En este punto hay que referirse al sistema evaluativo, las pruebas masivas arrojan
evidencias que son utilizadas para seguir constatando los últimos lugares que ocupa la
educación en Colombia, en efecto no todos los estudiantes aprenden de la misma manera,
pero si tienen una evaluación homogénea, entonces porqué no evaluar en contexto,
ciertamente las pruebas deberían plantearse desde el lugar donde se está produciendo la
enseñanza, para así garantizar de alguna manera la igualdad de derechos.
Es interesante también preguntarse por la finalidad de la educación, la pertinencia
en el desarrollo de las competencias requiere de escenarios de aprendizaje, no solo para
llevar determinados procesos y actividades, sino para comprender el contexto y los
recursos de los que se vale el maestro a la hora de contribuir en el mejoramiento de
actitudes y aptitudes en el conocimiento.
De igual forma el educar desde diferentes perspectivas académicas, concibiendo la
uniformidad de los objetivos a evaluar conlleva a la creación de desniveles intelectuales,
pues los grupos con el poder de adquisición son los dominantes frente a los que estudian
bajo la diversidad de las necesidades sociales educativas, la creencia que se tiene de la
evaluación como generadora de cambios, no corresponde a la función que se le delega.
Si bien, no se puede estar ajeno de lo que ocurre en esta problemática, necesita verse
desde todos los contextos, la educación se mueve dominada por los hilos de la política y
solo una movilización donde todos los entes inmersos en ella se manifiesten, puede iniciar
un cambio que con persistencia llegue al campo administrativo de la educación.
Pero la escuela hoy sigue de espaldas a la realidad, pero más que eso, ese
cuerpo que es la escuela es un cuerpo que tiene los ojos vendados, es un
cuerpo que tiene la boca sellada, es un cuerpo con las manos atadas y es un
cuerpo con los oídos tapados. Tiene los ojos vendados con la venda que se
llama programas curriculares, planes de estudios rígidos, acartonados,
anacrónicos, que no dan cuenta de lo que es la realidad, sino que extrañamente
como que quisieran ocultar para en su lugar dar cuentas de temas que, si bien
son interesantes y necesarios a la luz del desarrollo del pensamiento científico
y a la luz de la razón occidental, pudieran parecer temas aislados del mundo
real de la vida cotidiana y por lo tanto esta escuela estaría con los ojos
vendados frente a esa realidad y a los sujetos que la habitan. (Aguilar J. 1998)
Las políticas educativas han evadido la realidad de la educación, se plantean
estamentos con los cuales el maestro debe regir su labor, todo en pro de crear individuos
para la producción económica del país y en dónde ha quedado el ser humano, desde que
perspectivas se enseña en la universidad, qué valor tienen entonces las humanidades, si
son la orientación social necesarias para el desarrollo integral de la persona.
En este sentido, el plan decenal de educación debe ser pertinente en la investigación
directamente elaborada en los lugares más aislados del país, estructurar un sistema en el