134 INQUISICIÓN ESPAÑOLA
odiado en tazón de sus actividades comerciales y financieras y de
su origen religioso. El criterio de limpieza de sangre se convirtió en
el elemento de referencia de la sociedad española. Los que no eran
ex puro sanguine procedente veían cómo se les rechazaba del acceso
a las universidades (Salamanca, Toledo, Valladolid o Sevilla), de las
órdenes militares (Santiago, Alcántara y Calatrava), de ciertas ór
denes religiosas (dominicos, Jerónimos, franciscanos y, más tarde, je
suítas); no podían formar parte del personal de la Inquisición ni
conseguir cargos; pero en este último caso, la interdicción no se
respetaba por razones económicas. Desde su instalación, la Inquisi
ción aplicó la interdicción expresada en las Instrucciones de Torque-
mada publicadas en Sevilla en 1484:
... los hijos y nietos de los tales condenados [por la Inquisición]
no tengan ni usen oficios públicos, ni oficios, ni honras, ni sean
promovidos a sacros ordenes, ni sean Juezes, Alcaldes, Alcaides,
Alguaciles, Regidores, Mercaderes, ni Notarios, Escrivanos públicos,
ni Abogados, Procuradores, Secretarios, Contadores, Chancilleres,
Tesoreros, Médicos, Cirujanos, Sangradores, Boticarios, ni Corredo
res, Cambiadores, Fieles, Cogedores, ni Arrendadores de rentas
algunas, ni otros semejantes oficios que públicos sean.8
8. AHN, Inquisición, libro 497, f.“* 22-23, cit. por II. Kamen, op. cit p. 154.
9. AHN, Inquisición, Lletena, íeg. 1.987 y 1.988.
Sin embargo, el reinado de Carlos I no conoció una política de
persecuciones sistemáticas. La Reforma en Alemania y la infiltración
de las ideas protestantes en España incitaron a Felipe II, rey desde
1556, a reafirmar la acción inquisitorial, y una nueva oleada de re
presión se abatió sobre los conversos en la segunda mitad del si
glo
xvi. Así, Extremadura, fue objeto de una depuración radical en
los años 1560-1570, en particular Alburquerque, gran población agrí
cola, situada al norte de Badajoz, de donde dependía administrati
vamente, y a algunos kilómetros de la frontera portuguesa, que po
demos tomar como ejemplo.
Entre 1566 y 1575 fueron juzgadas 240 causas, que compren
dían 196 casos de judaismo.9 Una importante comunidad conversa
vivía en esta pequeña ciudad donde ocupaba un lugar socioeconó
mico típico; constituía la burguesía comerciante (pañeros, merceros,