Poder Político en la Edad Media Objetivo de la clase: Determinar el origen y legitimidad del poder político en la Edad media y compáralo con la antigüedad y el presente.
Ideas centrales Fin del Imperio Romano de Occidente significó el quiebre de la unidad del mundo Mediterráneo. Fusión cultural entre los distintos pueblos germanos y la población romana La Edad Media constituye una nueva realidad cultural cuyo espacio geográfico es el continente europeo. La Edad Media también se conoce como “Edad de la Fe”: la religión católica paso a ser el gran elemento de unidad en Occidente. La Iglesia Católica fue uno de los pilarse fundamentales. La fidelidad, fue el principio que rigió las relaciones personales en la época. En los primeros siglos de este período, las amenazas externas replegó a Occidente sobre sí mismo, desarrollando una economía de subsistencia (autárquica).
Edad Media Época histórica que se extiende entre los siglos V y XV. Desde la caída del Imperio Romano de Occidente (476) a la caída del Imperio Romano de Oriente (1543) También llamada Edad de la Fe, por el rol de la fe católica como factor de unidad y pilar de la sociedad. Época larga y compleja caracterizada por: Nuevo orden en la cuenca del mar Mediterráneo : Con la caída del Imperio Romano de Occidente se pone fin a la unidad política y cultural de la región. Surge un nuevo escenario: los reinos germánicos en el sector occidental y el Imperio Romano de Oriente (o Bizantino) en el sector Oriental. A contar del siglo VII la civilización musulmana (seguidora del Islam) dominan grandes territorios del Mediterráneo.
Imperio Romano de Oriente También se le conoce como Imperio Bizantino Perduró durante toda la Edad Media. Su capital, Constantinopla, fue el centro político, religioso, económico y cultural. A la cabeza estaba el emperador. Gobierna apoyado en sus ministros, una red de funcionarios y un ejército bien dotado. Su persona era sagrada, pues se cree que su poder venía de Dios. La religión oficial era el cristianismo. La Iglesia era dirigida por los patriarcas (obispos de las principales ciudades: Constantinopla, Antioquía, Alejandría y Jerusalén). El emperador intervenía en los asuntos de la Iglesia como era el nombramiento de obispos. Uno de los emperadores destacados fue Justiniano (527-565). Se esforzó por restaurar la unidad del Imperio Romano. Conquistó los reinos vándalos, ostrogodos y visigodos. Su obra más duradera es el Código de Justiniano (recopilación de las leyes del Imperio Romano), base del derecho en Occidente.
Imperio Romano de Oriente Después de Justiniano, se produce un debilitamiento de los lazos con Occidente. El imperio se siguió llamando romano, pero fue un imperio griego. El territorio comprendía sólo zonas helenizadas: Grecia, Macedonia, Tracia y Asia Menor). El griego reemplazó al latín como lengua oficial. El alejamiento religioso de Occidente se produce el año 1054: La Iglesia Bizantina se separa de Roma. Se forma la Iglesia Ortodoxa (de al recta fe) No reconocen la supremacía del Papa. Afirman que el Espíritu Santo proviene sólo de Dios Padre. En sus universidades y bibliotecas, los sabios bizantinos resguardaron la cultura clásica. Principalmente los conocimientos legados por los griegos. Constantinopla, además fue un importante centro comercial del Mediterráneo. Llegaban productos de lejano Oriente que se vendían a los grupos más adinerados de Europa.
Carlomagno y el ideal imperial Entre los reinos germanos, el de los francos adquiere mayor importancia. El año 711 los musulmanes derrotan a los visigodos, dominando la península Ibérica y avanzan hacia el interior del continente. Los francos, bajo el mando de Carlos Martel, los detienen el año 732 en la batalla de Poitiers. Carlos Martel era mayordomo de palacio (funcionario principal del reino en época de los “reyes holgazanes” y quien realiza las tareas de gobierno). Lo sucede en el cargo su hijo Pipino el Breve y el año 751 se proclama rey de los francos, con el apoyo del Papa, iniciando la dinastía carolingia en reemplazo de la merovingia (fundada por Clodoveo). Se forja desde entonces una alianza entre el Papado y el reino franco: este cuenta con el apoyo de la Iglesia a cambio de prestarle ayuda militar. A la muerte de Pipino el trono lo ocupa su hijo Carlos quien gobierna entre 768 y 814. Fue un gran conquistador. Durante su reinado dirigió campañas militares y amplió el territorio hasta conformar un imperio. Sus principales victorias fueron sobre los lombardos y sajones. Hace realidad el reestablecimiento en Occidente del imperio cristiano. El Papa León III lo coronó emperador, en la Navidad del 800, en Roma. En adelante se le conocerá como Carlomagno (Carlos el grande).
Imperio Carolingio Gobierno de Carlomagno : Estimuló el uso de la escritura del latín como idioma oficial. Se preocupó de contar con funcionarios letrados. Aplicó una legislación común basada en capitulares (ordenanzas dictadas por el emperador y separadas en capítulos). Administración del Imperio : Lo dividió en más de 200 condados, cada uno de ellos a cargo de un conde. Eran guerreros de su confianza que comandaban el ejército, cobraban impuestos y aplicaban justicia. Las marcas (zonas fronterizas con una función militar defensiva) quedaron a cargo de un marqués. Funcionarios especiales eran los missi dominici (enviados del señor), que recorren el imperio y supervisan la labor de condes, duques, marqueses y obispos. Todos ellos, una vez al año, se reunían con el emperador y, en una ceremonia, renovaban su juramento de fidelidad. Renacimiento Carolingio : Carlomagno puso especial énfasis en promover la cultura. Fundó escuelas y se rodeó de sabios. En su palacio de Aquisgrán funcionó una academia donde se estudiaban las artes liberales ( trivium y quadrivium).
Imperio Carolingio
Sacro Imperio Romano Germánico La unidad que logró Carlomagno no perdura tras su muerte. El Imperio comienza a fragmentarse. Su hijo Ludovico divide el imperio en tres zonas: Occidental: Carlos Central: Lotario Oriental: Luis En los siglos IX y X Europa sufre nuevas y violentas invasiones. Los reyes no pueden contenerlas y van perdiendo su poder. Sin embargo, el ideal imperial se hace realidad en la zona de la Germania (reino de los francos orientales), cuando en el año 962, el rey Otón I es coronado emperador por el Papa.