LEYENDA DEL MUSEO ENCANTADO
Felipe Suarez, había prometido a sus dos pequeños hijos, llevarlos al museo
encantado, así se hacía llamar el nuevo museo que se promocionaba por todos
lados, al parecer era uno de los museos más grandes de todo el mundo y ahora
estaba en la pequeña ciudad del estado de Querétaro, algo que no se había visto
nunca en la región. El día del estreno, la gente hacia fila para entrar, pero Felipe
junto con sus pequeños quisieron tomar un atajo, para ser de los primeros en entrar,
y se metieron por atrás del establecimiento, total, si los encontraban, tenían los
boletos pagados, que podrían hacer, pensó el padre de familia.
Y así fue, se metió por la puerta trasera, pero por descuido entro en el almacén del
museo encantado, en donde estaban todos las figuras de cera que presentarían,
algo que no pudo creer, fue que varias de ellas se movían como si estuvieran
preocupadas por el estreno.
Como es que se mueven, si son de cera, se preguntó Felipe, cuando empezó a
asustarse, y asustar a los niños, sin querer tumbo algo desde donde veía a las
estatuas y todas al mismo tiempo voltearon a verlo, el solo quiso correr y salir del
lugar. Con un niño corriendo y otro en brazos, sin querer llego al lugar en donde se
presentarían a todos, las figuras de cera, fue entonces cuando vio al encargado,
que le sonrió, parecía que sabía que los había visto, solo que en ese momento
empezó a entrar la gente, para esto, las figuras de cera ya estaban en el lugar de
exhibición.
Felipe ya no pudo salir, lo único que hizo, fue mezclarse entre las personas y
esperar que abrieran la salida, ya que por la entrada, estaban todos los que no
habían podido entrar, fue entonces cuando sintió un pinchazo en el brazo y unas
personas lo tomaron junto con sus bebes. Después solo se supo que los niños, se
le entregaron a la madre, pero del padre de familia nunca más se supo el paradero,
ahora es parte del repertorio de figuras de cera, del museo encantado que se sigue
presentando por toda las ciudades de la región, recolectando en cada una de ellas,
materia prima para su museo.