LLEVADOS POR DOQUIERA DE TODO VIENTO DE DOCTRINA

JonathanBravo52 1 views 7 slides Oct 12, 2025
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¿Sana Doctrina?
Muchos aseguran tenerla y predicarla, pero lo que realmente sostienen es una mezcla de sus propias ideas o una versión maquillada de la tradición teológica que heredaron. En este Mes de la Reforma, es un momento oportuno para examinarnos con sinceridad y preguntarnos si en verda...


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LLEVADOS POR DOQUIERA DE TODO VIENTO DE DOCTRINA
Por Jonathan Bravo
(DISCURSO PARA LÍDERES CRISTIANOS CON MOTIVO DEL ANIVERSARIO DE LA REFORMA)

Escritura: Efesios 4:14-15

“Para que ya no seamos niños fluctuantes,
llevados por doquiera de todo viento de doctrina,
por estratagema de hombres que para engañar emplean
con astucia las artimañas del error;
sino que, siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo
en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo.”

I. INTRODUCCION.
Vivimos en una hora crítica para la Iglesia evangélica contemporánea.​
Nunca ha habido tanta información, tantas plataformas, tantos “ministerios”, ni
tantos que se proclaman guardianes de la sana doctrina. Y, sin embargo, nunca ha
sido tan superficial el discernimiento doctrinal ni tan grande la confusión
espiritual dentro del pueblo que se dice “Bíblico”.
Muchos afirman con sus labios creer en Sola Scriptura, pero en la práctica
dependen de muletas ideológicas, emocionales o culturales que adulteran la
pureza del Evangelio. Hablan de La Biblia, pero no permiten que La Biblia los
juzgue a ellos. Citan versículos, pero los usan para sostener opiniones, tradiciones
y experiencias que niegan, en la raíz, la autoridad absoluta de La Palabra de Dios.
El apóstol Pablo advierte que el peligro no está solo fuera de la Iglesia, sino
dentro (Hechos 20:29–30). El mayor enemigo del Evangelio no es el ateísmo
militante, sino el cristianismo distorsionado que usa El Nombre de Cristo pero
tuerce Su Mensaje. Y este peligro se vuelve más mortal cuando los creyentes
piensan que están firmes, sin examinar sus fundamentos a la luz de La
Escritura.

“Examínense a sí mismos si están en la fe; pruébense a sí mismos”
(2 Corintios 13:5).

El autoengaño doctrinal es la epidemia de nuestra era. Las iglesias repiten
frases correctas, confiesan credos ortodoxos pero aún así viven y enseñan como
si la suficiencia de La Escritura fuera parcial. Dicen: “Solo la Biblia”, pero luego
añaden prácticas que la Biblia no autoriza: Espiritualidades místicas, decretos y
confesiones positivistas, psicología humanista disfrazada de consejería bíblica,
sesiones de liberación y enseñanzas raras, técnicas de liderazgo importadas del
mundo corporativo, emocionalismo en el culto, etc.​

“La herejía más peligrosa no es la que niega la Biblia, sino la que la cita fuera
de contexto para afirmar lo que la Biblia nunca enseñó.”​
R.C. Sproul

El principio de la Reforma fue simple pero absoluto: Sola Scriptura.​
La Palabra de Dios es suficiente, final, autoritativa e inmutable. No necesita
suplementos, revelaciones personales ni estrategias humanas para ser relevante.​
Y, sin embargo, una buena parte del cristianismo moderno ha hecho de La
Palabra un accesorio, no un cimiento.

“Cuando decimos Sola Scriptura,
no queremos decir que La Biblia sea la única autoridad,
sino la única autoridad infalible,
la norma por la cual se miden todas las demás.”​
John MacArthur

Agregar algo a La Palabra es herejía. Quitar algo de la Palabra es apostasía.​
Ambas actitudes revelan incredulidad. Dios no necesita que Su verdad sea
mejorada; solo que sea creída y obedecida.
“No es La Escritura la que necesita interpretación moderna; Es el hombre
moderno quien necesita arrepentirse para entender La Escritura.”​
Martyn Lloyd-Jones

La historia de la Iglesia demuestra que toda mezcla doctrinal termina en
corrupción espiritual. El apóstol Pablo se enfrentó a los Gálatas, quienes querían
combinar La Gracia de Cristo con las obras de la ley. Y su sentencia fue
contundente:
“Si alguno os predica un evangelio diferente, sea anatema”
(Gálatas 1:8).

Cada generación tiene su propia mezcla, y pareciera que las combinaciones
modernas son: Cristo + emociones (Profecías falsas, lenguas, milagros,actos
profeticos, danzas y ruido) Cristo + prosperidad, Cristo + política, Cristo +
experiencias místicas (Ministerios y propagandade revelaciones nuevas), Cristo
mas música, Cristo + cultura hebrea y secular.​
​ Pero el resultado siempre es el mismo: Cristo disminuye y el hombre ocupa
el centro. Esa es la esencia del error doctrinal.

“El corazón del error humano es su deseo de ser autónomo.
Toda herejía nace cuando el hombre deja de escuchar a Dios para escucharse
a sí mismo.”​
Agustín de Hipona

Es muy peligroso no examinarnos. El creyente que no se prueba a sí mismo
frente a La Palabra corre el riesgo de navegar con velas doctrinales rotas,
creyendo que avanza, cuando en realidad se aleja del puerto de La Verdad.​
Por eso la exhortación de Hebreos 2:1 es urgente:

“Es necesario que con más diligencia atendamos
a las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos.”

El apóstol usa la imagen del deslizamiento, no de la caída repentina. La
apostasía doctrinal rara vez ocurre en un instante; comienza como una
desviación pequeña, tolerada, aceptada, luego celebrada… hasta que El Evangelio
se convierte en algo irreconocible. Por eso esta conferencia no es solo una
advertencia teológica, sino un llamado a la autocrítica espiritual.​
​ No basta con decir que creemos en La Sana Doctrina; debemos probarlo
por medio de la fidelidad a Las Escrituras en todo pensamiento, palabra y
práctica.

“El mayor acto de humildad intelectual es someter cada idea
—aún las nuestras— al tribunal de La Palabra de Dios. Abriendo la
posibilidad de reconocer que estamos equivocados
o que ignoramos La Verdad desde el punto de vista de Dios.”​
Juan Calvino

Con esta conciencia, abrimos Las Escrituras en Efesios 4:14–15 para
examinar cómo la Iglesia puede resistir los vientos doctrinales de cada época, y
cómo la verdad —vivida y proclamada— nos ancla en Cristo, quien es la Cabeza
del cuerpo y la fuente de toda doctrina sana.
La doctrina importa. No es un accesorio teológico, sino el esqueleto que
sostiene el cuerpo de la fe.​

○​R.C. Sproul advirtió: “La herejía no es simplemente un error inocente;
es una falsificación del Evangelio que destruye almas.”​

○​John MacArthur añade: “Cada vez que la Iglesia se debilita
doctrinalmente, El Evangelio pierde claridad, la adoración se
contamina y el testimonio se apaga.”

Solo la sana doctrina, centrada en Cristo y Las Escrituras, guarda a la
Iglesia de los vientos engañosos que soplan en cada era.

II. CONTEXTO EXEGÉTICO DE EFESIOS 4:14–15.

A. Contexto inmediato.
​ Pablo describe la madurez de la Iglesia como fruto del ministerio dado por
Cristo: Apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros (v.11–12). Su
propósito: “perfeccionar a los santos para la obra del ministerio” y “edificar
el cuerpo de Cristo” (v.12).

B. La imagen del “niño fluctuante”

​ El término griego “κλυδωνιζόμενοι” (klydonizomenoi) evoca la imagen de una
nave sacudida por olas inestables. Así es el creyente sin ancla doctrinal:
emocional, vulnerable y cambiante. (Fe Infantil… De nivel Kindergarden)
C. “Vientos de doctrina”​

Los vientos representan corrientes ideológicas y teológicas que no proceden
del Espíritu Santo, sino de la astucia humana y del error satánico (1 Timoteo 4:1).​
La Iglesia, en cambio, está llamada a permanecer firme en “la fe que ha sido
una vez dada a los santos” (Judas 3).
III. HEREJÍAS ANTIGUAS Y SU REENCARNACIÓN MODERNA.

Pablo previó que “del mismo grupo de vosotros se levantarán hombres
que hablen cosas perversas” (Hechos 20:30). La historia de la Iglesia es, en
buena medida, la historia de su defensa frente a la falsedad.

Herejía
Antigua
Error Principal Versión Moderna
Gnosticismo Niega la encarnación real;
conocimiento secreto.
Nueva Era, Esoterismo
cristiano, “revelaciones
personales”.
Arrianismo Niega la divinidad plena de
Cristo.
Testigos de Jehová,
Cristología liberal.
Pelagianismo Niega el pecado original; el
hombre puede salvarse por sí
mismo.
Teología de la prosperidad,
autoayuda cristiana. obras.
Semi-pelagian
ismo
El hombre coopera con su
salvación.
Sinergismo moderno, “tú das
el primer paso”. Albedrio!
Sabelianismo Confunde las Personas de la
Trinidad.
“Jesús solo”, unicismo.
Antinomianis
mo
Rechaza la ley moral en el
creyente.
“Gracia barata”, libertinaje
cristiano.
Deísmo Dios creó pero no interviene. Cristianismo moralista sin
Evangelio.
Universalismo: ¡Todos se
salvan!

Juan Calvino escribió en Institución (I.VII.1):

“Satanás, desde el principio, ha procurado corromper
la pura doctrina de la fe, porque sabe que es el alma de la Iglesia.”

IV. LOS VIENTOS CONTEMPORÁNEOS: LA IGLESIA EN CRISIS.

A. El relativismo posmoderno.​
“Cada quien tiene su verdad” ha invadido el púlpito. …En ese caso NO hay verdad!​
Pero Cristo dijo: “Tu Palabra es verdad” (Juan 17:17).​
No hay verdades “personales”, sino revelación objetiva.
B. El pragmatismo religioso.​
El éxito se mide por el número de gente participante, no por La Regeneración ni
fidelidad.

Francis Schaeffer denunció: “El cristianismo moderno ha cambiado la verdad por
la relevancia, olvidando que la verdad es lo único eternamente relevante.”

C. La teología de la prosperidad. (Y se autonombran de Sana Doctrina!)

​ Predica un Evangelio sin cruz. Es el eco del pelagianismo: El hombre como
centro. Las prioridades son cumplir sus sueños! Gente NO Salva aprendiendo “Un
evangelio antropocéntrico! Hasta aprenden fórmulas para reclamarle a Dios y a
ordenarle a los ángeles! …Para que se les cumplan los caprichos! Locos!

Pero Martín Lutero afirmó en Heidelberg (1518):

“La teología de la gloria llama bueno a lo malo y malo a lo bueno.
La teología de la cruz llama las cosas por su nombre.”

D. El emocionalismo sin doctrina. (¡Sienten La Presencia! Dicen.)​

La adoración se vuelve experiencia sensorial sin profundidad. Pero El
Espíritu Santo no contradice La Palabra que Él inspiró.

Jonathan Edwards observó: “No hay calor santo donde no hay luz santa.”

V. LA RESPUESTA REFORMADA: LA IGLESIA ANCLADA EN LA VERDAD. Las 5
Solas. Las repasamos?

A. Sola Scriptura.
La Biblia es la única autoridad infalible de fe y práctica.

“Toda Escritura es inspirada por Dios… para que el hombre de
Dios sea perfecto” (2 Timoteo 3:16–17).​
La reforma no inventó esta verdad; la redescubrió.

B. Sola Gratia.​
Toda doctrina sana nace de La Gracia. La herejía florece donde se exalta la
voluntad humana sobre la soberanía divina.

“El hombre no puede buscar a Dios a menos que Dios lo busque primero”
Agustín de Hipona.

C. Sola Fide.
La Fe es un regalo de Dios que nos da La Seguridad Eterna. NO fe en la fe! Eso es
metafisica!

D. Solus Christus.
El es El Senor! NO hay otro mediador y Él es El Único Dueno de la Iglesia!

E. Soli Deo Gloria.

El fin de toda doctrina verdadera es La Gloria de Dios, no el bienestar humano.

“El error teológico más profundo es aquel que hace del hombre
la medida de todo y el punto de partida.”
John Piper.

VI. CÓMO SOBREVIVE LA IGLESIA: LA SANA DOCTRINA EN ACCIÓN.

1. Por la predicación expositiva.​
La Iglesia NO necesita entretenimiento, sino exposición fiel.

“Nada mantiene más pura a la Iglesia que el púlpito centrado en la Palabra.”
Charles Spurgeon.

2. Por el discipulado doctrinal.​
No basta con creer, hay que entender lo que se cree. Creer que?

“La fe que no se enseña pronto se pierde.” — John Owen.

3. Por la unidad en la verdad.

Efesios 4:13: “Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe.”

La unidad sin verdad es sentimentalismo; la verdad sin amor es fariseísmo. Pablo
une ambos en el v.15: “Siguiendo la verdad en amor.”

4. Por líderes fieles.

Tito 1:9: “Retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada,
para que también pueda exhortar con sana enseñanza y convencer a los
que contradicen.”

VII. LLAMADO FINAL: FIRMEZA EN LA TORMENTA
Los líderes cristianos — Y muchos profesionales que son cristianos, médicos,
abogados, docentes, ingenieros, empresarios — están en la primera línea del
pensamiento contemporáneo. Deben ser teológicamente firmes y bíblicamente
alfabetizados, porque la herejía moderna no siempre grita; a menudo susurra.
“Cuando el cristiano abandona la doctrina, abandona a Cristo mismo,
porque Cristo se nos da en La Palabra.” — J.I. Packer.
Para asegurarte de que no estás siendo arrastrado por las corrientes del
tiempo presente —ni por las mareas del sentimentalismo, las ideologías humanas
o las modas religiosas— examina firmemente en qué estás anclado. Muchos hoy
creen navegar hacia el cielo, pero van a la deriva en un mar de confusión y falsas
doctrinas, sostenidos por emociones, popularidad o tradiciones humanas. No te
dejes mover por los vientos mediáticos, ideológicos ni religiosos. Permanece
anclado en El Evangelio eterno (Apocalipsis 14:6), aquel mensaje inmutable
que desde la eternidad proclama la salvación por Gracia, por medio de la fe, en
Cristo Jesús.
Los vientos del mundo cambian constantemente, pero Cristo permanece
siendo La Roca de los siglos. Si tu alma está firmemente arraigada en Él, ningún
temporal podrá hundirte. En tiempos donde la verdad se relativiza y el error se
disfraza de piedad, nuestra seguridad no está en las voces del momento, sino en
La Palabra que nunca pasa. Aférrate a ella con todo tu corazón, porque sólo El
Evangelio verdadero te conducirá al puerto eterno. JBravo