Introducción
La piel es un órgano heterogéneo que sirve como principal medio de comunicación entre el animal
y su medio ambiente. La piel cumple los papeles de conservación del agua, el equilibrio
electrolítico del cuerpo, la regulación de la temperatura, protección mecánica, percepción
sensorial y elaboración de vitamina D.
El sistema esquelético se compone de dos partes: el esqueleto axial y el esqueleto apendicular. El
primero consta del cráneo, columna vertebral, esternón y costillas. El esqueleto apendicular
consiste en los huesos de las extremidades anteriores y posteriores.
El sistema muscular está compuesto de tres clases de músculos: el liso, el cardiaco y el estriado.
Estos tres son responsables de la locomoción, movimientos respiratorios, digestión y excreción.
El sistema circulatorio cuenta con dos órganos principales: el corazón y los vasos sanguíneos. Estos
son responsables del mantenimiento de la circulación de la sangre y el intercambio de oxígeno,
bióxido de carbono, electrolitos, nutrientes y productos de desecho entre la sangre y los fluidos
corporales.
El sistema respiratorio de los mamíferos
consta de los pulmones y las vías aéreas
que conducen a ellos. Las vías aéreas son
la cavidad nasal, la faringe, la tráquea y los
bronquios. Estos están construidos para
funcionar como un tubo continuo que
conduzca el aire a los pulmones.
El sistema digestivo comienza en la cavidad
bucal y termina en el orificio anal. No
incluye solamente el tubo digestivo, sino
que también algunos órganos asociados en
el proceso digestivo. Está constituido por la
lengua, el esófago, el estómago, el
intestino delgado y grueso, el hígado y el
páncreas.
Ilustración 1 Organos internos de la rata. Tomado de Starks D.M. y Ostrow, M.E.
eds. Assistant Laboratory Technician. AALAS, 1991.
PRACTICA 3 Anatomía animal en algunos animales de
laboratorio (Ratón, rata, hámster y jerbo)
Casarrubias Tabarez Brenda, Díaz González Gómez Zurya,
Fernández Sánchez Paulina