEMOS QUE LOS NIÑOS CON MAL NUTRICION TIENEN MAYOR INDICE EN TODAS LAS EDADES 8, 11 Y 17 DE AGRESIVIDAD E HIPERACTIVIDAD. NIÑOS CON MALNUTRICION TAMBIEN TIENEN “IQ” BAJO. CONCLUSION: IQ BAJO INDICA MAL NUTRICION, EL CEREBRO NECESITA NUTRIENTES. MALNUTRICION CAUSA BAJO FUNCIONAMIENTO CEREBRAL, ESTO CAUSA BAJA FUNCION COGNITIVA, BAJO IQ, Y CONDUCE A UN COMPORTAMIENTO AGRESIVO ANTISOCIAL .
Comparados con otros delincuentes, los violentos de género exhiben una mayor activación en la corteza cingular anterior y posterior (implicadas en casi todos los sentimientos, como la emoción o la percepción del dolor físico y emocional) y en la corteza prefrontal medial (toma de decisiones y planificación del pensamiento). Por contra una menor activación en la corteza prefrontal superior, también implicada en generación de decisiones. Los científicos creen que este contraste puede conllevar una inestabilidad afectiva.
LOS MALTRATADORES: BIOLOGÍA Su cerebro, aunque sano en lo anatómico, funciona de un modo particular , exclusivo de los hombres que suelen practicar este tipo de agresiones. Todo indica que existe un perfil de funcionamiento cerebral propio en los maltratadores". Y esto "podría explicar algunas de las alteraciones psicológicas que describen estos hombres cuando se enfrentan a su compañera sentimental, como la ira o la rabia, el miedo a ser abandonados, o la inestabilidad afectiva repentina en forma de aumento de la ansiedad". Tres años largos de estudio y 20 hombres violentos fueron necesarios para salir de dudas. La conclusión: "El cerebro de un maltratador funciona de manera distinta al de otros delincuentes", explica midiendo cada palabra el neuropsicólogo y catedrático Miguel Pérez García, al frente de la investigación en la Universidad de Granada. Se trata de un hallazgo científico de trascendencia
La socialización del varón en un medio así (con estereotipos de género que siguen firmes, aunque se disimulen bajo gruesas capas de maquillaje) inculca la violencia como forma de control. Y la necesidad de control nutre la violencia contra las mujeres. Los psicólogos Neil Jacobson (1949-1999) y John Gottman, de la Universidad de Washington, produjeron al respecto uno de los trabajos más serios, fundamentados e implacables, que, lejos de todo diletantismo academicista o intelectual.
D escriben a dos tipos de violentos. Uno es el cobra , un psicópata asocial, abusador físico y emocional, que no reconoce límites y (aunque pida perdón falsamente) ve en la mujer un objeto de uso descartable. No reconoce emociones y viene de familias en las que el abuso, la violencia y la ausencia de cariño y de respeto fueron norma. El otro es el pitbull , que depende emocionalmente de su mujer, teme a lo femenino, teme ser abandonado y por ello sobreactúa el control, la posesión, los celos y la paranoia. Aunque parezca menos violento, puede y suele pasar de la agresión emocional al asesinato. Una sociedad en la que cobras y pitbulls andan sueltos en abundancia debería reconocerlos como síntomas de la extensión y la prevalencia de modelos familiares y sociales menos idílicos y bastante más tóxicos de lo que se pregona.
Si alguien golpeara a un desconocido, tendría una sanción inmediata y, según los efectos, podría ser muy dura. Sin embargo, cuando un violento golpea a una mujer hay tolerancia legal y a menudo social, indican Jacobson y Gottman Mientras se piense que esta violencia es “de otro tipo” o que es menos grave que la sufrida por cualquier persona a manos de un ladrón, un asesino o un psicópata cualquiera, más mujeres morirán a manos no de desconocidos, sino de maridos, novios, ex novios o ex maridos, como bien señalan Jacobson y Gottman. Muchos femicidas se gradúan de tales tras haber llegado a la conclusión de que no serían castigados o recibirían castigos leves. Lo aprendieron de la experiencia, abonada por la desidia legal, política y policial, por la indiferencia social, por la protección (voluntaria o no) familiar. Son, en fin, el producto trágico y extremo de una cultura y una sociedad en las que la violencia y la anomia se naturalizaron y recorren, sin discriminar, todas las capas sociales.
Violentos famosos
Alphonse “scarface” CAPONE Criminal de los años de la prohibición. “Cararasgada”, por peleas de niño No terminó la secundaria (14 años) Actividades ilegales ya en la escuela 1925 gonorrea 1931 test Wasserman +. Sífilis 1938 (Alcatraz) pupila de Argyll-Robertson 1938 Episodios de confusión en la cárcel. Test mentales alterados 1939. Excarcelado, es asesinado el “chivato” que le metió en la cárcel. La neurosífilis lesiona el lóbulo frontal
Adolf Hitler Enfermedad de Parkinson En la EP existe un marcado defecto frontal
Stalin Dictador comunista ruso Genocida de millones de compatriotas “no afines” al partido. Enfermedad de Parkinson
VIVE EN UNA RELACION DE ABUSO? Pregúntese lo siguiente: mi compañero(a)... ■ .Controla donde puedo ir, lo que puedo hacer y con quien puedo hablar? Me insulta o me dice que estoy loco(a)? ■ .Critica mi aspecto o las cosas que hago o digo? Aparece inesperadamente en mi trabajo, en la casa, en la escuela o en otros lugares para ver que estoy haciendo? ■ .Me pega, me empuja, me abofetea, me patea o trata de estrangularme? ■ .Me culpa a mi por maltratarme? ■ .Me obliga a tener relaciones sexuales aunque yo no quiera? ■ .Lastima a mis mascotas o destruye las cosas que para mi son especiales? ■ .Me amenaza con herirme o matarme? ■ .Se disculpa y me dice que eso nunca volverá a suceder (aunque ya haya pasado antes)? Si contesto que "si" a cualquiera de esas preguntas o si su compañero(a) pudiese hacerlo, es posible que este en una relación abusiva. Considere que no esta solo(a). Hay personas que pueden ayudarle, como amigos, parientes, vecinos y profesionales de salud. Nadie debe estar en una relación en la cual su vida este en peligro.
Algunos de los atributos psicológicos individuales (los rasgos de personalidad y las habilidades psicosociales) son claramente factores de riesgo para el comportamiento violento en tanto que son variables predisponentes para la ejecución de conductas antisociales frecuentes. Parte de estas conductas antisociales, en combinación con determinados factores sociales, que conocemos como factores desencadenantes (como por ejemplo los conflictos interpersonales, las toxicomanías o las situaciones de necesidad, marginación y desarraigo social) pueden dar lugar a manifestaciones violentas graves o extremas. El conocimiento de los mecanismos de acción de los factores de riesgo, de los factores desencadenantes y de su interacción es la clave para la predicción y prevención del comportamiento violento.
INDICADORES DE VIOLENCIA POTENCIAL INMEDIATA: Dientes o puños apretados Amenazas verbales Tener en la mano objetos potencialmente peligrosos Agitación psicomotriz, OJO! Delirios paranoides Alucinaciones imperativas
FACTORES DE RIESGO PARA LA CONDUCTAS VIOLENTAS: Amenazas previas Disponibilidad de medios para ejercerla Género masculino Edad joven Nivel socio-económico bajo Escaso soporte social Escaso control de los impulsos Antecedentes de intentos suicidas Agentes estresantes recientes
¿ Es posible predecir y, en consecuencia, prevenir la violencia? Creemos que la respuesta, en términos globales, es sí. Pese a ello, los episodios concretos de futuros comportamientos violentos son difíciles de predecir con la exactitud que sería deseable. Esta tarea es especialmente complicada cuando los individuos no presentan características personales predisponentes ni poseen antecedentes de violencia. En cambio, es más fácil anticipar la violencia futura cuando se trata de personas potencialmente violentas, que tienen una historia anterior de comportamientos violentos repetidos o que poseen una personalidad predisponente al comportamiento violento o en su caso que sufren una enfermedad estrechamente asociada a la conducta violenta.
Prevenga la violencia El Doctor Youngerman-Cole propone las siguientes opciones para prevenir la violencia: ■ En vez de recurrir a la violencia, busque otras formas de resolver los conflictos. Los desacuerdos son comunes en las relaciones humanas. Incluso pueden ser sanos y enriquecedores, siempre y cuando no resulten en violencia. ■ Enséñele a sus hijos que la violencia no es una forma para solucionar los conflictos. Proporcione disciplina con amor y consistencia. Cuando necesite corregirlos, no los golpee ni los amenace. Si necesita ayuda para disciplinarlos, busque orientación con un psicólogo.
■ No guarde armas en su casa, sobre todo si usted vive con una persona que ha amenazado con suicidarse, que suele comportarse violentamente o que tiene problemas con las drogas o el alcohol. Si es necesario que tenga un arma, nunca la guarde cargada y trate de tener las balas en un lugar alejado y seguro. ■ Este pendiente de las señales de advertencia, como las borracheras o las amenazas. Tal vez eso le ayude a evitar situaciones peligrosas. Si no tiene forma de saber cuando ocurrirá la violencia, tenga un "plan de escape" que pueda usar en una emergencia. ■ No acepte la violencia. Si usted o un miembro de su familia acaba de ser victima de maltratos físicos, este consciente de que el abuso y la agresión son un crimen. ■ Busque ayuda si le preocupa el comportamiento violento de un familiar, de una amistad o de un compañero del trabajo, o si usted mismo tiene un problema de ese tipo (por ejemplo, si humilla o maltrata a los demás). ■ Si sospecha que un niño esta muy descuidado o es victima de abuso o de maltrato, o si el niño le dice que esta en esa situación, busque ayuda de grupos de apoyo
“Podemos concluir que el criminal (violento) nace y se hace. Nace con una carga biológica y genética, con unas alteraciones en el cerebro que le dificultan un control adecuado de la agresividad, con una falta de vínculo afectivo con sus referentes parentales y todo ello en un entorno psicosocial poco favorable que al actuar de retroalimentador de aspectos negativos de su propio Ser “no deseado” (dificulta la capacidad de experimentar sentimientos de empatía y ternura por los demás) que puede potenciar la formación de una personalidad criminal.” MUCHAS GRACIAS!
The neurobiology of empathy. From the Depts. of Psychiatry (DC, JE) and Neurology (BHP), Harvard Medical School, Boston, MA; the Center for Law, Brain, and Behavior (DC, JE, BHP) and the Law & Psychiatry Service (JE), Massachusetts General Hospital, Boston; and the Dept. of Neurology, McLean Hospital, Belmont, MA (BHP). Anatomía de la violencia. Conferencias. Adrian Raine. Análisis funcional de la conducta violenta. Jesús E. del Rey. Aportaciones psicológicas a la predicción de la conducta violenta: reflexiones y estado de la cuestión. A. Andrés Pueyo y S. Redondo Illescas . Departamento de Personalidad - Universidad de Barcelona. Grupo de Estudios Avanzados en Violencia- (GEAV) Conducta violenta Generalidades. Dra. Odette Terol Levy. Violencia y trastornos de la personalidad: implicaciones clínicas y forenses. E. Esbec y E. Echeburúa. Los femicidas no nacen, se hacen. Sergio Synai. Mentes asesinas. la violencia en tu cerebro. Feggy Ostrosky. Neurobiología de la violencia. Dr Agustín Oterino Durán. Servicio de Neurología. Hospital Marqués de Valdecilla. Santander. Conferencia del Dr. Eugenio Vargas Peña. “ La mente criminal”. Asunción. Paraguay Bibliografía