i o
neamientos que permitieran prever y garantizar lo más posi
ble los resultados. La pedagogía, transformada en la ciencia
de la educación, nos proporciona esa posibilidad. En la actua
lidad toda escuela que se respete programa la enseñanza de
acuerdo a lo establecido pfbr la didáctica moderna.
La enseñanza programada significa una oposición ai
antiguo feudalismo del maestro que hacía lo que y como se le
ocurriera (y pediera), implica una organización, una planea-
ción y un seguimiento que permitirán la evaluación objetiva
de los resultados observables.
La enseñanza programada de la danza clásica. cuando está
avalada por una institución oficial como sucede en México, es
un reconocimiento a la validez de esta forma de expresión artís
tica como profesión.
El nivel preelem ental
La edad propicia paia iniciar a un niño en el estudio intro-
ductorio de la danza clásica es a los 8 años. Para menores
(de 4 a 7 años) se recomienda un nivel preelemental basa
do en los talleres integrales de arte que con diferentes nom
bres se imparten y que, no teniendo exigencias técnicas,
ofrecen un amplio panorama de todas las artes.
Las propuestas de la maestra Lin Durán en los Cuaderni
llos de Danza, números 1, 2 y 3 (acó, ciD-Danza, in b a); los
talleres infantiles del maestro José Gordillo; el material
utilizado por la maestra Nellie Happee y el desarrollado por
las maestras Lorena y Georgina Avila Dueñas, de la ciudad
de Zacatecas (copia del cual se localiza en el Archivo del
Cenidi-Danza José Limón} son recomendables para que se
instruyan maestros y monitores que, a su vez, capaciten y
asesoren a maestros de instituciones oficiales —tanto fede
rales como estatales— y de academias particulares, propor
cionándoles así material adecuado que evite incurrir en el
nefasto error de dar a los niños un entrenamiento técnico
inadecuado para esas edades.
El nivel elemental
Oficializar un nivel elemental con carácter propedéutico y
niveles no seriados para aiños de 8 a 11 años de edad, permi
tirá una masificación de la enseñanza no formal pero correcta
que, en determinado nivel y mediante selección rigurosa,
propicie el acceso a la enseñanza formai (carrera profesional)
o, según el caso, abra la posibilidad de continuar en talleres
libres donde disfruten de los beneficios que la práctica de la
danza ofrece y promoverá, además, la formación de un públi-
*co conocedor que en el futuro vea con buenos ojos que sus
hijos —o sus nietos— se dediquen profesionalmente a la
danza si sus facultades físicas son las adecuadas.
El programa está diseñado con un carácter propedéutico y
se divide en dos ciclos:
° Iniciación A v B. Dos cursos anuales para niños de 8 a
9 años de edad.
° Vocacional A y B. Dos cursos anuales para niños de 10
a 11 años de edad.
La cantidad de horas^señaíadas en cada unidad es esencial
para el cumplimiento de los programas. El maestro deberá
elaborar un calendario temático, repartir el material y re
gistrar los avances y “pendientes”.
Ciclo iniciación
Desde el ciclo de iniciación À se establecen los trabajos crea
tivos por equipos, actividad que, basada.en la improvisación,
se considera importante para lograr la motivación hacia la
danza ya que promueve que los alumnos creen pequeñas dan
zas que incluso pueden ser mostradas en un espacio escénico
a otros niños o a familiares que resultan más positivas que los
“bailables” comúnmente presentados en los festivales de fin
de cursos.
En el ciclo iniciación la ubicación de contenidos implica
una estructura diferente, tanto en la general de la clase como
en lo particular dé cada ejercicio.
Esto tiene el objetivo primordial de desarrollar las facul
tades físicas naturales de los alumnos.
1^ nò seriàdon W los cürsos ampíía lás posibilidades de-
iniciar alumnos —sin selección previa— entre los 8 y los 11
años de edad y también a adolescentes varones —previa
selección y en grupos separados de "reguíarización”—; que,
interesados en dedicarse profesionalmente a la danza, se
comprometan por sí mismos a tomar cursos intensivos que,
de acuerdo a sus posibilidades, logren que el estudianté al
cance el nivel técnico requerido.
En ios dos primeros cursos anuales denominadlos Iniciación
Ay B, se han agrupado las actividades en cuatro categorías:
° Ejercicios preliminares, que tienen por objeto ubicar al
alumno en un ambiente de trabajo colectivo y propor
cionarle los lincamientos que debe seguir.
18