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10 UNIDAD DIDÁCTICA: “MUEVO MI CUERPO”
Dar algún tipo de responsabilidad al niño/a en la organización de la clase
(encargado de equipo-mesa, encargado de cerrar las persianas, encargado
de borrar la pizarra, regar plantas,….
También se le pueden dar pequeñas tareas o responsabilidades de ayuda
al maestro/a, para eliminar tensión y energía acumuladas por permanecer
quieto. Además se reforzará la autoestima al sentirse útil para la clase.
(medida válida para las dificultades emocionales.)
Crear rutinas para todo el aula y estructurar el funcionamiento de la clase
(momentos educativos: asamblea, trabajo por rincones, hora cuento, juego
simbólico, video, piscomotricidad, destrezas manuales….. Todo ello estará
expuesto en un panel de los días de la semana (utilizando pictogramas).
Uso del panel de rincones, en el que veremos visualmente dónde debe de
estar cada niño/a en todo momento de la jornada (rincones de juego y
actividad).
Actividades en las que sea necesaria la participación de varios niños/as
(escenificar cuentos, canciones con gestos, individuales o con parejas que
requieran atención y movimientos coordinados de ambos).
Agrupamientos flexibles, trabajo en equipo, en el que sea necesario el
trabajo de todos para conseguir los objetivos (murales colectivos,
fabricación de juguetes con materiales de desecho….). Agrupamientos
heterogéneos, con distintos niveles cognitivos para aprovechar el recurso
de los compañeros/as como tutores/as de las tareas.
El alumno trabajará en una mesa individual en los momentos que requiera
mayor concentración (realización de las fichas de la unidad didáctica,…).
Reservar un tiempo al final del día para realizar la asamblea final
recordatoria (donde hablaremos de todo lo que hemos hecho a lo largo de
la jornada y también analizaremos los logros y las dificultades). El
niño tendrá un casillero con su nombre y fotografía donde pueda
guardar el trabajo realizado durante la jornada, sus pertenencias,…
Enseñar al niño formas adecuadas de comunicar sus necesidades a los
demás (ej.: esperar su turno, levantar la mano,…).
Hacerle comentarios a menudo sobre lo que está haciendo “así vas muy
bien”, “lo terminarás muy pronto”, “qué bonito está quedando”. Es
conveniente elogiar al niño/a cuando está concentrado en la tarea.
Es conveniente prestar atención al alumno/a cuando realice algo positivo y
reforzar sus acciones con el contacto físico (abrazos, tocar el hombro,
chochar la mano).
Gratificaciones constantes para dar ánimo y ayudar a seguir la tarea. (“te
está quedado precioso”, “¡ufff! Te queda muy poquito para terminar"